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Presidente Gabriel Boric Font Interviene En La Seventy Seven Sesión De La Asamblea Common De Naciones Unidas Prensa Presidencia

La iniciativa, que incorpora una mirada de corresponsabilidad social y de género, también aborda temas como el financiamiento de los sistemas de cuidados y la situación de las trabajadoras y trabajadores de los servicios de cuidados, así como una serie de recomendaciones, basadas en la investigación, que buscan ser un aporte a este sistema integral. 1Estas dimensiones de la desigualdad hacen referencia a aquello que ocurre, primeramente, con la distribución de la riqueza e ingresos en una economía, es decir, dimensión ex-ante; y ex-post, cuando se alude a la redistribución de estos mismos (The Editors of Encyclopaedia Britannica, 2013). En este sentido, el Estado cumple un rol importante en términos de (des)igualdad, no obstante, esto será descrito más adelante. Así, estas movilizaciones continuaron hasta el Estallido Social del año 2019, don-de los/as chilenos/as se tomaron las calles debido a un malestar generalizado, entre otras causas, por la desigualdad del país, demandando un cambio profundo en este, el cual logró un acuerdo para cambiar la constitución que rige a Chile ( Güell, 2019 ). En este contexto, el Ministro de Desarrollo Social comenzó su intervención destacando que la Agenda 2030 pone en un plano de igualdad las dimensiones social, medioambiental y económica, superando la clásica subordinación de las dos primeras a esta última, lo que “nos impone un nuevo paradigma y una nueva gobernanza del desarrollo”, señaló. 10.2 De aquí a 2030, potenciar y promover la inclusión social, económica y política de todas las personas, independientemente de su edad, sexo, discapacidad, raza, etnia, origen, religión o situación económica u otra condición.

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El grupo de expertos “intentará reunirse con cargos del Gobierno, representantes de la sociedad civil, víctimas, instituciones nacionales de derechos humanos y otros implicados para recoger información de primera mano”, informó la portavoz del organismo Ravina Shamdasani. Naciones Unidas se refirió al aumento de protestas alrededor del mundo, asegurando que a pesar de que “son complejas y variadas” uno de los factores más comunes del descontento social de debe a las “condiciones económicas, la corrupción y en common desigualdad social opinion la gran desigualdad social entre los ricos y los pobres”. La Asamblea General de la ONU al aprobar la Declaración Universal de Derechos Humanos en 1948 reconoce el derecho a las madres y niños/as a “cuidado y asistencias especiales”, así como “protección social”. En los años sucesivos, la ONU exhorta a los Estados a velar por los niños en las situaciones de vulnerabilidad por emergencias y conflictos.

Sin embargo, el cambio climático no está dañando a todos/as por igual, por lo que ha incrementado las brechas en cuanto a las oportunidades que tienen los individuos y países, ya que están condicionados por su territorio ( United Nations, 2020b; Kuhn, 2020 ). Otro ejemplo que propone Sen (2000), tiene que ver con los virus y las bacterias que hay en el medio, que trastornan la manera y la calidad en que viven los individuos, o bien, la forma en que tienen que distribuir sus recursos los países. Por lo tanto, la diversidad en el medio influye di-rectamente en la libertad que tienen los individuos y países para lograr cierto nivel de calidad de vida “ideal”. Las citas mostrarán experiencias, buenas prácticas, desafíos y oportunidades para integrar la igualdad de género en la acción climática en ALC y en la hoja de ruta de implementación del Acuerdo de París.

“Las transformaciones culturales tienen que ver con los roles que hay que ejercer, donde no hay una visión de que los hombres son proveedores y las mujeres cuidadoras, sino que hombres y mujeres tienen que estar en todos los espacios”, indica Marcela Ríos, quien subraya también que “las desigualdades de género son múltiples, se superponen unas con otras y son transversales a las mujeres en todas las esferas”. Una rabia con el modelo económico, que daba claras señales de abuso, inequidad y maltrato en su experiencia cotidiana en áreas claves como las relaciones laborales, el acceso a la salud y la educación”, León Guzmán, psicólogo, Máster en Ciencia Política, neurocoach, gerente common de la consultora Add-Value y consejero de REDMAD. En 2012, los fondos procedentes de los países en vías de desarrollo eran 2,5 veces mayores que la cantidad de ayuda que recibían y las asignaciones en función del género eran comparativamente insignificantes.

Adicionalmente, se provee acceso a actividades extracurriculares en áreas de ciencias desde la robótica, artes desde la creación cinematográfica y al desarrollo socioemocional de forma específica y transversal en cada programa. Los sistemas educativos deben procurar recursos financieros y no financieros para los alumnos de menores recursos para asegurar que todos los alumnos gocen de altos niveles de aprendizaje. Mientras que las tasas de educación y alfabetización están aumentando en todo el mundo, no queda claro si se está disminuyendo la desigualdad educativa. Por eso, hay necesidad de aumentar la educación en los sectores en crecimiento como la tecnológica y habilidades sociales específicas adaptables al mundo que actualmente se necesita movilidad ocupacional. Las capacidades de las familias para llevar a cabo su cometido educativo no están equitativamente distribuidas, puesto que la pobreza, el nivel educacional de madres, padres o cuidadores, y su capital social influyen en el desarrollo y el desempeño escolar de niñas, niños y adolescentes. Según datos de 2017, Chile tiene uno de los índices más altos en desigualdad educativa entre los países de la OCDE, expresado en el índice Gini con un 0,503 .

Sin realizar un juicio de valor respecto de estos resultados, lo que requeriría un estudio profundo de las causas de las desigualdades en Chile, se puede observar una tendencia hacia un solo factor causante de las disparidades económicas, es decir, a las variaciones en el contexto social en que se encuentran las personas que residen en el país. Además, en ninguna de las acciones públicas analizadas se encontró alguna referencia a la distribución de los recursos dentro de las familias, que de acuerdo a Sen (2000), son la unidad básica a considerar en cuanto a la repartición de los ingresos, desde el punto de vista de cómo se utilizan. Seguidamente, también se presentó el documento que trabajarán los representantes de los países a lo largo de las diferentes sesiones del Encuentro, con el fin de contar con un panorama common para acelerar la acción climática en la región con una perspectiva de igualdad de género e implementar el Plan de Acción de Género del Acuerdo de París. Además, la temporalidad de las acciones públicas examinadas, al ser la mayoría de estas previas a la Agenda 2030, indica que aún queda trabajo por realizar para incorporar estos objetivos a las diversas partidas públicas del país. Es decir, que existiendo esta agenda como una guía para el desarrollo sostenible, los esfuerzos que vengan a continuación deberían responder a la lógica de estos objetivos y no al revés.

Y el Ecuador se inscribe dentro de esta realidad que se evidencia en la cuarta edición del Informe Latinoamericano Pobreza y Desigualdad 2017 “Ningún territorio atrás”, que Rimisp – Centro Latinoamericano para el Desarrollo Rural, presenta el próximo viernes 9 de marzo en Quito. Por otro lado, seguiremos trabajando para continuar fomentando y promoviendo una cultura de paz, tolerancia y respeto. Tenemos que avanzar en el reconocimiento global y protección de los derechos de las niñas, niños y adolescentes; los derechos sexuales y reproductivos; los derechos de los pueblos indígenas.

En consecuencia, si el Índice de Gini chileno demuestra que hay una gran disparidad de ingresos, deberían cuestionarse las causas de esta, por un lado, y por otro, qué otros indicadores podrían entregar una mejor perspectiva de cuáles son las acciones públicas que deben llevarse a cabo para disminuir las desigualdades que hoy afectan al país. Por ejemplo, y como se describió en el primer apartado, Chile mostraba un Coeficiente de Gini de 44,4 al año 2017 ( Banco Mundial, 2020a), siendo el país número 35 junto con Filipinas, versus su Índice de Desarrollo Humano, en el cual Chile se encuentra en la posición número 42 desigualdad juridica, al contrario de Filipinas que se encuentran en la posición número 106 ( UNDP, 2020b). Es decir, Chile ha conseguido algunas metas mínimas en materia de desarrollo humano, como la esperanza de vida y los años de escolaridad, por ejemplo, sin embargo, esto no ha acortado las brechas existentes dentro del país. Así, se hace necesario examinar lo que efectivamente están mostrando estos indicadores, con el fin de dilucidar el problema que afecta a la población de Chile, en términos de las grandes disparidades que hoy sufren.

Porque si bien en las últimas décadas hemos presenciado importantes avances en este sentido –desde mayor educación para las niñas hasta más mujeres en posiciones de liderazgo–, en los últimos años los derechos de las mujeres han vuelto a ser atacados desde distintos frentes. La primera declaración sobre los derechos del niño data de 1920 aprobada por la Liga de las Naciones, la cual se disolvió en 1946. Ese mismo año, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) fue creada, organismo que hoy vela por el cumplimiento del derecho internacional, el mantenimiento de la paz internacional, la promoción y protección de los derechos humanos, entre otros.

10.1 De aquí a 2030, lograr progresivamente y mantener el crecimiento de los ingresos del 40% más pobre de la población a una tasa superior a la media nacional. Avanzar en una equitativa distribución de la corresponsabilidad en el cuidado y trabajo doméstico, terminar con los estereotipos en torno a roles de género, apoyar los emprendimientos liderados por mujeres, denunciar los casos de violencia doméstica, son algunas acciones cotidianas que podemos realizar para facilitar este proceso. En el ámbito educacional y laboral, si bien existe una porción levemente superior de mujeres jóvenes que son egresadas universitarias en comparación con los hombres, y hay mayor participación laboral, la desigual distribución de las tareas de cuidados y trabajo doméstico no remunerado ha contribuido a incrementar la brecha de género, especialmente con posterioridad a la pandemia del Covid19. [newline]La Parte 2 profundiza en el análisis de experiencias de articulación y coordinación de actores en territorios específicos de Colombia (Capítulo 3) y Ecuador (Capítulo 4). Estas experiencias muestran cómo en ámbitos tan diversos como la construcción de la paz o la producción de café, es posible avanzar en calidad e intensidad de la articulación para el logro de propósitos compartidos.

Esa es la convicción que motivó en septiembre de 2021 la creación de la Comisión Empresarial para la Lucha contra la Desigualdad (BCTI, en inglés), instancia conformada por 60 empresas y organizaciones a nivel global, y que acaba de lanzar en Chile una guía práctica en español con 10 acciones concretas que una empresa puede impulsar para aportar a este desafío. A nivel global debemos considerar también los conflictos, pues las más perjudicadas son las mujeres y las niñas. Por ejemplo, la guerra en Ucrania –que ya lleva dos años–, ha provocado que 56 por ciento de los 3,7 millones de desplazados sean mujeres y niñas, y hará que más de eight millones de mujeres y niñas necesiten ayuda humanitaria durante 2024 (según estimaciones de ONU).

Las ganancias y altos niveles de enriquecimiento, se generó en paralelo a un malestar y descontento generalizado entre los sectores populares y más empobrecidos de la sociedad. Además, la migración campo-ciudad que se generó en la misma época del “boom” (con la finalidad de encontrar nuevas oportunidades laborales en la ciudad), comenzó a acumular personas alrededor de las ciudades como Santiago. Por lo mismo que los millones de seres humanos que viven en la pobreza a nivel mundial, no sólo es un desafío del sistema internacional de los Derechos Humanos, sino que también para aquellos gobiernos comprometidos con el fortalecimiento democrático y su compromiso de garantizar derechos y libertades públicas.

Los gobiernos de manera periódica deben presentar informes sobre los progresos en el cumplimiento de todos los derechos. La Convención Sobre los Derechos del Niño es un tratado internacional que existe para establecer las normas mínimas que aseguren la vida, el bienestar, la protección y la libertad de los niños y niñas. La Convención sobre los derechos del niño/a ha sido ratificada por 196 Estados Parte de la Convención. Ha sido uno de los tratados sobre derechos humanos que más rápidamente ha sido ratificado y a la que más países se han adherido. Uno de los Estados que aún no ha ratificado la Convención, pero que ha expresado su intención de hacerlo, es Estados Unidos. Más estratégicamente, se ha utilizado activamente la tecnología de la información y las comunicaciones (TICs) para desarrollar contenidos y aplicaciones, ampliando la oferta educativa a través de los medios de comunicación, apoyando a niñas y niños para que sean capaces de continuar y disfrutar su proceso de aprendizaje.

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En 1959, la Asamblea de la ONU aprueba la declaración de los Derechos del Niño y en 1989 aprueba la Convención sobre los Derechos del Niño, tratado internacional vinculante ratificado por 196 países. Diversos estudios concluyen que la desigualdad educativa está directamente relacionada con la clase socioeconómica y al nivel de acceso a oportunidades (ante condiciones socioeconómicas deprimidas, menores oportunidades y viceversa). Un nuevo “índice de normas sociales” presentado este año cube que, en la mitad de los países evaluados, el sesgo de género se ha incrementado en los últimos años.

Según un estudio del Economic Policy Institute sobre niños y niñas de guardería del año 1998 y 2010, hay un hueco de desempeño entre los niños en el nivel socioeconómico más bajo y más alto que persisten entre ambas clases. Esto es importante porque las habilidades cognitivas y no cognitivas son importantes para el éxito en la escuela y en otros aspectos. Sin estos éxitos, no habrá buenas perspectivas económicas en el futuro lo que conduciría a una falta de movilidad social.

“Aprovechemos la oportunidad de esta disaster para virar hacia una senda más sostenible y resistente, , para demostrar la fuerza y la utilidad del sistema multilateral y para construir un mundo que transmitamos con orgullo a las generaciones futuras”, añadió. Con relación a la disaster que provoca el endeudamiento propuso su suspensión y aligeramiento, así como la concesión de liquidez a los países que la necesiten. De igual manera el Movilh denunció el incremento de la violencia contra la población LGBTI en Chile, la cual subió en un 45.7% en 2017, y la desprotección estatal que afecta a activistas y organizaciones de la diversidad sexual y de género. Junto a ello, el Movilh denunció a Naciones Unidas los vacíos del Acuerdo de Unión Civil, y los negativos efectos que tienen en las personas LGBTI la ausencia de una ley de identidad de género, la prohibición del matrimonio igualitario y de la adopción homoparental y la vigencias de normas discriminatorias, como son los artículos 365 y 373 del Código Penal. Precisó que “esta situación es evidente al considerar que desde la promulgación de la Ley Zamudio se ha conocido de 1.528 casos y denuncias por discriminación basada en la orientación sexual o la identidad de género, de acuerdo a nuestro Informe Anual de DDHH. La delegación chilena está liderada por el Ministro de Desarrollo Social, Marcos Barraza, e integrada por el subsecretario de Salud, Jaime Burrows; el Director de políticas multilaterales, Ignacio Llanos, y la directora Nacional del INE, Ximena Clark.

Es decir, que las disparidades que viven a diario los/as habitantes de Chile van más allá de su salario, experimentándose en otras áreas, como en la educación, la salud, la protección social, entre otras, que fueron aludidas dentro de las acciones públicas y otras que aún quedan por resolver. Respecto de la Agenda 2030, el diagnóstico que realizó el Consejo Nacional para la Implementación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible (2017b) estableció que de los 11 indicadores que presenta el ODS 10, el país cuenta actualmente con información solo para tres de ellos, 10.1, 10.2 y 10.three. Respecto de las primeras tres metas mencionadas, y como se puede observar en el Anexo 1, siete acciones públicas responden, ya sea en su totalidad o en algunos de sus contenidos, a la primera meta.

En este sentido, es importante mencionar que, si bien las economías varían entre sí, y por tanto, las causas de sus desigualdades, estas últimas son multidimensionales y al haber una tendencia explicit respecto de cuál causa o dimensión se aborda, ex-ante o ex-post, y dentro de estas, qué subdimensiones particularmente se trabajan, se podría argumentar que no sería suficiente para reducir efectivamente la desigualdad. De esta forma, como se explicó en el primer apartado de este artículo, ambas dimensiones de las disparidades, ex-ante y ex-post, presentan una relación recíproca entre sí, afectándose mutuamente. Es decir, que los resultados de una generación afectarán directamente el punto de partida de la siguiente y, además, aun habiendo logrado la igualdad en una de estas dimensiones, esto no resolvería las disparidades en la otra dimensión. Esta implica el punto de partida sobre el cual las circunstancias particulares de una persona o población limitan de una u otra forma la libertad que poseen de elegir o de alcanzar ciertos objetivos ( Roemer, 1998 a; Kanbur & Wagstaff, 2014; Alfonso et al., 2015; Stiglitz & Doyle, 2015). Aquí, las coyunturas individuales definen, en parte, el alcance de lograr ciertos objetivos propuestos, como, por ejemplo, el género, contexto acquainted, acceso a la salud, a la educación, entre otros.

El estudio será ejecutado por ONU Chile – a través del apoyo técnico del PNUD, ONU Mujeres y FAO- y busca saldar la falta de datos estadísticos que permitan identificar situaciones de desigualdad de género, lo que facultará al Ministerio del Medio Ambiente a tener claridad de cuáles deben ser las prioridades al trabajar en políticas y acciones para enfrentar el cambio climático. Señala que las brechas surgen incluso antes de nacer, en una especie de «lotería» determinada por el lugar de nacimiento de un niño. También están las diferencias en el acceso a una salud oportuna y a una educación de calidad, y la vivencia de malos tratos y discriminación debido a causas que están fuera del management de las personas (el aspecto físico, el origen socioeconómico, el género y el lugar de residencia, entre otros). Ahora bien, respecto de la acción pública que no fue analizada, la número eleven del informe en cuestión, sobre Política Migratoria Internacional, si bien en el reporte se indican algunos Memorándums de Entendimiento Binacional en materia Migratoria y Consular con algunos países de Latinoamérica, estos no son de carácter público.

El Secretario General también pidió que la ayuda al desarrollo se destine principalmente a los países donde más se necesita y propuso la creación de un nuevo impuesto. “Para acabar de una vez por todas con la pandemia necesitamos un acceso equitativo a las vacunas para todos, en todas partes“, dijo. Guterres subrayó la necesidad de lograr la “unidad y solidaridad” para salvar vidas y evitar deudas y disfunciones catastróficas. UNICEF/Adrian MusinguziUn trabajador sanitario recoge un vial de la vacuna COVID-19 de AstraZeneca de un recipiente refrigerado en Uganda. El titular de la ONU señaló que la recuperación de la pandemia y el impulso necesario para una respuesta global equitativa al momento que vivimos están poniendo a prueba el multilateralismo, una asignatura que hasta el momento Guterres considera fracasada.

El relator de Naciones Unidas permanecerá hasta el 24 de marzo en el país y se reunirá además con diferentes autoridades de gobierno y otras instituciones. Las encuestas de hogares, como la Casen, sobre las que se basan las estimaciones habituales del Gini, no son capaces de capturar la concentración en la parte alta de la distribución, porque no suelen representar al pequeño grupo de personas más ricas y porque a la vez tienen dificultades para capturar los ingresos del capital. 5Para más información desigualdad social 2022 sobre los factores causales de la desigualdad en Chile revisar López & Miller (2008); Castillo (2012); PNUD (2017). 10.c De aquí a 2030, reducir a menos del 3% los costos de transacción de las remesas de los migrantes y eliminar los corredores de remesas con un costo superior al 5%. El Modelo de Naciones Unidas de Chile (MUNCh) nace en 2022 como una alianza interuniversiatria de las organizaciones de la Universidad de Chile, Universidad de Santiago y la Pontificia Universidad Católica de Chile.

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Integrando datos de cuentas nacionales, declaraciones de impuestos y encuestas de hogares para corregir estos problemas de medición, el equipo del World Inequality Database estima que el 1% de mayores ingresos en Chile se lleva aproximadamente un 27% de los recursos, fracción que ha permanecido bastante estable desde 1990. Esta concentración es similar a la de América Latina (25%) y está muy por sobre la de países desarrollados, que fluctúa en torno al 12%. El Banco Mundial hizo hace unos años este mismo esfuerzo con el objeto de corregir el Gini, obteniendo que, en 2013, en Chile este no era de 0,5, sino que de 0,fifty nine. Sin embargo, existe una amplia gama desigual de recompensas, las cuales son construidas socialmente (Hopkins & Kornienko, 2010). Por ejemplo, dos individuos que pudieron acceder a la misma educación profesional, en igualdad de condiciones ex-ante, obtienen luego el mismo puesto de trabajo, pero en diferentes empresas.

Estamos así generando oportunidades innovadoras, a través de proyectos y talleres, en la formación y cuidado de niños, niñas y jóvenes, fortaleciendo sus competencias y capacidades, aportando al desarrollo sustentable de sus comunidades y territorios”. “Considero que el tema de la interculturalidad y la diversidad de los países de América Latina es muy importante, no solamente en lo que respecta el fortalecimiento de la identidad cultural de los pueblos, sino también a la trascendencia de potenciar la identidad empresarial. Por un lado, valorar el conocimiento, la habilidad de los pueblos, de las mujeres, de los jóvenes para que nos permita no solamente crear condiciones de oportunidad en la generación de ingresos, sino también en la generación del empleo para desarrollar un mundo más igualitario con mejores condiciones de vida para nosotros, para nuestros hijos y las comunidades a las que pertenecemos” afirmó la especialista guatemalteca.

Esto generó que su elaboración no fuera fácil, al haber un gran número de voces que escuchar, con diferentes ideas, intenciones y prioridades (Martínez & Martínez, 2015; Tassara & Cecchini, 2016). Sin embargo, la mayoría coincidía en la urgencia que proponía el escenario de aquel entonces sobre trabajar en pro de un modelo de desarrollo sostenible, ya que las diferentes crisis que se vivieron por esos años, como la disaster financiera de 2008, por ejemplo, evidenciaban la vulnerabilidad del sistema internacional, la globalización e interconexión entre los Estados (Sachs, 2015; Kamau et al., 2018). La pandemia de Covid-19, junto con los conflictos geopolíticos, desastres climáticos y disaster económicas, ha exacerbado las desigualdades existentes, empujando a 75 millones de personas adicionales a la pobreza extrema y amenazando con llevar a más de 342 millones de mujeres y niñas por debajo del umbral de pobreza para 2030. Este contexto subraya la urgente necesidad de un financiamiento transformador que empodere a las mujeres y aborde las raíces estructurales de la desigualdad de género. Si bien este último comprende una variedad de demandas, entre ellas se encuentra la gran desigualdad que existe actualmente en el país, la cual, en palabras de Güel (2019), “…no se trata solo ni principalmente de un problema de distribución del ingreso” (párrafo 8).

En ese contexto desde un comienzo del Programa Originarias junto con la Universidad Arturo Prat hemos tenido el compromiso de incluir a mujeres indígenas, profesionales, líderes y sabias en el diseño y en la ejecución del Programa. Es así como este seminario buscó compartir el aprendizaje y la experiencia de la Escuela Maya de Negocios, porque creemos que es una iniciativa que puede servir también para ser incorporada en la Universidad, aquí en el territorio y en Chile”. El Comité de Diversidad e Inclusión de ESO method recomendaciones a la administración de ESO sobre objetivos, políticas y buenas prácticas referidas a todos los aspectos de la diversidad. Fuera de ESO, la organización es miembro de la pink desigualdad social onu GENERA (Red sobre equidad de género en Física dentro del espacio europeo de la investigación), que fomenta la colaboración global en políticas de igualdad de género en física, entre organizaciones de investigación, asociaciones y consorcios. Pronto daremos a conocer mayor información sobre el trabajo del Comité y, en general, sobre las actividades de diversidad, equidad e inclusión de ESO, en una página internet específica. Chile, como miembro de la ONU, asumió el compromiso de avanzar en la implementación de esta Agenda, estableciendo metas en cada uno de los ODS.

Y si bien la ciudadanía está en su gran mayoría de acuerdo con la thought de que las personas que trabajan duro merecen ganar más, prácticamente todos están de acuerdo o muy de acuerdo con que las diferencias de ingresos en el país son muy grandes (un 90%, según reporta el PNUD en su libro Desiguales, del 2017). En este contexto, el Ministro de Desarrollo Social comenzó su intervención destacando que la Agenda 2030 pone en un plano de igualdad las dimensiones social, medioambiental y económica, superando la clásica subordinación de las dos primeras a esta última, lo que “nos impone un nuevo paradigma y una nueva gobernanza del desarrollo”, señaló. 10.2 De aquí a 2030, potenciar y promover la inclusión social, económica y política de todas las personas, independientemente de su edad, sexo, discapacidad, raza, etnia, origen, religión o situación económica u otra condición. Una de las mujeres participantes del estudio, refirió a la iniciativa del sistema de cuidados, destacando lo complejo que ha sido para ella cambiar su vida para hacerse cargo del cuidado de sus padres.