El proyecto Luz en Casa cuenta hoy con 388 usuarios activos en la Región de Coquimbo, los cuales ya están con sistemas en las comunas de Los Vilos, Illapel, Canela, Combarbalá, Monte Patria, Punitaqui y Ovalle. Las luminarias solares permitirán aprovechar los beneficios de cerca de 300 kWh/año de energía renovable y un sistema de reciclaje de aguas grises de la sede servirá para el riego de la huerta comunitaria. Lo anterior pone en evidencia la complejidad de esta situación y exige un trabajo articulado, multilateral y colaborativo con actores claves de la sociedad. Durante el evento, los encargados de actuar como monitores de los jóvenes fueron 54 colaboradores de Grupo Security que participaron como voluntarios en la organización, traslado de los niños desde los buses a sus espacios asignados, entrega de almuerzos, and so on. En complete, 1.700 personas (entre niños y monitores) asistieron presencialmente al evento en Espacio Riesco provenientes de 17 colegios de la Región Metropolitana (incluyendo establecimientos particulares, subvencionados y municipales). A estos jóvenes se suman las más de 1.800 reproducciones que tiene el congreso hasta la fecha en el canal de YouTube de Grupo Security.
Asimismo, estudios del Banco Mundial muestran que la productividad de empresas localizadas en áreas urbanas aumenta con el tamaño de ciudad (Vidler, 1999). Para explotar los beneficios de aglomeración, las ciudades pueden (Vidler, 1999) aumentar la inversión en capitales (infraestructura, vivienda, social) a través de un financiamiento tanto público (multi-nivel) como privado. Asimismo, utilizar instrumentos de uso de suelo (zonificación) para racionalizar los usos competitivos de éste, minimizar externalidades negativas y dinamizar procesos de desarrollo. Finalmente, los gobiernos pueden influir sobre el tipo de desarrollo con la ubicación de obras públicas (tanto pequeñas como grandes).
Por ejemplo, entregar recomendaciones para hacer deportes en casa, cube Munita, es muy diferente en contextos de viviendas con patio grande a otros espacios de forty o 50 metros, “son una serie de indicadores que se van acumulando y que hacen que las experiencias de encierro sean muy distintas”. “En el segmento más susceptible es donde encontramos el mayor uso de sistemas constructivos de menos calidad, lo que implica menos aislamiento contra el frio y la humedad en invierno y una situación equivalente con el calor pobreza en la república dominicana en el verano”, resalta Munita. En el caso de una de menos de 30 metros cuadrados, el 5,6% del grupo D y E lo que en C2 y C3 es de 2,6% y en el ABC1 de 0,8%. Desde marzo que las cuarentenas han obligado mucha gente a permanecer en sus casas para evitar un colapso sanitario, pero estudio muestra que cuando el encierro se vive en condiciones de pobreza, con menos metros cuadrados y hacinamiento, la medida se hace más compleja. Impulsar programas integrales de mejoramiento de habitat y de oportunidades productivas para asentamientos precarios.
Asimismo, ha inhibido a que la política pública comprenda su potencialidad «destructiva» sobre los activos y posibilidades de desarrollo de los pobres urbanos (por ejemplo, construcción de vivienda social en lugares apartados de fuentes de trabajo y sin redes de transporte adecuadas y accesibles). Se parte de la hipótesis de trabajo de que la vulnerabilidad económica en los sectores de pobreza urbana no ha sido plenamente integrada en las políticas del habitat, limitando la contribución de éstas a la mejora en el acceso de los pobres urbanos al empleo e ingresos estables. El trabajo intenta girar la mirada desde los indicadores agregados sobre la situación de pobreza urbana y precariedad en la región, para incorporar al hogar pobre, y ver cómo la dimensión económica influye sobre la vida de los sectores de pobreza, y sobre todo, indagar sobre qué significado esta dinámica tiene para las políticas públicas del habitat. Desde la perspectiva de potenciar a los sectores de pobreza urbana como protagonistas de su propio desarrollo, se recomienda entablar una agenda del habitat para atender la vulnerabilidad económica de los pobres urbanos. En este contexto, se debiera buscar el mejoramiento de las condiciones del habitat, entendiendo que éstas forman parte de la dotación de capital físico y económico de los sectores urbanos de pobreza.
Lo hacemos también articulando con agencias, ministerios y con otras asociaciones nacionales e internacionales afines. Hoy impulsamos en la región las transformaciones del sector que hagan realidad las transiciones energéticas. Argentina fue a comienzos del siglo pasado un país con una sólida economía, que le colocaba entre los primeros países del mundo, comparable a varios países europeos. Su nivel de bienestar económico era tal que se decía que los empresarios agrícolas más adinerados, llevaban vacas a bordo de los barcos que los trasladaban a Europa, para poder así contar con leche fresca todo el trayecto. Sea verdad o mito, lo cierto es que Buenos Aires desarrolló unos de los primeros ferrocarriles metropolitanos del mundo, y la inversión extranjera acudía con generosidad a esa tierra de promesas. La economía se expandía con fortaleza, y así surgieron poderosas y modernas ciudades que concentraban el poder económico y también el político.
Los análisis de la CEPAL demuestran que los factores vinculados al bienestar económico tienen efecto tanto sobre la inequidad como sobre la pobreza. Este artículo presenta el análisis de los hallazgos de un estudio de caso en dos escuelas chilenas con niveles excepcionales de heterogeneidad socioeconómica entre sus estudiantes, ello previo a la implementación de políticas educacionales que buscan reducir la segregación e incrementar la diversidad social en las escuelas, como es la Ley de Inclusión. Guiado por una discusión de los conceptos de Pierre Bourdieu, el análisis de entrevistas con profesores y directivos revela una actitud ambivalente hacia las diferencias y mixtura socioeconómicas en las escuelas. Por una parte, estas diferencias son valoradas y asociadas a beneficios para todos los estudiantes, principalmente el desarrollo de disposiciones igualitarias, como son las actitudes para relacionarse de manera respetuosa y empática con otros.
1.b.1 Proporción de los gastos públicos periódicos y de capital que se dedica a sectores que benefician de forma desproporcionada a las mujeres, los pobres y los grupos vulnerables. 1.three.1 Proporción de la población cubierta por sistemas o niveles mínimos de protección social, desglosada por sexo, distinguiendo entre los niños, los desempleados, los ancianos, las personas con discapacidad, las mujeres embarazadas, los recién nacidos, las víctimas de accidentes de trabajo, los pobres y los vulnerables. En Argentina, la provincia de Salta firmó en 2017 un acuerdo con Microsoft para utilizar inteligencia artificial en la prevención del embarazo adolescente y la deserción escolar. Según la empresa, a partir de datos recolectados por medio de encuestas a sectores vulnerables de la sociedad “los algoritmos inteligentes permiten identificar características en las personas que podrían derivar en alguno de estos problemas y advierten al gobierno para que puedan trabajar en la prevención de los mismos”.
Fernando Campos comparte ese primer diagnóstico y califica de obsoletos los criterios para medir la calidad de las viviendas. “El índice que se ocupa es el de déficit habitacional, que dice poco del criterio de calidad que se utiliza y que está construido en base a datos de hace 50 años o más, entonces, que te digan si la vivienda tiene piso de tierra o no, son criterios muy básicos. La capacidad de ventilación o los niveles de humedad de una vivienda no se toman en cuenta y son justamente los que hoy, en medio de una pandemia, ponen en juego la rapidez del contagio”, dice el sociólogo. En este sentido, durante las últimas semanas el Ministerio de Vivienda comprometió la entrega de “kits de salud” que incluyen cloro gel, toallas desinfectantes, detergente, pasta de dientes, cepillos de dientes, guantes, jabón, paños de limpieza y lavalozas, entre otros, que están destinados a las personas que viven en los 802 campamentos que se tienen catastrados.
Para ello, ha logrado unir a Grandes Empresas, algunos integrantes de Pacto Global Chile y otras no, para apoyar a Escuelas Rurales de la Ciudad de Puerto Montt, en celebridades, suministros, útiles escolares y reparación de infraestructura. Hoy, ya contamos con la participación activa y apoyo de Aceros AZA, La Bolsa de Santiago, Telefónica, SMU, Tiendas Dimarsa, Caja de Compensación La Araucana, Carabineros de Chile, Paz Corp., Transport Group, entre otras. Ciertos grupos están desproporcionadamente representados entre los pobres, y estos enfrentan restricciones adicionales – como el acceso limitado a recursos y mercados productivos – para salir de la pobreza. 1.3 Implementar a nivel nacional sistemas y medidas apropiados de protección social para todos, incluidos niveles mínimos, y, de aquí a 2030, lograr una amplia cobertura de las personas pobres y vulnerables. La situación es particularmente preocupante dada la situación de escasez de bienes esenciales y la crisis humanitaria que se agrava en el país, principalmente afectando los derechos a la alimentación y salud de las poblaciones más vulnerables.
La evaluación de los proyectos es realizada por un comité técnico integrado por representantes de Sodimac y de la Comunidad de Organizaciones Solidarias (COS), el que valora el impacto positivo de cada propuesta. Es así como en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Social (a través de FOSIS y SENAMA), la Fundación Simón de Cirene y Lipigas, se desarrolló una campaña digital donde se contactaron adultos mayores de todo Chile para darles una carga de gasoline. Para la realización de las clases la compañía dispone de recursos que complementan los aportes que el MINEDUC otorga por alumno de manera anual, para ello dispone de los recursos, colaciones, instalaciones, administrativos y otros aportes pedagógicos que el programa necesite.
No así en los segmentos de más ingresos donde normalmente existe poca diferencia- y normalmente poca distancia- entre las características del entorno donde viven y donde trabajan”, explica Munita. Lo que se grafica en los mapas de calor (abajo) que representan la ubicación del destino por motivos laborales en la encuesta de Origen y Destino 2012, el primero del segmento D y E, y el último del segmento ABC1. Una realidad que se agudiza en contextos de confinamientos detalla un estudio realizado por Criteria que analiza datos de Casen y Censo 2017 e integración de knowledge pobreza en la pandemia territorial con el GSE privisto por AIM (Asociación de Empresas de Investigación de Mercado), con foco en los grupos socioeconómicos D y E, que entre ambos representan el forty seven,1% de la población nacional.
Incluso los países más equitativos exhiben algún grado basal de desigualdad vinculado a la división del trabajo, la que requiere pagos diferenciados acorde a la complejidad de las ocupaciones o para el fomento de actividades que están sujetas a un considerable nivel de riesgo, como la innovación y la labor empresarial. Eso se aprecia, por ejemplo, que en el caso de los hogares ABC1 el 86% cuenta con una farmacia a menos de 20 cuadras, eso es de seventy seven,2% en C2 y C3, y 61,1% en D y E. 6 Se utiliza la clasificación elaborada por la División de Estadísticas de CEPAL, de «empleo formal» y «empleo informal», aplicada en este caso a los jefes de hogar. Más allá de las particularidades en cada país y entre rondas de encuestas, se considera como empleo casual al empleo no calificado en microempresas (aquellas cuyo variable tamaño del establecimiento tiene un número igual o menor a 5 trabajadores), al empleo doméstico y al trabajo independiente no calificado de cualquier rama de productiva. Favorecer en las licitaciones públicas los servicios de los pequeños y medianos emprendimientos de propietarios de sectores de vulnerables.
Durante las últimas décadas, las políticas del habitat han ido incorporando una marcada orientación hacia la economía de mercado en sus programas. Desde el punto de vista de la oferta se exigen a los sectores de pobreza ahorros, pagos para servicios, entre otros. Esta estrategia de política sin lugar a duda, ha ayudado a ampliar la cobertura de estos programas, diversificando las formas de financiar la inversión pública, como también ha ayudado a facilitar la asimilación de una cultura relacionada a esta economía. Sin embargo, la comprensión de esta realidad de economía de mercado, desde el punto de vista del hogar (e individuo), ha sido ajena a la política habitacional y a la intervención urbano-territorial. Esta falla en el marco de las políticas del habitat en la región no ha permitido potenciar a los sectores de pobreza en aspectos críticos de su desarrollo.