Salud Mental En Chile, Determinantes Sociales De La Salud Y Desigualdad: ¿cuáles Son Los Alcances De La Ley De Protección A La Salud Mental?entrevista Al Diputado Gabriel Boric Font

Primero, en lo estrictamente médico clínico, tuvo éxito al aumentar la expectativa de vida de nuestra población hasta cerca de los eighty five años, en un lapso relativamente breve. A pesar de este enorme avance, mostró sus aspectos negativos y enormes debilidades con los cuadros crónicos, cuya evolución requiere como mínimo de 10 años para que aparezcan los primeros síntomas y signos clínicamente reconocibles, produciendo que cualquier tipo de acción médica sólo pueda enlentecer y excepcionalmente detener su avance, pero no desaparecerlos. ¿Qué pasó con el reconocimiento internacional por los éxitos en los resultados de los programas de salud pública del Estado de Chile? Aquella distinción que hacía de nuestro país un objetivo muy deseado por profesionales de la salud en busca de experiencias y formación reconocida en todo el planeta, ubicándonos a la cabeza de Latinoamérica y el mundo en programas estatales de salud. Los contenidos de la capacitación se centraron en la introducción a los conceptos de equidad y desigualdad social en salud, diversas métricas para análisis en la materia y cómo establecer metas nacionales en sanidad con enfoque de reducción de desigualdades.

Luego,  en una publicación posterior estos autores trabajan aún más este argumento enfatizando que las sociedades desiguales también están afectadas psicológicamente, puesto que sus habitantes sufren más de ansiedad, estrés crónico, depresión, adicción y trastorno bipolar. Además, muestran una alta correlación entre los diferentes patrones nacionales de desigualdad de ingresos y la adicción al juego, problemas de comportamiento en la niñez, trastorno bipolar e incluso “sesgo de autoestima”. La epidemiología tiene muchas ramas, pero en general es la disciplina investigativa que aporta evidencia científica a la salud pública.

Asimismo, sociedades más inequitativas tienden a tener peores resultados globales que las que podrían tener en un escenario de mayor igualdad. Un sistema de salud universal, eficiente, y equitativo puede amortiguar dichas desigualdades, incluso si éstas son consecuencia de profundas inequidades sociales. Nuestro sistema de salud divido, entre ricos y pobres, determinado por la capacidad de pago de las personas, actúa profundizando estas desigualdades. La alta prevalencia de trastornos mentales no sólo tiene un impacto en la calidad de vida de las personas, sus familias y comunidades, sino que también tiene un alto costo económico para el país.

desigualdad en la salud

El informe sostiene que la inequidad en las regiones es uno de los principales problemas en el pleno ejercicio del derecho a la salud en Chile. A esto se suman los problemas de cobertura específicos para diferentes grupos de población dentro de cada región, por ejemplo, pueblos originarios, personas con menos recursos económicos o migrantes. La posible insolvencia de algunas de estas instituciones produciría cambios abruptos en el sistema que no solo afectarán a sus usuarios actuales, sino que tendrían repercusiones en la totalidad del sistema de salud. Al abordar la desigualdad de ingresos a través de la práctica clínica, la promoción y las estrategias de fomento de la resiliencia, los psicólogos podemos contribuir a mejorar los resultados de la salud mental y promover la justicia social. Mediante esfuerzos de colaboración, podemos esforzarnos por crear una sociedad más equitativa en la que el bienestar psychological sea accesible para todos. Según Richard Wilkinson y Kate Pickett, dos epidemiólogos con residencia en Londres, en su libro Desigualdad (2009), argumentan que la alta desigualdad de ingresos en países se correlaciona con una peor salud física, niveles más altos de violencia y economías menos productivas.

Psicóloga en Associació per la Reeducació Comunitaria (ARC), y formadora en el “Servicio para la implementación y desarrollo de programas formativos y de tratamiento de violencias en el marco de la ejecución de medidas penales alternativas del Departamento de Justicia de Cataluña. A continuación, el informe indica que del subcomponente del gasto que se canaliza en los fondos de seguros de salud -que suma el 6,9% del PIB- un 2,4% del PIB está constituido por cotizaciones a fondos privados y gasto de bolsillo de afiliados a los seguros privados. Por otra parte, el financiamiento de los beneficiarios de FONASA concentra el four,5% del PIB, que incluye las cotizaciones, los gastos de bolsillo y el aporte fiscal. Otra fuente de financiamiento del gasto en salud en Chile son los aportes directos que hace el Estado tomando recursos recaudados por impuestos generales. Para la académica Marjorie Borgeat, el Centro de Imágenes también es un apoyo en esa línea y argumenta que “el acceso a exámenes complementarios en salud dental en población vulnerable, por supuesto que es importante, porque las radiografías odontológicas tienen un costo importante. Por ejemplo, la población infantojuvenil que derivamos a la especialidad de ortodoncia en el Servicio de Salud, tiene como requisito la radiografía panorámica, que tienen un costo que puede ir desde los $12 mil a $15 mil por radiografía.

Se necesita una mirada más amplia y estructural sobre cómo hacemos sociedad, cómo hacemos ciudad, entregamos cuidados, organizamos el trabajo y la educación. En este capítulo se estudia la cobertura de esquemas previsionales de salud y el uso de servicios de salud de la población inmigrante y se compara con la población native en Chile. Se encuentra que para un inmigrante la probabilidad de estar afiliado a algún esquema (Fonasa, Isapres u otros) es de alrededor de eighty por ciento para quienes llevan un año o menos en el país.

Tratamos de darle un poco la vuelta a cómo repensar los marcos teóricos, cómo darle vuelta a la metodología y cómo también un poco motivar a los estudiantes en ir un poco más allá de los simples datos y de los simples promedios que generalmente estamos mirando”. En conclusión, nuestro estudio muestra un panorama general de las diferencias de género en el impacto psicológico de la pandemia en Chile. En este contexto, la pandemia intensificó brechas de género ya presentes en la salud mental y en el mercado laboral. Esta disparidad está fuertemente asociada a la mayor fragilidad económica de las mujeres, y al aumento en las tareas en el hogar y cuidado de niños. Estos resultados apuntan a una acumulación de vulnerabilidades, ya que los roles tradicionalmente asociados a cada género y la fragilidad económica se combinaron creando mayores desafíos para las mujeres durante la pandemia en 2020.

La epidemiología investiga desde cuestiones moleculares hasta cuestiones sociales en niveles micro, meso y macro. La epidemiología social justamente trata de entender la distribución de la salud y la enfermedad desigualdad en la salud en la población, en función de condiciones que se construyen socialmente. Miramos desde los modelos de estado de bienestar hasta la forma en que se hace ciudad, el trabajo o cómo se organiza el cuidado.

2 Hubo diferencias en la calificación de los efectos de los fallos incluso dentro de la misma Corte Suprema. En efecto, seis meses después de dictadas las sentencias, la ministra de la Corte Suprema Angela Vivanco, reabrió la discusión sobre el alcance de los fallos al sugerir que la devolución de excedentes solo se aplicaría a quienes presentaron demandas. Lo que fue abordado por la Corte Suprema en enero de 2023, en respuesta desigualdad en los ingresos al recurso de aclaración presentado por la Superintendencia. En agosto de 2023 la tercera sala de la Corte Suprema falló –de nuevo con alcance general– dejando sin efecto el alza de la prima GES. Para ello, fijó un tope de 7,2 UF anual, conforme a lo calculado en el Estudio de Verificación del Costo de la Universidad de Chile (Ministerio de Salud 2021), cifra menor a la que consideraron la mayoría de las ISAPREs.

Una importante dimensión de su aporte ha sido desarrollar centros de investigación y laboratorios que generan conocimientos en los temas prioritarios de salud en cada territorio. Asimismo, las universidades regionales integran sus actividades de formación e investigación con los programas de extensión y vinculación con las comunidades de su entorno. Los autores plantean que la esperanza de vida coincide con un patrón geográfico claro al interior de la ciudad, evidenciando la segregación socioeconómica y de nivel de salud en Chile. Se observó que la mayor esperanza de vida se concentra desde el centro y hacia el oriente de Santiago, con una expectativa de hasta 17,7 años más en estas zonas favorecidas. La implementación del aborto por plazos, que establezca una edad gestacional límite como ocurre en otros países, sería una oportunidad de hacernos cargo del aborto inseguro, que representa una carga desproporcionada para las mujeres y para el sistema de salud.

Por ejemplo, hemos identificado que de los 177 hospitales públicos que atienden a múltiples patologías, 112 de ellos presentan una cobertura geográfica limitada a su entorno local en un 82%, lo que significa que no están atendiendo adecuadamente a la población que reside en una comuna distinta a donde está ubicado el hospital. Esto se debe en parte a la falta de equipamiento clínico y médicos especialistas en estos hospitales. Esta información es crucial para estructurar un sistema de referencia y contrarreferencia efectivo para el acceso a camas hospitalarias, donde a menudo lo más importante no es la complejidad del centro médico, sino simplemente su existencia.

Por lo tanto, es esencial una comprensión integral de las experiencias de los pacientes y la interseccionalidad de los diversos determinantes sociales de la salud. Por otro lado, abordar las consecuencias de la desigualdad de ingresos requiere un enfoque multinivel y multidisciplinar que mix la terapia individual con la defensa de un cambio social más amplio. Los psicólogos clínicos podemos colaborar con los responsables políticos y administrativos, las organizaciones comunitarias y otros actores relevantes para abogar por políticas destinadas a reducir la desigualdad de ingresos y promover la justicia social.