Indh Panamá 2024 Programa De Las Naciones Unidas Para El Desarrollo

Esta sistematización se ha elaborado como parte de las actividades realizadas por la Unidad Nacional de Ozono del Ministerio de Salud, en el marco del proyecto … Este documento presenta un análisis detallado del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) para los años 2019 y 2022. Desde el año 2018, Panamá ha desarrollado mediciones anuales del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), utilizando encuestas que proporcionan datos characterize desigualdad social y medio ambiente… El cambio climático es uno de los temas que particularmente nos interesa abordar considerando la intensidad y frecuencia de los acontecimientos, impactando con mayor intensidad aquellos asentamientos humanos en condición de vulnerabilidad.

”, se pregunta León, que cree que todos estos retrocesos asociados con la tuberculosis, el sida u otras enfermedades de transmisión sexual afectarán especialmente “a las personas más vulnerables”, como la población que se encuentra en cárceles, quienes consumen drogas o quienes ejercen la prostitución. “Son personas que históricamente ya han sido criminalizadas y estigmatizadas” lo que hará “que tengan muchísimo más miedo de ser testeadas”. Por ello, la medida, según la activista, provocará justo el “efecto contrario”, ya que, la falta de diagnóstico abre las puertas de la transmisión.

En los países donde la capacitación formal para maestros y otros servicios y recursos son escasos, podrían usarse otros recursos, como miembros de la comunidad, padres, cuidadores u organizaciones no gubernamentales, que podrían convertirse en socios al momento de apoyar la educación inclusiva. Una vez que los estudiantes, maestros y el resto del personal de educación vuelvan a la escuela, es fundamental restablecer la salud y la seguridad a través de prácticas mejoradas de salud y saneamiento, continuando de manera inclusiva con instalaciones, información y comunicación que sean accesibles para todos los estudiantes y el personal en basic. La demanda de soporte socioemocional y de servicios de orientación es alta actualmente y seguirá aumentando, ya que el bienestar de los maestros y los estudiantes debe pasar a primer plano. La implementación del aborto por plazos, que establezca una edad gestacional límite como ocurre en otros países, sería una oportunidad de hacernos cargo del aborto inseguro, que representa una carga desproporcionada para las mujeres y para el sistema de salud. Texto escrito por Andrea Alvarez Carimoney, Académica de la Escuela de Salud Pública, Facultad de Medicina, Universidad de Chile. La desigualdad en salud configura un cuello de botella estructural a la hora de pensar en avances más profundos a escala regional.

Pero en Latinoamérica, son especialmente tangibles los ejemplos de cómo la casi “militarización de un país” deriva de forma inevitable en la violación de los derechos humanos. “El caso más reciente es el de Argentina, un país que ha sido líder regional en políticas de género y salud y donde [el actual presidente, Javier] Milei acaba de cerrar el Ministerio de la Mujer”, recuerda. El estudio detalló cómo fue ese impacto en cada una de las regiones de todo Chile, a partir de las alteraciones que sufrieron cuatro variables que inciden fuertemente en el bienestar urbano, en base a resultados de la Encuesta Casen 2017 y 2022. Para estos efectos, se consideraron dos variables sociales (percepción de inseguridad y situación de pobreza) y dos variables económicas (actividad de construcción y dinamismo del comercio). Si la recaudación de impuestos se vio afectada por el cierre de actividades y por la caída del consumo, también se han incrementado los gastos públicos. Al igual que otros desastres, la pandemia se monta sobre un escenario preexistente y pone de manifiesto las fortalezas y debilidades actuales del sistema socioeconómico.

desigualdad y pandemia

En el agregado, sixteen comunas, del centro y sur de la ciudad, concentraron los impactos negativos de una menor actividad de construcción y de comercio publish estallido social y pandemia. “Tanto el estallido social como la pandemia fueron shocks que afectaron al país, a las ciudades, a las comunas y, por cierto, a todas las personas. Nuestra intención con este trabajo es analizar cómo fue ese impacto en las comunas del Gran Santiago, a partir de las alteraciones que sufrieron estas cuatro variables”, explicó León. El Índice de Pobreza Multidimensional, que también se realiza en conjunto con la Iniciativa de Oxford, es un instrumento de medición que analiza otros indicadores además de los ingresos e incluye aspectos como el acceso al agua potable, la educación, la electricidad, los alimentos y otros seis indicadores más.

Además, se registró una disminución en las solicitudes de permisos para construir en 25 comunas, mientras que hubo un retroceso en el pago de patentes comerciales en 20 comunas, lo que implica una pérdida de ingresos estimada en más de $80.000 millones. El presidente del gremio native, Bernardo Suazo, indicó que para prevenir mayores pérdidas del bienestar territorial, es importante visualizar las oportunidades de la ciudad, siendo un punto de partida elementary, comprenderlas y trabajarlas de manera integral y multisectorial. Un 80% de las personas que entrarían a la pobreza a raíz de la pandemia viven en áreas urbanas. Se suman también, conductas impulsivas que pueden derivar en actos violentos, así como las manifestaciones de estigma y discriminación. La situación es especialmente preocupante para América Latina y el Caribe, donde la cobertura de inmunización históricamente alta se ha reducido en la última década. Estos países ahora también se enfrentan a interrupciones moderadas a severas en las campañas de vacunación relacionadas con COVID-19.

Menos mediático es el caso de Ecuador, donde la Asamblea debate “reformar el Código Orgánico Integral Penal para criminalizar la transmisión de enfermedades infecciosas”, apunta León. Esta reforma pretende penar con hasta tres años de cárcel a quien contagie de manera intencionada una patología. “Pero no estamos hablando solo del VIH, sino también de la tuberculosis o de la misma covid-19”, cube con indignación. León destacó que cinco comunas específicas —Independencia, Santiago, Estación Central, Maipú y Macul— fueron las más afectadas, albergando al 25% de los afectados de la capital. Estas comunas también concentran el 33% de las estaciones de Metro y el 26% de los servicios públicos y privados, lo que subraya su potencial de desarrollo futuro. Lo anterior, es una de las conclusiones que arrojó el estudio “Impactos del estallido social y la pandemia en el bienestar urbano”, presentado por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), en el marco de la 13ª Conferencia Internacional de Ciudad (CIC), la cual se realizó en Santiago.

En su presentación, Nicolás León recordó que el estallido social y la pandemia provocaron impactos a nivel nacional y en múltiples áreas. Para revertir los fenómenos que han generado una disminución en el bienestar en las ciudades se deben abordar en conjunto múltiples aspectos y un trabajo colaborativo entre el sector público, el privado, las organizaciones de la sociedad civil y las comunidades, explicó. Se enfoca en evaluaciones de impacto de programas sociales desigualdad social y la pobreza y recientemente colideró la agenda de investigación sobre el impacto de la calidad docente en los resultados del aprendizaje en escolaridad temprana. Yyannú ha trabajado en el Banco Mundial en Washington DC., y en Banxico y en la Secretaría de Hacienda en México. Es autora y coautora de artículos académicos (en journals tales como QJE) y capítulos de libros sobre la efectividad de los programas sociales y desarrollo infantil temprano, entre otros.

Dentro de las razones que explican esto, están los retrocesos en el mercado laboral de diez años en sus niveles de ocupación y que alrededor del 56,9% de las mujeres en América Latina están empleadas en sectores en riesgo por la pandemia, lo que implica un potencial desempleo femenino y la reducción de sus fuentes de ingresos (Cepal, 2021). Lo anterior, además de los patrones culturales patriarcales, la concentración del poder en las figuras masculinas que limitan la participación femenina en la toma de decisiones para reaccionar a la pandemia, la tradicional división del trabajo por sexo3, entre otros. Los resultados económicos respaldan esta afirmación, porque han mostrado números muy sombríos de decrecimiento a nivel mundial2 y prevén que otros problemas, como el cambio climático y los conflictos sociales, tienen el potencial de deteriorar aún más la frágil condición de millones de personas en el orbe. Ahora, con la covid-19, el número de pobres aumentará en 28,7 millones de personas, hasta alcanzar la cifra de 214,four millones de pobres en la región. A su vez, la pobreza extrema afectará a 15,9 millones más, sumando en total eighty three,4 millones de personas.

30 de septiembre de 2020, el COVID-19 se constituyó en la primera causa de muerte en el Área Metropolitana de Santiago y la tercera a nivel nacional. En Santiago, los más afectados son los estratos de menores ingresos, en que el impacto en la mortalidad y la esperanza de vida ha sido muy superior al registrado en la población de altos ingresos.

Teniendo en cuenta que quienes padecen violencia sexual se enfrentan además a barreras para acceder a métodos anticonceptivos de emergencia o a una interrupción authorized del embarazo, es posible inferir que esto produzca un aumento de los embarazos en niñas y adolescentes. Más allá de esas desigualdades propias de cada modelo, se puede identificar una serie de desafíos que los atraviesan en mayor o menor medida a todos y que acaban impactando en la desigualdad en el acceso. En segundo lugar, cambios en la demanda relacionados con la propia evolución epidemiológica de la población. En definitiva, se elevan los costos (ya sean individuales o colectivos), lo que no necesariamente significa mejoras para la salud de la población. Otros retos están relacionados con la gestión de los servicios, como en lo que refiere a la fragmentación de la pink asistencial y la falta de coordinación entre los diferentes niveles de atención, lo que dificulta, por un lado, la continuidad en el cuidado y, por otro, la posibilidad de un abordaje integral. “Tasas bajas y mediocres de crecimiento hacen muy difícil, por no decir imposible, promover la transformación productiva, reducir la pobreza, reducir la informalidad, crear empleos de alta calidad y generar los ingresos fiscales para políticas sociales de impacto.

En cuanto al sector de cuidado remunerado en la pandemia, estas autoras concluyen en su informe que «por cada hombre que perdió el empleo en este sector, 5 mujeres perdieron su empleo» (p. 14). En definitiva, las privaciones que deja la pandemia van por la vía de lo material y por la vía de las capacidades que se han limitado. Pese a que los progresos en riqueza y salud son importantes para una buena vida (Deaton, 2015), no lo son todo al pensar en la coyuntura actual, en la cual urgen decisiones de política pública con alta participación de la sociedad que faciliten las capacidades de las personas para percibir renta y que hagan más fácil convertir la renta en capacidades.

Sin embargo, la carga de la deuda se hará sentir mucho tiempo después de que desaparezca el virus, cuando aumenten los costos del servicio de la deuda, desacelerando la recuperación y dificultando los esfuerzos para enfrentar otros desafíos del desarrollo, incluido el cambio climático. No es de extrañar que los hombres y las mujeres han vivido la disaster de maneras muy diferentes. Un examen de datos realizado por el Banco y otros asociados muestra que las mujeres han sufrido mayores pérdidas que los hombres en términos de empleo, ingresos y seguridad. El Banco, junto con sus asociados, evaluó el grado de preparación de los países para aplicar de manera segura vacunas contra la COVID-19 en más de one hundred forty países. Aunque los países tienen algunas deficiencias en materia de preparación, la mayoría se ha preparado lo suficientemente bien en algunas áreas básicas.