A nivel mundial, el Banco estima que la pandemia de COVID-19 empujará a entre 88 millones y 115 millones de personas a la pobreza extrema este año, mientras que la cifra whole llegará a los a hundred and fifty millones para 2021, según la gravedad de la contracción económica. La proyección del Banco Mundial es que haya 29,7 millones de personas en la extrema pobreza este año, equivalente al 5,6% de su población. Hace tres años afectaba al 6,2% de los habitantes del subcontinente americano, ó 37,1 millones de personas que tenía que vivir con menos de 1,90 a que se debe la desigualdad social dólares diarios. La institución financiera creada para apoyar a los países más rezagados del mundo da a conocer estos datos una semana después de acordarse en Naciones Unidas la agenda global para el desarrollo sostenible. Esta semana, además, celebra en Lima (Perú) la cumbre anual con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la primera en 50 años que acoge un país latinoamericano. En el informe también se llega a la conclusión de que muchos de los nuevos pobres serán habitantes de países que ya presentan tasas de pobreza elevadas.
En segundo lugar, políticas orientadas al mercado que han impulsado el crecimiento a través de reformas para mejorar la productividad y que han ayudado a perfeccionar el diseño de los servicios públicos y la política social. En tercer lugar, como el mayor productor y exportador de cobre en el mundo, Chile se caracteriza por su dependencia de las materias primas. Estas características han ayudado al gobierno a lograr una tasa de crecimiento promedio anual de casi 5% en los últimos 30 años, reduciendo al mismo tiempo la tasa de pobreza a menos de 8%. La clase media de Chile es una de las más grandes en América Latina, sin embargo, la desigualdad sigue siendo appreciable. El desarrollo económico ha significado un fuerte incremento en la esperanza de vida y un descenso en las tasas de fertilidad. De hecho, si bien en relativamente menor medida que otros países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), Chile está adelantado en la transición demográfica, lo que implica importantes retos en términos de crecimiento económico y productividad laboral.
“A causa de la pandemia y la recesión mundial, más del 1 % de la población del mundo caerá en la pobreza extrema”, señaló David Malpass, presidente del Grupo Banco Mundial. “A fin de superar este duro revés para el avance del desarrollo y la reducción de la pobreza, los países deberán prepararse para una economía diferente tras la COVID permitiendo que el capital, la mano de obra, el personal especializado y la innovación se trasladen a nuevos sectores y empresas. Esto viene explicado también por el Banco Mundial que señala que según la pobreza extrema se reduce, el crecimiento por sí solo tiende a sacar a un menor número de personas de la pobreza. Por lo tanto, el crecimiento tiene que ser más inclusivo y relevante para la vida de los hogares pobres y las comunidades, y los programas y las estrategias deben abordar las barreras estructurales para su inclusión en los beneficios del crecimiento (Chandy, Kato & Kharas, 2015). Mientras que entre las que superan el promedio nacional encontramos a Tarapacá (23,8%), Atacama (20,3%), La Araucanía (19,8%) y Los Lagos (19,7%).
Lo que sí señala es que el “viento de cara” para el conjunto de la región ahora “es muy fuerte”. El gran temor de los organismos internacionales ante esta situación de incertidumbre por la brusca moderación de crecimiento es que se pierdan los avances logrados durante las últimas dos décadas. Esto se explica por el robusto crecimiento en los países en vías de desarrollo y emergentes, que hicieron de motor de la expansión global tras la Gran Recesión hasta el año pasado. India fue el principal contribuyente a la mejora en los niveles de pobreza mientras que América Latina fue la región donde más gente entró a formar parte de la clase media, gracias a los programas educativos. Muchos países de acogida enfrentan escasez de recursos, entre ellos el Líbano que alberga al mayor número de refugiados per cápita en el mundo. El Grupo Banco Mundial, una de las principales fuentes de financiamiento y conocimientos para los países en desarrollo, está adoptando medidas rápidas y de amplio alcance a fin de ayudar a los países en desarrollo a fortalecer su respuesta frente a la pandemia.
Se estima que la disaster sanitaria empuje a la miseria entre 88 y a hundred and fifteen millones de personas este año, cifra que llegará a 150 millones el próximo año en dependencia de la severidad de la contracción económica, advirtió el organismo en un informe. En esa línea Marcel afirmó que “ante múltiples disaster, los bancos multilaterales de desarrollo necesitan estar mejor preparados para ayudar en la recuperación global y proporcionar recursos para el desarrollo. Esto requiere transformar al Banco Mundial en una institución más ágil, efectiva y bien dotada de recursos en que el acompañamiento vía instrumentos de conocimiento es basic. Para guiar el papel estratégico del Banco Mundial, respaldamos plenamente la nueva visión y misión de ‘crear un mundo libre de pobreza en un planeta habitable’ y ‘poner fin a la pobreza extrema y promover la prosperidad compartida en un planeta liveable, fortaleciendo la inclusión, la resiliencia y la sostenibilidad’”. El Banco Mundial estima que 97 millones de personas en todo el mundo cayeron en la pobreza extrema debido a la pandemia del COVID-19 en 2020, viviendo con menos de US$ 2 al día. Según el informe anual sobre desigualdad de Oxfam Internacional, las mil personas más ricas del mundo solo tardaron nueve meses en recuperar sus fortunas durante la pandemia, mientras que podría pasar más de una década antes de que los menos afortunados se recuperen.
El presidente de la institución propone que se adopten medidas que permitan atender al 40% de la población con los niveles más bajos de renta, los más vulnerables. Esto, insiste Kim, no solo permitirá una mejor distribución de la prosperidad, además impedirá que los que abandonaron la pobreza vuelvan a quedar atrapados. A corto plazo, preocupa el efecto combinado del alza de tipos de interés en Estados Unidos con la moderación del crecimiento en China y el abaratamiento de las materias primas.
Mañana el ministro comenzará su jornada asistiendo al Plenario Anual para luego dar paso a reuniones con Alfonso García, vicepresidente para Europa y América Latina y el Caribe de la Corporación Financiera Internacional (IFC en su sigla en inglés) y Manuel Reyes, Director Regional del IFC. Abed, que recientemente trabajó con miembros del parlamento del Reino Unido para declarar una “emergencia” sobre el tema, sostiene que “la pobreza es una opción de política”. Sobre todo, “la comida era el mayor problema”, dijo Dipali Roy, de 20 años, que entonces estaba embarazada y a veces solo podía hacer una comida al día gracias a un programa de racionamiento público.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en tanto, revisó los datos de ingresos y estimó medidas de pobreza y pobreza extrema por ingresos, mientras que el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) estimó el índice de pobreza multidimensional. Además, un panel externo de expertos y expertas supervisó todo el proceso para asegurar altos estándares de calidad en toda la encuesta. Lorena Flores, directora ejecutiva de Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, fue enfática en señalar que “los resultados de esta CASEN refuerzan la línea de trabajo que nuestro país debe seguir para derrotar la pobreza. En ese sentido, el desafío del Gobierno es aprovechar estos datos que son muy valiosos para afinar las políticas públicas que conduzcan al país hacia el desarrollo”. El Banco Mundial recuerda, además, que la pobreza es un problema que afecta a los países de rentas altas.
Los datos reflejan un escenario positivo para el país, dado que se retoma la senda decreciente de la pobreza en Chile. La Corporación Financiera Internacional (IFC) ha apoyado activamente al sector privado de Chile para aumentar la productividad, promover la inclusión y lograr avances en materia de sostenibilidad. En el país se están llevando a cabo algunos de los proyectos más innovadores de IFC, que incluyen autobuses eléctricos, productos especiales diseñados para promover la inclusión financiera, e hidrógeno verde. En el ejercicio de 2023, los nuevos compromisos de IFC alcanzaron un monto récord de USD 1700 millones, un aumento de casi el 200 % en comparación con el ejercicio anterior. Durante más de 75 a que llamamos pobreza años, hemos trabajado en conjunto en soluciones innovadoras para desafíos complejos, contribuyendo al progreso de Chile y de otros países que enfrentan retos de desarrollo similares. En «Aprender para hacer realidad la promesa de la educación« se sostiene que, sin aprendizaje, la educación no podrá ser el issue determinante para poner fin a la pobreza extrema, generar oportunidades y promover la prosperidad compartida.
Este hallazgo puede explicarse por la gente pobre, que experimentan condiciones únicas que les atrapan en la pobreza convirtiéndose en aún más pobres. Muchas de estas condiciones ―tales como la falta de propiedad del capital (humano, físico y/o financiero)― son el resultado de la desigual distribución inicial. Según los cálculos de la institución, la economía world se desplomará cerca de un 5 % este año. A modo de ejemplo, apunta que mientras la tasa de desempleo en Uruguay es de alrededor del 8%, la de los afrodescendientes sube a 11%. “Al mismo tiempo, la pobreza extrema fue prácticamente erradicada”, acotó la institución, al asegurar que “los salarios mínimos se duplicaron en términos reales entre el 2006 y el 2017, mientras que el índice de salarios reales aumentó cerca del 50%”. Jim Yong Kim comentó que el objetivo de la institución es erradicar la pobreza antes de 2030.
Se proyecta que aumente hasta en 480 millones, o una tasa del 42% este año, debido a los efectos de la pandemia. Los últimos 30 años han sido un período de mejora casi ininterrumpida del nivel de vida de muchos de los más pobres del mundo. En 1990, casi mil millones de personas solo en Asia oriental, principalmente China, vivían en la pobreza extrema, al igual que otros 500 millones de personas en Asia meridional, principalmente India. Pobreza multidimensional a nivel nacionalLa Encuesta Casen permitió contar con una nueva medición de la pobreza multidimensional, que no había sido calculada desde 2017, debido a las restricciones sanitarias que no permitieron aplicar la versión completa del cuestionario en 2020. Los resultados de la encuesta muestran también una importante reducción en la pobreza multidimensional a lo largo de los años.
“Uruguay se destaca en América Latina por sus políticas sociales altamente progresistas y sus bajos niveles de desigualdad”, cube el reporte Inclusión Social en Uruguay, publicado el miércoles por el organismo internacional. Sin embargo, explicó que «para acabar con la pobreza extrema se necesitaría que un millón de personas la abandonaran cada semana durante sixteen años», por lo que es necesario el apoyo de toda la comunidad internacional. De cara al futuro, el presidente de la principal institución de desarrollo global remarcó que esta «migración» desde los estratos más pobres de la población representa «nuevos desafíos» para generar un crecimiento «sostenible e inclusivo». La pandemia de coronavirus puede estar llevando hasta one hundred millones de personas a la pobreza extrema, advirtió este jueves el presidente del Banco Mundial, David Malpass, en una entrevista con la AFP. Más de 500 millones de personas están cayendo en la pobreza extrema por tener que pagar los gastos médicos de su propio bolsillo, según dos informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Banco Mundial, que constatan que la pandemia de COVID-19 puede frenar dos décadas de progreso hacia una mayor cobertura sanitaria. “Los avances en la reducción de la pobreza extrema básicamente se han detenido, a lo que se suma un escaso crecimiento de la economía mundial”, indicó en un comunicado al presentar el informe el presidente del Grupo Banco Mundial, David Malpass.