Mientras que las tasas de educación y alfabetización están aumentando en todo el mundo, no queda claro si se está disminuyendo la desigualdad educativa. Por eso, hay necesidad de aumentar la educación en los sectores en crecimiento como la tecnológica y habilidades sociales específicas adaptables al mundo que actualmente se necesita movilidad ocupacional. A tres décadas de su promulgación, el documento basado en el principio de la eliminación de prejuicios vinculados a condiciones físicas, intelectuales, sociales, emocionales y lingüísticas, se ha convertido en un punto de referencia para adaptar las metodologías de enseñanza. Una cualidad que ha permitido flexibilizar su aplicación, ofreciendo cabida integral a las necesidades del mundo estudiantil.
Los resultados apuntan a factores clave a nivel individual, escolar, familiar y comunitario que ayudan al éxito escolar en estos contextos. Se evidencia que el acompañamiento socioeducativo de agentes del entorno y el capital social del barrio, así como las relaciones de conianza o la personalidad responsable, son elementos determinantes que podrían compensar hándicaps socio-económicoculturales de los alumnos. Estos primeros hallazgos abren nuevas perspectivas de mejora de las políticas educativas de equidad e inclusión. La violencia escolar debe comprenderse en su relación con las personas, organizaciones y culturas que la enmarcan. Resulta interesante conocer la perspectiva de los niños y niñas de enseñanza primaria al respecto, especialmente en los segmentos sociales marginados y vulnerados por condiciones de injusticia y pobreza, cuyas voces suelen estar menos representadas en la cultura escolar.
“En el mes de abril se realizará una presentación internacional desde Roma, y en mayo esperamos realizar un webinar con el equipo de investigadores, el que esperamos difundir conjuntamente con la Dirección de Vinculación con el Medio”, adelanta Juan Pablo Faúndez Allier, Director del Programa de Ciencias para la Familia de la Facultad Eclesiástica de Teología PUCV. A través del Programa de Ciencias para la Familia de la Facultad Eclesiástica de Teología, la PUCV es una de las catorce instituciones a nivel mundial que forman parte de este estudio, liderado por el Family International Monitor y el Pontificio Instituto Juan Pablo II para las Ciencias del Matrimonio y la Familia de Roma. La charla “Educación y pobreza” fue moderada por la Directora de Desarrollo Estudiantil UGM María Jesús Andrade, y contempló como expositores a Liliana Cortés, Directora Ejecutiva de la Fundación Súmate del Hogar de Cristo, y Andrés Millar, trabajador social y catedrático de Formación General de Pobreza y Exclusión Social en la PUC. Un aspecto clave para sostener la efectividad escolar es garantizar un alto grado de estabilidad en la orientación del trabajo del equipo directivo, cuestión en la cual tiene mucha incidencia el propietario del establecimiento escolar.
Los sistemas educativos deben procurar recursos financieros y no financieros para los alumnos de menores recursos para asegurar que todos los alumnos gocen de altos niveles de aprendizaje. En adición, es igualmente importante responsabilizar a las escuelas por sus resultados académicos. Las pobreza economica capacidades de las familias para llevar a cabo su cometido educativo no están equitativamente distribuidas, puesto que la pobreza, el nivel educacional de madres, padres o cuidadores, y su capital social influyen en el desarrollo y el desempeño escolar de niñas, niños y adolescentes.
El gobierno chileno intentó implementar un subsidio por estudiante (voucher), pero según investigaciones de expertos chilenos e internacionales, esto no tuvo éxito porque reforzaba la segregación escolar, ya que las escuelas privadas podrán admitir estudiantes por preferencia y ganancias, mientras que las escuelas públicas no podían hacer lo mismo y estaban sujetas al estatuto más rígido. La desigualdad educativa es provocada por las diferencias en las oportunidades formativas que afectan las condiciones de vida a futuro. La educación es un derecho, pero no todas las personas tienen el mismo acceso a la misma calidad. Diversos estudios concluyen que la desigualdad educativa está directamente relacionada con la clase socioeconómica y al nivel de acceso a oportunidades (ante condiciones socioeconómicas deprimidas, menores oportunidades y viceversa). Así, la educación perpetúa las desigualdades que surgen con la clase social, el género, y el origen étnico.
La OCDE destacó la iniciativa por su foco en sectores vulnerables, su funcionamiento horizontal, la transferencia de conocimientos y la atención en innovar en educación para mejorar las condiciones de igualdad y equidad. En 2017, la Red de Escuelas Líderes fue destacada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE, como uno de los 27 proyectos que inspiran la mejora educativa a nivel mundial, esto dentro de su Plan Innovative Pedagogies for Powerful Learning, IPPL. La Red de Escuelas Líderes nace en 2007 a partir del interés de identificar y dar a conocer buenas prácticas docentes y directivas. A lo largo de las 288 páginas del texto, los datos levantados por el Programa de Ciencias para la Familia de la Facultad Eclesiástica de Teología PUCV son puestos en perspectiva con la realidad de países tan diferentes como Benín, Kenia, Sudáfrica, Brasil, Haití, México, India, Líbano, Qatar, España e Italia.
La escuela de la modernidad implica también un encuentro con otras formas de ver la vida que ya autores del campo como Comenio (1988) señalan como positivo del espacio escolar el aprender a vivir con otros códigos sociales y culturales entre pares y con otros grupos etarios. Persiste esta posibilidad que da la escuela, no sólo de enseñar y aprender conocimientos académicos, sino formas de estar con la diferencia y aprender otras formas del cuidado de la vida, por ello su cierre temporal, su realización a distancia y en la familia representa un rasgo de la crisis que actualmente vivimos. Importa señalar esto como parte de las posibilidades que colocan una mirada humanista y no sólo eficientista como fue el modelo anterior. Ello abre posibilidades en la gran complejidad de sus procesos de negociación para su implantación. Asimismo, esta reforma se planteó la revalorización de la formación docente y transformaciones curriculares y que favorecen los principios como la libertad, la justicia, la dignidad y valores derivados de los derechos humanos.
Además, en los países desarrollados, solo un 75% de niñas y niños de familias más pobres se gradúan de las instituciones de educación secundaria, mientras que un 90% de los niños de familias ricas se gradúan. Si una buena educación es más accesible a los más ricos de la sociedad, eso crea más desigualdad en el futuro ya que las personas ricas se seguirán asociando con otros ricos y obteniendo los trabajos más lucrativos mientras las personas pobres continuarán siendo pobres y permanecerán en la sociedad, completando un ciclo de la pobreza debido a la desigualdad educativa pobreza extrema onu y social. “No creo que el sector público tenga que estar a cargo de todas las escuelas, pero prácticamente todos los sistemas de educación de alto rendimiento tienen una visión educativa coherente que se extiende a todas las escuelas y tiene la capacidad de movilizar y asignar recursos en todo el sistema para que cada estudiante pueda beneficiarse de un excelente aprendizaje –afirmó Schleicher-. Más importante aún, la educación pública puede atraer a los profesores más talentosos a las aulas más desafiantes y a los directores más capacitados a las escuelas más difíciles.
El estudio contó con el consentimiento informado de la dirección del establecimiento, así como de los profesores y de los apoderados de los estudiantes que participaron. Todos los estudiantes y apoderados de la institución escolar fueron informados sobre el proyecto de investigación mediante comunicaciones masivas en reuniones. A los estudiantes seleccionados, previo a la entrevista, se les solicitó su asentimiento para grabar y analizar la información, comprometiendo el anonimato y la confidencialidad. Para respetar dicho compromiso, el materials fue cegado en su transcripción, omitiendo nombres propios. La situación de vulnerabilidad social ha simbolizado al conjunto los sujetos posicionados en necesidad de asistencia y de apoyo social (Bonal & Tarabini-Castellani, 2013; Grinberg et al., 2014; Infante et al., 2011; León, 2011; Llóbet, 2006; Villalta et al., 2011; Villalta & Saavedra, 2011). En el caso de Chile, se ha transformado en un mecanismo de integración, que explicita la injusticia en la distribución socioeconómica (Julio, 2009).
Se utilizó la entrevista para comprender cómo llevan a cabo la articulación curricular y la didáctica de la enseñanza de la lectura entre los dos niveles y las razones de por qué lo hacen. A través del Análisis Temático de la información, se evidenció una precaria articulación curricular y didáctica entre ambos niveles, con baja consideración del contexto donde enseñan, y basada en conocimientos desactualizados de los docentes. Si se observa lo que ocurre en los sistemas educativos exitosos de países más desarrollados, lo anterior queda de manifiesto.
“Las escuelas cuya efectividad se ha mantenido en el tiempo se caracterizan por un fuerte foco en los procesos pedagógicos y en el logro de aprendizajes”, asegura el estudio del CIAE. Esto se materializa en un intenso trabajo de planificación de clases y de seguimiento de los procesos de aula, con fuertes grados de coordinación y trabajo colectivo docente. Escuelas efectivas en sectores de pobreza, diez años después”, publicado a fines de 2015, presenta los resultados de un nuevo estudio de aquellas mismas 14 escuelas, realizado por el CIAE (Centro de Investigación Avanzada en Educación) de la Universidad de Chile, con la colaboración de varios autores de la investigación inicial. Su estructura geológica asentada en el Cinturón de Fuego del Pacífico, unido a los movimientos tectónicos y diastróñcos, le otorgan una perenne condición sísmica, sin embargo, nada es comparable a la fractura ocurrida en el tiempo de dictadura, que abarca todos lo ámbitos de la sociedad y produce consecuencias que signan, irremediablemente, el curso de su historia.
En cualquier análisis sobre Chile es necesario considerar su condición colonial, impronta de su historia; para el caso de la política educativa, parece válida la pregunta respecto de si esta condición constituye una estela o, más bien, se trata de un estigma para su posterior desenvolvimiento. Invasión, Encuentro, Descubrimiento, constituyen tres conceptos que desde diferentes ideologías han caracterizado el vínculo que entre dominadores y dominados se establece en Chile, tras la llegada de los españoles. Vergüenza, impotencia y culpa son sentimientos que manifestaron los estudiantes que recibían maltrato físico y verbal de parte de otros compañeros. A la vez que percibían desamparo ante la violencia escolar, asumían la responsabilidad de que la situación persistiera, por no saber manifestar su propio malestar y su necesidad de cambio.
Para ello, el estudio profundiza en la interacción entre aspectos del contexto, gestión escolar, política institucional, trabajo técnico pedagógico, docentes, cultura escolar y aprendizajes. Así, cursos comunitarios y escuelas interculturales con estudiantes indígenas en la educación básica (preescolar y primaria y secundaria) y una enorme variedad en educación media superior derivan de políticas para la atención de la condición social, económica, política y cultural de la población en edad escolar. Así, extensión y diversidad presentan rasgos estructurales del sistema educativo nacional que desafía a las estrategias de manera inconmensurable en el contexto actual. Hace más de una década, como parte del trabajo de Unicef (Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia) en Chile, un equipo de investigadores estudió 14 escuelas del país cuyos estudiantes provenían de familias de bajo nivel socioeconómico y lograban altos resultados de aprendizaje. Escuelas efectivas en sectores de pobreza”, que hasta hoy cuenta con amplia difusión en programas de formación pedagógica, comunidades escolares y otros profesionales del campo de la educación. Sujetos, tiempos, espacios y medios se han modificado y cada uno requiere un análisis minucioso, no obstante, en su conjunto, colocan al límite las configuraciones hasta ahora conocidas.
Ello representó la pauperización de las condiciones en que se implanta la política en materia de EPJA. Este bajo compromiso del gobierno con la EPJA, se manifiesta hoy a pesar de lo que puede aportar a la educación en familia, la salud, el cuidado del medio ambiente, la educación comunitaria y es muy probable que los presupuestos continúen de esa manera en el marco de los impactos económicos de la pandemia. En esta coyuntura existe la oportunidad de reflexionar los modos en que se ha definido a la EPJA, sus campos, sus procesos, espacios, sujetos. Esta revisión crítica permite identificar relaciones favorecedoras que pueden tener las lógicas de la educación no escolar al interaccionar, como lo hace ahora, con los procesos, contenidos y sujetos escolares. Sin embargo, actualmente se trata de una relación construida desde otras coordenadas de lectura que no sea la imposición cerrada de una sobre la otra, sino que permita redefinir las interacciones educativas en espacios muchas veces definidos como no formales con los formales, que realmente son escolares y no escolares. La relación familia y escuela fue vista como un apoyo de la primera para los procesos de la niñez y de la propia institución escolar.