10.c De aquí a 2030, reducir a menos del 3% los costos de transacción de las remesas de los migrantes y eliminar los corredores de remesas con un costo superior al 5%. 10.5 Mejorar la reglamentación y vigilancia de las instituciones y los mercados financieros mundiales y fortalecer la aplicación de esos reglamentos. Ciertamente hay muchos otros aspectos a considerar, si se tiene en cuenta la devaluación de la institucionalidad política, el empoderamiento de las comunidades y los cambios que trae consigo la automatización del empleo y la revolución digital. Es tarea de todos contribuir a superar los obstáculos y aspirar a un país más justo, próspero y solidario.
En estos párrafos, se busca hacer una descomposición un poco más profunda de evidencia nacional sobre desigualdad para entregar perspectivas acerca de la concentración de ingresos, su dimensión territorial y su eventual rol en el conflicto social. Las desigualdades también están aumentando para las poblaciones vulnerables en países con sistemas sanitarios más deficientes y en países que se enfrentan a crisis humanitarias existentes. Por eso, generalmente, éstos representan porcentajes acotados de la recaudación agregada.
El ausentismo y deserción escolar implican pérdidas de oportunidades duraderas y prolongadas, que afectan el desarrollo y el aprovechamiento de las oportunidades educativas, otro issue contribuyente a la desigualdad. Distancia, falta de transporte, enfermedades frecuentes, vestimenta inadecuada, falta de útiles escolares, inadecuadas en las poblaciones vulnerables. La desigualdad educativa empuja a muchas niñas y niños fuera de las aulas escolares, haciéndolos vulnerables a la explotación al entorno legal e incluso en casos extremos, al tráfico de personas. Para hacer seen este problema, desde Good Neighbors Chile hemos preparado una recopilación de datos alarmantes sobre la desigualdad educativa y la pobreza en Chile. Se sugiere trabajar con este video durante el desarrollo de la clase, como insumo que permita a los estudiantes identificar los riesgos que implica para la democracia la desigualdad social y en qué aspectos de su vida cotidiana lo ven reflejado.
Para Chile, existen diferentes estimaciones de la porción de los ingresos que se lleva el 1% más rico, que varían dependiendo de los datos disponibles, supuestos metodológicos, y correcciones hechas por evasión y elusión. El estudio de Flores, desigualdad estructural ejemplos Sanhueza, Atria y Mayer encuentra una concentración en torno al 24% usando datos tabulados. Fairfield y Jorrat usan microdatos administrativos de 2005 al 2010 y, ajustando por evasión y elusión, encuentran cifras en torno al 33%.
En cualquier caso, lo cierto es que desde lo más profundo de la crisis en 2010 la esperanza de vida se ha incrementado en 14 meses hasta eighty,5 años de media (con un techo de 84,2 en Japón y un suelo de seventy four,6 en Colombia), y ha subido en los 35 países del estudio. Espacio Público es un centro de estudios independiente que busca aportar en la construcción de una sociedad más justa, transparente y democrática, que permita un desarrollo económico, social y político que beneficie a todas las personas. Los escándalos de financiamiento irregular e ilegal de la política pusieron en el tapete la desigualdad en la política. El Congreso aprobó varias reformas ambiciosas para reducir la desigualdad política, cuyos frutos se irán notando, cada vez con mayor fuerza, en los años que vienen. La OCDE afirma que las autoridades deben entender cómo la gente forma sus percepciones, y para esto recomienda lograr una «mejor comprensión del apoyo público a las reformas».
Llama la atención que en ningún período de nuestra historia el coeficiente haya estado en un nivel comparable a los que muestran los países actualmente más desarrollados (figura 1). Esta persistencia en el tiempo contrasta con el avance de otros indicadores sociales y económicos, los que han permitido reducir significativamente la pobreza en el país. Una vez hecho el diagnóstico inicial, es imperativo generar herramientas más precisas y profundas que nos permitan complejizar los cuestionamientos que nos hacemos cuando nos referimos a la desigualdad.
Así fue parte del discurso que dio el Presidente Gabriel Boric en la ONU presentado el martes, en el que afirmó que Chile se encuentra entre los países más desiguales del mundo. Ante esto, El Dínamo conversa con distintos expertos considerando el coeficiente Gini, una herramienta analítica que suele emplearse para medir la concentración de ingresos entre los habitantes de una región, en un periodo determinado. Al realizar el mismo ejercicio pero considerando el 20% de los hogares con mayores y menores ingresos, el ratio es claramente menor. Sin embargo, el escenario no cambia demasiado al jerarquizar el territorio, al menos no para las regiones mejor y peor catalogadas anteriormente. El (Gráfico 7) demuestra nuevamente que La Araucanía y Los Ríos son los territorios más desiguales, seguida del Biobío y la Región Metropolitana, la cual sube al puesto número cuatro. Por su lado, con menor desigualdad destacan las regiones de Arica y Parinacota, Atacama y Antofagasta (las misma regiones destacadas en el ratio 10/10, pero en un orden diferente).
Sin embargo, estos impuestos representan una porción muy menor de la recaudación complete y, en explicit al impuesto a la herencia, su diseño no permite una implementación eficiente. Así, se puede decir que, en términos generales, los impuestos patrimoniales no son desigualdad infantil relevantes en Chile, tanto en términos de recaudación, como en progresividad o cuidado de la democracia. Evidencia reciente en Colombia sugiere que incluso en países con instituciones fiscalizadoras más débiles que las de un país desarrollado, estos impuestos pueden ser ejecutados de manera efectiva.
Si bien no es comparable con años anteriores, entrega un resultado más cercano a la realidad, ya que esta es una variable de gran impacto en la calidad de vida de la población chilena. La pobreza multidimensional en 2015 se vio afectada principalmente de las dimensiones trabajo y seguridad social y educación (31,1 y 25,8% respectivamente). Un resultado de estas características, ya sea que se trate de una realidad a firme o de una percepción aumentada de esa realidad, lo permea y condiciona todo –desde luego a la política– sin que sea posible eludirlo o aislarlo en ninguna discusión relevante respecto de la trayectoria del desarrollo futuro del país. Agregó que los datos utilizados para medir la desigualdad son deficientes para cuantificar los niveles de concentración del ingreso entre los muy ricos. Las encuestas de hogares -las fuentes de información típicas de los indicadores de desigualdad- no siempre captan bien los ingresos de los más ricos. Los hogares tienden a declarar menos ingresos de lo que realmente reciben, sobre todo, los procedentes de las rentas del capital.
Las desigualdades también están aumentando para las poblaciones vulnerables en países con sistemas sanitarios más deficientes y en países que se enfrentan a crisis humanitarias existentes. Los refugiados y los migrantes, así como los pueblos indígenas, los ancianos, las personas con discapacidad y los niños se encuentran especialmente en riesgo de ser excluidos. La desigualdad sería menos problemática si el lugar que ocupan las personas en el orden social fuese pasajero, sujeto a cambios durante el ciclo de vida o, por último, si la posición social de los hijos no dependiera de la de los padres.
La COVID-19 ha intensificado las desigualdades existentes y ha afectado más que nadie a los pobres y las comunidades más vulnerables. El motivo es que el Gini reportado periódicamente por los organismos internacionales no captura correctamente los ingresos de los individuos de más altos ingresos. Estos indicadores se basan exclusivamente en datos provenientes de encuestas de hogares (en el caso chileno, la encuesta CASEN), que no son representativas para los percentiles de más altos ingresos (es decir, muy rara vez una persona de altos ingresos aparece encuestada en la CASEN). Además, las personas de altos ingresos que sí son encuestadas, subreportan sus ingresos, ya sea porque no los conocen con exactitud o porque no desean hacerlos públicos.
Este año, bajo el lema «Smart Food por la Salud y el Planeta», la feria promete destacar por su interdisciplinariedad y conexión con la industria, ofreciendo un espacio para degustar, aprender y apoyar el talento joven en la creación de alimentos saludables. Así por ejemplo, los estadounidenses, italianos o canadienses dedican una media hora menos por semana que en 2010 a las relaciones sociales y en Bélgica más de forty minutos. La tasa de homicidios se ha reducido en un tercio desde 2010, también la mortalidad en carretera, las personas se sienten más seguras y dicen estar más satisfechas de su existencia. Tras Chile aparecía México con 0.forty six; Estados Unidos y Turquía con 0.39; Israel con 0.37 y Estonia, con 0.36; todos en el membership de las naciones más desiguales del mundo.