Programa Protección A La Vejez En Pobreza Extrema Provee

resultado de esfuerzos de diversos niveles de gobierno (Razo-González, 2014, Águila et al., 2013). El envejecimiento de la población de Puerto Rico es uno de los mayores retos que enfrentamos como sociedad. Este grupo poblacional está compuesto en su mayoría por féminas, tienen un menor nivel de escolaridad y en complete reportan ingresos menores a $15,000 anuales. Es decir, una gran parte de los adultos mayores en Puerto Rico vive en la pobreza, carente de los recursos necesarios para cubrir necesidades básicas de vivienda, alimentación y servicios esenciales de electricidad y agua potable.

pobreza en la vejez

En Las Condes alcanza un 94% las compras, mientras un 77% sostiene que cocina y/o realiza labores domésticas, mientras en Recoleta el 94% realiza como actividad más frecuente la relacionada a las labores domésticas mientras un 84% se indica realiza compras al menos una vez a la semana. Las desigualdades económicas (de ingresos) sin dudas median el tipo de labor que realizan con más frecuencia, pero sí resalta en ambos casos el bajo nivel de presencia en el mercado laboral, esto debido a la condición de vejez. Este dato expresa cómo si bien otras variables como nivel educacional, ingresos, dan cuenta de una desigualdad de clase, la condición vejez unifica y re-enclasa3 a este grupo en una nueva matriz de producción de desigualdad persistente.

Pertenecer a otro hogar, que puede ser ampliado, compuesto o corresidente, solo resultó significativo en los ingresos por donativos y por trabajo. La edad no resultó estadísticamente significativa en los modelos de ingreso por pensión y donativos. En el resto de las estimaciones se encuentra que si se incrementa la edad en un año, la probabilidad de tener ingresos por beneficios gubernamentales aumenta, con em de 0,014, en tanto que la probabilidad de recibir ingresos por trabajo se cut back, con em de -0,017. González-González y Wong (2014) también entienden que la edad se asocia negativamente con la participación en el mercado de trabajo. Es de notar que las variables situación conyugal sin pareja; lengua indígena; clase de hogar ampliado, compuesto o corresidente; número de integrantes de once y menos años de edad, y alfabetismo no resultaron estadísticamente significativas en la regresión sobre seguridad económica en la vejez.

En relación con la autonomía, los resultados encontrados concuerdan con Quintana (1999), quien establece un parámetro funcional que ofrece diferencias entre los adultos mayores y sus estilos de vida, al dividir a las personas en tercera y cuarta edad. La tercera edad abarcaría a todas aquellas personas que desde los sixty five años conservan

bienestar private si continúan comprometiéndose en actividades sociales similares a las que hacía en épocas anteriores. Por lo tanto, la vida social y el bienestar private en el adulto mayor serán el resultado, en gran parte, del equilibrio entre los recursos personales y las estructuras situacionales. Asimismo, los adultos mayores varones en un rango de edad de seventy six años y más, que viven en compañía pero no tienen vida social activa, de estrato socioeconómico medio bajo o bajo, con educación básica, diagnosticados con alguna enfermedad, presentan 58% de posibilidad de tener bienestar personal.

Este indicador corresponde al porcentaje del flujo de ingresos durante el retiro, respecto a los ingresos durante la vida laboral activa. Para evaluarla se estima la tasa de reemplazo objetivo que refleja cuanto se requiere para que un retirado tenga cierto nivel deseado de consumo. No existe consenso sobre cuál es el best, sin embargo se considera que es menor del one hundred pc debido a que los niveles de consumo durante el retiro tienden a ajustarse a la baja (Villagómez, 2014). La vejez no es sinónimo de enfermedad, sino que puede ser una etapa en la que aumenta la prevalencia de enfermedades y el nivel de dependencia. Es un proceso en el que el individuo se vuelve más vulnerable debido al deterioro pure del organismo. 113Hay que recordar que las diferentes temáticas tratadas, algunas se han presentado aquí, conforman un zócalo desde el cual debemos lanzar nuevos interrogantes sobre el comportamiento de la población de la tercera edad.

Lo cual, según expertos, supone un avance y una mejora en la calidad de vida de los más vulnerables del país. Su proyecto de ley para reformar las pensiones, uno de los grandes programas de su ambiciosa campaña, fue aprobado por el Congreso colombiano el pasado 14 de junio. Mientras que la percepción de inseguridad aumento en 191 mil familias en 22 comunas de la Región Metropolitana. Por otro lado, el estudio expuso que la pobreza habría aumentado en cerca de 66 mil familias de 17 comunas de la capital, estas zonas se ubican principalmente en la zona centro y norte del Gran Santiago.

“Impactos del estallido social y la pandemia en el bienestar urbano”, se llama el sondeo realizado por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), donde se midió la reacción de la ciudadanía ante estos hechos ocurridos entre finales del 2019 y el 2021. El objetivo es garantizar su bienestar cuando sean mayores y ampliar la capacidad productiva de la economía. Como consecuencia, podrían peligrar los avances hacia la consecución de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), expresamente el número 10 sobre reducción de las desigualdades.

acceder a beneficios que, aunque similares, podrían resultar complementarios. 115En el área de la práctica, el aporte se puede extender a las políticas sociales y en specific aquellas que tienen como beneficiarios a las personas de la tercera edad. Lo que estas personas viven cotidianamente, sus redes y estrategias, son fundamentales de conocer para adecuar la intervención social y mejorar su calidad de vida. 100Esta situación adquiere rasgos propios al paisaje económico mexicano, que ha sido el objeto de hondas transformaciones económicas (desregulación laboral, privatizaciones, ajustes económicos) que han repercutido en el mercado laboral y en consecuencia en la vida laboral de las personas.

De acuerdo con el análisis de la información, la edad, la escolaridad, el género, el estrato socioeconómico y el vivir en compañía, no se consideran factores que contribuyan a predecir o mantener el bienestar en los adultos mayores. Los resultados del análisis estadístico indican una relación predictiva significativa de la vida social, la autonomía y la salud con el bienestar private de los adultos mayores. Los estudios nucleados alrededor del tema maltrato parten de una realidad, las diversas y numerosas expresiones de maltrato hacia adultos mayores, así como su ocultamiento e invisibilización. El reconocimiento del maltrato hacia otros grupos vulnerables como los niños/as y las mujeres, cuenta en la sociedad chilena con una mayor representación en términos de imaginarios que el maltrato hacia las personas mayores (Abusleme,2013).

casos, deseos de no vivir más (Bazo, 1990). El resto usará sus fondos en algún emprendimiento o como mostró Mariano Bosch y sus colegas del BID en un estudio del año 2020 otros lo gastará rápidamente o invertirá “en vehículos con retornos menores a la inflación”. Por ello, es perfectamente entendible la decisión de los ciudadanos mayores de sixty five años de generar o complementar ingresos, algunas veces a partir de otras rentas o transferencias familiares, pero en la mayoría de casos a partir de una búsqueda activa de opciones laborales. Por lo tanto, no hay certeza de si la restricción de acceso a beneficios para evitar la duplicidad de beneficiarios en programas parecidos en los diferentes niveles de gobierno puede gestar una nueva vulnerabilidad al dejar de

La marginación estructural a la que son sometidas las personas mayores tienen en su base una interpretación de esta etapa de la vida en términos de dependencias, desvalorización. Sin considerarse que probablemente una de las pérdidas fundamentales impuestas socialmente a las personas pobreza extrema mundial mayores es precisamente el de su valor como sujetos productivos en toda su dimensión y no solo económica. Esta es una de las principales formas de expropiación a las que como Sociedad, Estado, Mercado, Familia, sometemos consciente o inconscientemente a las personas mayores.

45Aunque el autor escribe desde otro contexto mundial, los puntos no parecen estar alejados de las necesidades que desde México se imponen en la agenda de investigación sobre la vejez y el envejecimiento de la población. La dependencia de lo económico, como se señala, cristaliza la preocupación de la pobreza estructural ejemplos opinión pública sobre la vejez vista exclusivamente como un problema, que va más allá de la construcción de una problemática social compleja y dinámica. En esta tónica las nociones utilizadas rotulan a la vejez como una locura, o degradación, muy en sintonía con los primeros avances de la Geriatría.

Además, en el largo plazo, la propia transición demográfica hace más probable la situación de abandono en la vejez o por lo menos la contracción de redes de soporte acquainted. Por consiguiente, el derecho a una pensión en la vejez en México corresponde a una serie de modalidades que se relacionan con la trayectoria de vida laboral de las personas, de manera que son diversos los sistemas de pensiones a los que los adultos