La Pobreza Es Una Grave Vulneración De Los Derechos De Los Niños, Niñas Y Adolescentes

Con el gasto de consumo en caída libre, Europa entró en recesión a principios de año, lo que reforzó una sensación de relativo declive económico, político y militar que se inició a principios de siglo. Porque los pobres no tienen a donde volver la voz,

porque los pobres son pobres

No hay que ser un experto ni economista para tener claro el diagnóstico de que en Chile existe una inequidad galopante. ¿Cómo superar una brecha que parece ir agrandándose a medida que nuestra economía crece? La ecuación es clara, como la señala la ingeniero comercial y Master en Políticas Públicas de la Universidad de Chile, Silvia Leiva cuando afirma que “a mayor educación, hay más probabilidades de encontrar empleo y, por lo tanto, mayores probabilidades de mejorar ingresos. A mejor salud, en función del ausentismo laboral, hay mayor productividad que quiere decir que con más licencias médicas se tiene menos eficiencia”.

Chile debe ser capaz de garantizar los derechos y proteger las trayectorias de vida de todos los niños, niñas y adolescentes. Murphy y Nagel creen que esta es una razón para abandonar los criterios tradicionales de justicia en materia tributaria. Pero olvidan que debido a que el mercado es una realidad, es que necesitamos criterios de justicia tributaria que hagan posible evaluar la distribución del mercado. En países menos desarrollados, el IVA es instrumentalmente un mejor impuesto porque permite asegurar recaudación en economías informales o donde existe alto incumplimiento tributario. Chile hoy no tiene esos problemas gracias a diversos factores, entre los que se encuentran, un SII moderno y tecnológicamente avanzado, un sistema político e instituciones que no han sido destruidas –a pesar de verse afectadas– por la corrupción y que algo queda de una cultura de contribución. El IVA es un impuesto que permite asegurar recaudación, pero que necesariamente debe ir acompañado de un impuesto a la renta que permita balancear las fuentes del gasto público.

Posiciones de extrema derecha comprenden al mercado como un espacio de florecimiento private que “revela” preferencias personales. Desde esta perspectiva, problemas sociales estructurales (crisis climática, disaster salarial) se simplifican como asuntos individuales y vinculados a teorías de la conspiración (confabulaciones de “falsos chilenos” que provocan incendios o de una “casta gobernante” que malgasta los dineros públicos). Con estas simplificaciones, asuntos urgentes (como la realidad de vivir en una sociedad con trabajadores pobres) quedan desanclados de discusiones macro sobre las relaciones de poder que constituyen a la sociedad. La pobreza multidimensional corresponde al nuevo enfoque que contempla la Encuesta, y permite identificar la situación de pobreza en que se encuentran los hogares y personas que sufren carencias en los ámbitos de educación, salud, trabajo, seguridad social y vivienda; aspectos que afectan su bienestar y calidad de vida. El psicólogo se refirió a los niveles de desigualdad en nuestro país y cómo ello se hace aún más patente en medio de la disaster sanitaria y económica actual.”Esto lo ha confirmado el informe “Desiguales” del PNUD  de hace unos años atrás en el que se plantea que Chile tiene una deuda gigantesca respecto de la desigualdad. Eso afecta la vida de las personas y determina muchas veces el ciclo de la vida de la gente, e incluso a las familias por generaciones.

La relevancia viene dada porque son precisamente estas personas que concentran altos niveles de ingresos, quienes adicionalmente ejercen una influencia importante en las decisiones y en el diseño de políticas que finalmente los terminan favoreciendo a ellos mismos. Según un estudio del COES (2018), la mayor cantidad de conflictos sociales por habitante se producen en las regiones donde el índice de desigualdad es igual o superior al promedio nacional. Según el cálculo exploratorio propuesto por los autores, y considerando el carácter multidimensional de los orígenes del conflicto social, “reducir la desigualdad de Chile de zero,forty nine a zero,forty three (GINI) podría significar una reducción de cerca de 18% en los conflictos a nivel nacional”. Para medir pobreza monetaria, se establece una “línea” mínima de ingresos, a partir de la cual todo ingreso inferior ese “umbral” se considera insuficiente para satisfacer necesidades básicas. Una persona puede encontrarse por encima del umbral de la pobreza monetaria, y aun así presentar carencias significativas en ámbitos como salud, educación o vivienda, por mencionar algunos. De ahí la importancia de medir ambas pobrezas, ya que la multidimensional evalúa directamente la satisfacción de necesidades agrupadas en distintas esferas del bienestar.

En México las cifras oficiales sobre la pobreza y el desempleo muestran una cara maquillada, sin embargo, la realidad muestra otra cara, más cruda, más presente, más real. El pobre es Carmen, madre soltera que tiene que trabajar en lo que encuentre para mantener a sus tres hijos y que además es analfabeta; es Johnny, indocumentado hondureño que tiene que exponer su vida atravesando México, ya que ha preferido correr ese riesgo que morir de hambre o de violencia en su país. Y así podríamos citar muchos nombres, con rostros concretos, cuyas historias escapan, la mayoría de las veces, a los números oficiales, que buscan maquillar cifras. Consideramos por lo tanto que la lucha contra la pobreza es el mayor reto que tenemos que enfrentar las sociedades en la actualidad. Un desafío para la humanidad que debe encontrar en la ética la semilla que haga surgir tanto en políticos, religiosos, economistas, y sociedad en general, una nueva manera no tanto para ver sino para escuchar el clamor y el hambre del pobre (Cortina, 2017). El indicador en sí, se compone a su vez de indicadores agrupados en cada una de las cuatro dimensiones que forman el indicador ultimate, y cada uno de estos indicadores tiene igual ponderación en la medida multidimensional.

Para tratar de demostrar cómo el cambio hacia una sociedad más justa y fraterna comienza con el cambio en uno mismo, que hemos llamado “conversión” al otro, hemos dividido nuestro trabajo en tres apartados. Los avances en cuanto a la reducción de la pobreza han sido notables en las últimas décadas. El mundo logró la meta del primer objetivo de desarrollo del milenio (ODM) de disminuir a la mitad para 2015 la tasa de pobreza registrada en 1990, y lo consiguió en 2010, cinco años antes de la fecha prevista. Pero pese a este logro, la cantidad de personas que vive en condiciones de pobreza extrema en el mundo sigue siendo inaceptablemente elevada.

Entre 1990 y 2017 Chile fue reconocido a nivel mundial tras avanzar significativamente en la reducción de la pobreza, desde un sixty eight,5% de la población a un eight,6%. Fue la disaster del covid-19 y su shock económico el que quebró la tendencia y nos hizo retroceder, llevando a casi medio millón de personas bajo la línea de la pobreza, aumentando a un 10,8% la tasa de incidencia de pobreza en el país. Al desafío sanitario de la pandemia se sumó rápida y urgentemente la necesidad de combatir los efectos sociales y económicos de la misma. Las diversas ayudas sociales permitieron una rápida recuperación económica y de los empleos, pero trajo consigo un sobrecalentamiento de la economía, que sumado a la guerra de Rusia en Ucrania y los rebrotes de covid-19 en Beijing, elevó la inflación anual a un máximo de 14,1% en agosto de 2022, lo que presagiaba una dificultad en la recuperación. Iniciamos el presente ensayo preguntándonos por qué hasta ahora no se ha podido combatir la pobreza material y económica en el mundo.

la vuelven hacia los cielos buscando una confesión ya que su hermano no escucha

Indignación ha producido en amplios sectores de la ciudadanía la confesión de uno de los 33mineros rescatados de que habrían solicitado, apenas three horas antes del accidente en la mina San José, salir de ella debido a los crujidos que avisaban la catástrofe. La historia tuvo un final feliz, puesto que el gobierno dispuso entre 15 y 20 millones de dólares para el salvataje. Ellos fueron afortunados, a diferencia de los 443 trabajadores, entre hombres y mujeres que murieron el año pasado en sus trabajos en Chile y de los más de 280 que ya han fallecido en lo que va del año. La desigualdad sería menos problemática si el lugar que ocupan las personas en el orden social fuese pasajero, sujeto a cambios durante el ciclo de vida o, por último, si la posición social de los hijos no dependiera de la de los padres.