Menos Pérdida Y Desperdicio, Más Alimentos: Un Pilar En La Lucha Contra El Hambre, Julio 2020 Oficina De Estudios Y Políticas Agrarias

En efecto, enviar el proyecto a la Comisión de Relaciones Exteriores constituye una excusa, ya que en el fondo no tienen la valentía de manifestar ahora que están en contra del proyecto. Si hay una estimación negativa del uso de estos fondos, obviamente la recogeremos. La haremos nosotros mismos y estamos absolutamente dispuestos a evaluar una posible revisión de la contribución que se está haciendo. Según las estimaciones del Ministerio de Hacienda, la recaudación que se va a obtener por este concepto asciende a aproximadamente a 2 millones 800 mil dólares en el presente año y para el próximo representará una cifra similar. Ésa es la cantidad que aportaríamos en el evento de que el Senado apruebe esta iniciativa.

Habíamos pensado que iba a ser por seis meses; después, que sería por un año; pero, finalmente, se cree que durará un año y medio. No estamos hablando de 5 millones ni de 10 millones de dólares, sino que de 95 millones de dólares, de lo cual Chile recibe un retorno de las Naciones Unidas, pero de todas maneras le cuesta al menos 10 millones de dólares anuales. La diferencia radica en que nosotros estamos viendo que los soldados chilenos están ahí, atendiendo a los haitianos y gastando bien esos 10 millones de dólares; es decir, estamos viendo que, al menos, no se está perdiendo el total de ese dinero.

El proyecto en debate no va en detrimento de ningún otro programa de carácter social emprendido por el Gobierno, porque está vinculado a una tasa específica -la tasa aeronáutica- que se cobra a los pasajeros que realizan vuelos internacionales. ¿Cuál es la diferencia entre el aporte que estamos proponiendo y las acciones humanitarias individuales realizadas por Chile anteriormente? La diferencia radica en que éste es un aporte que se incorpora a un esfuerzo sistemático que está desplegando la comunidad internacional para enfrentar los temas de la pobreza en el mundo. Me extraña que el señor Senador -pese a la opinión que tiene de sí mismo, y a que muchos coincidimos en que es un hombre capaz e inteligente- no entienda que a lo mejor pude haber estado en un error respecto de la interpretación acerca de que un proyecto de ley vaya o no a una Comisión. Pero eso no constituye un acto de deshonor, como tan livianamente lo señaló aquí en su intervención. No cabe duda de que la participación en materias de importancia global obedece al interés nacional.

Biobío es la tercera región que muestra la mayor prevalencia de inseguridad alimentaria en el país, con un 14,3% de hogares en esa situación (datos encuesta Casen 2017). Delante de ella están las regiones de Atacama y Arica y Parinacota, con un 16,6% y un 15,5%, respectivamente. La revisión de todos los SOFI disponibles en la plataforma documental de FAO permite una mirada en retrospectiva del desempeño de nuestro país. En ellos se aprecia que entre 1990 y 1996 Chile redujo a la mitad la cantidad de personas subalimentadas. Sin embargo, desde ese punto de quiebre hasta ahora, el complete de subalimentados se ha mantenido intacto; como si un país completo se hubiese acostumbrado los últimos 20 años a contar con más de medio millón de personas en riesgo de pasar hambre. Efectivamente, si bien “hambre” e “inseguridad alimentaria” aplican en un mismo contexto, según FAO, la primera debe ser entendida como la sensación física de incomodidad o dolor, y la segunda responde al evento en que las personas no dispongan de acceso a suficientes alimentos —inocuos y nutritivos— para satisfacer necesidades y llevar una vida sana.

Por lo tanto, la tarea se encuentra incumplida y, de aquí al 2015, ciertamente seremos incapaces de reducirla al 50 por ciento, como lo propuso dicha Declaración. Finalmente, el Ejecutivo hizo una indicación para que dicho aporte fuera incluido en el proyecto de ley de Presupuestos de cada año para asegurar su financiamiento. En efecto, dado el carácter progresivo de la contribución, es coherente con la voluntad de repartir mejor los frutos de la globalización. En el plano internacional, la diferenciación de las tasas permite tomar en cuenta la especificidad de todos los países que implementen esta contribución, y en especial su nivel de desarrollo. Los países signatarios de dicha Declaración, reconocen que ninguna autoridad internacional dispone hoy día del poder de establecer contribuciones.

También hay metas concretas respecto de los medicamentos para combatir la malaria, si se toma en cuenta que hoy día cada 30 segundos muere un niño en el mundo debido a esa enfermedad, la que hace algunos años parecía estar en retirada o erradicada. Lo mismo ocurre en el caso de los medicamentos masivos para atacar la tuberculosis en África -allí todavía produce 2 millones de muertes anuales- y también en Asia y América Latina. En Latinoamérica hay naciones, como Haití, donde se presenta en condiciones muy graves. Señor Presidente , el proyecto que se somete a la consideración del Senado es muy simple. Sencillamente, se trata de una autorización a la Dirección de Presupuestos para aportar hasta el equivalente a cinco millones de dólares anuales a la Iniciativa contra el Hambre y la Pobreza.

Para evitar esa situación, la FAO llamó a ayudar a los cerca de 475 millones de pequeños agricultores de bajos ingresos con vistas a erradicar la pobreza y el hambre en el mundo, dos de los objetivos que la comunidad internacional se ha marcado para 2030. Es importante que éste sea un lugar donde se discutan las diferencias y donde los distintos sectores puedan expresar sus puntos de vista. Reconozco la legitimidad que tiene la Unión Demócrata Independiente para hacer su planteamiento, aun cuando pienso que es absolutamente primitivo.

Ayer hice presente que el programa Petróleo por Alimentos parecía notable, pero al final nadie fiscalizó y todos los involucrados terminaron procesados, porque se incurrió claramente en una exacción ilegal de los recursos proporcionados por distintos países. El Gobierno de Chile comprometió su aporte solidario en septiembre empresas con fines sociales de 2005, el cual consistirá en un recargo de 2 dólares en los derechos de embarque de pasajeros de vuelos internacionales, adicional a la tasa vigente. Por otra parte, con la finalidad de identificar nuevas fuentes de financiamiento para combatir la pobreza y el hambre en el mundo, en 2004 se convocó a la Cumbre de Nueva York.

el hambre y la pobreza

La directiva repite constantemente que los almuerzos comunitarios son sanos y que con tal de que las y los niños no dejen nada en el plato se las ingenian para tratar de ofrecer una colación a modo de postre. En un seminario desarrollado por el Ministerio de Agricultura el 16 de junio, Julio Berdegué, representante regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), se refirió en duros términos al momento alimentario que atraviesa Chile, advirtiendo que podríamos llegar “a un millón de personas que no tendrían cómo parar la olla”. —Viene gente de tercera edad de la población que está junto al campamento a buscar su plato de comida. Externos, abuelitos de una población establecida que vienen acá con su ollita. Sabemos que las pensiones de los adultos mayores son una miseria y en Las Gaviotas les abrimos las puertas —señala el líder de la toma.

Provengo de una vertiente humanista y cristiana, de manera que el valor de la solidaridad, la preocupación y el dolor que me produce lo que pasa a mi prójimo han sido y deben ser parte de mi vida cotidiana y de mi quehacer en la política. Lamentamos lo que está pasando en el mundo, lamentamos que haya esta hambruna y lamentamos que tengamos que dar esa plata, que, a lo mejor, se podría invertir en nuestro país; pero no podemos dejar desamparados a esos niños. Comparto con quienes no están de acuerdo con el proyecto, no con el fondo, sino con la forma como exclusión por pobreza se ha tramitado. Si me permite, señor Presidente , quiero señalar que efectivamente hubo unanimidad para suprimir el inciso segundo, el cual se estimó innecesario debido a que, según se explicó en la Comisión, diversas autoridades tienen la facultad para suscribir convenios o documentos. Y en esa resolución participaron, o el Senador señor Escalona , o el Senador señor Ominami , quienes concurrieron a la unanimidad. Donde no la hubo fue respecto de las indicaciones presentadas por la Oposición, que fueron rechazadas y que nosotros no hemos renovado.

En este caso, me parece que temas relacionados con la salud y la pobreza globales son incentivos válidos para discutir dentro de los espacios que nos competen, así como en su momento lo fueron aquellos asuntos atinentes a la seguridad internacional que nos han llevado a participar en Haití, en Chipre y en otras partes del mundo. Porque la seguridad internacional afecta a nuestro comercio, a las líneas de comunicaciones y, sustantivamente, al interés nacional. Lo relativo a nuestro aporte se refiere, por tanto, a la manera como apreciamos este fenómeno, que adquiere magnitudes inconcebibles hasta ahora -particularmente en el período industrial-, y que no está teniendo solución a nivel mundial. Lo señaló muy bien el señor Senador que me antecedió en el uso de la palabra; pero lo cierto es que los organismos que nombró, de los cuales conozco sólo 7 -no 10, como otros Honorables colegas-, son absolutamente irrelevantes en la actualidad… Sobre la base de la lógica nacional en el momento presente -lo vimos ayer con relación a los deudores habitacionales; lo vimos con el paro del día lunes y con las cuestiones de la salud-, aquí no sobra la plata. Si algunos señores Senadores de las bancadas oficialistas -quiero ser preciso- sostienen lo contrario, que lo expresen fuerte, entonces.

Entonces, si la FAO afirma que se necesitaría 60 por ciento más de alimentos para satisfacer la demanda en el año de 2050, mejor debería reflexionar sobre cómo distribuir la oferta de manera más equitativa. Con el apoyo del Gobierno de Chile y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan) ejecutará el proyecto «Fondo contra el Hambre y la Pobreza», que fue lanzado hoy con el propósito de paliar la crisis alimentaria en Guatemala, informó la Cancillería del país centroamericano.». Mientras cierran el turno de la olla común y desinfectan la cocina, las y los vecinos de los cerros de Talcahuano cruzan los dedos para que la estela de pobreza que dejó el terremoto y tsunami de 2010 no se repita una década más tarde con la pandemia. Con el fresco recuerdo del 27F, en Las Gaviotas, Héctor Romero sospecha preocupado que nuevas personas llegarán a pedir un lugar producto de la falta de ingresos.

Para ello se contextualiza la realidad de la infancia en la ciudad, la compleja relación entre infancia popular y la escuela y finalmente las organizaciones de auxilio de la infancia pobre y escolar. “El papel de la sociedad civil es essential para garantizar que todo el mundo pueda comer. Alimentarse no es un privilegio de la gente rica ni es una caridad que hacemos a la gente pobre.