En diciembre de 2023, las académicas de la Facultad de Ciencias Agronómicas, Carmen Sáenz y Loreto Prat, participaron en una reunión técnica de la FAO en Marruecos para abordar los retos y oportunidades de este cultivo, destacando la ventaja de Chile frente a la plaga de la cochinilla que afecta a otras regiones. Las académicas explican el potencial de esta especie originaria de México y que fue introducida al territorio chileno por los españoles durante la época de la colonia. Crear tecnologías de reciclaje usando la ciencia e innovación como herramientas de transformación, proveyendo de valor agregado a los desechos que hoy terminan en su gran mayoría en rellenos sanitarios. De Chile Cristina Acuña, quien en conversó con Alumni Uchile sobre este proyecto sustentable que scale back la huella de carbono. La brecha es mucho más elevada cuanto más pobre es el país, detalló la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
«Cuando nace un hijo se genera la brecha y esta persiste en el tiempo. No observamos que se vaya cerrando y es ahí donde está el problema principal”, advierte. Los escolares de gran parte del territorio nacional ya están disfrutando de sus vacaciones de invierno, descanso que -al igual que el año pasado- llega un par de semanas antes de lo tradicional ante el peak de enfermedades respiratorias. Los académicos de la Universidad de Chile Mariela Muñoz, Guillermo Zepeda y Cristián Rebolledo destacan la medida, comparten algunas recomendaciones y reiteran el llamado a vacunarse. La muestra constituye un recorrido de los trabajos que ha realizado en la última década en su taller, demostrando su vigencia y dando cuenta de su larga y prolífica trayectoria. A inicios de los ’70, Martínez Bonati llenó de arte chileno el edificio UNCTAD III, construido originalmente en el Gobierno de Salvador Allende y hoy reconvertido en el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM). La exposición, que fue abierta a público este jueves 20 de junio y permanecerá en el GAM hasta el eleven de agosto, cuenta con entrada liberada.
Por lo tanto, la diversidad en el medio influye di-rectamente en la libertad que tienen los individuos y países para lograr cierto nivel de calidad de vida “ideal”. La sociedad hoy reconoce y valora la equidad de género como un imperativo ético para construir un Chile más justo. Pero aún resta mucho camino para asegurar la plena igualdad de derechos y oportunidades entre mujeres y hombres. Datos desagregados de la participación de mujeres y hombres en el sistema de pensiones y seguro de cesantìa, estadísticas sobre la densidad de cotizaciones, remuneraciones imponibles promedio y dónde están las principales brechas en materia previsional son algunos de los tópicos abordados en este reporte, elaborado por segundo año consecutivo por la División de Estudios de nuestra institución.
Comparando mujeres y hombres que estaban empleados previo a la pandemia, encontramos que las mujeres han perdido más sus empleos y han experimentado más frecuentemente caídas en su ingreso. En otras palabras, y consistente con la experiencia en otros países, la crisis económica afectó en mayor manera el empleo y el ingreso de las mujeres. Esto se suma al aumento en la presión por las tareas del hogar, y el cuidado y educación de niños pequeños asociados al cierre de las escuelas. Según el director ejecutivo del Foro de Gobernanza Mundial (Global Governance Forum), Chile está sobre la media de los países de la Unión Europea en varios aspectos, pero en el terreno de igualdad de género y discriminación contra la mujer aún hay muchas deficiencias que deben ser mejoradas, ya que tienen efectos económicos, políticos y sociales. Pese al desempeño de Chile a nivel common, es importante destacar que gran parte de su avance en materia de igualdad de género se ha visto reflejado en la tasa de participación laboral.
La vulnerabilidad económica en los hogares liderados por mujeres está vinculada a mayores niveles de informalidad en los empleos, una brecha salarial persistente y un aumento en la monomarentalidad, lo que implica que las mujeres empobrecidas mantienen y reproducen hogares empobrecidos, evidenciado lo que en la literatura se ha categorizado como la feminización de la pobreza, detalla PAZ 2022. Un estudio realizado por la Fundación Chile Movilizado consultó por la experiencia de 15 parlamentarios en torno a vivencias de violencia y desigualdad de género que frecuentemente son enfrentadas por mujeres. La campaña que nació en Argentina el three de junio del 2015 y se expandió por multitud de países en Sudamérica, volvió a colmar las calles de Buenos Aires para conmemorar un aniversario en que se sigue exigiendo medidas contra los femicidios, la violencia machista y la desigualdad de género. En la dimensión del acceso al trabajo, existe una brecha profunda de género debido a múltiples factores que dejan a las mujeres en posición de desigualdad. Se suma a lo anterior, que un 84,9% de los hogares monoparentales está a cargo de una mujer, las que, en su mayoría, no reciben ninguna contribución de los padres para la crianza y educación de los hijos e hijas comunes. El programa consiste en el cuidado de niños entre los 6 y thirteen años para favorecer la participación de sus madres en el mercado laboral.
Por su parte, la filósofa Nancy Fraser habla de la paridad participativa y postula que la justicia exige unos acuerdos que permitan que todos los miembros de la sociedad interactúen en pie de igualdad, tanto a nivel de redistribución como de reconocimiento. Incluso los países más equitativos exhiben algún grado basal de desigualdad vinculado a la división del trabajo, la que requiere pagos diferenciados acorde a la complejidad de las ocupaciones o para el fomento de actividades que están sujetas a un considerable nivel de riesgo, como la innovación y la labor empresarial. (2) En marzo de 2021 comenzó de forma gradual la vuelta a clases presenciales de los escolares de nuestro país.
También se ha observado que algunos grupos de la población han sido más vulnerables a los efectos de la pandemia. En explicit, muchos de estos estudios apuntan a una diferencia de género, señalando que es más possible que las mujeres presenten este tipo de síntomas. Una de las causas es que la pandemia ha tenido un impacto mayor en sectores económicos donde el empleo femenino es más prevalente, como los sectores de hospitalidad y retail. Esto llevó a mayores tasas de desempleo, caída de ingresos, y salida del mercado laboral para las mujeres, en relación a los hombres. Otra causa importante se relaciona con un aumento en el tiempo dedicado a tareas domésticas y de cuidado, asociadas a las cuarentenas y al cierre de escuelas, que recayeron en mayor medida en las mujeres.
Los datos revelados por Ciper Chile señalan que a pesar de lograr una mayor inserción laboral y parcial autonomía económica, las mujeres a cargo de estos hogares enfrentan desafíos significativos. A menudo se ven obligadas a destinar la mayoría de su tiempo a la reproducción del hogar, limitando sus oportunidades de desarrollo personal y profesional. Esta situación se agrava por la desigualdad salarial persistente y la informalidad laboral, lo que perpetúa la vulnerabilidad económica y la feminización de la pobreza.
De este modo, un estudio elaborado por Chiledeudas.cl reveló que a las mujeres se les cobra una tasa de interés promedio de 12,4%, mientras que a los hombres se les cobra un promedio de eleven,1%, por lo tanto, el género femenino está pagando un monto casi 12% mayor (1,3 puntos porcentuales). Avanzar en una equitativa distribución de la corresponsabilidad en el cuidado y trabajo doméstico, terminar con los estereotipos en torno a roles de género, apoyar los emprendimientos liderados por mujeres, denunciar los casos de violencia doméstica, son algunas acciones cotidianas que podemos realizar para facilitar este proceso. El cuestionario de la ISSP 2009 incluye una serie de ítems actitudinales acerca del ingreso, la distribución, la percepción de desigualdad, principios distributivos, expectativas acerca del rol del Estado sobre la desigualdad, así como preguntas acerca de la percepción y evaluación de las remuneraciones. En esta sección nos abocaremos a las diferencias individuales en percepción de desigualdad, las que serían susceptibles de ser explicadas mediante una serie de determinantes. Por lo tanto, nos referimos a un modelo conceptual de tipo explicativo que considera como variables dependientes a las tres medidas de percepción de desigualdad mencionadas, tal como se ilustra en la Figura 2. Desde la tradición liberal, John Rawls afirma que “la justicia es la primera virtud de las instituciones sociales, como la verdad lo es de los sistemas de pensamiento”.
Así, las desigualdades de género varían mucho entre grupos socioeconómicos, generaciones más jóvenes y mayores, zonas urbanas y rurales, poblaciones indígenas y no indígenas. El vínculo entre percepción de desigualdad y formas de acción social es un primer elemento a mencionar como campo de futuras investigaciones. Si bien la acción social es difícil de opera-cionalizar en encuestas de opinión, existe la posibilidad de establecer indicadores en temas de participación política convencional desigualdad economica social y no convencional, los que esperamos poder incorporar en futuras encuestas. Un segundo aspecto a explorar son las percepciones en distintas dimensiones de la desigualdad, que van más allá de lo salarial y que abarcan ámbitos como la educación, salud y vivienda, entre otros. En tercer lugar, sugerimos la incorporación de elementos ideológicos de tipo distributivo como posibles determinantes de las percepciones de desigualdad y que vayan más allá de la posición política.
Tres de las muchas mujeres del mundo que una vez decidieron que nada para ellas era imposible y que la historia, y sobre todo su historia, podían ser diferentes. Otra mujer que producto de sus capacidades y trabajo logra un puesto históricamente ocupado desigualdad de la globalización por hombres y que le abre el camino a otras mujeres que quieran seguir sus pasos. Rosa Devés llega a la rectoría en un momento especial del país en que más mujeres están situándose en posiciones de liderazgo y donde se está reconociendo su mérito.
De esta forma, como se explicó en el primer apartado de este artículo, ambas dimensiones de las disparidades, ex-ante y ex-post, presentan una relación recíproca entre sí, afectándose mutuamente. Es decir, que los resultados de una generación afectarán directamente el punto de partida de la siguiente y, además, aun habiendo logrado la igualdad en una de estas dimensiones, esto no resolvería las disparidades en la otra dimensión. Como se puede observar, las metas de este ODS contemplan los aspectos económicos, políticos y sociales, lo que va en la línea de lo planteado respecto de la multidimensionalidad de la desigualdad económica. Es decir, que esta no solo considera el tema de ingresos, sino que hay una gama amplia de particularidades a considerar para lograr reducirla. Por ejemplo, la meta 10.2 busca promover la inclusión social, económica y política de las personas, con un foco antidiscriminatorio, y la meta 10.3 hace referencia explícita sobre las dimensiones ex-ante y ex-post de esta, al demandar reducir las desigualdades de oportunidades e ingresos, respectivamente. No obstante, este ODS tampoco ha quedado exento de críticas, lo que ha llevado a varios académicos/as a dudar de sus posibilidades de éxito.