Para reducir la pobreza que aún afecta a Chile, así como la desigualdad, se requiere de buenos instrumentos que puedan identificar, cuantificar y caracterizar, de una forma precisa, a la población más susceptible del país, de manera de poder aplicar la política pública eficientemente. Bajo este criterio, el Ministerio de Desarrollo Social, encargado de la Encuesta CASEN, a partir del año 2013 utiliza una nueva metodología de medición de Pobreza por Ingresos, tomando en cuenta los nuevos patrones de consumo chilenos e imponiendo estándares más altos que se adapten al actual nivel de desarrollo del país. Asimismo, incorpora la medición de la Pobreza Multidimensional, siguiendo el ejemplo de países más desarrollados. Según un análisis de Oxfam, de acuerdo con datos de la UNESCO, en los países en desarrollo, niñas y niños de familias pobres tienen siete veces menos probabilidades de terminar la escuela secundaria (media) que niños de familias ricas.
La región de La Araucanía, siendo la más desigual en el año 2009, no es la que más ha reducido sus niveles de desigualdad, pero se encuentra dentro de las tres mejores. Las tres regiones del norte, Tarapacá, Antofagasta y Atacama, efectivamente fueron las regiones que iniciaron con los índices de Gini más bajos, logrando menores reducciones de desigualdad en el tiempo. Mientras que a nivel nacional no hay un gran cambio en la desigualdad en el último período, Tarapacá incrementó su desigualdad en más de un 6%, y por su parte Los Lagos la redujo en casi un 11% (metodología nueva). Estas diferencias son de gran relevancia para la política pública y de acuerdo con Contreras (1999), también para el proceso de descentralización.
aéreo y marítimo, a pesar de todos los aumentos en productividad, hay algo que avanza en sentido opuesto, la desigualdad y la pobreza. En el 2013, un año antes del discurso de Lagarde, Thomas Piketty publicó su libro Capital en el siglo XX, en el cual promueve la concept de que la concentración de la riqueza y su distribución desigual son fuentes de inestabilidad económica y social. La discusión sobre desigualdad llegó para quedarse, y ha sido protagonista en las exigencias del movimiento social.
Es más, la encuesta también muestra que sólo el 5,6% de los ingresos totales del 10% de hogares pobres viene del trabajo de sus integrantes (hasta 2017 era aproximadamente 40%), mientras que en el extremo opuesto los ingresos provenientes del trabajo cayeron muchísimo menos. Por ejemplo, en el 10% con mayores ingresos, bajaron sólo de 87 a 85,7% del monto whole recibido por esos hogares. El artículo se cierra analizando si se aplica a Chile la explicación que ha dado Thomas Picketty para el aumento exponencial de la concentración de la riqueza en los últimos 50 años en el mundo.
El nivel alarmante y preocupante de pobreza en Chile en diferentes ámbitos y factores (millones de Chilenos sin viviendas,personas residiendo en campamentos, con déficit y carencia de servicios básicos y sociales). Proponemos nuevos sentidos y enfoques para la política social de Chile basados en aprendizajes y reflexiones sobre la pobreza, vulnerabilidad y desigualdad. Realizamos investigaciones cualitativas en torno a temáticas de pobreza en las regiones de Chile que buscan incidir en políticas públicas. La economista Andrea Repetto reafirmó esta última concept, agregando que “la pobreza es muchas cosas, no solo falta de ingresos.
La reparación que requerimos como sociedad, implica escenarios de validación y reconocimiento social de las personas, sus familias y comunidades, así como también de sistemáticos ejercicios de dignificación, que pasan por el involucramiento activo de los afectados en las decisiones que les atañen y en las soluciones de sus problemas y desafíos. De ahí que si la libertad no puede ser ejercida por todos en una sociedad, no es verdadera libertad. Pero siendo más precisos aun, solo se puede hablar de desigualdad cuando se produce una desmerecida acumulación de desventajas por algunos en la sociedad. Lamentablemente, la acumulación de desventajas en salud, educación, trato, hábitat, ingresos, y otras, hoy afecta a millones de compatriotas, privándoles de la posibilidad de escoger la vida que quieren llevar. Más estratégicamente, se ha utilizado activamente la tecnología de la información y las comunicaciones (TICs) para desarrollar contenidos y aplicaciones, ampliando la oferta educativa a través de los medios de comunicación, apoyando a niñas y niños para que sean capaces de continuar y disfrutar su proceso de aprendizaje.
19Para ver las variables que componen las distintas dimensiones, revisar el informe de Vial (2017). Mac Clure y Calvo (2013) proponen una división administrativa basada en el actual estado del proceso de urbanización. Dado que las cifras iniciales de desigualdad en Chile son muy altas, los avances han sido lentos y se necesitaría de un mayor esfuerzo por parte del Gobierno para someter todas aquellas fuerzas que amplifican las desigualdades.
La Convención sobre los derechos del niño/a ha sido ratificada por 196 Estados Parte de la Convención. Ha sido uno de los tratados sobre derechos humanos que más rápidamente ha sido ratificado y a la que más países se han adherido. Uno de los Estados que aún no ha ratificado la Convención, pero que ha expresado su intención de hacerlo, es Estados Unidos.
En este texto abordo esta pregunta tratando de ser riguroso y apegado a los hechos, pero consciente de que, más allá de lo bien que podamos caracterizar tanto la desigualdad como el estallido social, establecer una relación entre ambos fenómenos es un ejercicio eminentemente especulativo. El ministro de Hacienda, Mario Marcel, destacó los resultados dados a conocer hoy de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica, Casen 2022, por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, donde se informó que Chile retomó la senda de descenso de la pobreza. 11Utilizan dos bases de datos, la Encuesta Nacional de Caracterización Socioeconómica (Casen) de 2003 y el Censo de Población y Vivienda de 2002. 8Estados Unidos por su parte, obtiene el puesto número diez, con un PIB per cápita 2,four veces superior al chileno. La desigualdad sería menos problemática si el lugar que ocupan las personas en el orden social fuese pasajero, sujeto a cambios durante el ciclo de vida o, por último, si la posición social de los hijos no dependiera de la de los padres. Al momento de aceptar la publicación de sus artículos, los autores deberán formalizar la cesión de derechos de autor a EURE, según las condiciones establecidas por la Revista.
Sin embargo, esta es una meta poco alcanzable bajo condiciones de alta desigualdad socioeconómica. Si bien la historia muestra que el sistema de mercado o capitalista ha sido una máquina de crecimiento económico, también propicia procesos de concentración de la riqueza, por lo que se requiere la acción distributiva de los gobiernos. Una sociedad de alta desigualdad es percibida por la población –o parte de ella– como una sociedad injusta. La crisis social que amenazó la institucionalidad del país en 2019 tuvo por sustrato un extendido malestar vinculado a condiciones de vida precaria, sensación de abusos y pérdida de confianza en las instituciones. Las sociedades capitalistas producen, como resultado de su lógica interna, diversas formas de desigualdad de poder. Por ejemplo, la concentración de las decisiones de inversión en una pequeña elite le entrega a esta última una capacidad de veto sobre la política económica, sobrerrepresentando sus intereses en el debate público.
A pesar de estas diferencias, son muy informativos y nos permiten hacer comparaciones entre los distintos territorios del país y su evolución en el tiempo. Acorde con la CASEN, los años de escolaridad promedio del país son 11, con una leve diferencia por género, 11,2 años para los hombres y 10,9 desigualdad estructural ejemplos en el caso de las mujeres. Esta diferencia, aunque pequeña, se ha mantenido en el tiempo y es el mismo comportamiento presentado por Barro y Lee (2010). Otros datos interesantes que nos entrega la CASEN en materia de educación, es la diferencia de escolaridad por lugar de nacimiento y pertenencia a una etnia.
2La Tabla del Anexo D resume los resultados de los indicadores presentados en el trabajo de Mieres (2019). En la actualidad, el 1% de las familias más poderosas acapara el 46% de la riqueza del mundo. El estudio fue presentado este mediodía por el ministro desigualdad en las ciudades de Desarrollo Social, Giorgio Jackson; junto a la directora del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, Lorena Flores; la subsecretaria de Evaluación Social, Paula Poblete; y el jefe del Observatorio Social de la misma cartera, Matías Cociña.