La erradicación de la pobreza es elementary para los ODS, y el logro de todos los Objetivos está estrechamente relacionado con el logro del Objetivo 1. Para que un hogar se identifique en situación de pobreza multidimensional debe presentar un número igual o superior a three indicadores en carencia correspondientes a cualquiera de las primeras cuatro dimensiones (equivalente al peso completo de una de estas dimensiones). También se encuentran en situación de pobreza multidimensional los hogares que presenten carencias en los 3 indicadores de la dimensión de Redes y Cohesión Social y que presenten carencias en al menos 2 indicadores de las restantes dimensiones.
También sugiere la implementación de un bono contra el hambre como complemento del ingreso básico de emergencia para toda la población en situación de pobreza extrema, siendo su valor equivalente al 70% de una línea de pobreza extrema (CEPAL, 2020 a; 2020 b). De acuerdo con la CEPAL (2021), el continente enfrenta el COVID con grandes brechas y amplios sectores de la población desprotegidos, evidenciando la fragmentación y las desigualdades de sus sistemas de protección social. Antes de la crisis pobreza desigualdad y exclusión social resumen, solo el 47,2% de las personas ocupadas estaban afiliadas o cotizaban a los sistemas de pensiones, y el 60,5% estaban afiliadas o cotizaban a los sistemas de salud.
Respecto de 2017, mientras en nueve regiones la tasa de pobreza disminuyó de forma significativa, en Tarapacá y Antofagasta hubo un aumento de un 50% y 70% respectivamente. Son más de 40 mil nuevas personas cuyos ingresos no alcanzan a satisfacer necesidades básicas y que representan un desafío para la política social. Se suma a ello que en esos territorios las tasas de pobreza extrema también aumentaron y no se aprecia una baja respecto del 2020, cuando se vivieron los momentos más álgidos de la pandemia.
Y para ello se necesita poner a la persona al centro, conocer sus historias y sus necesidades de primera fuente para dar precisión y eficiencia al diseño de políticas públicas y programas sociales. Sólo así se podrá ofrecer servicios que vayan más allá de la simple asistencia, como la revolucionaria experiencia “Vivienda Primero”, y logremos superar esta emergencia social que de tan abundante termina convirtiéndose en parte del paisaje. En el Día de la Justicia Social, nuestra llamada concreta es a no seguir viendo impávidos cómo hermanos nuestros viven en la precariedad absoluta y hacer algo en serio por ellos. Más de 100 millones de niños en el mundo han quedado por debajo del nivel mínimo de competencia en lectura, lo que podría deshacer dos décadas de logros educativos, y aún no sabemos cuántos niños, niñas y jóvenes no volverán al colegio este marzo en Chile.
Todas las empresas deberían ser empleadores con igualdad de oportunidades, prohibir la discriminación contra grupos vulnerables y adoptar políticas que respalden la inclusión para contribuir al empoderamiento económico. Una de las formas más efectivas de reducir la pobreza es crear empleos decentes, es decir, ofrecer a las personas una fuente de ingresos sostenible y confiable, condiciones de trabajo decentes y apoyo para servicios básicos como la salud, la vivienda y el saneamiento. La pobreza es un obstáculo para la realización de la dignidad humana y el desarrollo, y representa una barrera para muchos Derechos Humanos. Vivir en la pobreza, a menudo significa la falta de acceso a servicios básicos como la buena alimentación, el saneamiento, la atención médica y la educación. Por lo tanto, reducir la pobreza puede ayudar a abordar cuestiones relacionadas con la nutrición (ODS 2), salud (ODS 3), educación (ODS 4), saneamiento (ODS 6) y desigualdad (ODS 5 y 10), que contribuyen colectivamente a construir sociedades más pacíficas (ODS 16).
La Pensión Garantizada Universal (PGU) es probablemente la transferencia monetaria más importante que hoy día se paga en Chile. Beneficia a los viejos, pero eso en ningún caso garantiza la integralidad de los derechos sociales de los adultos mayores. Lo que más requieres tú cuando eres un mayor y tienen mayor probabilidad de enfermar es acceso a la salud, a los remedios, a los tratamientos. Por esto, para potenciar el desarrollo comunitario sostenible, llevamos a cabo este proyecto en alianza con las fundaciones Techo para Chile y El Colihue y, junto a las comunidades, co-diseñamos distintos programas sociales.
“A nivel mundial, el aumento de la pobreza que se produjo en 2020 debido al covid-19 todavía persiste, y los pobres inducidos por el covid-19 en 2021 siguen siendo 97 millones de personas”, señalaron los economistas del banco. Los países con las peores cifras en la región fueron Argentina, Colombia y Perú, los tres con aumento de siete puntos porcentuales o más. 86 millones de personas en Latinoamérica pasaron a vivir en pobreza extrema durante el 2021, el segundo año de la pandemia. A esa conclusión llegó la Comisión Económica para América Latina y el Carbine (Cepal), de acuerdo al informe «Panorama Social de América Latina», presentado esta semana. La línea de pobreza se define como un indicador de la capacidad de satisfacer las necesidades básicas de una persona. Así, un hogar está en situación de pobreza si su ingreso por persona o ingreso del hogar es inferior al valor de la línea de pobreza.
– Tomás Recart, Co-fundador de Enseña Chile, organización sin fines de lucro que trabaja para que niñas y niños en el país reciban educación de calidad. En su presentación relató como encontró su vocación y decidió dedicar su carrera al mundo de la educación. En 2010, Tomás fue reconocido como Emprendedor Social del Año por Fundación Schwab, Joven Líder Global del Foro Económico Mundial en 2011 y en 2016 obtuvo el segundo puesto entre los miembros de organizaciones sociales más admirados del país. Una acción pobreza desigualdad y exclusión ambiciosa para reducir la pobreza implica llevar el trabajo decente a las comunidades económicamente desfavorecidas, y crear oportunidades para los grupos que han sido marginados, como las mujeres, las minorías étnicas y raciales y las personas con discapacidad. Es esencial establecer objetivos para revisar la efectividad de las estrategias de implementación dirigidas a la erradicación de la pobreza. Así mismo, se requiere el apoyo de todos los niveles de la empresa para expandir estos objetivos.
Esta ausencia es aún más relevante dado que en muchas oportunidades, es la cantidad de miembros de los hogares la que aparece como población beneficiada. Las TM tendrán una particular expansión dentro del giro progresista desarrollado en el continente, a inicios del presente siglo. Indica Uribe (2018) que estos gobiernos buscaron combinar el crecimiento económico con protección laboral, aumento del salario mínimo, del empleo formal, de la inversión pública y la extensión de la protección social articulando mecanismos contributivos y no contributivos, en specific transferencias monetarias condicionadas. A estas, Martínez y Sánchez (2016) las consideran la innovación más generalizada, permitiendo pasar de coberturas restringidas a otras más amplias. Pero agregan que se trata de una incorporación segmentada entre los accesos contributivos y no contributivos, que presentan muy distintos grados de suficiencia de las prestaciones. La disaster sanitaria generada por la COVID-19 permanece aún vigente y Latinoamérica con el Caribe la región más weak del mundo en medio de la pandemia.
Los hombres registraron un 6,1% de pobreza y 1,9% de pobreza extrema, en tanto las mujeres tuvieron una incidencia de pobreza de 6,9% y 2,1% de pobreza extrema. Este jueves 27 de julio fueron presentados los primeros resultados de la encuesta CASEN 2022 en la Casa Central de la Universidad de Chile, institución que estuvo a cargo de la implementación del instrumento entre noviembre de 2022 y febrero de 2023. Las principales conclusiones del estudio fueron dadas a conocer por el ministro de Desarrollo Social y Familia, Giorgio Jackson, y la subsecretaria de Evaluación Social, Paula Poblete, quienes destacaron que la medición registró una disminución general en los indicadores de pobreza y alcanzó mínimos históricos.
En el 10% de menos recursos esta situación es aún más dramática, donde se observa que los ingresos de estos hogares cayeron de $167 mil en 2017 a $95 mil en 2022 (ajustado por la inflación). Es decir, para estas familias la capacidad de generar ingresos por su cuenta es solo poco más de la mitad de la que tenía en 2017. Este escenario se repite, con distintos niveles de intensidad, en todo el territorio nacional. En línea con la Cumbre sobre Transformación de la Educación de las Naciones Unidas celebrada este año, el documento entrega diversas recomendaciones de política para hacer de esta disaster una oportunidad de transformación. La pobreza extrema aumentó en 5 millones de personas el año pasado, pese a las ayuda sociales estatales durante la pandemia, según informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). El segundo año de la pandemia del Covid-19 disparó la pobreza extrema en Latinoamérica hasta alcanzar a 86 millones de personas, cinco millones más que en 2020 y la mayor cifra en 27 años, apuntó este jueves un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
El rol de la silvicultura en las economías locales, a menudo rurales, se enfatiza específicamente en nuestros requisitos, y ayudamos a promover la salud y el bienestar a largo plazo de las comunidades. La certificación PEFC también asegura que los derechos de propiedad, la propiedad de los árboles y los acuerdos de tenencia de la tierra se clarifiquen y establezcan. Un antecedente que no se percibe en la reciente encuesta, amortiguado por los aportes monetarios del Estado, es el impacto de la inflación. –Al menos hay que discutir si tiene sentido seguir haciendo este análisis de ingresos imputando el arriendo como plata recibida. O, al menos pedirle a la CASEN, que entregue resultados con y sin imputación de arriendo, y ahí uno se podría aproximar de mejor manera a la realidad de los ingresos reales que las personas tienen en los bolsillos para enfrentar sus necesidades.
En el año fiscal 2017, las inversiones a largo plazo en países en desarrollo ascendieron a $19.300 millones de dólares, ayudando al sector privado a desempeñar un papel esencial en el esfuerzo mundial por acabar con la pobreza extrema y por aumentar la prosperidad compartida. En su informe anual Panorama Social de América Latina, la Cepal estima que entre 2020 y 2021 las personas en situación de pobreza extrema se incrementaron en cerca de 5 millones. Organismo de las Naciones Unidas llama a avanzar hacia sistemas de protección social universales, integrales, sostenibles y resilientes.