Los niveles proyectados de pobreza extrema en 2022 representan un retroceso de un cuarto de siglo para la región, subraya el organismo regional. Entre otras cosas, la agencia de la ONU plantea apoyo a pequeños negocios y agricultores con el fin de amortiguar el efecto de la crisis, además de rentas básicas para asistir a unas 9 millones de personas vulnerables en un programa de 24 meses centrado en la escala native. El documento resalta la desigualdad en la distribución de la pobreza, tanto dentro de los estados como en los países.
La pobreza mundial había retrocedido a un ritmo anual de aproximadamente 1 punto porcentual entre 1990 y 2015. Esto representa un aumento de eight millones con respecto al 2019, y se debe al mayor costo diario promedio de este tipo de dieta en América Latina y el Caribe comparado con el resto de las regiones del mundo, llegando en el Caribe a un valor de USD four,23, seguido de América del Sur y Mesoamérica con USD 3,61 y USD 3,47, respectivamente. En la presentación del informe en Ginebra, el jefe de OCHA, Martin Griffiths afirmó que el cambio climático está afectando “primero y de peor manera” a las personas más pobres y vulnerables del mundo.
Estos datos obsoletos dificultan la identificación de las políticas que deben aplicarse para acelerar la reducción de la pobreza. Las actividades deben centrarse en una ayuda humanitaria más eficaz, que incluya enfoques innovadores como medidas preventivas y redes de seguridad con capacidad de respuesta ante las perturbaciones. Desde la perspectiva del desarrollo, es de suma importancia aumentar las inversiones básicas a fin de abordar las causas profundas de las crisis alimentarias y la malnutrición infantil. Para ello, es imprescindible que los sistemas agroalimentarios sean más sostenibles y más inclusivos, en particular mediante el uso de soluciones basadas en la naturaleza, el acceso inclusivo a los alimentos y una mejor mitigación de los riesgos.
El responsable de la CEPAL detalló que la incidencia de la pobreza “también es más alta entre las mujeres, la población indígena y las personas que viven en zonas rurales”. José Manuel Salazar-Xirinachs señaló que los datos revelados significan que “casi un tercio de la población de la región vive en situación de pobreza, porcentaje que se eleva a 42,5% en el caso de la pobreza en república dominicana 2022 población infantil y adolescente, una realidad que no podemos tolerar”. El informe destaca la importancia de comprender estos patrones para enfrentar con efectividad la pobreza. “En Lao, RDP, por ejemplo, las familias que no tienen acceso a combustibles para cocinar a menudo no envían a sus niñas y niños a la escuela para que, en cambio, se encarguen de recolectar leña diariamente.
Para resurgir fortalecidos de la disaster, en el corto plazo, es imprescindible recuperar las pérdidas de capital humano causadas por la pandemia, especialmente en la recuperación de aprendizajes, condiciones laborales y de salud. De cara al futuro, se necesitará actualizar los sistemas de protección social para responder a la creciente urbanización de la pobreza y a la vulnerabilidad ante nuevas crisis, que serán cada vez más frecuentes en el contexto del cambio climático. El panorama socioeconómico de América Latina y el Caribe no es alentador; los grupos de población más afectados son los niños y niñas menores de 5 años y las mujeres, pues sufren una mayor prevalencia de inseguridad alimentaria que los hombres. Unos 40 pobreza economica millones de personas se sumaron en un año al colectivo global que sufre inseguridad alimentaria aguda, alerta el informe anual sobre el tema. Por lo tanto, se considera que todas las personas que disponen de menos de USD 2,15 al día viven en la pobreza extrema.
Sin embargo, mil millones de niños sufren cada año alguna forma de violencia emocional, física o sexual. Y en lo que tardas en leer este texto, digamos cinco minutos, un niño muere cada siete minutos como resultado de la violencia. Millones de niños y niñas de todo el mundo, muchos de ellos solos o separados de sus familias, son desplazados por los conflictos armados. Como resultado, estos niños se encuentran en una situación de riesgo y vulnerabilidad extrema en – o alrededor – de campamentos y otras zonas de refugiados. Es necesario que se actúe con urgencia para aliviar la difícil situación en la que viven los menores desplazados por estos conflictos.
La tasa de homicidios de la región es tres veces el promedio mundial, y la mayoría de los asesinatos se perpetraron con armas de fuego traficadas desde los EEUU. Las ciudades más grandes, como Kingston en Jamaica y Puerto Príncipe en Haití, ocuparon el puesto 12 y 15 entre las ciudades más asesinas en 2023. Además del informe insignia sobre los ODS, Panorama de género 2023, ONU Mujeres, en colaboración con sus socios, produce de forma periódica la serie de documentos “Spotlight sobre los ODS”. Durante y después de un conflicto, es crucial brindar apoyo psicológico y psicosocial para ayudar a las personas sobrevivientes de violencia sexual y de género a …
La joven haitiana Rose Senoviala Desir sintió desde muy joven el deseo de ayudar a las personas más vulnerables. Haber recibido comidas escolares de la agencia de la ONU sobre alimentación y los veranos en la pequeña granja de sus abuelos influyeron enormemente en la elección de su carrera profesional. En Haití, en los primeros tres meses de 2021, el número de admisiones de niños con emaciación severa en centros de salud en el país aumentó en un 26% en comparación con el mismo periodo en 2020. Del mismo modo, enfatiza que el sobrepeso está aumentando entre los niños y especifica que, de acuerdo con los datos disponibles, de 2019 a 2021 la emaciación estuvo dentro del rango “muy bajo” para todos los países, menos Haití, donde se le clasificó como de gravedad “media”. Llamaron también a fortalecer un enfoque coordinado para garantizar que las actividades humanitarias, de desarrollo y de mantenimiento de la paz se lleven a cabo de manera holística y coordinada con el fin de impulsar la construcción de resiliencia y la recuperación. Asimismo, abogaron por promover cambios estructurales en la forma de asignar el financiamiento externo y realizar inversiones de desarrollo a mediano y largo plazo para que la asistencia humanitaria pueda reducirse con el tiempo abordando las causas profundas del hambre.
En su nuevo informe Panorama Social, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) explicó que esos números marcan una disminución de más de un punto porcentual con respecto al año anterior y se ubican a un nivel similar al de 2019, antes de la pandemia de COVID-19. Los 17 Objetivos de la Agenda se elaboraron en más de dos años de consultas públicas, interacción con la sociedad civil y negociaciones entre los países. Los esfuerzos contra la pobreza en las montañas del oeste de China incluyen enseñar a los niños y niñas de la minoría étnica Yi a hablar mandarín. En la imagen se ve a una mujer y varios menores parados al borde de una carretera en el condado de Ganluo, provincia de Sichuan, suroeste de China, el miércoles 9 de septiembre de 2020.
Más de 7000 trabajadores de la salud han fallecido por el COVID-19, mientras que se ha doblado el número de los que trabajan en casa. Para hacer frente a futuras emergencias como la planteada por el COVID-19, la agencia que vela por los trabajadores insta a implementar o fortalecer las políticas laborales de seguridad y salud nacionales, integrándolas a las medidas de respuesta a posibles crisis. “Sin un esfuerzo deliberado para acelerar la creación de empleo decente y ayudar a los miembros más vulnerables de la sociedad, y a la recuperación de los sectores de la economía más afectados, los efectos de la pandemia podrían prolongarse durante años en forma de pérdida de potencial humano y económico, y de mayor pobreza y desigualdad”, enfatizó. “Los cinco años de avance hacia la erradicación de la pobreza laboral se han perdido”, afirma la OIT y explica que la caída del empleo y de las horas de trabajo se ha traducido en una reducción drástica de los ingresos laborales y el consiguiente aumento de la pobreza. No es momento para cambios graduales, sino para políticas transformadoras y ambiciosas”, aseguró Salazar-Xirinachs.
Y, desde 2019, Nueva Zelanda cuenta con un presupuesto específico destinado al bienestar social y medioambiental de su población con el que busca que el mayor número de neozelandeses tengan la opción de ver cumplidas sus propias expectativas. “El índice de pobreza multidimensional nace del concepto de desarrollo humano, propuesto por Amartya Sen en los años ochenta, que habla del desarrollo como la libertad que tiene el individuo de poder acceder a aquello que quiere hacer. Es decir, existen más variables que te dan la libertad para ser lo que quieres ser”, explica Borja Santos, director ejecutivo de la School of Public and Global Affairs de la IE University. “El conflicto, la disaster climática, el COVID-19 y el aumento de los costos de los alimentos y el combustible han creado una tormenta perfecta, y ahora tenemos la guerra en Ucrania acumulando una desgracia sobre otra. Necesitamos urgentemente fondos de emergencia para sacarlos del abismo y revertir esta crisis mundial antes de que sea demasiado tarde”, apuntó David Beasley.
El sector privado tiene un papel essential que desempeñar a la hora de determinar si el crecimiento que genera es inclusivo y contribuye a la reducción de la pobreza. Por ejemplo, ha permitido el acceso al agua potable, ha reducido las muertes causadas por enfermedades transmitidas por el agua y ha mejorado la higiene para reducir los riesgos para la salud relacionados con el consumo de agua no potable y la falta de saneamiento. Esta falta de acceso igualitario a las finanzas es una barrera para salir de la pobreza en la que se encuentran muchas mujeres al impedir que tengan plena autonomía para tomar decisiones sobre sus propias vidas. Y es que las consecuencias de esas desigualdades no se limitan sólo al poder adquisitivo sino que repercuten también en el acceso a otros derechos como la salud, el agua y saneamiento, justicia o educación. Por ejemplo, la pobreza aumenta la posibilidad de no acceder a una formación básica, y al mismo tiempo, la falta de acceso a la educación también genera pobreza. De no tomar medidas necesarias, la ONU estima que al ritmo precise de progreso a hundred and ten millones de niñas y mujeres jóvenes no asistirán a la escuela en 2030 a nivel mundial.