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Banco Mundial: Chile Es El Décimo País Más Desigual De Latinoamérica Y El Segundo Con Mayor Pib Per Cápita

A diferencia de las regiones Metropolitana y Antofagasta, con descensos de 7,47% y 7,45% respectivamente, que fueron las más afectadas. Pese a esta generalizada incidencia a la baja, la nueva dimensión no generó grandes cambios en las posiciones regionales del IDERE global. La dimensión sustentabilidad y medio ambiente es de gran relevancia para el crecimiento económico sostenible.

La percepción de las personas de que la distribución de ingresos en su país era injusta o muy injusta disminuyó al caer la desigualdad, en tanto subió cuando la brecha se acrecentó. “La caída de la desigualdad se detiene, el ímpetu se acabó, y se acaba en un contexto en que además también está disminuyendo la tasa de crecimiento y en algunos países incluso hay algo de recesión y aumenta la pobreza”, dijo. Las transferencias monetarias según régimen político no muestran una diferencia importante, al igual que los datos de empleo público. Sin embargo, el salario mínimo es la variable que muestra que hubo una diferencia en términos de política activa en el ámbito laboral que reforzó probablemente lo que se observa como tendencia estructural en términos de demanda y oferta de los trabajadores por nivel de calificación. Descomponiendo los datos para encontrar los factores que explican esta disminución tan importante de la desigualdad, se observa que, en promedio para la región, un 62% está asociada a la caída en la desigualdad del ingreso laboral. “Esto ya da una pauta de dónde tenemos que buscar las causas, porque si 2/3 se explican por lo que pasó con el ingreso laboral, ése es el camino para entender los determinantes de ese periodo”, dijo.

Si ocurre que jóvenes de familias más pobres, con poco conocimiento y experiencia en educación superior, reciben educación de peor calidad y poco apoyo en su paso por la educación superior, esto reduce sus oportunidades laborales y de movilidad. Un gran desafío para países que expanden su educación superior e invitan, por primera vez, a sectores tradicionalmente excluidos, es apoyar, con recursos económicos pero también extraeconómicos, a los jóvenes más vulnerables. Idealmente, el esfuerzo por impulsar la movilidad requiere una batería de políticas que incluye estrategias universales y focalizadas. La reducción de la desigualdad es una tarea compleja y de largo desigualdad en la globalización ejemplos plazo, que incluye políticas que afectan los ingresos autónomos de los hogares -laborales, educacionales-, así como políticas redistributivas que permiten que el Estado recaude y use recursos para promover el bienestar económico de la población. Estas políticas generales deben ser complementadas con estrategias más focalizadas y específicas que atiendan las necesidades de sectores pobres, marginados o discriminados. La desigualdad de Chile tiene una importante dimensión territorial, cuando las desigualdades son considerables, desalientan la formación profesional, obstruyen la movilidad económica y social y el desarrollo humano y, en consecuencia, inhiben el crecimiento económico.

En este mismo sentido, agregó que un requisito es alentar la asistencia oficial para el desarrollo y las corrientes financieras, incluida la inversión extranjera indirecta para los estados con mayores necesidades, entre otros aspectos. “Desde finales del siglo XIX se han desarrollo sistemas desiguales, generando inequidades de oportunidades, generando desigualdad de acceso de educación, salud, agua, infraestructura”, recalcó en su intervención. Cociña comenzó su intervención señalando que “un tema clave en la desigualdad no son tanto los niveles de desigualdad en sí, sino que sobre todo las percepciones de justicia asociadas a esa desigualdad”.

La contrapartida de la concentración en el tope son los bajos sueldos que obtiene la mitad de los asalariados, cuya remuneración es inferior al ingreso que necesita un hogar promedio para cubrir sus necesidades básicas (línea de pobreza). Esto no se traduce en una situación generalizada de precariedad, porque hay más fuentes de ingresos.

Por su parte, familias pobres muchas veces deben decidir a qué hijo educar profesionalmente. Por tanto, las condiciones iniciales cumplen un rol importante para marcar las desigualdades futuras. Mejorar sustancialmente la oportunidad educacional en todas las regiones juega un rol esencial para disminuir las brechas que separan a los chilenos. El crecimiento económico es una condición necesaria para el desarrollo, sin embargo, no suficiente. En el libro de March (2013) se cita a Sunkel & Paz (1986), quienes definen desarrollo como un proceso de cambio social, cuyo objetivo es igualar las oportunidades sociales, económicas y políticas, refiriéndose a un nivel nacional y a las sociedades que alcanzan mayores niveles de bienestar. Todaro y Smith (2012) por su lado, adopta la definición desarrollada por Amartya Sen15, donde se relacionan el proceso de desarrollo con la calidad de vida y con la capacidad de las personas de elevar su estatus, adicionando los conceptos de autoestima y libertad.

Esta inversión en capital humano, a su vez, implicaría un mayor nivel de PIB futuro, lo que repercutiría indirectamente también en la reducción de la desigualdad. Por su parte, la Nueva Geografía Económica plantea que las desigualdades entre regiones pueden mantenerse en el tiempo e incluso crecer junto con la economía de un país, ya que existe un centro que aprovecha los mayores beneficios del crecimiento, mientras que las regiones de la periferia pierden esa oportunidad (Merchand, 2017). “En los últimos diez años la investigación ha empezado a poner de manifiesto lo negativa que resulta la desigualdad para la sociedad. Resulta mala incluso para los de arriba, que se convierten en personas diferentes -más endiosadas- gracias a ella” (Joseph Stiglitz, Premio Novel de Economía 2001). Marianne Heberlein, estudiante de sexto año de la carrera de Geología de la Universidad de Chile, tuvo la oportunidad de analizar microfósiles y muestras sedimentarias provenientes de la bahía de Cranton, en la Antártica.

Parece existir una relación bastante directa entre los niveles de desigualdad sobre la ocurrencia de conflictos, que tiene que ser estudiada con mayor profundidad. De acuerdo a la información del COES (2018), la mayor cantidad de conflictos sociales por habitante se producen en las regiones de Aysén, Atacama, Los Ríos, Arica y Parinacota, y Magallanes, todas regiones donde los índices de desigualdad son iguales o superiores al promedio nacional. Parte del debate público, sin embargo, argumenta que la desigualdad es un producto inevitable del libre mercado, el desarrollo tecnológico, y de la globalización. Se dice (o al menos se asume) que no hay nada que los países puedan hacer para domar las fuerzas del mercado y que cualquier intento de regular el grado de desigualdad tendrá efectos negativos ineludibles sobre el crecimiento económico. Así, lo que hoy se observa en los datos sería una consecuencia inevitable de los tiempos modernos.

Se infiere que períodos de alto crecimiento económico tienden a aumentar la participación de la población de mayores ingresos, a expensas del resto de la población. Recordando a Merchand (2017), este señala que las desigualdades entre regiones pueden mantenerse en el tiempo e incluso crecer junto con la economía de un país, ya que existe un centro que aprovecha los mayores beneficios del crecimiento, mientras que las regiones de la periferia pierden esa oportunidad. El modelo VI incorpora, al igual que el estudio de Solimano y Torche (2008), el ingreso autónomo del hogar. Se utilizan los quintiles del ingreso autónomo en lugar del Gini como controles de la desigualdad inicial y se mantiene el PIB per cápita. Tanto la concentración de población indígena como el aporte del sector secundario y la oferta de educación superior siguen siendo relevantes y el PIB per cápita vuelve a ser significativo.

Y si consideramos que en Chile todo el sistema de bienestar está mercantilizado podemos darnos cuenta de que la desigualdad crece aún más, porque quienes tienen recursos para educarse o entrar al sistema privado de salud lo hacen y así se va reproduciendo la cadena», termina. En Chile, el analfabetismo es cada vez menor (ver Gráfico 9), pasando de un 5,2% de la población de 15 años o más que no sabía leer ni escribir en 1990, a un 3,1% en 2015. En 1990 un 14,2% de la población rural era analfabeta y un 3,4% de la población urbana; asimismo, el 5,4% de las mujeres lo era, seguidas de cerca por un 4,9% de los hombres. Para 2015 se observa un buen progreso en las personas del área rural, ya que un menor 7,8% no sabe leer ni escribir, así como un 3% de las personas de la ciudad; este año, hay un 3,3% de mujeres analfabetas, seguidas muy de cerca por un 3% de los hombres.

Está claro que hay protestas por la desigualdad y el malestar social, el FMI y la ONU también lo dicen. Organismos internacionales que no son precisamente de izquierda llaman la atención de que el recrudecimiento de las condiciones de vida lleva a las personas a protestar. La brecha educativa de los sectores carenciados en comparación con los sectores privilegiados es brutal. Eso va a traer consecuencias terribles, porque los estudiantes después son el tejido productivo y van a reproducir la desigualdad.

desigualdad en paises

19Para ver las variables que componen las distintas dimensiones, revisar el informe de Vial (2017). 2Estos autores hacen especial énfasis en la importancia de trabajar a nivel subregional. Mac Clure y Calvo desigualdad entre paises desarrollados y subdesarrollados (2013) proponen una división administrativa basada en el actual estado del proceso de urbanización. Es interesante ver como a partir del año 2001 la tasa de mortalidad comienza nuevamente a ascender.

En general, las regiones con menores años de escolaridad al comienzo del período, son aquellas que han tendido a mejorar más este indicador. Muchos trabajos de investigación han tratado de identificar cuán importante es la relación entre desigualdad y desarrollo, y los mecanismos para explicar dicha relación. Una de las conclusiones es que ella opera vía mecanismos más indirectos de lo que se creía. Existen diversas razones por las que podríamos argumentar a favor de reducciones en los niveles de desigualdad que exhibe el país, desde juicios morales y éticos, hasta elementos puramente prácticos como son los efectos que produce sobre el crecimiento, el tejido social, y la concentración del poder político (además del económico).

Desigualdad Social: México Y Latinoamérica

Sin embargo, no es del todo adecuado atribuir de forma exclusiva al modelo neoliberal, los actuales indicadores de desigualdad que presenta la sociedad en que vivimos. El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), al referirse al caso de Chile señala “La historia del país, la antigua y la más reciente, se puede escribir desde el lente de sus desigualdades, y muy probablemente sea este fenómeno el que marque la senda de su desarrollo” (p. 48). Para el logro de este propósito, la influencia de un conjunto de economistas y profesionales formados en la escuela de Chicago, conocidos como Chicago boys, resulta determinante.

Claro está, que este paso hacia la recuperación del sistema democrático no hubiera sido posible sin la tenaz y decidida movilización social de los opositores al gobierno autoritario. Entonces, cómo es que el proyecto neoliberal se logró propagar e instalar de manera tan acelerada y sostenida. Sobre esta interrogante, Morresi (2008) sostiene, los neoliberales desarrollan y expanden sus ideas en fundaciones y centros de estudio académicos, se instalan por lo general en espacios gubernamentales de poder, y desde allí implementan políticas públicas según sus idearios.

En la última década se ha hablado mucho de Malala Yousafzai, activista pakistaní por la educación de las mujeres que recibió el Nobel de la Paz en 2014 por su valiente resistencia a la doctrina de los talibanes (que había prohibido a las niñas ir a la escuela y, con ello, les negaba el derecho humano a la educación). En cierto sentido, este ejemplo se puede considerar representativo de dos tendencias del pensamiento actual. Una tiende a interpretar los esfuerzos heroicos de Malala como una prueba de la imperiosa necesidad de campañas en favor de la educación de las niñas; en especial, en países donde se les niega un acceso a una educación en pie de igualdad desigualdad segun la onu con los niños varones. Por añadidura, los datos muestran que, frente a un tercio de los hombres de la Unión Europea que llevan a cabo tareas del hogar y hacen la comida a diario, entre las mujeres esta proporción asciende a ocho de cada diez. También en la esfera privada, casi la mitad de las mujeres que trabajan dedican al menos una hora al cuidado infantil o de otro tipo, frente a un tercio de los hombres que trabajan. Al documentarme al respecto, he encontrado amplios indicios de la persistencia de la desigualdad de género en el ámbito internacional, más allá de la Unión Europea , en la esfera privada y la pública y en múltiples ámbitos.

desigualdad social en la actualidad

En tanto, la indigencia —las personas que no tienen ingresos suficientes para hacer frente a las necesidades alimenticias— trepó al 7,7%, frente al four,9% del mismo período de 2018. Se destaca la profundización de la pobreza extrema en el proceso de deterioro de la condiciones de vida, la cual aumenta en un 57,1%. La nota de dicho medio agrega que el 10 por ciento de la población en México captó el 59 por ciento de los ingresos generados en el país entre 2000 y 2019. Ese mismo día, el diario La Jornada informó en sus ocho columnas que “tienen un tercio de la riqueza nacional 1% de millonarios”.

En América Latina y el Caribe sigue siendo alta, pese a que ha disminuido considerablemente. En muchas economías industriales avanzadas, la desigualdad aumentó ligeramente si bien ya se encontraba en valores bastante bajos. Varios países de Europa Oriental registraron un drástico aumento de la desigualdad durante su transición política. Las diferencias han disminuido en algunas partes de Oriente Medio, pero han aumentado en determinados grupos.

Esta serie escenifica una competición con 456 participantes que tienen grandes deudas sobre sus espaldas. Lo anterior implica que hay que empezar a ampliar la jornada escolar y que hay que invertir en los docentes. No es posible brindar a los estudiantes lo que en la actualidad necesitan para la vida o el trabajo en cuatro horas de clase que acaban siendo menos de tres horas efectivas en muchos casos.

Resulta evidente, que factores asociados a los ingresos, ubicación geográfica, y edad, se encuentran presente en la configuración de nuevas formas de desigualdad. Sin embargo, contar con acceso a Internet no es garantía para ser parte de la propuesta de gobierno electrónico. De acuerdo con un estudio del Gobierno de Chile (2016), se indica que para el año 2015, las personas consultadas le asignan un bajo porcentaje de importancia, a las actividades asociadas a relacionarse con el Estado por Internet, equivalente al dos por ciento. Por el contrario, un porcentaje elevado de importancia se asigna a actividades, tales como la adquisición de información y comunicaciones (Gobierno de Chile, 2016). Ante este cuadro, pareciera que la industria de la comunicación digital y las redes sociales ganan terreno en las preferencias de la población, en contraposición al interés que demuestran los ciudadanos de relacionarse con el gobierno en línea.

En Chile, ya transcurrido algunos años de la implementación de la modernización del Estado y desarrollo del gobierno electrónico. Es posible analizar críticamente su incidencia en el fortalecimiento del sistema democrático y bienestar de la población. Para lo anterior, se requiere poner en contexto el análisis de la experiencia, toda vez que este fenómeno, no debiera ser abordado como un acontecimiento explicit y aislado de las profundas transformaciones acaecidas, como resultado de los efectos del neoliberalismo. En este escenario, es que la racionalidad tecnológica de orientación capitalista, finalmente se instala en los procesos de modernización del Estado.

Solo el 47% de las mujeres del mundo están empleadas; apenas 20 son jefas de Estado o Gobierno; solo un 50% puede decidir utilizar métodos anticonceptivos o negarse a tener relaciones íntimas; todavía representan el 75% de los padres solteros; y aún son sometidas al matrimonio infantil y  mutilación genital. Un nuevo estudio de la ONU recoge graves estadísticas, que muestran que, a pesar de los avances en algunos ámbitos como la educación, el progreso se ha estancado por un cuarto de siglo. “La cartografía de la pobreza crónica es un insumo indispensable para la puesta en marcha de Estados inteligentes. Contar con este tipo de herramientas es basic para definir mejor los problemas y ganar precisión en la orientación de la política pública y recursos escasos”, sostuvo Ianina Tuñón, investigadora del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA. A las dos interpretaciones sobre la persona y la igualdad que se presentaron en la sección anterior, la primera basada en la autodeterminación individual a través del uso de las capacidades; la segunda fundada en que la personalidad se outline por la estructura de la relación mercantil, corresponden dos definiciones distintas de clase social.

Un claro ejemplo es el uso de Facebook por movimientos sociales como Black Lives Matter, que han utilizado la plataforma para organizar protestas y difundir información relevante sobre la injusticia racial. El estudio pregunta a los participantes por los factores más importantes que afectan a la “movilidad social” y el más indicado es la educación (56,9 %), seguido de “el esfuerzo personal, trabajo duro, constancia” (45,5 %) y la familia (31,9 %). Cuestionados sobre si piensan que hoy en día las diferencias de ingresos entre las personas ricas y pobres son demasiado grandes, el 84,7 % respondió estar “muy de acuerdo” o “bastante de acuerdo”. El coeficiente se distribuye en el intervalo comprendido entre 0 y 1, siendo 0 equivalente a “máxima igualdad” y 1 a “máxima desigualdad”, ambos referidos a ingresos salariales.

Lo hacemos en los estados más pobres del país, como Puebla, Oaxaca o Chiapas, y aliados con organizaciones de la sociedad civil mexicana. Nuestro objetivo no es otro que mejorar los derechos de la infancia y garantizar sus necesidades de educación, salud y vida digna, y todo ello para que familias y comunidades accedan a mejores condiciones de vida (alimentación, vivienda, agua, salud…) o para fortalecer las acciones de organizaciones comunitarias. De esta forma, impulsamos el desarrollo de iniciativas económicas locales, que hagan prosperar a los territorios en los que estamos presentes. A pesar de ello, en lugar de aplicar impuestos a las personas y empresas más ricas, los Gobiernos de África Oriental planean reducir en los próximos años las inversiones públicas en servicios que benefician a las personas en mayor situación de pobreza, como la atención médica y la educación, o en agricultura y protección social. Estos recortes empeorarán la crisis económica que sufre África Oriental y agravarán la pobreza y las desigualdades en la región. La cuestión fundamental alrededor de lo anterior es que el rol funcional que se tenga dentro de esta relación de producción determina la pertenencia a una clase social.

“Son personas que históricamente ya han sido criminalizadas y estigmatizadas” lo que hará “que tengan muchísimo más miedo de ser testeadas”. Por ello, la medida, según la activista, provocará justo el “efecto contrario”, ya que, la falta de diagnóstico abre las puertas de la transmisión. La relevancia de la informalidad laboral es otro signo de desigualdad en tanto representa una carencia o falta de cobertura por parte de la legislación en materia de trabajo. Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México (INEGI), en el primer trimestre de 2020 hubo un 56 desigualdad onu,0% de informalidad laboral siendo uno de los ejemplos de desigualdad en México más preocupantes. La gran mayoría de ellas tiene escasa formación y no cuenta con otras opciones de supervivencia, lo cual les obliga a aceptar las condiciones deplorables que les ofrecen las empresas que se dedican a la explotación de este recurso. Realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados.

Banco Mundial: Chile Es El Décimo País Más Desigual De Latinoamérica Y El Segundo Con Mayor Pib Per Cápita

10.1 Para 2030, lograr progresivamente y mantener el crecimiento de los ingresos del 40% más pobre de la población a una tasa superior a la media nacional. A su vez, el invitado internacional agregó que “Antes se decía que la desigualdad en América Latina se debía al capitalismo, pero bueno, hay países capitalistas que son desiguales, pero no tanto como los de la región. Luego que era el neoliberalismo y así ha habido diferentes modas, entonces ahora todo se quiere explicar por esa intersección de clase, etnia y género y voy a tratar de demostrar que sí, pero también voy a cuestionarlo un poco y ver qué otras cosas habría que tomar en cuenta y preguntarnos, cuál es el riesgo de con un solo concepto querer explicarlo todo. Entonces es ese es el tema de hoy, viniendo de un país muy desigual como es México y uno muy desigual como es Chile” cerró.

La dimensión sustentabilidad y medio ambiente es de gran relevancia para el crecimiento económico sostenible. Es lamentable que no se tengan datos históricos respecto a la inversión pública en el área medioambiental, sin embargo, contamos con los datos de los últimos años, los cuales develan que en 2015 la inversión ascendió a más de 27 mil millones de pesos. A nivel regional las regiones con mayor presupuesto medioambiental ejecutado fueron La Araucanía, Biobío y Aysén, tres regiones del sur del país. En el informe del PNUD (2016)16, se observa que Chile está dentro de los países con un nivel muy alto de desarrollo humano, ubicándose en el puesto número 38, bajo Lituania y sobre Arabia Saudita, con una expectativa de vida promedio de 82 años, y una media de años de escolarización de 9,9 (de los 16,three años esperados para el país). Dentro de esta categoría los únicos países latinoamericanos representados son Chile y Argentina en el puesto forty five (con valores de 0,847 y 0,827 respectivamente, siendo el promedio de América Latina y el Caribe de 0,751). Sin embargo, Chile retrocede 12 puestos si se considera la desigualdad17, quedando al nivel de países como Rumania, Kuwait o Rusia.

Para la mayoría de las regiones, hay un mayor porcentaje de mujeres analfabetas que de hombres, a excepción de las regiones de Tarapacá y O’Higgins. De acuerdo con la Encuesta CASEN, los años de escolaridad promedio en Chile son superiores a los presentados anteriormente por Barro y Lee y el PNUD. A pesar de estas diferencias, son muy informativos y nos permiten hacer comparaciones entre los distintos territorios del país y su evolución en el tiempo. Acorde con la CASEN, los años de escolaridad promedio del país son eleven, con una leve diferencia por género, 11,2 años para los hombres y 10,9 en el caso de las mujeres. Esta diferencia, aunque pequeña, se ha mantenido en el tiempo y es el mismo comportamiento presentado por Barro y Lee (2010). Otros datos interesantes que nos entrega la CASEN en materia de educación, es la diferencia de escolaridad por lugar de nacimiento y pertenencia a una etnia.

“Lo interesante que vamos a discutir es por qué se llegó a esa opción y en qué consiste”, agregó el economista. La Asamblea General de la ONU al aprobar la Declaración Universal de Derechos Humanos en 1948 reconoce el derecho a las madres y niños/as a “cuidado y asistencias especiales”, así como “protección social”. En los años sucesivos, la ONU exhorta a los Estados a velar por los niños en las situaciones de vulnerabilidad por emergencias y conflictos. En 1989, tras 10 años de negociaciones, se aprueba la Convención sobre los Derechos del Niño, que vincula a los Estados Partes a cumplir las normas de este tratado Internacional.

Para lograr estos objetivos, adoptamos cuatro enfoques en la ejecución de nuestros programas educativos. En todo el cambio en el sistema de la subvención escolar, que se ha movido a una subvención escolar diferenciada, donde los alumnos que provienen de hogares más desaventajados reciben una subvención mayor y los establecimientos que atienden una proporción alta de alumnos más desaventajados, también. De hecho, varios académicos que han estudiado los determinantes del crimen han apuntado a la desigualdad como una de sus causas principales. Por ejemplo, Gary Becker, uno de los primeros investigadores que modelaron las decisiones criminales como una elección racional hecha por individuos. Crear tecnologías de reciclaje usando la ciencia e innovación como herramientas de transformación, proveyendo de valor agregado a los desechos que hoy terminan en su gran mayoría en rellenos sanitarios. De Chile Cristina Acuña, quien en conversó con Alumni Uchile sobre este proyecto sustentable que reduce la huella de carbono.

desigualdad en los paises

Por el contrario, una política que empeora la distribución del ingreso se outline como regresiva. Este número nos sitúa en el lugar 24 en términos de desigualdad sobre el whole de 159 países con datos disponibles, y nos corona como el país más desigual de la OCDE. El profesor de la Escuela de Gobierno UC e investigador de MLIV, Eduardo Undurraga, recordó que la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por Chile hace más de 30 años, estableció el derecho de toda niña, niño y adolescente a un adecuado desarrollo físico, psychological, espiritual, moral y social. Las niñas, niños, y adolescentes tienen mayor probabilidad de vivir en condiciones de pobreza y deprivación severa, lo que puede tener consecuencias dañinas y duraderas para su desarrollo y el de la sociedad”, explicó. (i) Desaceleración del crecimiento por incapacidad de lograr mejoras continuas en competitividad y productividad(ii) Baja calidad de la educación y lenta transferencia de conocimiento e ideas innovadoras (iii) Excesiva desigualdad y desprotección social.

Por otro lado, ese indicador tampoco mide la concentración de la riqueza en un país, razón por la cual puede resultar engañoso. Alegan que la economía ha crecido, pero que la riqueza sigue concentrada en un sector de la sociedad, un rasgo que históricamente ha sido común en los países latinoamericanos. La igualdad debe garantizar una vida digna para todos, las políticas deben ir en prestar atención en las necesidades de las comunidades desfavorecidas y marginales. La desigualdad se ha vuelto una de las problemáticas que más afecta a los países durante las últimas décadas. Por ejemplo, un 27,2% de las y los trabajadores declara que su empleo no le permite tener estabilidad financiera y un 33,4% considera que su educación no les ha entregado la oportunidad de aumentar sus ingresos o de ascender en el trabajo. 10.7 Facilitar la migración y la movilidad ordenadas, seguras, regulares y responsables de las personas, entre otras cosas mediante la aplicación de políticas migratorias planificadas y bien gestionadas.

Consistente con lo reportado por la OCDE, encuentran que en su conjunto la acción del gobierno es levemente progresiva.[8] El estudio muestra, además, que el sistema tributario es levemente regresivo y el sistema de transferencias es progresivo, especialmente debido a las transferencias en salud y educación. Así, el diseño mismo del sistema tributario explicaría por qué la desigualdad antes y después de impuestos y transferencias es particularmente acotada en el caso chileno. En este sentido, para Martínez-Vázquez et al (2012), el impuesto sobre el ingreso personal (este es el impuesto más progresivo, según Verbist y Figari, 2014) y el gasto social, en general, reducen la desigualdad; mientras que las cuotas de la seguridad social, el IVA y otros impuestos indirectos la aumentan.

Mayores ingresos son consecuentes con mejores oportunidades de acceso a un sistema educacional y de salud de calidad14. Una persona de mayores ingresos irá a mejores escuelas, podrá asistir a clases particulares y extracurriculares, tendrá mejor asistencia dental, podrá ir a mejores centros médicos e incluso tomar mejores medicinas, que una persona pobre. Para reducir la pobreza que aún afecta a Chile, así como la desigualdad, se requiere de buenos instrumentos que puedan identificar, cuantificar y caracterizar, de una forma precisa, a la población más susceptible del país, de manera de poder aplicar la política pública eficientemente. Bajo este criterio, el Ministerio de Desarrollo Social, encargado de la Encuesta CASEN, a partir del año 2013 utiliza una nueva metodología de medición de Pobreza por Ingresos, tomando en cuenta los nuevos patrones de consumo chilenos e imponiendo estándares más altos que se adapten al actual nivel de desarrollo del país. Asimismo, incorpora la medición de la Pobreza Multidimensional, siguiendo el ejemplo de países más desarrollados. En marzo del año 2010, bajo el segundo mandato de la presidente Michelle Bachellet, Chile se convirtió en el miembro número 31 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y el primero a nivel Sudamericano.

Así, entre 2002 y 2013, el ingreso laboral del decil más pobre creció, en promedio, un 50% en términos reales, mientras que el aumento promedio fue del 15% para el decil más rico (y 32 % para el ingreso de la mediana de la distribución). En los últimos 15 años ha habido una reducción de la desigualdad de los ingresos, aunque el coeficiente de Gini de 0.forty eight en la última medición disponible para Chile (2017) está lejos aún del promedio de las economías desigualdad en la distribución de ingresos desarrolladas (figura 2). Por el contrario, es el diseño institucional y las políticas públicas los que han permitido que eso ocurra. En otras palabras, son decisiones políticas las que han transformado la globalización en desigualdad. Si bien estos indicadores aún no alcanzan la relevancia que tiene el coeficiente de Gini en el debate público, en parte porque su disponibilidad es más reciente, hoy son el estándar en el debate académico sobre desigualdad.

La pobreza cayó significativamente en todas ellas, pero la desigualdad del ingreso se mantuvo constante. Por lo tanto, estudiar solo el comportamiento nacional no es un análisis completo, ya que oculta cambios significativos a nivel regional. Conocer la dinámica de desigualdad regional será un punto importante en el diseño de políticas públicas y estrategias de desarrollo diferenciadas, muy necesarias en un país con regiones tan heterogéneas como Chile. Por una parte, como se puede observar desigualdad en el mundo actual en la Tabla 2, este ODS no contempla en ninguna parte las causas de las desigualdades económicas. En este sentido, Oestreich (2018 ) propone que, si bien hay una meta para las oportunidades y los resultados de esta misma, en ninguna parte se mencionan los factores que dan origen a estas disparidades en primer lugar. Así, se corre el riesgo de seguir perpetuando las estructuras internacionales y nacionales que promueven de una u otra forma las desigualdades en y entre los países.

Por lo tanto, haber aprobado la Agenda 2030 indica voluntad, pero aún así objetivos como el 10, tendrán que superar barreras y resistencias políticas a nivel internacional y nacional para poder ser implementado y realmente exitoso (Donald & Lusiani, 2016). La primera razón que postula Atkinson (2015) tiene que ver con las dificultades que enfrentan las personas en la vida, sin considerar la desigualdad de oportunidades que pueda existir. El autor incluso hace referencia a la “mala suerte” que podrían tener algunos sujetos de la economía. Por ejemplo, dos personas que perciben el mismo ingreso, pero una de ellas se ve forzada por factores fortuitos a generar un gran gasto o endeudarse, mientras que la otra puede ahorrar ese dinero o invertirlo en su desarrollo personal, mostrarán disparidades en el uso de sus recursos y, por consiguiente, en la libertad para lograr ciertos resultados. De acuerdo a Sen (2000), alcanzar cierto nivel de calidad de vida se ve coartado por las condiciones sociales en que se encuentra un individuo o que posee un país.

Y eso requiere, probablemente, que el Estado reciba más fondos de los sectores de mayores ingresos. Según consigna Emol, en el informe Chile se encuentra entre los tres países latinoamericanos (junto a México y Colombia) que se encuentran en los últimos lugares en indicadores de bienestar, tales como ingresos, desigualdad social, tasa de homicidios y conocimiento de sus estudiantes. 3“Los objetivos del Grupo del Banco Mundial son los de terminar la pobreza extrema y promover la prosperidad compartida. Promover la prosperidad compartida significa que trabajaremos para aumentar los ingresos y bienestar del 40 por ciento más pobre de la sociedad donde sea que estén, ya sea en las naciones más pobres, países de renta media o alta” Traducción propia. En el año 2000, 189 países miembros de las Naciones Unidas firmaron una declaración donde se comprometían a trabajar en una agenda para el desarrollo con ocho Objetivos del Milenio ( Fondo ODS, 2018). El reporte explica que «los resultados para la desigualdad de ingresos son consistentes en general en los países clasificados en la parte superior e inferior».

La mediana de los encuestados piensa que los trabajos mejor pagados son hasta 23 veces mayores que los peor remunerados, pero deberían ser máximo nueve veces más, mientras que la media del grupo de países es de nueve y cuatro, respectivamente. Así fue parte del discurso que dio el Presidente Gabriel Boric en la ONU presentado el martes, en el que afirmó que Chile se encuentra entre los países más desiguales del mundo. Ante esto, El Dínamo conversa con distintos expertos considerando el coeficiente Gini, una herramienta analítica que suele emplearse para medir la concentración de ingresos entre los habitantes de una región, en un periodo determinado.

La Brecha Digital El Nuevo Rostro De La Desigualdad En Latinoamérica

Las pequeñas empresas y los trabajadores poco cualificados tienen mayores dificultades y, por lo tanto, también se han visto más perjudicados por las restricciones de la pandemia. En el siguiente artículo, el medio The Conversation da a conocer cómo la pandemia ha afectado el desempleo y la pérdida de empleos en el continente, y el efecto que estas cifras tendrán a largo plazo en países que ya eran muy desiguales en la región. En medio de este panorama, el descontento social se ha expresado recientemente mediante votaciones anti-gobierno a lo largo del subcontinente y, en especial, con fuertes protestas callejeras en países como Chile, Colombia o Ecuador.

Estas rentas son muy importantes en Centroamérica, donde representan entre el 13% y el 20% del PIB, especialmente para los hogares más vulnerables. Entre el 80% y el 90% de las remesas se destinan a cubrir necesidades básicas de los hogares, como la alimentación o la salud. El resultado de la disminución de los ingresos públicos y el incremento de los gastos ha sido un incremento del déficit público y de la deuda pública. Brasil y Argentina son los países con mayor nivel de deuda (en torno al one hundred desigualdad opinion pc del PIB) y de déficit público (superando el 10% del PIB) en 2020. Si la recaudación de impuestos se vio afectada por el cierre de actividades y por la caída del consumo, también se han incrementado los gastos públicos. Cabe destacar los gastos destinados a afrontar los impactos sociales del coronavirus.

El ritmo de reducción de la desigualdad se desaceleró en años recientes a pesar del rol de los sistemas de protección social. 18 países de América Latina se mantuvieron en 0,forty six en 2017 mostrando un estancamiento tomando en cuenta índices previos luego que en 2002 la cifra fuera de 0,fifty four. El segundo año de la pandemia del COVID-19 disparó la pobreza extrema en Latinoamérica hasta alcanzar a 86 millones de personas, cinco millones más que en 2020 y la mayor cifra en 27 años, apuntó este jueves un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Además de analizar la evolución reciente de la desigualdad socioeconómica en la región, Abramo aborda en la entrevista la distribución del uso del tiempo entre hombres y mujeres, las brechas presentes en las distintas etapas del ciclo de vida y la situación de las personas afrodescendientes.

Una aproximación de derechos fundamentales con una comprensión interseccional de los distintos tipos de exclusiones que las tecnologías promueven y clausuran es la única manera de hacer frente a la desigualdad a la que millones de personas están siendo sometidas en el continente. Solo así, las nuevas tecnologías quizás puedan convertirse en un issue que ayude al cierre de las brechas que enfrentamos ahora. En Chile, la implementación de sistemas de identificación biométrica en el sistema nacional de salud preocupa por las posibles limitaciones que podría generar a poblaciones marginadas y empobrecidas -e incluso a personas mayores, por la pérdida de legibilidad en rasgos como las huellas digitales- para su acceso a servicios básicos de salud.

En Bolivia, el triunfo electoral del candidato del MAS, Luis Arce, parece haber clausurado la crisis política desatada el año pasado. Tras conocer las cifras, el economista y ex tesorero de la República, Hernan Frigolett, señaló que el lento retroceso de la desigualdad se explica por el bajo crecimiento económico en la región. Con relación a la desigualdad, el informe asegura que aumentó entre 2019 y 2020, rompiendo una tendencia decreciente que venía desarrollándose desde el año 2002, pero que ya en la década de 2010, ya había perdido el ritmo de forma progresiva. En esa misma línea, el texto explica que el incremento de la pobreza extrema es consecuencia de “una reducción de las transferencias de ingresos de emergencia que no se compensan con el aumento de los ingresos por trabajo”. “La recuperación económica de 2021 no ha sido suficiente para mitigar los profundos efectos sociales y laborales de la crisis sanitaria”, dio la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, en la presentación virtual del documento. La última edición del informe Panorama Social de América Latina, elaborado por la Comisión Económica de América Latina y el Caribe (Cepal), que analizó la evolución de la pobreza, el gasto y la inclusión social, reveló que Chile mantuvo sus altos índices de desigualdad.

Los altos niveles de desigualdad y el bajo crecimiento económico que caracterizan a la mayoría de los países de América Latina constituyen una trampa de la cual la región no ha logrado salir. Pese a importantes avances sociales y económicos en las últimas décadas, como la disminución de las tasas de pobreza y la ampliación de los sistemas de protección social, la región continúa siendo la segunda más desigual del mundo y nuestras economías se caracterizan por sus bajos niveles de productividad. El término de “‘brecha digital”, que de acuerdo a Norris (2001), describe las desigualdades en el acceso a las TIC, ha venido cobrando relevancia en el contexto del a pandemia. Estas disparidades abarcan aquellas que se dan entre los países desarrollados y aquellos en desarrollo, como las que surgen al interior desigualdad mundial 2022 de grupos sociales en los países, entre hombres y mujeres o entre los grupos más ricos y los que están en condición de pobreza. La brecha digital de género se refiere a la diferencia en el uso y acceso a las TICS entre mujeres y hombres, pero incluye también la desigualdad en cuanto a la creación y publicación de contenidos, la participación y la presencia en la pink.

La excepción es Santiago, cuyo patrón de segregación residencial socioeconómica, a gran escala todavía pese a su descenso reciente, sí permite imputar a un conjunto de comunas de la zona oriente la condición de nicho histórico de la élite. A escala particular person, dos relaciones conceptuales entre la movilidad diaria para trabajar y las características laborales y socioeconómicas de los ocupados son relevantes para los propósitos de este documento. La primera se vincula con la naturaleza del vínculo laboral y la segunda con el nivel socioeconómico. El presente trabajo procura evaluar empíricamente las hipótesis antes expuestas usando micro-datos censales de la ronda de 2000 en los que se incorporó la pregunta pertinente para medir movilidad cotidiana. Por ello, se trabajará casi exclusivamente con bases de microdatos censales en formato REDATAM, que serán procesadas justamente con este programa. Ocasionalmente, y sólo para efectos de apoyo, se usarán otras fuentes como encuestas de hogares.

En efecto, deben considerar a la vez la localización de los grupos socioeconómicos y la ubicación de los empleos, pues su interacción es la que finalmente determina los patrones de movilidad diaria. Y tales supuestos difícilmente se verifican en las ciudades de la región (Polése, 1998), en explicit por el alto grado de informalidad que predomina en ellos y las marcadas asimetrías que existen entre los actores relevantes de ellos. Desde la tradición liberal, John Rawls afirma que “la justicia es la primera virtud de las instituciones sociales, como la verdad lo es de los sistemas de pensamiento”. Por su parte, la filósofa Nancy Fraser habla de la paridad participativa y postula que la justicia exige unos acuerdos que permitan que todos los miembros de la sociedad interactúen en pie de igualdad, tanto a nivel de redistribución como de reconocimiento. Y afirma la necesidad de una distribución que garantice la independencia y la voz de todos. Pero esta condición no se remite solo a diferencias en calidades de vida, ya que tiene asociado un conjunto de problemas que implican, especialmente, trabas a la justicia, a la convivencia y al desarrollo económico.

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También ratifica el hallazgo del gráfico 1, vale decir, en Santiago y México los asalariados de menor nivel socioeconómico registran la mayor probabilidad de trabajar en la misma comuna, lo que no ocurre en Sao Paulo y Rio de Janeiro. El gráfico 1 ofrece evidencia primaria respecto de ambas preguntas, usando como indicador la probabilidad de ser «no móvil o no conmutante», que son sinónimos en este documento, es decir, de trabajar en la misma comuna de residencia. Los cuentapropistas son, en cambio, quienes tienen mayores índices de «no movilidad», estando los empleadores en una situación intermedia. Así, persistiendo el desafío de identificar o elaborar teoría urbana que sea capaz de explicar este comportamiento, los datos sugieren que, en principio, los factores que provocan la movilidad se hallan en un plano más institucional o empresarial (localización de puestos de trabajo y de vivienda), que en uno más particular person o de libre opción. Esta situación, a su vez, limita las posibilidades de progreso de las sociedades, ya que se pierden capacidades de generación de nuevos negocios y otras instancias de mejora del bienestar de la sociedad. Por último, la desigualdad tiende a causar situaciones de conflicto social que, a su vez, pueden derivar en consecuencias que afectan las posibilidades de desarrollo, ya sea a través de situaciones de inestabilidad política o por el tipo de políticas económicas implementadas.

“Cuando miramos la diferencia entre grupos de personas y no solo los promedios -explicó Marcela Ríos, coordinadora del área de gobernabilidad del Programa en el país-, Chile cae catorce puntos en el rating y es el país más desigual entre los cincuenta países de desarrollo humano alto. (…) las personas –añadió- reconocen desigualdades en el trato y de privilegios que están en la base del malestar social”. En otro apartado, el informe constató que en la Región Metropolitana de Santiago ha habido una mejora durante quince años, pero las diferencias entre las comunas son persistentes y han aumentado. El Informe Regional de Desarrollo Humano plantea que, para abordar los desafíos de la alta desigualdad y el bajo crecimiento, los países de América Latina deben abordar la complejidad de las interacciones entre estas variables. Se plantea que un punto de entrada para abordarlas es el diseño de sistemas de protección social que sean universales, más inclusivos y redistributivos y fiscalmente sostenibles.

La diferencia urbano-rural es menor en Chile que en los otros países y la magnitud de la brecha se ha reducido mientras que en los otros se ha mantenido constante. Al introducir el elemento étnico (Gráfica 3) observamos que los grupos indígenas tienen mucha mayor prevalencia de analfabetismo/no escolaridad que el resto y que la reducción ha sido importante en ese grupo. En Perú el analfabetismo en personas con lengua materna indígena es tres veces mayor que para el país en common y cinco veces mayor que para los que hablan castellano (21% en 2007 y 16% en 2017). En Colombia el analfabetismo entre los indígenas period casi cuatro veces el del promedio nacional en 2005 y three.5 veces en 2017, con tasas del 30% y 17% respectivamente.

Entre las mujeres urbanas, la brecha étnica es mucho más visible, pues varía entre 14 p.p. La brecha entre la región urbana y rural es profunda y constante en los países de la región. No obstante, es importante señalar que algunas intersecciones agravan y otras atenúan las brechas entre el área urbana y rural.

Cepal Lanza Nuevo Informe De Desigualdad En Latinoamérica Y Recalca Que «la Superación De La Pobreza En La Región No Exige Solamente Crecimiento Económico»

En términos políticos ha estado en permanente conflicto armado y con un amplio historial de gobiernos militares. En el contexto de la guerra fría, en la década del año 1980, el país se convirtió en una importante zona estratégico-militar para los EEUU, generando serios conflictos internos. A día de hoy, el 62,3% de la población de América Latina (408 millones de personas) cuenta con dos dosis, pero la distribución es todavía muy desigual dentro de la región. Con más de 55,7 millones de casos y cerca de 1,5 millones de muertes en dos años, Latinoamérica es una de las regiones más afectadas en términos sanitarios y económicos por el COVID-19, que provocó en 2020 una contracción del Producto Interior Bruto (PIB) del 6,eight % -la mayor en one hundred twenty años-.

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«Es que en Chile hay otros factores, como la insatisfacción con el sistema de pensiones», contesta la investigadora. Y en el otro lado del espectro hay dos países que han seguido un camino muy diferente. Para esta ONG «las élites latinoamericanas no se han destacado por su compromiso por sus países», al contrario en muchos de los países de América Latina, no existe impuesto al patrimonio o los impuestos al lujo son bajísimos. La implementación de programas que condicionan el acceso a servicios básicos por medio de vigilancia estatal y privada agudizan la inequidad imperante en el continente.

De esta manera, la movilidad diaria parece tener nexos con el funcionamiento del mercado de trabajo y con el nivel de ingreso de las personas. Y contra las imágenes iniciales o típicas, no son los más pobres o los informales los que conmutan más, sino aquellos con más educación y más formales. Lo anterior no significa forzosamente que los conmutantes de clase alta viajen más o gasten más tiempo en sus desplazamientos diarios para trabajar. Esta visión de las metrópolis latinoamericanas está ciertamente influenciada por estudios previos del autor con la ciudad de Santiago de Chile (Rodríguez, 2007a, 2007b y 2006a), basados en los resultados del censo de 2002, que incluyó, por vez primera, la consulta sobre comuna en la que trabajan o estudian las personas.

En Argentina, la provincia de Salta firmó en 2017 un acuerdo con Microsoft para utilizar inteligencia artificial en la prevención del embarazo adolescente y la deserción escolar. Según la empresa, a partir de datos recolectados por medio de encuestas a sectores vulnerables de la sociedad “los algoritmos inteligentes permiten identificar características en las personas que podrían derivar en alguno de estos problemas y advierten al gobierno para que puedan trabajar en la prevención de los mismos”. Los datos recabados son procesados por servidores de Microsoft distribuidos alrededor del mundo y el resultado de ese procesamiento apunta específicamente a las adolescentes identificadas como personas bajo riesgo, afectando no solamente su privacidad, sino también su autonomía y generando amplio potencial de discriminación. Se trata, finalmente, de un mecanismo dirigido de management sobre personas en situación de vulnerabilidad que son expuestas a intervenciones sin su consentimiento, reforzando la vulnerabilidad de las personas que son privadas incluso de la posibilidad para decidir sobre esas intervenciones.

Sobre ambos asuntos, la localización de la población según condición socioeconómica y la ubicación de los puestos de trabajo, hay un amplio debate en la actualidad. Con todo, el enfoque de la «ciudad dual» se opone a esta visión de fragmentación y dispersión policéntrica (Holt-Jensen, 2002). Las remesas de los trabajadores latinoamericanos desde fuera de la región se redujeron un 19,3% en 2020 según el Banco Mundial.

Así, Daron Acemoglu y James Robinson argumentan que las brechas socioeconómicas afectan negativamente el desarrollo de los países cuando se traduce en un acceso, también desigual, al poder político; este mecanismo se relaciona con la potencial captura de rentas por parte de la élite y el bloqueo de oportunidades de desarrollo para el resto de la población. Estos ciclos de alza y baja pueden observarse a través de la evolución del coeficiente de Gini, el cual es un indicador que se encuentra entre 0 y 1, donde un mayor número indica más desigualdad en la dimensión de los ingresos. Llama la atención que en ningún período de nuestra historia el coeficiente haya estado en un nivel comparable a los que muestran los países actualmente más desarrollados (figura 1). Esta persistencia en el tiempo contrasta con el avance de otros indicadores sociales y económicos, los que han permitido reducir significativamente la pobreza en el país.

Los países con las peores cifras son Argentina, Colombia y Perú, en donde ambos índices crecieron siete puntos porcentuales o más, mientras que Brasil fue el único que mejoró, con una caída del 1,8% en la pobreza y 0,7% en la pobreza extrema. La subida de la pobreza extrema es «consecuencia de una reducción de las transferencias de ingresos de emergencia que no se compensan con el incremento de los ingresos por trabajo», explica el documento. El reporte «Panorama Social de América Latina» estimó que la tasa de pobreza extrema creció del 13 desigualdad legal,1% al thirteen,8% en 2021, mientras que la pobreza disminuyó del 33% al 32,1%, alcanzando a 201 millones de latinoamericanos. «A pesar de haber habido intentos de inclusión, eso todavía permea. Y los países donde menos desigualdad hay son los que no tienen una diversidad étnica y racial tan marcada», compara, señalando como ejemplos los casos de Argentina, Costa Rica o Uruguay.

En conclusión, en los tres países las oportunidades de educación son muy distintas para el campo y la ciudad. La penalidad de la ruralidad es bastante menor para los que no se identifican con ninguna etnia en Colombia, mientras que en Chile la penalidad de la ruralidad es parecida para los indígenas y no indígenas, y en Perú esta depende del género. De hecho, en Chile las brecha urbano-rural se profundiza un poco para las mujeres, mientras que en Perú la brecha se profundiza dramáticamente. Finalmente, La región no genera mucha variación en las brechas urbano rurales de Perú, excepto para mujeres, mientras que en Chile hay una variación un poco más significativa y en Colombia hay una variación regional mayor en las brechas urbano-rurales.

No obstante, mi invitación es que incluso cuando casi toda la desigualdad subnacional se explica por la composición de las regiones, existe una fuerza causal regional en acción. La descomposición ratifica la idea que la naturaleza de la desigualdad subnacional es muy distinta entre países y que cambia en el tiempo, a pesar que en términos absolutos la magnitud de la brecha entre la región con más analfabetismo/escolaridad y menos analfabetismo/escolaridad es parecida. Como vemos en la tabla 2, la diferencia entre la región andina y la región Caribe en Colombia en la tasa de analfabetismo era desigualdad social pobreza el 8% en 2005 y 5% en 2018. En Perú, la diferencia en la tasa de analfabetismo entre la Costa y la Sierra era de 9% en 2007 y 7% en 2017.

A raíz de ello, tanto el grado de desigualdad como la tendencia pueden estar mal calculados. Frente a esto, los conflictos políticos y económicos visibles en la región se han centrado en la pugna sobre el acceso y explotación de los recursos naturales. Estos conflictos ponen en debate los débiles modelos de democracia vigentes en nuestros países y minan la confianza de la población en los gobiernos, las instituciones y en su entorno. Se ve una correlación importante entre ciudadanía política y civil (0.68), pero además resulta evidente la menor percepción de acceso a esos derechos en las comunas del sur del Gran Santiago, las más pobres y con mayor vulnerabilidad (comunas como La Pintana, La Granja y San Ramón). Elocuentemente, el Sur del Gran Santiago y especialmente algunas de sus comunas más emblemáticas, presentaron bajo el sistema de voto voluntario tasas reales de participación política significativamente más bajas que las de otros sectores de la ciudad (PNUD 2015). Se trata también de municipalidades con mayor presencia de desafiantes territoriales al estado, fundamentalmente bandas de crimen organizado dedicadas al microtráfico y con creciente control territorial (véase CIPER 2021).

Son personas que se ganan la vida día a día, sin contratos ni derechos laborales; por esto, han estado, además, más expuestas al coronavirus. Para finalizar el análisis volcamos la mirada a las diferencias que hace vivir en una región u otra. En el agregado, la brecha regional es una de las más pequeñas y es parecida entre los países. En Colombia la diferencia entre la región con mayor y menor analfabetismo period de 8% en 2005 y 5% en 2018.

En el área rural se siente más la brecha étnica especialmente entre las mujeres (10 a 13 p.p. para 2002 y three a 8 p.p. para 2017), y en los hombres pero sólo de la región Sur. Entre los dos censos la diferencia entre etnias se ha reducido, aunque subsiste entre las mujeres de la región sur. Los enfoques cuantitativos aportan a la interseccionalidad porque ayudan a identificar atributos o características de las personas o del contexto que resultan influyentes en la asignación de privilegios o recursos y que no estaban previamente en el radar de los investigadores.

Tanto es así, que por ejemplo, un país más igual no tiene por qué ser sinónimo de un país mejor o más justo. De hecho, puede ocurrir que en un país las personas sean todas más pobres y, por lo tanto, son más iguales. «Al ultimate lo que la gente percibe como desigualdad, es la desigualdad de acceso a servicios como la salud, la educación, el transporte o la seguridad en los barrios», le cube a BBC Mundo Luis Felipe López-Calva, director del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD.

Banco Mundial: Chile Es El Décimo País Más Desigual De Latinoamérica Y El Segundo Con Mayor Pib Per Cápita

Los modelos tradicionales de regresión lineal tienen una lógica unitaria y aditiva, mientras que la introducción de términos de interacción no resuelve el problema de la aditividad. El apéndice incluye un resumen de las metodologías cuantitativas típicamente utilizadas en el estudio de la interseccionalidad. El concepto de interseccionalidad fue acuñado inicialmente por Crenshaw (1991) para evidenciar que la experiencia de las mujeres afrodescendientes period fundamentalmente distinta a la de las mujeres por un lado y de los afrodescendientes por otro. La intersección alude así a una noción multiplicativa y no aditiva de la desigualdad, pues, en otras palabras, las mujeres negras –para continuar el ejemplo– sufren una opresión mayor a la de la suma de ser mujeres y negras por separado. Frente a la tendencia global de una mejora en los indicadores, hay algunos en los que se constata un empeoramiento, y en particular el que se refiere al tiempo dedicado al ocio, a las actividades personales o a las interacciones sociales.

Si el efecto de cada uno de las categorías sobre la variable dependiente es importante, el efecto de la intersección es necesariamente menor. Es decir que los efectos de la interacción dependen del tamaño de los efectos de cada variable por separado. De este modo, si el efecto de las categorías por separado es bajo, la intersección probablemente no será significativa (Bowleg 2012). Esto dista de ajustarse al enfoque interseccional porque cada categoría se concibe como “independiente, distinta, mutuamente excluyente”, y el efecto de la variable de interés sobre el desenlace es el mismo entre distintas razas y géneros. De este modo, distinguir entre el componente composicional y el interseccional no solo ayuda a identificar cuáles son las políticas públicas apropiadas para cerrar la brecha, sino que también ayuda a identificar los agentes que la producen y reproducen. Tanto agentes y procesos dentro y fuera de la región, actuales e históricos, confluyen en crear la desigualdad regional.

En Colombia el analfabetismo rural es 3.8 veces el del urbano en ambos años, pero la reducción ha sido más significativa, pues éste pasó del 18.8% al 11.7%. En Chile el porcentaje de los que no han tenido educación básica en el sector rural es 2.6 veces el del sector urbano en 2007 y 2.3 veces en 2017. La diferencia urbano-rural es menor en Chile que en los otros países y la magnitud de la brecha se ha reducido mientras que en los otros se ha mantenido constante. Brasil, la Argentina, Colombia, México y Perú forman parte de los 10 países más golpeados por el coronavirus.

Además, pese las señales de recuperación económica en 2021, se evidencia que no está centrada ni en la igualdad ni en la sostenibilidad ambiental, y se manifieta en un contexto de permanencia de los retrocesos en el desarrollo social, opina la Cepal. Aun así, no se puede olvidar la medición de la riqueza aporta elemento más allá del efecto coyuntural de la pandemia, pues también permite un acercamiento a los factores estructurales que inciden en la reproducción de la desigualdad en el tiempo. Pero aunque la medición de la extrema riqueza aporta a la caracterización de la desigualdad, refiere el organismo, la valoración del patrimonio de los más ricos tiene limitaciones y la Cepal para sus cálculos utiliza las estimaciones de Forbes. En el caso de Chile (dato para 2015), la participación del 1% más rico en el ingreso complete desigualdad social ejemplo, también medida por las encuestas de hogares, alcanzaba a 7,5%, proporción que subía a 22,6% considerando la información de los registros tributarios y a 26,5% en el caso de la riqueza neta (activos financieros y no financieros menos pasivos).

El movimiento de mujeres latinoamericano se ha caracterizado por la capacidad de construcción, el aporte de propuestas y una gran incidencia política y social. Esto se refleja en el Consenso de Montevideo, los acuerdos en torno a la Plataforma de Acción de Beijing, la articulación que ha promovido en torno a los derechos sexuales y reproductivos, la identidad de género, la economía del cuidado y la participación política paritaria, entre otros temas fundamentales. El análisis del caso de Chile y de la desigual distribución en la percepción de acceso a distintos derechos de ciudadanía que hemos discutido en esta nota, ilustra por qué su disaster reciente tomó por sorpresa a quienes convencionalmente veían al país como una democracia liberal de calidad a nivel regional. Si bien aquella perspectiva es interesante y valiosa, y puede también ser analizada en clave sub-nacional, el enfoque predominante deja de lado la atomización de la experiencia ciudadana, a nivel cotidiano y native, con las promesas de la democracia liberal. Nuestra incapacidad para mapear e incorporar al análisis este sustrato basic de la legitimidad del régimen liberal-democrático, equivale a las dificultades que poseen hoy los políticos nacionales para estructurar la representación y canalizar el malestar ciudadano en sociedades tan fragmentadas como las contemporáneas.

En primer término, los Estados concedieron derechos civiles básicos (como el derecho a la libre circulación, derechos de reunión y de prensa, a la seguridad, al acceso a la justicia y el estado de derecho). A pesar de mejoras en las últimas décadas, muchos trabajos en América Latina aún se caracterizan por salarios bajos, condiciones laborales extenuantes o peligrosas y jornadas laborales prolongadas. Esto es particularmente evidente para una amplia proporción de la población que trabaja en la economía casual. La OCDE recomienda a los países de la región intensificar sus programas activos del mercado laboral, mejorar los sistemas de protección social, afinar su normativa de seguridad laboral y en el lugar de trabajo, y fomentar la aplicación de las leyes laborales. Además de analizar la evolución reciente de la desigualdad socioeconómica en la región, Abramo aborda en la entrevista la distribución del uso del tiempo entre hombres y mujeres, las brechas presentes en las distintas etapas del ciclo de vida y la situación de las personas afrodescendientes.

En cifras gruesas, según estimaciones de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL, 2020), sobre un complete de 620 millones de personas, 215 millones quedarían en la pobreza. El artículo se cierra analizando si se aplica a Chile la explicación que ha dado Thomas Picketty para el aumento exponencial de la concentración de la riqueza en los últimos 50 años en el mundo. Esto es, que las tasas de retorno del capital (que constituyen gran parte de los ingresos de la elite) son superiores a las tasas de retorno del trabajo (que constituyen gran parte de los ingresos del 99% de los ciudadanos del mundo). En Chile, sin embargo, faltan datos para corroborar si este fenómeno ocurre y explica la extrema desigualdad. De hecho, el estudio da cuenta de que los datos tributarios de las personas parecen no recoger a cabalidad los ingresos corporativos, por lo que a los autores les parece urgente comprender mejor, en el contexto chileno, cómo operan esos ingresos que se reportan como corporativos, pero que se usan con propósitos personales. Mientras la brecha entre ricos y pobres se incrementa en el mundo, América Latina sigue siendo la región donde la riqueza se distribuye de forma más desigual.

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Pese a que Latinoamérica continúa siendo la región más desigual del mundo, la brecha ha disminuido y la caída entre 2002 y 2013 fue enorme y única, solamente comparable a la que tuvieron los países desarrollados en la posguerra. «En varios países latinoamericanos, así como en Estados Unidos, un gran elemento racial (?) jugó un rol en al menos una dimensión de la desigualdad», sostiene el execonomista jefe del Banco Mundial y actual profesor de la Universidad de Columbia, en Nueva York. La noción de igualdad promovida por la Cepal, según explicó, se refiere no solo a la igualdad de medios, ingresos o propiedad, explica la funcionaria. También alude a la igualdad en el ejercicio de derechos, a la igualdad en el desarrollo de capacidades y autonomías y a la igualdad de género, étnica, racial y territorial, entre otras. De hecho, el libro también menciona la revuelta social en Chile, que se inició en octubre de 2019. El documento estudia la experiencia latinoamericana para mostrar los costos económicos, políticos y sociales de la desigualdad.

«América Latina sigue siendo la región más desigual del mundo, a pesar de importantes avances realizados por los países durante la primera década y media del siglo XXI», señala Laís Abramo, Directora de la División de Desarrollo Social de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en el noveno capítulo del programa «Horizontes Cepal». A poco más de cuatro meses de asumir el presidente Gabriel Boric, la promesa de construir un nuevo pacto social sigue en deuda. Había algarabía en los miles de rostros y la esperanza de que se daban los primeros pasos en un camino por construir. Ignorábamos que los tanques y la brutalidad masificada cortarían de raíz los sueños. La cara entumecida de una niña en un recodo de La Pintana, población en la periferia, me da la clave. Son miles los jóvenes de ayer que hoy demandan pensiones dignas, sistema de salud common desigualdad social en la actualidad.

“Es fascinante esto porque quiere decir que la desigualdad cayó en países con tasa de crecimiento alta y con tasa de crecimiento baja; en países que tenían el auge de materias primas y aquellos que eran importadores netos de materias primas, en países gobernados por la izquierda y países gobernados por la derecha. Hay una generalización que deberíamos poder explicar más allá de características típicas del período”, destacó. Promedio en puntajes de acceso percibido a derechos de ciudadanía en América Latina. Es decir, si bien en Chile la mayoría prefiere la democracia, la insatisfacción con ella es creciente. Esta evolución es compartida con la mayoría de los países latinoamericanos (LAPOP 2021). La incidencia de la informalidad en el ámbito laboral en América Latina y el Caribe es una de las más altas a nivel mundial, reconoció desde hace tiempo la Organización Internacional del Trabajo.

En specific, en la mayoría de los países donde la desigualdad total descendió durante la década del 2000, los retornos a la educación primaria, secundaria y terciaria, respecto de ninguna escolaridad o escolaridad primaria incompleta, también descendieron. Descomponiendo los datos para encontrar los factores que explican esta disminución tan importante de la desigualdad, se observa que, en promedio para la región, un 62% está asociada a la caída en la desigualdad del ingreso laboral. “Esto ya da una pauta de dónde tenemos que buscar las causas, porque si 2/3 se explican por lo que pasó con el ingreso laboral, ése es el camino para entender los determinantes de ese periodo”, dijo. Esto es una evidencia más de que la desigual distribución territorial y socioeconómica de la capacidad estatal permea significativamente la experiencia cotidiana que segmentos importantes de la ciudadanía posee respecto a la promesa de un acceso básico al paquete de derechos que promete la democracia liberal. ‘Frente a este escenario la región no aguanta políticas de ajuste y requiere de otras que estimulen el crecimiento y reduzcan la desigualdad. Las condiciones actuales necesitan que la política fiscal se centre en la reactivación del crecimiento y en responder a las demandas sociales’, dijo antes de la alarma sanitaria Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva del ente.

Pero esta condición no se remite solo a diferencias en calidades de vida, ya que tiene asociado un conjunto de problemas que implican, especialmente, trabas a la justicia, a la convivencia y al desarrollo económico. Chile ha sido un país de muchas diferencias sociales a lo largo de toda su historia. Al igual que otras naciones de América Latina, su origen se remite a la Colonia, cuando se constituyeron las instituciones que la inician, como la concentración en la propiedad de la tierra y la relación jerárquica entre la clase alta y el bajo pueblo. «Existe un vínculo indirecto entre populismo y pandemia, a través de la disaster económica y social. Ante las frustraciones económicas que va a dejar el coronavirus, pueden fortalecerse este tipo de liderazgos, que vemos en América Latina y en el mundo. Pueden crecer los discursos antisistema a partir de esas frustraciones», afirmó Negri.

El enfoque apunta entonces a no privilegiar un marcador determinado, sino a explorar en cada contexto los aspectos que puedan ser constitutivos para las relaciones de poder. Desiguales destaca el rol que le cabe a la política pública en igualar el acceso a los servicios sociales, reducir la concentración del ingreso en el 1% más alto y romper el vínculo entre el dinero y la influencia en las decisiones públicas. OECD (2012) postula la necesidad de reformas tributarias que combinen ajustes en impuestos (algunos hacia la baja, otros al alza) con políticas de subsidios al trabajo de los sectores de menores ingresos. La desigualdad es un desafío ético porque implica una injusticia, ya que todos tenemos una dignidad por ser personas y el derecho a participar de los bienes y servicios que se producen en la sociedad; y es injusta porque esta realidad podría ser distinta mediante políticas públicas.

Claves Para Abordar El Alto Costo De La Inseguridad Alimentaria En América Latina Termómetro Económico Y Social De Latinoamérica El País América

Una enorme pista en este campo llegaría a raíz de un ensayo social iniciado en 1994, cuando el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos lanzó el programa “Moving to Opportunity”. Complementariamente, sobre el ODS 14 “Vida Submarina”, Karina Toledo precisó que “refleja el trabajo pionero desarrollado por nuestra Escuela de Ciencias del Mar para contribuir al desarrollo de la ciencia y de la tecnología en el mejor uso y conservación de los ecosistemas acuáticos y sus recursos”. “Impactos del estallido social y la pandemia en el bienestar urbano”, se llama el sondeo realizado por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), donde se midió la reacción de la ciudadanía ante estos hechos ocurridos entre finales del 2019 y el 2021.

La Asamblea General, en su Plan para la Ulterior Ejecución del Programa 21 de 1997 (párrafo 27), decidió que la erradicación de la pobreza sería uno de los temas primordiales del desarrollo sostenible en los próximos años. Se trata de uno de los objetivos fundamentales de la comunidad internacional y de todo el sistema de las Naciones Unidas. La erradicación de la pobreza se aborda en el capítulo II del Plan de Aplicación de las Decisiones de Johannesburgo (2002), en el que se subraya que la erradicación de la pobreza constituye el mayor desafío que enfrenta el mundo en la actualidad y un requisito indispensable del desarrollo sostenible, en specific para los países en desarrollo. En la Encuesta Casen se recoge y procesa la información en conjunto con otras instituciones.

Son los llamados Indicadores de pobreza y condiciones de vida a nivel subregional, y esta comarca sale, francamente, mal parada. Para salir de la pobreza, el 75% de los argentinos considera imprescindible “acceder a un trabajo en blanco”, cifra que trepa al 78% entre quienes pertenecen a los niveles socioeconómicos más desfavorecidos. Sin embargo, 6 de cada 10 encuestados considera que tiene pocas o ninguna chance de tener un empleo en esas condiciones, un escenario que se agudiza en los sectores bajos, donde el 76% declaró que su situación económica le impide tener esta posibilidad. Para Agustín Salvia, doctor en Ciencias Sociales y director del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, está claro que las demandas sociales de los argentinos están fundamentalmente dirigidas a mejorar no solo las condiciones de vida presentes, sino futuras.

Ambos indicadores muestran mejoras en comparación con mediciones anteriores y son los mejores resultados de su serie. Las regiones que presentan las tasas más bajas de la pobreza multidimensional son Magallanes (6,9%), Aysén (14%), Biobío (14,1%) y Maule (15%). Mientras que entre las que superan el promedio nacional encontramos a Tarapacá (23,8%), Atacama (20,3%), La Araucanía (19,8%) y Los Lagos (19,7%). La institución continúa colaborando estrechamente con los países para ayudarlos a encontrar las mejores maneras de elevar el nivel de vida de sus ciudadanos menos favorecidos. Intentan disimular la inferioridad de su situación en su entorno y mantienen relaciones distantes con los que tienen una situación comparable.

Para el equipo de Chetty queda claro que el experimento tuvo impactos significativos en los participantes, particularmente en los niños, lo que sugiere que MTO contribuyó a reducir la desigualdad. Grusky cree que el experimento ofreció la evidencia más convincente de que los vecindarios son realmente importantes en los niños. Llevaron a cabo una revisión del estudio original en el que hacían seguimiento a los hijos de las familias que se cambiaron de vecindario con Moving to Opportunity. Sin embargo no se observaron efectos significativos en el empleo de los adultos o en la educación de los niños.

Tras décadas de avances, el ritmo de reducción de la pobreza mundial comenzó a disminuir en 2015, a la par de un crecimiento económico moderado. El Objetivo de Desarrollo Sostenible de poner fin a la pobreza extrema para 2030 sigue siendo inalcanzable. Alrededor de 700 millones de personas viven con menos de USD 2,15 al día (la línea de pobreza extrema).

Consideramos por lo tanto que la lucha contra la pobreza es el mayor reto que tenemos que enfrentar las sociedades en la actualidad. Un desafío para la humanidad que debe encontrar en la ética la semilla que haga surgir tanto en políticos, religiosos, economistas, y sociedad en basic, una nueva manera no tanto para ver sino para escuchar el clamor y el hambre del pobre (Cortina, 2017). Por otra parte, y aunque Simmel no aborda directamente en este texto las experiencias vividas de la pobreza, su análisis le lleva, lógicamente, a presentar una de las dimensiones fundamentales de la situación de los pobres que deriva de la relación de asistencia. Cuando la colectividad combate la pobreza y la considera intolerable, su estatus social se devalúa y estigmatiza.

Esta sociología de la pobreza es en realidad una sociología de las relaciones sociales. Además, la pobreza puede tener un impacto negativo en la salud mental y emocional de las personas, ya que puede provocar estrés, ansiedad y depresión. Esto puede llevar a problemas de salud mental a largo plazo y puede afectar negativamente las relaciones interpersonales y la calidad de vida en common.

la pobreza social

Utiliza los datos, las evidencias y los análisis más recientes para ayudar a los países a formular políticas que mejoren la calidad de vida de las personas, con especial atención en los más pobres y vulnerables. En 2020, la disaster de la COVID-19 provocó el retroceso más significativo en la reducción de la pobreza mundial en décadas, ya que seventy one millones de personas más cayeron en la pobreza extrema ese año en comparación con 2019. En abril de 2020, las Naciones Unidas emitieron un Marco de la ONU para la respuesta socioeconómica inmediata ante el COVID-19 y crearon el Fondo del Secretario General de las Naciones Unidas para la Respuesta y Recuperación en relación con el COVID-19.

David Contreras explicó que el resultado en el ODS “Poner fin a la pobreza”, representa el compromiso institucional con el desarrollo de la comunidad, especialmente con los más vulnerables, a través de programas permanentes en alianza con organizaciones de los territorios donde estamos insertos y donde participan docentes y estudiantes. “Este trabajo de vinculación con el medio es una manifestación concreta del sello valórico institucional que caracteriza a la PUCV”. Estos resultados se dan en un contexto donde las instituciones de educación superior trabajan para contribuir a los desafíos más urgentes del planeta y en el que la PUCV busca fortalecer una cultura de sostenibilidad, mejorar su gestión ambiental, potenciar la vinculación con la comunidad la pobreza es y territorios. Por su parte, la directora de Vinculación Social y Sostenibilidad de nuestra institución, Karina Toledo, reconoció que este resultado es consecuencia de un trabajo de muchos años y que ha permitido avanzar decididamente “en la integración de la sostenibilidad en la PUCV, considerando su dimensión económica, social y medioambiental. En nuestra visión, actualizada recientemente después de 20 años, se explicita el compromiso institucional con el Desarrollo Sostenible y en el nuevo Plan de Desarrollo Estratégico se incorpora la sostenibilidad como un tema central y prioritario para el desarrollo institucional”. Mientras que la percepción de inseguridad aumento en 191 mil familias en 22 comunas de la Región Metropolitana.

En nuestro país, el 60% de las personas considera que la principal prioridad del Estado para asistir a quienes viven en situación de pobreza, debería ser crear oportunidades laborales, seguida por mejorar la educación (37%), ofrecer capacitaciones para el trabajo (30%) y asegurar la alimentación (20%). Por otro lado, solo un 7% cree que debería proporcionar un apoyo económico directo, como por ejemplo, a través de planes sociales. “Las consecuencias de la inseguridad alimentaria son de gran alcance, impactando no solo la salud, sino también el bienestar basic.

Es decir que cuanto más pobre es una persona, más difícil resulta encontrar oportunidades para cambiar su situación. Hay múltiples factores sociales, económicos e incluso psicológicos involucrados en la pobreza, la pobreza en la sociedad y también distintas formas de medirla y de comprenderla. Sin embargo, en líneas generales, se traza la línea del inicio de la pobreza cuando se padece la falta de medios fundamentales para la subsistencia.

¿tiene Solución La Desigualdad En Las Ciudades De Latinoamérica?

Las zonas rojas son las de menor puntaje, las amarillas cercanas al promedio, y las verdes de puntajes más alto. Respecto de la Agenda 2030, el diagnóstico que realizó el Consejo Nacional para la Implementación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible (2017b) estableció que de los eleven indicadores que presenta el ODS 10, el país cuenta actualmente con información solo para tres de ellos, 10.1, 10.2 y 10.3. Respecto de las primeras tres metas mencionadas, y como se puede observar en el Anexo 1, siete acciones públicas responden, ya sea en su totalidad o en algunos de sus contenidos, a la primera meta. Asimismo, se observa que también hay acciones públicas que responden a otras de las metas contempladas para el ODS 10, es decir, cinco de estas responden a la meta 10.four, una a la 10.5 y una a la 10.7. En este sentido, se destaca un claro enfoque en las metas 10.2 y 10.three, y por el contrario, que no existen acciones públicas que respondan específicamente a las metas 10.6, 10.a, 10.b y 10.c del ODS 10, al menos de acuerdo a lo informado por el Consejo Nacional para la Implementación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible (2018).

Este organismo publica en su sitio 6 , a su vez, las diferentes acciones públicas que se han realizado para cada uno de los objetivos, describiendo su aporte para estos fines determinados, como también informes sobre los avances en esta materia o diagnósticos previos y las resoluciones del Consejo. Otra crítica que ha recibido este objetivo tiene que ver con que no cuenta con un organismo temático o institución a nivel internacional para dirigir acciones en pro de este mismo, como tampoco para financiarlo ( Donald, 2017). Por lo tanto, se corre el gran riesgo de quedar rezagado al no existir muchas herramientas a nivel internacional para abordarlo (Donald & Lusiani, 2016). Además, esto permite que este ODS quede vulnerable desigualdad de paises a las interpretaciones u obstaculizaciones de otras instituciones ( Donald, 2017). La Convención Sobre los Derechos del Niño es un tratado internacional que existe para establecer las normas mínimas que aseguren la vida, el bienestar, la protección y la libertad de los niños y niñas. Los sistemas educativos deben procurar recursos financieros y no financieros para los alumnos de menores recursos para asegurar que todos los alumnos gocen de altos niveles de aprendizaje.

Los informes del PISA indican que sólo el 7% de los alumnos finlandeses se siente ansioso al estudiar matemáticas. Mientras tanto, en el rígido sistema de enseñanza de Japón, que ostenta altos niveles de desempeño escolar, se registran récords de suicidio entre estudiantes, con un índice que llega al 52%. «La preocupación central de la escuela finlandesa no es alcanzar récords de desempeño escolar, sino ayudar a desarrollar las aptitudes de un niño para formar individuos capaces de vivir vidas felices, dentro y fuera del trabajo», añade Sahlberg. Las estadísticas apuntan al éxito de la fórmula de aliar políticas educativas con políticas sociales, cube Sahberg. Por ley, todos los niños de zero a 6 años tienen derecho a un lugar en la guardería, ya sea tiempo parcial o completo. Después del periodo de permiso de paternidad, uno de los padres tiene derecho a permanecer en casa con el niño, si así lo prefiere, y recibir un apoyo de cerca de 450 euros al mes (US$525).

El grupo también está compuesto por Portugal, Nueva Zelandia, Austria, Eslovenia y Brasil, entre otros países. De acuerdo con el informe, lograr la igualdad jurídica de género requiere un esfuerzo establecido por parte de los gobiernos, la sociedad civil y las organizaciones internacionales. Las reformas jurídicas y regulatorias pueden servir como un acelerador importante para mejorar las vidas de las mujeres, sus familias y comunidades. La directora gerenta de Políticas de Desarrollo y Alianzas del Banco Mundial, Mari Pangestu, advierte que «si bien es alentador que muchos países hayan tomado medidas proactivas para ayudar a las mujeres a atravesar la pandemia, está claro que queda mucho por hacer, especialmente en materia de licencia parental e igualdad salarial».

Ciertamente hay muchos otros aspectos a considerar, si se tiene en cuenta la devaluación de la institucionalidad política, el empoderamiento de las comunidades y los cambios que trae consigo la automatización del empleo y la revolución digital. Es tarea de todos contribuir a superar los desigualdad capitalismo obstáculos y aspirar a un país más justo, próspero y solidario. Una condición necesaria para que se produzcan efectos duraderos en el tiempo es el tránsito a una cultura de respeto por la persona, por la igualdad de dignidad y respeto, y por los valores de justicia y solidaridad social.

Por otra parte, una condición que explica las desigualdades territoriales, se refiere al carácter concursable de muchos de los fondos de inversión y por el carácter estructuralmente desigual del financiamiento municipal, a pesar de la ecualización positiva producida por el Fondo Común Municipal (FCM). Esto es la “normalidad” que vemos todos los días, donde encontramos desarrollo del nivel de ciudades europeas en una comuna y subdesarrollo en otra comuna de nuestra  ciudad-región y a no más de 10 kilómetros de distancia. Las acciones que formarán parte de ese trabajo se van a planificar a partir de los resultados de la encuesta, la que se realizará durante el mes de agosto en la institución. Con la incorporación de nuevas integrantes y el desarrollo de iniciativas en contra del denominado micromachismo, la instancia sigue desarrollando su trabajo de cara al segundo semestre del año.

desigualdad de oportunidades ejemplos

En este sentido, el nivel de resultados obtenido por un sujeto influirá en la distribución acquainted futura y limitará nuevamente el nivel de resultados para esta nueva generación de individuos dentro de una economía, generando un círculo vicioso que irá incrementando las brechas económicas, como ya ha ocurrido en el mundo ( United Nations, 2020b). La primera razón que postula Atkinson (2015) tiene que ver con las dificultades que enfrentan las personas en la vida, sin considerar la desigualdad de oportunidades que pueda existir. Por ejemplo, dos personas que perciben el mismo ingreso, pero una de ellas se ve forzada por factores fortuitos a generar un gran gasto o endeudarse, mientras que la otra puede ahorrar ese dinero o invertirlo en su desarrollo private, mostrarán disparidades en el uso de sus recursos y, por consiguiente, en la libertad para lograr ciertos resultados. “La alta desigualdad en Chile no solo se refleja en los resultados del bienestar sino en las oportunidades y está claramente marcada por cómo nacemos. También hay evidencia robusta de que circunstancias como el género, la etnia o el origen social de las personas determinan los logros en la vida y esto significa que hay una deuda pendiente con los derechos humanos, económicos y sociales en el país”, explicó el especialista.

En estas unidades, donde las estadísticas han mostrado una participación creciente de las mujeres, es donde se hace más difícil su sobrevivencia, y las políticas son necesarias para que se hagan cargo de corregir o disminuir estos impactos negativos. Sin embargo, hay que considerar que la decisión de incorporar la equidad de género como criterio de política implica un largo proceso, cuyo objetivo último es lograr que en la definición de éstas se lleguen a considerar sistemáticamente los efectos diferenciados en hombres y mujeres de las acciones que se planifican. Desde ILC estamos convencidos que este desafío es tan grande, que sólo una acción coordinada de diversos actores nos permitirá abordar esta realidad.

La evaluación se hizo considerando los años 2015 y 2019 y, para ello, se utilizó la herramienta denominada NiMásniMenos, iniciativa diseñada por las Universidades de Talca y Adolfo Ibáñez, y que cuenta con la colaboración de nuestro servicio, de ONU Mujeres y Mercer. “…el Estado debe asumir un rol protagónico como garante y responsable de proteger integralmente a niños, niñas y adolescentes, entendiendo que la pobreza es un fenómeno multidimensional…”. «Ellos definen cuáles van a ser las zonas residenciales, cuáles van a ser las zonas recreativas y dónde se van a ubicar las zonas industriales o comerciales, es un excelente ejemplo de la planificación. Nosotros tenemos que perderle el susto a la planificación urbana, porque es la mejor forma de vivir, permite hacerse cargo de las inequidades que vemos hoy en la ciudad,  que están costando muy caro», advierte. Por ejemplo, Londres es una ciudad más grande que Santiago, pero que tiene una autoridad metropolitana que vela, simultáneamente, por tener excelentes buses, excelentes trenes, excelentes sistemas de ciclovías, tarifas a los automóviles y se preocupa de potenciar los espacios peatonales. Sin embargo, para él es importante que las autoridades se hagan cargo de la thought de que la ciudad no puede evolucionar de forma espontánea, «hay que lograr que la ciudad evolucione en la dirección planificada y que le haga bien a la ciudadanía».

Por esto, estamos trabajando en tres iniciativas en conjunto con instituciones especializadas para juntos lograr un real impacto en los jóvenes del país y seguir avanzando de forma colaborativa en este ecosistema en torno a la educación. Además de embellecer el entorno, este negocio fortalece la economía native, la calidad de vida de los recolectores y evita la disposición de la chatarra en rellenos sanitarios. Estas actividades están apoyadas por acciones de difusión y comunicación en diversos medios y redes sociales con el afán de posicionar los temas que involucran a personas mayores en nuestro país y tienen el objetivo de aportar a la inclusión de las Personas Mayores en la sociedad. Todas las empresas deben reconocer que los accionistas son solo un grupo, y que los intereses de otras partes, y el desarrollo sostenible más ampliamente, puede necesitar prioridad sobre la maximización a corto plazo del valor para el accionista. Los accionistas responsables, a su vez, reconocen y actúan en el entendimiento de que la maximización a largo plazo de los retornos puede implicar rendimientos más bajos en el corto plazo.

«Estas maniobras pueden no parecer muy dañinas, incluso pueden resultar naturales en las interacciones, pero su poder, devastador a veces, se ejerce por la reiteración a través del tiempo, y puede detectarse por la acumulación de poderes de los varones de la familia a lo largo de los años. Esas trampas son concepts, expresiones, gestos, actitudes y comportamientos cotidianos, interiorizados y justificados como naturales, que condicionan el día a día de la mujer y que se conocen como micromachismo. El término fue acuñado por el psicoterapeuta español Luis Bonino Méndez, en 1991, para definir aquellas prácticas que otros especialistas calificaban como «pequeñas tiranías», «terrorismo íntimo» o «violencia blanda». Tres de las muchas mujeres del mundo que una vez decidieron que nada para ellas period imposible y que la historia, y sobre todo su historia, podían ser diferentes. Otra mujer que producto de sus capacidades y trabajo logra un puesto históricamente ocupado por hombres y que le abre el camino a otras mujeres que quieran seguir sus pasos. «Impulsaremos todas las transformaciones que sean necesarias para avanzar hacia una educación verdaderamente inclusiva tanto en nuestra institución como en el país, como lo demanda nuestro compromiso con el derecho a la educación», expresó luego de obtener la victoria en la elección.

Menos del 5% de los estudiantes de Chile son capaces de alcanzar los niveles máximos de aprendizaje en la prueba PISA”. Cuando se focaliza en los estudiantes en el 5% más alto de los puntajes, 21% de estudiantes de colegios pagados, 2% de subvencionados y 1% de los públicos están en ese rango de puntuaciones. Es incorrecto atribuir las brechas de logro promedio entre escuelas de diferentes dependencias administrativas de las escuelas a diferencias en la calidad de la enseñanza.

La Brecha Digital El Nuevo Rostro De La Desigualdad En Latinoamérica

6Se refiere a la tendencia a diseñar políticas públicas y distribuir recursos privilegiando los habitantes urbanos, puesto que en gobiernos democráticos es racional para los políticos privilegiar esas audiencias y espacios en su búsqueda de votos y ser elegidos. No obstante, las ganancias de adoptar metodologías cuantitativas no vienen sin enormes desafíos. El más importante de ellos ha sido identificar un método que traslade a las variables explicativas una lógica interseccional y no unitaria, y que logre en el modelamiento estadístico una noción multiplicativa y no aditiva de sus efectos.

Santibañes sugirió que la región pierde importancia por motivos económicos y tecnológicos. «Una baja tasa de crecimiento, menor comercio, menor innovación, nos vuelven menos relevantes. Pero América Latina se está convirtiendo en un foco más relevante geopolíticamente por la presencia china, sobre todo en el Cono Sur. Y eso genera la necesidad de una política exterior responsable». En medio de las múltiples crisis superpuestas, la región no apela a mecanismos de integración y cooperación que la fortalezcan. Permanece dividida, fragmentada, con una política exterior descoordinada y desarticulada, guiada por la ideología, que se traduce en una pérdida de relevancia en medio de las crecientes tensiones entre China y Estados Unidos a nivel internacional.

desigualdad social en america latina

En hombres urbanos –tanto indígenas como no indígenas – la brecha regional es de máximo 3 p.p., al igual que para mujeres urbanas no indígenas, hombres rurales no indígenas, y curiosamente, mujeres rurales indígenas. La brecha regional se siente solo en hombres rurales indígenas (5 p.p. y 3 p.p. entre los dos años), mujeres urbanas indígenas (8 p.p. y 5 p.p. entre los dos años), y mujeres rurales no indígenas (7 p.p. y three p.p.). La brecha regional es mucho menor que en Colombia y se ha disminuido bastante para 2017. En Colombia hombres y mujeres rurales indígenas componen los 5 estratos con mayor analfabetismo, en Perú los cinco estratos con peor tasa de analfabetismo son de mujeres, four de ellos rurales y four indígenas. Y en Chile las mujeres rurales indígenas también constituyen 4 de los 5 estratos con menor escolaridad. En los distintos países ser mujer, indígena y rural constituye una condición de mucha desventaja.

Al encadenamiento social de la crisis económica, hay que sumarle sus efectos políticos. Los problemas socioeconómicos son un lastre que la región arrastra desde hace décadas. Como mamushkas o muñecas rusas, en América Latina las disaster se superponen y yuxtaponen. La disaster sanitaria, la disaster económica, la disaster social, e incluso la disaster educativa, se interrelacionan y potencian. Sobrevuela en muchos países el espectro de la disaster política, con los episodios de Bolivia, Chile y Ecuador, que el año pasado dieron inicio a un ciclo de protesta social que la pandemia del coronavirus puso en pausa y que ahora, en algunos casos, vuelve a agitarse. Si las democracias no logran canalizar los reclamos ciudadanos pueden crecer las alternativas demagógicas y de tinte populista.

Aun sin que se sospechara acerca del virus SARS-COV-2, causante de la enfermedad letal, se sabía que más del 53 por ciento de la población ocupada en la región permanecía en el empleo informal y que los ingresos de millones de trabajadores no eran suficientes para su sustento. El informe también invita a los países de América Latina a mejorar su infraestructura. La debilidad de los enlaces de transporte desigualdad social en la globalizacion constituye un impedimento para el incremento de la productividad y la inclusión social en la región. Los costos logísticos en la región representan entre un 18% y 35% del valor de un producto, cuando en los países de la OCDE ese porcentaje ronda el 8%. Este mes, la OCDE lanzó un nuevo informe en su serie ¨Mejores Políticas¨ titulado «Fomentando un crecimiento inclusivo de la productividad en América Latina».

Desde la tradición del pensamiento social cristiano, san Alberto Hurtado define la justicia social como “aquella virtud por la que la sociedad, por sí o por sus miembros, satisface el derecho de todo hombre a lo que le es debido por su dignidad de persona humana”. Entre 1930 y 1970, hubo una moderación del fenómeno en el contexto de una creciente democratización del país, revertida durante la dictadura militar, cuando grandes transformaciones domésticas y de la economía mundial generaron innovaciones tecnológicas y de otro tipo que impactaron sobre la desigualdad de ingresos. Teniendo en cuenta los altos niveles de desigualdad y pobreza que preexistían en la región, no sorprende que sea una de las más afectadas por la pandemia.

En la medianía del registro están Chile, Costa Rica, Ecuador y Paraguay, con aumentos de pobreza de entre tres y cinco puntos; Bolivia, México y República Dominicana, con un crecimiento de menos dos puntos porcentuales, y El Salvador, donde prácticamente no varió. «Se combina el fin de la fiesta para todos con una situación donde empieza a empeorar otra vez la distribución». Afirma además que las economías basadas en recursos naturales como son las latinoamericanas tienden a caracterizarse por la inequidad.

Aunque la pobreza ha disminuido en el país, la distancia entre ricos y pobres sigue siendo muy importante. Tanto es así, que un estudio del Banco Mundial indica que un tercio del ingreso generado por la economía chilena en 2013 fue captado por el 1% más rico. Por ello, es relevante considerar este aspecto como una verdadera traba al desarrollo, cuando se bloquean las oportunidades y se traduce en un acceso poco equitativo al poder político y económico. Según consigna Emol, en el informe Chile se encuentra entre los tres países latinoamericanos (junto a México y Colombia) que se encuentran en los últimos lugares en indicadores de bienestar, tales como ingresos, desigualdad social, tasa de homicidios y conocimiento de sus estudiantes.

El informe bienal publicado hoy por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el cual compara los últimos datos disponibles de sus países miembros con los del 2010, dejó en evidencia el complejo escenario native. Según la funcionara, la pobreza extrema aumentaría de los 67,5 millones a los 90,7 millones. De hecho, también se estima que con esta caída del Producto Interno Bruto y este aumento del desempleo, el número de personas que viven en pobreza se incrementaría de 186 millones a 219,1 millones.

Durante su intervención, Bárcena subrayó que hay un desencanto social que se manifiesta principalmente en los más jóvenes de la región, debido a que se generaron expectativas que no han sido cumplidas. La secretaria ejecutiva del organismo, Alicia Bárcena, señaló que las protestas en la región pueden convertirse en una oportunidad para el cambio social. Una de las razones por las que el enfoque interseccional ha tenido una aplicación limitada es porque no ha sido fácil identificar un método que cristalice las aspiraciones ontológicas del término (Hancock 2007; Bauer 2014; Collins 2015). Ciertamente hay muchos otros aspectos a considerar, si se tiene en cuenta la devaluación de la institucionalidad política, el empoderamiento de las comunidades y los cambios que trae consigo la automatización del empleo y la revolución digital.

El documento aborda el doble desafío al cual se enfrenta la región—la reducción significativa de la pobreza y el cierre de la brecha de productividad. Imposible no volver la mirada a ese otro 4 de septiembre de 1970, cuando Chile también definió un giro radical. Han transcurrido casi 52 años y las huellas del día en que Salvador Allende obtuvo la primera mayoría en la elección presidencial siguen latentes. Para el presidente de Estados Unidos, Richard Nixon, y su secretario de Estado, Henry Kissinger, después de la Revolución Cubana un mandatario electo democráticamente con apoyo de socialistas y comunistas no es permitido en América Latina, su patio trasero.

«La recuperación económica de 2021 no ha sido suficiente para mitigar los profundos efectos sociales y laborales de la crisis sanitaria», lamentó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, durante la presentación virtual del informe desde Santiago de Chile. Pese a todo eso, unos 100 millones de latinoamericanos salieron de la pobreza entre las décadas de 1990 y 2000 en base a programas sociales y políticas salariales en medio del auge de las materias primas. «En varios países latinoamericanos, así como en Estados Unidos, un gran elemento racial (…) jugó un rol en al menos una dimensión de la desigualdad», sostiene el execonomista jefe del Banco Mundial y actual profesor de la Universidad de Columbia, en Nueva York. América Latina es tan desigual que una mujer en un barrio pobre de Santiago de Chile nace con una esperanza de vida 18 años menor que otra en una zona rica de la misma ciudad, según un estudio.

La situación es particularmente preocupante dada la situación de escasez de bienes esenciales y la disaster humanitaria que se agrava en el país, principalmente afectando los derechos a la alimentación y salud de las poblaciones más vulnerables. Aunque en este caso el sistema haya sido desarrollado por una universidad privada local, nuevamente se trata de una iniciativa invasiva de recolección de datos sensibles de menores de edad que conlleva desigualdad social onu gran riesgo de profundizar situaciones de prejuicio y estigmatización hacia grupos históricamente vulnerables. Además, estos procesos implican la transferencia de datos personales a terceros y la posibilidad de que esos datos sean usados para fines distintos a los que permitieron su recolección; sin bases legales ni garantías de que la información generada no será utilizada a futuro con otros propósitos, como iniciativas de policiamiento predictivo por ejemplo.

Banco Mundial: Chile Es El Décimo País Más Desigual De Latinoamérica Y El Segundo Con Mayor Pib Per Cápita

Por consiguiente, si bien la hipótesis propuesta sobre que esta estrategia se basa principalmente en la reducción de ingresos, no está equivocada, pero sí estaría incompleta, de acuerdo a lo informado por el Consejo Nacional para la Implementación de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible (2018). En este sentido, la dimensión ex-post, que hace referencia a los resultados e ingresos, sí se encuentra presente en las políticas desigualdad de la riqueza analizadas, sin embargo, no es la única dimensión que se considera en ellas. Las causas de estas disparidades son múltiples, y estas se expresan en diversos ámbitos de la vida de los/as residentes del país, como por ejemplo, en el sistema previsional, en salud, educación, entre otros ( Vera, 2017 ). Esta desigualdad no es una novedad, es un problema que ha afectado al país incluso desde la época de la Colonia (PNUD, 2017).

desigualdad de los paises

La metodología de investigación consiste en un análisis descriptivo y comparativo de las regiones del país, así como de un análisis de convergencia regional. La información recopilada para el desarrollo de este trabajo, se ha obtenido de fuentes secundarias, desde distintas bases de datos mundiales y nacionales. A nivel país se utiliza principalmente, la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN) del Ministerio de Desarrollo Social y datos de productividad del Banco Central de Chile. Asimismo, se contacta con diferentes instituciones, como el Instituto Nacional de Estadísticas, al que se solicita datos antiguos poblacionales y vitales no disponibles en la web1. La desigualdad socioeconómica puede entenderse en relación con las diferencias en la vida social de las personas, las que implican ventajas para unos y desventajas para otros. Son percibidas como injustas en sus orígenes, moralmente ofensivas en sus consecuencias, o ambas.

Enfocó su análisis en la percepción de la desigualdad en la vida cotidiana y cómo motivar a luchar por tener sociedades más equitativas. Incluso, con su antiguo grupo llevó a cabo un estudio que evidenció cómo cuando se hablaba de desigualdad a otras personas usando rostros cercanos, por ejemplo pidiendo pensar en el amigo con menos recursos, crecía el rechazo hacia ella. De niño, le enseñaron que Santa Claus (también llamado, “Papá Noel”) regalaba juguetes a los niños que se portaban bien. Sin embargo, ese pequeño no entendía cómo había niños que aun portándose mal recibían tan grandes regalos.

Si bien el crecimiento es un fenómeno relativo al mercado y al aumento del PIB, como se ha mencionado, el desarrollo suma a esto el bienestar social, el cual se observa en la calidad de vida de la población, en el desarrollo de competitividad y capital humano, en la mayor calidad y acceso a educación y salud, entre otros factores. En esta oportunidad se estudiaran el índice de desarrollo humano (IDH) y el índice de desarrollo regional (IDERE). El PIB per cápita ha sido ampliamente estudiado en la literatura que relaciona el crecimiento económico con la desigualdad de un territorio. Comenzando por Kuznets (1955), cuya teoría sostiene que cuando una economía comienza a crecer, también lo hacen las disparidades, desigualdad economica mundial hasta llegar a un cierto punto de desarrollo, donde a pesar del mayor crecimiento económico, las desigualdades van disminuyendo, tomando la forma de una U invertida. Por su lado, la Nueva Geografía Económica plantea que las desigualdades entre regiones pueden mantenerse en el tiempo e incluso crecer junto con la economía de un país, al existir un centro que aprovecha los mayores beneficios del crecimiento, mientras que las regiones de la periferia pierden esa oportunidad (Merchand, 2009). Una vez hecho el diagnóstico inicial, es imperativo generar herramientas más precisas y profundas que nos permitan complejizar los cuestionamientos que nos hacemos cuando nos referimos a la desigualdad.

La sociedad se fragmenta en grupos sociales que viven como si habitaran en naciones de nivel de desarrollo opuesto. Así, hay personas que son denigradas y discriminadas, en tanto otras desarrollan una actitud de superioridad fundada en la posesión de cargos o tenencia de dinero. No he estudiado directamente ese fenómeno, pero dada la concentración en la parte superior -por ejemplo, el decil superior de ingresos-, lo que se ha hecho en otras experiencias es recaudar más impuestos de este sector de ingresos más altos para financiar programas de apoyo a familias más vulnerables. Y no sólo apoyo económico, sino también de salud, de educación, de apoyo a la primera infancia, que sean aún más robustos. Chile tiene una infraestructura de programas muy avanzada y muy admirable a nivel latinoamericano, pero si queremos hacerla más robusta, una estrategia que han usado otros países, además de optimizar el uso de recursos, es recibir más fondos de los sectores de ingresos más altos. La persistencia intergeneracional de la riqueza se asocia a una alta concentración de ingresos en el grupo de ingresos más altos en Chile.

El video entrega recomendaciones a la familia para estimular el desarrollo de la lectura y escritura en niños y niñas de 3 a 5 años. 8Estados Unidos por su parte, obtiene el puesto número diez, con un PIB per cápita 2,4 veces superior al chileno. Dado que las cifras iniciales de desigualdad en Chile son muy altas, los avances han sido lentos y se necesitaría de un mayor esfuerzo por parte del Gobierno para someter todas aquellas fuerzas que amplifican las desigualdades. Si bien, mejorar la salud es el principal objetivo de un servicio de salud, no es el único. Se debe, por un lado, alcanzar el mejor nivel posible, es decir un sistema de calidad, y por el otro lado, este sistema debe ser equitativo, “en este sentido, un sistema de salud es bueno si responde bien a lo que la gente espera de él; y es equitativo si responde igualmente bien a todos, sin discriminación”(OMS, 2000. Citado en INDH, 2016, pp. 194).

La (Tabla 7) muestra, por una parte, la evolución de este índice considerando solo las seis dimensiones originales, lo que permite hacer una correcta comparación en el tiempo, y a continuación, expone los resultados 2017 al incorporar la variable de medio ambiente y sustentabilidad. Los resultados 2017 (seis dimensiones) muestran que las regiones con mayor IDERE son La Metropolitana y Magallanes, mientras que los peores resultados los presenta La Araucanía y el Maule, sin embargo, son de las regiones con mayor progreso durante el período evaluado. Al parecer se cumple el principio de convergencia, ya que algunas de las regiones con menor índice, son de las que más mejoran, mientras que las de mayor desarrollo tienen un progreso más lento (Metropolitana, Antofagasta, Valparaíso y Magallanes). La excepción a este comportamiento ha sido Arica y Parinacota, que a pesar de su relativamente bajo IDERE, ha experimentado menor evolución en el período analizado.

10.a Aplicar el principio del trato especial y diferenciado para los países en desarrollo, en particular los países menos adelantados, de conformidad con los acuerdos de la Organización Mundial del Comercio. La desigualdad absoluta ha seguido creciendo, y si crece en un contexto de desigualdad relativa y pobreza que cae, y la población en common siente que el bienestar está aumentando, es probable que no importe. Pero si sigue creciendo cuando hay gente de la parte baja o media que está perdiendo, probablemente se crea gran resentimiento”, aseveró. “En los últimos treinta años, la desigualdad en América Latina se redujo, cuando la medimos con el instrumento que más se utiliza para esto, que son las encuestas de hogares”, dijo la académica para iniciar. Pero esta condición no se remite solo a diferencias en calidades de vida, ya que tiene asociado un conjunto de problemas que implican, especialmente, trabas a la justicia, a la convivencia y al desarrollo económico. Al igual que otras naciones de América Latina, su origen se remite a la Colonia, cuando se constituyeron las instituciones que la inician, como la concentración en la propiedad de la tierra y la relación jerárquica entre la clase alta y el bajo pueblo.

La extensión y popularización de la educación escolar gatilló, por una parte, la migración de la élite liberal desde los liceos emblemáticos hacia colegios privados con proyectos liberales (laico o católicos progresistas). Sumado a ello, los estudios que abordan estas instituciones en Francia, los Estados Unidos y el Reino Unido muestran que otro carácter de distinción de estos colegios son los cierres físicos, pues usualmente están ubicados en lugares alejados, con escaso acceso a transporte público. Uno de los principales mecanismos de cierre social se encuentra en el ensamblaje entre las barreras de entrada que fijan los colegios de élite en su ingreso y las preferencias de las familias de élite por dónde educar a sus hijos. El cobro de altos aranceles a las familias es uno de los primeros mecanismos de selección y cierre social (Stevens, 2009).

Los escándalos de colusión mostraron la desigualdad que existe entre consumidores y productores, llevando a mejoras de la ley antimonopolios que nos dejan al nivel de países desarrollados y una ley de consumidores que debiera aprobarse en los próximos meses. Si esta ley se aprueba, tendremos instituciones potentes para promover la competencia y revertir el sentimiento de abuso bastante generalizado existente en la actualidad. Se trata de un aporte importante, con abundante y novedosa evidencia que invita a reflexionar y debatir sobre cuáles son las dimensiones más relevantes de la desigualdad en la actualidad.

En el caso de los países donde no se midió el indicador en 1990, utilizamos el año más cercano a esa fecha, y lo comparamos con la información más reciente. «Al final lo que la gente percibe como desigualdad, es la desigualdad de acceso a servicios como la salud, la educación, el transporte o la seguridad en los barrios», le cube a BBC Mundo Luis Felipe López-Calva, director del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD. Pero como solo considera la desigualdad de los ingresos, no refleja todas las otras dimensiones de la vida diaria. La manera más común de mirar la desigualdad de un país es utilizando el Índice de Gini, el cual mide la diferencia de ingresos. En coordinación con el Ministerio de Desarrollo Social y de Familia, el BM se encuentra entregando asistencia técnica al proyecto Gestión Social Local (GSL)  Esta nueva metodología para la entrega integrada de servicios y beneficios sociales en los municipios, ya se encuentra disponible en casi el 70% de las municipalidades del país.

En cualquier caso, lo cierto es que desde lo más profundo de la crisis en 2010 la esperanza de vida se ha incrementado en 14 meses hasta 80,5 años de media (con un techo de eighty four,2 en Japón y un suelo de 74,6 en Colombia), y ha subido en los 35 países del estudio. Países como Finlandia, Irlanda o Francia logran incluso bajar su Gini en más de 23 puntos. La evidencia Ocde muestra que un 78% de la disminución de la desigualdad, es decir el gran grueso, proviene de transferencias monetarias directas (12,5 puntos), mientras que un 22% se explica por la progresividad tributaria (3,5 puntos). Por otra parte, este mismo aumento en la desigualdad también genera incentivos en los grupos más ricos para aumentar su nivel de protección. La razón es que, en un ambiente desigual, estos últimos tienen más recursos para gastar en protección y tienen más que perder si sus propiedades son robadas.