Lo anterior, según las autoridades encargadas de la evaluación, se debió principalmente a una vaga definición de los beneficiarios del programa. La información que hoy tenemos sobre pobreza energética asociada a uso de leña es limitada. Sin embargo, lo que está disponible es suficiente para indicar que un porcentaje muy importante de los habitantes del centro-sur de nuestro país está sometido a condiciones desfavorables de acceso a la energía para lograr confort térmico en sus hogares. Como consecuencia, la población enfrenta una carga económica importante asociada a la compra de energía para calefacción, llevándola a preferir combustibles de mala calidad, pero a precio asequible, con múltiples consecuencias para la salud[12]. El estado de la vivienda es probablemente uno de los factores más relevantes en este análisis, en términos del impacto potencial que el frío, la humedad y la contaminación atmosférica puedan tener en la salud de las personas que las habitan y, por tanto, debería ser uno de los ejes para abordar el problema a mediano plazo. En conclusión, “el covid-19 y sus repercusiones socioeconómicas presentan una oportunidad para reconstruir mejor hacia el desarrollo sustentable e inclusivo”, enfatiza Bronfman.
En 2019, un cuarto de las personas de 65 años o más no percibía una pensión y los programas de transferencias condicionadas cubrían en promedio al 18,5% de la población de los países de América Latina y el Caribe. Como se observa en el Gráfico four, la participación de los hogares del primer decil en los ingresos totales a nivel nacional se triplica. También, como es de esperar, el impacto de las ayudas en términos relativos va decreciendo a medida que aumenta el decil de ingresos, beneficiando, en menor cuantía, hasta el sexto decil de ingresos autónomos. Lo anterior permite ver la progresividad del IFE y el resto de los beneficios, ya que son los sectores de más altos ingresos quienes más ven reducida su participación del ingreso complete, y dichos recursos fluyen hacia los sectores más vulnerables.
Con la intensidad del nuevo paquete fiscal para el año 2021 se logra revertir esa situación, consiguiendo que la desigualdad alcance mínimos históricos de forma momentánea. El IFE Ampliado, el cual fue entregado durante los meses de abril y mayo, se caracterizó por incluir a todos los hogares pertenecientes al 80% más vulnerable del RSH. En el caso del IFE Covid de los meses de enero, febrero y marzo, se utilizó la información de ciertas preguntas causas de la desigualdad economica de la encuesta CASEN para determinar los potenciales beneficiarios, en función de la fase del plan Paso a Paso en la que se encontrasen. De esta forma, de los hogares ubicados en comunas que estuvieron en cuarentena y transición para los periodos requeridos (ver Tabla 3), se consideraron como beneficiarios a todos aquellos encuestados que declararon haber recibido el IFE durante el año 2020, sin necesidad de verificar el cumplimiento de otros requisitos.
la limitación de la posibilidad de proveer materiales y ambientes estimulantes de un desarrollo positivo, a causa de la falta de ingreso. Pero, en las últimas décadas, han surgido definiciones más amplias de pobreza, que incluyen distintas dimensiones, ya que se concibe como
También existe un programa de reducción de las emisiones debidas a la deforestación y la degradación forestal (REDD+) por valor de USD 26 millones y una donación de USD 5 millones para la implementación de los mercados de carbono. Se han suscrito seis acuerdos de servicios de asesoría reembolsables por un whole de USD 8,seventy six millones que abarcan temas como género, salud, protección social, estadísticas nacionales y digitalización del transporte. Sin decirlo expresamente, su reflexión apunta a lo ocurrido en la pandemia, donde políticas de apoyo como el IFE fueron progresivamente aumentando en monto pero también expandiendo su cobertura hacia la clase media. Así, entre mayo y agosto, recibirán este apoyo todas las familias inscritas en el Registro Social de Hogares, exceptuando solo a las que tiene rentas per cápita sobre $800 mil mensuales. Pero todas las familias reciben el mismo monto, independientemente de su nivel de vulnerabilidad.
En el mundo, 250 millones de niños no alcanzan su capacidad de desarrollo, debido a condiciones de exclusión, pobreza y/o vulnerabilidad.
Distintas investigaciones muestran que interacciones parentales positivas, sensibles y consistentes pueden ser factores de resiliencia en contextos de adversidad. Es conocido el efecto de la contaminación del aire sobre enfermedades respiratorias, cardiovasculares y cánceres, particularmente en sectores socialmente vulnerables[1]. Existen antecedentes de que la contaminación atmosférica aumenta la tasa de incidencia y mortalidad de las enfermedades respiratorias. En 2002, el síndrome respiratorio agudo causado por un virus genéticamente similar al actual coronavirus tuvo una letalidad promedio cercana al 6,6% en ciudades de China.
Finalizan indicando que actuar de manera enérgica y sostenida desde las políticas públicas, es clave. Al igual que los paquetes fiscales recién mencionados, uno de los principales desafíos que fue evidenciado en los sistemas de seguridad social corresponde a fallas en materias de cobertura. Algunas de las experiencias de aprendizaje que se destacan son las de EE.UU y Francia, donde hubo un menor acceso a las prestaciones de seguridad social por parte de los grupos más jóvenes. También se evidenció este problema entre los trabajadores independientes, por lo que varios países, tales como EE.UU, Canadá y Bélgica, optaron por darle a este grupo acceso a seguros de desempleo, entre otras prestaciones, además de rebajas de impuestos o medidas similares a los préstamos solidarios implementados en Chile. El acceso a datos de ingresos representativos de la situación de los trabajadores también fue un problema en un conjunto de países pertenecientes a la OCDE, por lo que se tuvo que recurrir a las declaraciones de impuestos de años anteriores. Lo anterior, produjo que países tales como Reino Unido o Nueva Zelanda excluyeran a ciertos grupos debido al poco tiempo dedicado al diseño de las medidas.
Por este y otros motivos, en un futuro cercano existirán altos niveles de endeudamiento, ya que de acuerdo al Banco Central, en Chile la deuda, pre pandemia en los hogares, alcanzó un 75% de los ingresos disponibles anuales en 2019. Si bien la mayor parte de esa deuda corresponde a créditos hipotecarios, la siguen los préstamos de consumo. “Esto implica desafíos importantes de políticas públicas y también poner la prioridad en la recuperación de la actividad económica (…) Es clave en la recuperación del empleo femenino pensar en el tema de las escuelas y jardines. No politizando ni siendo irresponsables, sino que viendo opciones de políticas que apoyen en el cuidado”. La pobreza nunca se fue del todo de Chile, pese a que disminuyó en forma muy relevante en las últimas décadas, pasando del 68% de la población en 1990 al eight,6% en la última medición, de 2017, una disminución inédita en la región. Sin embargo, la pandemia del Covid-19 hizo que nuevamente este fantasma volviera a cobrar protagonismo, con la amenaza de volverse actual para muchas familias.
En relación a la pobreza, el año pasado alcanzó a nivel nacional un 9,8%, y este año podría ascender hasta eleven,9% en el escenario más favorable, hasta 12,7% en el medio y a 13,7% en el más negativo. “Las pandemias son como los desastres, como las crisis climáticas, los más afectados son siempre los más vulnerables, y en este caso, especialmente las mujeres, que se tienen que cepal pobreza quedar en la casa porque no solo hay menos empleo, sino porque los niños no pueden ir a sala cuna o al colegio”, señala Pérez. “La población más afectada es la población activa, es decir, jóvenes entre 18 y 29 años, y si se hace el análisis a grupos vulnerables como migrantes, se duplica. Aclarado esto, los resultados de la última Casen informan de un aumento tanto en la pobreza, como en la desigualdad.
Así contribuyen a pasar de ser sociedades basadas en la producción de bienes primarios, en las industrias extractivas, con poca cualificación de la masa laboral, a ser sociedades basadas en el conocimiento. En menos de tres meses Marco Navarro pasó de gerenciar una agencia de comunicación y publicidad a criar pollos y sembrar hortalizas en el patio de su casa de la ciudad ecuatoriana de Cuenca para pagar la hipoteca y el colegio privado de sus hijos y mantener el hogar. También empezó a padecer episodios recurrentes de insomnio, aunque no sabe si son producto de las preocupaciones económicas por la quiebra de la empresa o una secuela de la covid que afectó a su familia. La cantidad de gente en situación de pobreza en Chile subió del eight,6 % en 2017 al 10,8 % en 2020 debido a la pandemia de la covid-19, según cifras divulgadas este lunes por el Ministerio de Desarrollo Social, a raíz de los primeros resultados de la Encuesta Casen 2020. Familias que dejan la condición de pobreza y familias que vuelven a la condición de pobreza. Y esa es una foto de la alta fragilidad que hace muy difícil para ellas tomar decisiones de largo plazo”, agrega Contrerasa.
El documento revela que, a menos que se tomen medidas urgentes, el número de niños y niñas que viven en hogares pobres en los países de bajos y medianos ingresos podría aumentar un 15%. El incremento más considerable, de hasta un 44%, podría registrarse en los países de Europa y Asia Central, mientras que en América Latina y el Caribe podría producirse un aumento de un 22%. En Uruguay, en marzo de 2020, asume un nuevo gobierno y son anunciados los primeros casos de COVID. A partir de entonces fueron desarrolladas medidas planteadas para atender las consecuencias sociales de la pandemia. Algunas fueron a través de la seguridad social, básicamente en atención a las personas desempleadas.
A raíz de los problemas involucrados en la ejecución de la Encuesta CASEN, esta fuente de información sólo logra identificar a un 83% de los beneficiarios efectivos del IFE durante el año 2020. En consecuencia, al observar los requisitos del IFE para el primer trimestre del año 2021, se obtiene una subestimación de los beneficiarios que tuvieron el IFE estando en cuarentena, dado que no se logra identificar a todos los beneficiarios del IFE 2020. Además, la pobreza extrema llegaría a afectar a un whole de 83,four millones de personas, con lo que la cifra aumentaría 2,6 puntos porcentuales, equivalentes a 15,9 millones de personas. En la presentación de su tercer informe sobre coronavirus, titulado «El desafío social en tiempos del Covid-19», la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (Cepal) advirtió del crítico escenario que significará para para los países de la región el coronavirus en términos de pobreza, pobreza extrema y desigualdad.