Estimando Indigencia Y Pobreza Indígena Regional Con Datos Censales Y Encuestas De Hogares

ha ocurrido en el resto de América Latina, donde Chile ha tenido una performance mejor, dentro del drama que significa que aumente la pobreza». De acuerdo con el estudio, 168 millones de latinoamericanos se encontraban bajo la línea de pobreza en 2011, es decir, 29,4% de la población de la región. De América Latina se mantuvieron estables en 2014 al situarse en 28,2% y 11,8%, respectivamente. La Cepal proyecta que las tasas subieron en 2015 a 29,2% y 12,4%, lo que se traduce en 175 pobreza en adultos mayores millones de personas en situación de pobreza, de las cuales seventy five millones estarían en situación de indigencia. Tras los resultados de la Casen, el presidente de izquierdas, Gabriel Boric, dijo que el hecho de que “hayamos bajado a niveles históricos la pobreza, tanto la por ingresos como la multidimensional, que bajó del 20%, significa que disminuimos pero que también siguen habiendo muchas personas en situación de pobreza en Chile.

La iniciativa fue organizada por el Programa de Asuntos de Interés Público de la Universidad de Valparaíso, que dirige la ex ministra de Planificación del gobierno de Michelle Bachelet, Paula Quintana. La temática del seminario se originó en el conocimiento de los resultados de la Encuesta Casen, que en nuestro país es considerada como el principal instrumento que mide la evolución de la pobreza, la distribución del ingreso y el impacto de las políticas sociales en la población del país. De acuerdo con la CEPAL, la pobreza aumentará en los países de América Latina este año, anticipando que, en el peor de los casos, el porcentaje de personas en situación de pobreza a nivel regional pasará del 30,3% registrado en 2019 al 35,5% en 2020. Según información recogida en encuestas de hogares de ocho países de América Latina en 2011, 7% de la población no indígena ni afrodescendiente es indigente o altamente susceptible a la indigencia, porcentaje que se eleva a 11% en el caso de la población afrodescendiente y a 18% de los pueblos indígenas. De igual forma, mientras el 62% de la población no indígena ni afrodescendiente period considerada no vulnerable, esa cifra baja a 56% en el caso de la población afrodescendiente y a solo 33% en el de los pueblos indígenas. De esta manera se proyecta que la región finalizará este año con 167 millones de personas en situación de pobreza, un millón de personas menos que en 2011, lo que equivale a 28,8% de los habitantes.

La publicación segmenta en una zona superior para el género masculino y una inferior para el femenino, y en donde el centro de la región es una representación porcentual poblacional de pobres e indigentes, y en un aro exterior, divisiones por sexo. Cada zona dividida por género, segmenta verticalmente la situación en zonas rurales y zonas urbanas, con el rango de edad añadido a un globo de texto. Un nuevo estudio del organismo regional destaca la importancia de generar empleos productivos y decentes, ya que los ingresos laborales representan en promedio 80% del ingreso whole de los hogares en la región.

«Hoy, con la publicación de este índice sobre pobreza, terminamos con la emergencia estadística en su forma más crítica». «Después de años de manipulación, hoy sabemos qué realidad nos golpea, porque uno de cada tres argentinos es pobre y es algo que nos duele». El Indec remarca en su informe que no incluye datos de trimestres anteriores dado que, conforme a la emergencia estadística dictada por el nuevo Ejecutivo, el organismo ha dispuesto que las sequence publicadas con posterioridad al primer trimestre de 2007 y hasta el cuarto trimestre de 2015 deben ser «consideradas con reservas». En abril de 2014, el Gobierno de Cristina Fernández suspendió la difusión de los índices de pobreza, en un momento en el que los datos estadísticos oficiales eran seriamente cuestionados por consultoras privadas y hasta por empleados del propio Indec. Autoridades del Indec, encabezadas por su titular, Jorge Todesca, explicaron en una conferencia la nueva metodología llevada a cabo para realizar la medición, tras el proceso de reestructuración del organismo ordenado por el Gobierno de Mauricio Macri desde que asumió el cargo, en diciembre de 2015. La última modificación a la Constitución argentina es de 1994, según está registrado en la Biblioteca de su Congreso Nacional.

pobreza e indigencia

hacia atrás». «Todos tenemos que buscar soluciones para la pobreza y no llegar y decir que se van a eliminar todos los programas sociales».

Las mujeres registraron en esta última Casen un 6,9% de pobreza y un 2,1% de pobreza extrema, mientras los hombres presentaron un 6,1% y 1,9%, respectivamente. Posteriormente, en el año 2015, se conformó un Comité Asesor Ministerial integrado por académicos y representantes de organizaciones de la sociedad civil que estuvo a cargo de elaborar una propuesta para la incorporación de indicadores de entorno y redes. Esta propuesta constituyó la base para la actualización de los indicadores utilizados para la medición de la pobreza multidimensional, iniciando una nueva serie de datos a contar de la publicación de los resultados de la Encuesta Casen 2015. El Ministerio de Desarrollo Social y Familia publica mensualmente información actualizada del valor de la CBA y de las líneas de pobreza extrema y no extrema en base a la información entregada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

El escrito fue apoyado por la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo y se encuentra disponible para visualización y descarga de forma gratuita. El 20 de junio marca el cambio de estación en el hemisferio sur, que corresponde al día de menor duración de la luz photo voltaic y, a la vez, el inicio de un nuevo ciclo de luz creciente. De Chile José Utreras, Bernardita Ried y César Fuentes, quienes destacan que las noches más largas, por ejemplo, permiten observar la Vía Láctea en todo su esplendor o estudiar el clima de exoplanetas para enriquecer nuestra comprensión de las estaciones.

En términos simples, el método propuesto consiste en estimar la tasa de pobreza a nivel comunal como un promedio ponderado entre la estimación de la tasa de pobreza directa (obtenida a ese nivel con datos de la Encuesta Casen) y una tasa de pobreza sintética (estimada en base a un conjunto de indicadores procedentes de fuentes administrativas y censales que están disponibles para las mismas comunas). Los hogares que se encuentran en situación de pobreza multidimensional son aquellos que acumulan un porcentaje de 22,5% ó más de carencias en los 15 indicadores individuales que se utilizan para la medición, ponderados de acuerdo al peso que les corresponde en cada dimensión. La Canasta Básica de Alimentos (CBA) refiere a un conjunto de bienes alimentarios que se utiliza como base para definir el valor de la línea de pobreza y línea de pobreza extrema por ingresos.

Lo anterior permite visualizar la capacidad que tienen estas transferencias para reducir la desigualdad. La medición de la pobreza de acuerdo a estas dos metodologías es realizada de manera simultánea con información estadística levantada por la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen), instrumento con cobertura nacional cuya realización está a cargo del Ministerio de Desarrollo Social y Familia. El seremi de Planificación, Tomás Ochoa, destacó el esfuerzo de la Universidad de Valparaíso, que se hizo partícipe al “apostar por una deliberación pública con alto significado para la región y el país…

Si revisamos la dinámica de pobreza en el tiempo por región, por ejemplo en el Bío Bío, entre el ’90 y el ’92, es bien increíble cómo cae. En el ’98, con la crisis asiática, la cosa se queda más o menos plana y de 2000 en adelante empieza a caer fuerte de nuevo. Esta figura demuestra que el crecimiento económico tiene efectos significativos sobre la pobreza, pero además es bastante claro que la cosa está medio estancada, sobre todo cuando se mide la pobreza por región. Fuera de esa discusión, si uno revisa los datos, hay lecciones bastante interesantes con respecto a la dinámica de pobreza e indigencia, importantes consecuencias sobre cómo medimos el gasto social y qué tan bien focalizado está y también sobre los desafíos de políticas públicas en la materia. Esta propuesta pretende visualizar los datos cruzados en un chile horizontal, donde se piensa como una aplicación interactiva que permite agregar y/o quitar datos por año, sexo, región, etc.

Para comparar las estimaciones obtenidas para dos grupos independientes de hogares o de población (incluyendo comparaciones entre grupos para un mismo año y comparaciones de un mismo grupo para diferentes años), el Ministerio de Desarrollo Social y Familia. La actividad reunió a autoridades de gobierno, ex ministros, académicos e investigadores sociales de distintas universidades y centros de estudio de la zona, quienes junto a estudiantes, docentes, representantes del ámbito público, ONGs e invitados especiales, analizaron los registros locales entregados por la encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional. «En los países desarrollados la pobreza no se mide en términos absolutos, sino que en términos relativos y alguien es pobre en la medida que está bajo un 30 por ciento del ingreso medio del país, con lo cual automáticamente se ve en la medición de pobreza la medición de desigualdad. Eso es a lo que debiéramos optar», concluyó. A su juicio, es muy importante «actualizar la línea de pobreza y sincerar la información y lo debe hacer un Gobierno apenas entra, porque tendrá un costo político, porque subirá la pobreza por decreto». Son los primeros resultados de la doctrina de shock económico, anunciado por el presidente Javier Milei apenas asumió su mandato. Muy lejos de redistribuir ingresos golpeando «a la casta» responsable de la crisis social en Argentina, como él discursivamente propagandeó, por el contrario golpea a las familias más humildes del país, a quienes viven de un salario o pensión.

El número de personas en extrema pobreza o indigencia se mantendrá estable en 2012, sumando 66 millones, la misma cifra que en 2011. De acuerdo con los resultados dados a conocer este jueves, la baja en la pobreza por ingresos se explica tanto por el aumento de los ingresos laborales y los autónomos (que no tienen que ver con el trabajo), así como por los diversos subsidios que ha entregado el Estado a los hogares de menores ingresos desde la pandemia en adelante. Según señaló el ministro Jackson, respecto a los ingresos de los hogares y su distribución, “podemos ver que el año 2022, por ingresos del trabajo registramos un aumento significativo respecto de 2020, pero son estadísticamente iguales al 2017, por lo que podemos hablar de un efecto de recuperación desde la pandemia, pero no de una superación del nivel de la pandemia”. La gran desigualdad en las condiciones socioeconómicas de los diversos grupos de la población continúa siendo un desafío relacionado con la inequidad social, que requiere de apoyo de mayor equidad distributiva, contributiva y de subsidios focalizados. La desigualdad bajo las cuales los distintos grupos de la población están influidos por aspectos como el ingreso, desempleo, pobreza y educación requieren continuar siendo monitoreadas y las políticas, estrategias y subsidios ser fortalecidas y resguardadas. Tal como lo señala la CEPAL, la pobreza aumentará en cada uno de los países de América Latina este año, anticipando que, en el peor de los casos, el porcentaje de personas en esta situación a nivel regional pasará del 30,3% registrado en 2019 a 35,5% en 2020, promedio que incluye el salto del 9,8% al thirteen,7% que se experimentaría en Chile.

Según el estudio dado a conocer hoy por Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Cepal, las estimaciones de pobreza basadas en las encuestas de hogares disponibles hasta 2011 indican que en ese año la pobreza de la región se situó en un 29,4%, lo que incluye un 11,5% de personas en condiciones de pobreza extrema o indigencia. Hay desafíos mayores en algunas regiones, hay algunas áreas de la medición de pobreza multidimensional donde hay carencias que son mayores. Consideramos también el aporte que vamos a tener en el futuro por el aumento del ingreso mínimo, por el hecho que se está reduciendo la inflación y los aportes a los hogares a través de la política pública que esperamos financiar con el pacto fiscal. Creo que podemos decir que Chile va una dirección claramente positiva en esta materia y que quisiéramos intensificar durante los próximos años”. La línea de pobreza es la medida oficial, expresada en pesos corrientes, que se utiliza como umbral para identificar al conjunto de hogares y de población que se encuentra en situación de pobreza por ingresos.

La medición de la pobreza con el método de la «línea de pobreza» consiste en establecer, a partir de los ingresos de los hogares, si estos tienen capacidad de satisfacer -por medio de la compra de bienes y servicios- un conjunto de necesidades alimentarias y no alimentarias consideradas esenciales. A tal extremo han llegado los efectos, que actualmente tenemos altas tasas de desempleo, tanto que se han debido establecer distintas políticas que permitan a una gran parte de la población contar con ingresos para pobreza estructural y coyuntural poder vivir el día a día. Sin duda han sido importantes aportes, pero aún falta mucho más para lograr amortiguar en los hogares chilenos el estar sin empleo y sin posibilidad de acceder a servicios y bienes de consumo diario. A fines de julio, se conoció que la pobreza por ingresos en nuestro país llegó a su menor nivel histórico según datos entregados por Casen. El estudio apuntó que, la pobreza por ingreso pasó de un 10,7% en 2020 a un 6,5%, el menor nivel desde que hay datos comparables (en 1990).