La reflexión respecto a las especificidades de los territorios es elementary para comprender la profundidad de la centralización en Chile, y asimismo para explorar la relación existente entre conflicto social y concentración de la riqueza. Para un 48% de los encuestados, esto se debe a que falta mejorar la distribución de recursos entre las comunas, a lo que se suma que otro 23% opinó que refleja que este tema no ha estado entre las prioridades políticas. Una de cada cinco personas mencionó además la falta de planificación urbana como el origen de este problema. Marcadas diferencias entre quienes viven en el Gran Santiago y quienes lo hacen en otras regiones del país, arrojó la segunda consulta on-line con que Corporación Ciudades quiso recabar cómo viven y qué piensan de sus ciudades los habitantes de 22 ciudades del país, bajo la nueva óptica que impone la pandemia del covid 19.
El informe económico de la OCDE (2013) concluye que el fuerte crecimiento de Chile ha traído consecuencias para el ecosistema, uno de ellos es el mayor gasto energético. Si bien existe la conciencia a nivel público y privado del costo medioambiental, los esfuerzos para cubrir las externalidades negativas, a través de nuevas tecnologías e impuestos energéticos, no han sido suficientes (OCDE, 2013). Los años de escolaridad promedio en Chile han tenido una favorable evolución en el tiempo. Se observa en el (Gráfico 8) que en 1955, en promedio, los chilenos no alcanzaban a completar la enseñanza primaria (8 años), llegando a este nivel solo a partir de 1990. En 2014 el promedio fue de 9,eight desigualdad internacional años, por debajo de la educación obligatoria en el país (12 años) y de los años de escolaridad esperada de acuerdo con el PNUD (15,2 años para 2014). El país busca facilitar cada vez más el acceso a estudios superiores, de hecho la política pública pretende que a través de becas y créditos la educación esté al alcance de la población económicamente más vulnerable.
También combatió la actitud de la izquierda inglesa, la de la “Tercera Vía” de Tony Blair, que asumió que la desigualdad era el costo inevitable del crecimiento. Para Atkinson, en cambio, “hay pasos que pueden dar los gobiernos, las firmas, los sindicatos y las organizaciones de consumidores para reducir los presentes niveles de desigualdad. Y reclamaba que la “Tercera Vía” y sus seguidores en el mundo no se hayan atrevido a actuar frente a los mercados, en defensa de las familias. Uno de los hechos positivos que aprendió la humanidad en la última década, es precisamente el ejercicio de la diversidad.
La desigualdad es un desafío ético porque implica una injusticia, ya que todos tenemos una dignidad por ser personas y el derecho a participar de los bienes y servicios que se producen en la sociedad; y es injusta porque esta realidad podría ser distinta mediante políticas públicas. Desde la tradición del pensamiento social cristiano, san Alberto Hurtado outline la justicia social como “aquella virtud por la que la sociedad, por sí o por sus miembros, satisface el derecho de todo hombre a lo que le es debido por su dignidad de persona humana”. Después de 20 años desde su creación, el Premio Nacional de Medicina recayó en una mujer.
Y nunca se hicieron la pregunta, muy importante, de quiénes eran los directores de esa empresa. Y que la universalización de servicios sociales, como la salud y la educación gratuitas, le dan al régimen cubano una perspectiva social y una legitimidad muy fuertes. Es la parte positiva, que se debería seguir en otros países para mejorar la situación de las personas. La crisis también tiene el potencial de aumentar la presión política a favor de un cambio más progresivo. Si la flexibilización cuantitativa logra mantener a flote las economías y los avances médicos nos permiten contener el virus, podemos presenciar el regreso a alguna versión de los negocios como de costumbre, con todas las desigualdades arraigadas que esto conlleva. Pero si la disaster resulta ser más prolongada, si conduce a una depresión global o si las vacunas se retrasan mucho, la miseria well-liked y el descontento podrían llegar a niveles tales que las decisiones políticas más radicales se vuelvan más atractivas o incluso inevitables.
Otros determinantes de la resistente desigualdad son “la concentración de la propiedad y el poder económico, el acceso diferenciado según los ingresos a la educación de calidad, la diferencia de remuneraciones en los empleos, la debilidad de los sindicatos, entre otros factores…” (Sunkel e Infante, 2009, pp. 89). Respecto a la tasa de crecimiento, en 2016, La Araucanía es la región con mayor crecimiento a nivel real, a pesar de los bajos indicadores socioeconómicos que se darán a conocer más adelante. Mientras tanto, la menor variación se observó en el norte, en la región de Antofagasta, cuyo PIB disminuyó un 2,9% respecto al año anterior, sin embargo, sigue siendo una de las regiones que más aporta al PIB nacional (9,7%), gracias al producto minero de esta zona. La Región Metropolitana es por excelencia la región que más produce en el país, por sí sola aporta el 42% al PIB nacional, sus principales ingresos provienen del sector de servicios financieros y empresariales y del comercio (Ver Anexo B). Las principales conclusiones de este trabajo, revelan la gran heterogeneidad que existe entre las regiones de Chile, siendo consistente con los trabajos de Agostini y Brown (2007; 2010), Ramírez et al. (2009) y Mac Clure y Calvo (2013), quienes avalan la importancia de trabajar a distintas escalas territoriales2.
La sorprendente partida de Graeber dejó al mundo con la esencia de su filosofía audaz y su visión de justicia social. Las distintas religiones, como el budismo, taoísmo, confucionismo, judaísmo e islam, también han dejado su influencia sobre el concepto de igualdad. “Las religiones reivindican a la humanidad en términos de familia, transmitiendo el mensaje de que todos somos hermanos, tenemos un mismo padre, creados por un solo Dios.
Sí, porque este 2022 el reconocimiento lo obtuvo la neuróloga infantil Marta Colombo, quien tiene una vasta carrera en docencia, investigación y asistencia en hospitales públicos. Marta Colombo es médica cirujana titulada de la Pontificia Universidad Católica de Chile y la especialidad la obtuvo en la Universidad de Chile. Posee casi fifty five años de trayectoria en la salud pública y cuenta con más de un centenar de trabajos científicos publicados en revistas chilenas e internacionales.
En documentos recientes (particularmente en Redistribución, desigualdad y crecimiento, 2014 y en ¿Neoliberalismo Sobrevendido?, 2016) sus investigadores no solo han dicho que la desigualdad extrema cut back la fuerza y la duración del crecimiento, sino que sostienen que impuestos pagados por los más ricos en actividades con externalidades negativas, pueden ayudar a los países a crecer. Es importante aclarar que Atkinson no buscaba acabar con la desigualdad, ni tenía en mente un nivel específico al que se debiera apuntar. Argumentaba que hay buenos motivos por los que algunas personas tienen más ingresos que otras (trabajan más o tienen a su cargo decisiones más complejas). Lo que pretendía era cambiar la dirección en que nos estamos moviendo, pues hoy nuestras sociedades están estructuradas para seguir acrecentando una desigualdad que le parecía insostenible.
Siempre hay personas en los medios de comunicación que tratan de menoscabar las opiniones ajenas y actúan con cierto morbo. Tenemos que reconocer, primer lugar, que de los valores “revelados” por Jesús mediante sus palabras y obras, al anunciar y anticipar en su contexto el Reino de Dios, permanecen vigentes y reclaman ser implantados con urgencia en la realidad global y local. Más aún, son parte constitutiva de la misión de las discípulas y los discípulos de Jesús, de los llamados a colaboran con él en la búsqueda del Reino y su justicia, en cada tiempo y lugar. Dado que las cifras iniciales de desigualdad en Chile son muy altas, los avances han sido lentos y se necesitaría de un mayor esfuerzo por parte del Gobierno para someter todas aquellas fuerzas que amplifican las desigualdades.
El amanecer de todo es un libro desafiante y estimulante que nos invita a repensar nuestra comprensión de la historia humana. Es una lectura imprescindible para cualquiera que quiera entender mejor el mundo en el que vivimos y el potencial de un futuro más justo. El libro se basa en un análisis exhaustivo de la evidencia arqueológica y antropológica, y proporciona numerosos ejemplos de sociedades complejas que eran igualitarias y democráticas. Los autores señalan que estas sociedades existían en todo el mundo, desde la Europa neolítica hasta la África subsahariana. Eso de que el costo es que mueran personas no lo cube nadie en países desarrollados en Europa. No porque sean más cultos o educados, no lo creo, sino porque un empresario sabe que necesita la mano de obra, y si no funciona bien, tampoco va a tener ganancias.
Sin duda, las mujeres chilenas han realizado esfuerzos determinantes en orden a un cambio de su posición. De hecho, dentro de Latinoamérica y el Caribe, tienden a ubicarse entre aquellas con más alto nivel educacional. Los datos relativos a la incorporación de las niñas al sistema formal de educación certifican un incremento sostenido en las últimas décadas, aunque en la Educación Superior tiende a declinar su presencia.
Ahora, por lo tanto, a diferencia del año ’90, no es la fractura política lo que puede afectar la estabilidad de nuestro país. Hoy es la fractura social el factor clave que hay que enfrentar para garantizar la estabilidad democrática e institucional de nuestro país a largo plazo. Yo medité respecto de cuál es hoy el desafío del sistema político en Chile, para poder precisarlo, establecerlo. Entiendo que don Gabriel Valdés se propuso esa tarea, tomando en cuenta que el año ’90 desigualdad en america latina, al retornar la democracia, el país corría el severo riesgo de volver a polarizarse.
Mazzucato explica que Apple invirtió menos en Investigación y Desarrollo (I+D) que otras industrias tecnológicas, porque usó lo que el financiamiento público había creado. “Es preferible una torta más chica, mejor repartida que hacer crecer la torta con los niveles de mala distribución que tenemos hoy”. Este fenómeno se acentuó tras la crisis financiera de 2008 (de la cual muchos responsabilizaron a la misma élite). Según remarcan Jacobs y Mazzucato, en los tres años que siguieron a la disaster, ¡el ninety one %! Las medidas de Atkinson buscan intervenir antes en el mercado, de modo que la repartición de los premios sea distinta.