El gran problema, a su juicio, “es cómo, a través de la política pública, vamos a determinar quiénes son los beneficiarios, si son titulares de derechos o si vamos a focalizar y cómo”. “Con una rotación tan grande alrededor de la pobreza y un 60% tan homogéneo de la población, tener políticas tan focalizadas es complicado”, indica. Consultada por la relación de los sectores populares con el Estado, cuyas políticas resultarán fundamentales para contener la pobreza extrema, Ruiz Jabbaz advierte que no es cotidiana y que “cuando aparece, está mediada por mucha burocracia, por la sensación de estar siendo examinados, de tener que demostrar que se es pobre. Para obtener su ayuda uno debe estar dispuesto a ser sometido a un escrutinio, a un proceso humillante, en cierto sentido”. Una presencia que sí es cotidiana “es la represión”, añade, “aunque la sensación más común es de ausencia, de abandono”. Al finalizar el sexenio de Fox, y con ello la continuación del partido de la alternancia en el poder, encabezado por Felipe Calderón, se continuó con estrategias similares para el combate a la pobreza.
2.- La posibilidad de estudiar por separado la evolución de cada una de las necesidades a través del tiempo y, con ello, analizar la efectividad de las políticas implementadas para paliar ciertas necesidades básicas (Katzman, 1989). Numerosas organizaciones mundiales combaten la pobreza a través de iniciativas de ayuda a gran escala, que van desde planes educativos (como los de
sufren de anemia. Más de 1 millones de personas en el mundo viven en pobreza extrema, sin una vivienda estimable, y el 70% de ellas son mujeres. «El camino de la superación de la pobreza en Chile que se propone en esta etapa, es el camino de la participación activa de las propias personas, familias y comunidades pobres en la superación de sus situaciones de pobreza, y el camino de la acción comprometida y responsable de los demás actores sociales ante la pobreza». El papel del Estado está subordinado a ello y es el de «crear las condiciones que hagan posible y eficaces los esfuerzos de dicha población pobre por salir de su situación. Y para esto la acción de la política social debe ser tanto un issue de desarrollo como una acción de concertación entre el sector público y el sector privado». La cifra tradicional, como ya ha quedado claro en la discusión pública, es distinta a lo que se había dicho anteriormente por parte del MDS el 2011 y el 2013.
Esta perspectiva supone que la satisfacción de las personas (no sentirse carenciadas o pobres) no depende solo del consumo, siendo este solo una de las variables relevantes. Por ejemplo, es posible la existencia de una familia que pueda adquirir más de dos canastas básicas al mes, pero que tenga problemas de integración social, por lo cual puede ser catalogada como una familia pobre. El enfoque usa como complemento las líneas de pobrezas y la perspectiva analítica de las carencias personales y de grupo. Con la alternancia partidista en el gobierno pobreza actual federal después de poco más de 70 años de gobiernos emanados de un solo partido, se generó la esperanza de que la economía mexicana retomaría una senda sostenida de crecimiento y que con ello se favorecería la reducción de la pobreza. Sin embargo, la gestión y los resultados económicos de la administración de Vicente Fox no fue mejor que la de sus predecesores, puesto que en promedio la tasa de crecimiento del PIB fue cercana al dos y medio por ciento, lo cual resultó insuficiente para generar un ritmo sostenido de desarrollo y bienestar.
Desde 1987, los datos de ingresos de los hogares recolectados periódicamente por la encuesta CASEN habían sido validados, corregidos por no respuesta y ajustados con las Cuentas Nacionales por la CEPAL, junto al cálculo del costo de una canasta de alimentos que era contrastado con los ingresos de las familias. Dicho sea de paso, esta medición resultaba considerablemente superior a la que realiza el Banco Mundial, con su línea de pobreza definida en dos dólares diarios –a paridad de poder de compra– por persona, con lo que para este organismo la población pobre en Chile sería del orden de sólo 3%. Pero en 2009, se produjo una divergencia metodológica, con la consecuencia de que la estimación de la CEPAL registró una caída de la incidencia de la pobreza a 11,5% de la población, mientras para el gobierno de Piñera se habría producido un aumento de la pobreza a 15,1% de la misma. En el otro extremo, añade Moreno, “nos enfrentamos a una situación que no veíamos hace 35 años.
A diferencia de la Unicef que se basa en la pobreza relativa, en los indicadores internos se mide la pobreza absoluta. Por eso según la encuesta Casen 2015 el porcentaje de niños en esta situación es 18,2%. La disminución de la pobreza, la justicia social y la existencia de un sistema agroalimentario sustentable son condiciones esenciales para el logro de seguridad alimentaria. Paralelamente, los precios internacionales del petróleo (una de las principales fuentes de recursos financieros del gobierno federal) experimentaron un incremento sustancial, lo que permitió incrementar el gasto de gobierno en obras de infraestructura y la canalización de mayores recursos a los estados y los municipios11.
En 2011, para la CEPAL –utilizando siempre la encuesta Casen y su propia metodología de registro de ingresos y de descuento de la inflación– la pobreza siguió bajando levemente y la cifra de la población en esa condición se situó en un 11,0% (y la de indigencia en un 3,1%), mientras para el Gobierno de Chile las tasas alcanzaron cifras de 14,four % y 2,8%, respectivamente. La situación es también particularmente alarmante en el sur, donde cuatro familias de cada diez viven en pobreza relativa. El análisis de Icefi también cita datos contenidos en el Informe del Panorama regional de seguridad alimentaria nutricional 2022, elaborado por distintas agencias de la ONU (FAO, Fida, OPS, WFP y Unicef), el cual apunta que El Salvador, Guatemala y Honduras son las naciones que experimentaron un mayor aumento en inseguridad alimentaria moderada o grave en América Latina. No en todos los indicadores tenemos malos resultados, por ejemplo en los objetivos de Fin al hambre ocupamos el lugar 29, y en Aseguramiento de producción y consumo sustentable el 26. Sin embargo en Aseguramiento de salud y bienestar descendemos al penúltimo lugar, lo que baja su nota promedio. En el informe se añade que las reformas de descentralización del gobierno ayudarían a luchar contra el alto nivel de desigualdad regional de Chile, pero se requieren medidas complementarias para garantizar su eficacia.
En cambio, para la CEPAL –siempre según su propia metodología– la incidencia de la pobreza experimentó un descenso de un eleven,0% en 2011 a un 7,8% en 2013 (ver cuadro), mientras la extrema pobreza pasó de un three,1% a un 2,5% de la población, es decir, cerca de la mitad de la incidencia estimada por el Gobierno chileno para el mismo año y con la misma encuesta. Según esta información dada a conocer en enero de 2015 por la CEPAL, en términos comparativos regionales la pobreza registrada en Chile –manteniendo la metodología sobre la base del costo de una canasta básica de alimentos– es sustancialmente más baja que los promedios de 28,1% y eleven,7% consignados para América Latina por este organismo regional. Chile ha logrado avances sociales y económicos significativos durante las últimas dos décadas destaca la OCDE.
Dicho de otra manera, se debe buscar potenciar la utilización y el consumo de alimentos bajo la premisa de que estos representan una parte vital de las oportunidades de desarrollo de las personas. Es por ello que la utilización de programas y políticas, así como la difusión de entornos y hábitos alimentarios saludables que conduzcan al consumo de alimentos a la potenciación de los niveles de nutrición y aprovechamiento de las personas, es un aspecto clave en el combate a la pobreza alimentaria y la seguridad alimentaria y nutricional21. Respecto al primer pilar, hay que mencionar que la disponibilidad se encuentra estrictamente relacionada con la producción de alimentos a nivel native, regional y nacional, así como con la generación de ingresos económicos para la importación de los productos alimenticios que se demanden por parte de la población. No obstante, es importante señalar que dicha disponibilidad de alimentos se debe asociar a la calidad de los mismos y que estos deben corresponder con los patrones y la cultura alimentaria de las personas. En adición, la oferta alimentaria no solamente tiene que ser suficiente en cantidad, sino que tiene que contemplar las diferentes variedades y tipos de alimentos que son consumidos por la población, así como sus valores nutricionales. Entonces, permite la medición de la carencia de ingreso monetario para la satisfacción de las necesidades mínimas de alimentación y de bienestar en basic, además de acceso a derechos como la vivienda y sus servicios, educación, salud y el grado de cohesión social (CONEVAL, 2009).
Sin embargo, la combinación de ambos métodos en ocasiones genera una poco consistente estimación de las necesidades que no son satisfechas por el ingreso, así como de aquellas cuya satisfacción no depende exclusivamente del pobreza absoluta ejemplos ingreso corriente del individuo o su familia (Boltvinik, 2000). La pobreza es uno de los principales males sociales del mundo y a ella se atribuyen otros flagelos y dificultades en el desarrollo de las naciones, así como la
En un inicio, el concepto se refería principalmente sólo a la disponibilidad de alimentos a nivel mundial y su consumo, factores importantes en la fluctuación entre oferta y demanda (Cumbre Mundial de Alimentación, 1974). Con el paso del tiempo, el concepto evolucionó al incorporar elementos relacionados con la calidad de los alimentos y su efecto en la salud de la gente. Se entiende por pobreza a la condición social y económica de ausencia de recursos (o a la carencia de herramientas para adquirirlos), que permitan
El pobre percibe indiferencia de las autoridades o de la comunidad respecto de las necesidades individuales; percibe que el entorno social se presenta agresivo y hostil; percibe, en fin, que la suya es una situación de clara marginalidad. En tales situaciones las respuestas del pobre son variadas y pueden ir desde el aislamiento hasta la violencia, pasando por la evasión, representada por las drogas y el alcohol. Sin duda, dados los incrementos en las remuneraciones reales, en el ingreso mínimo y en el empleo es razonable suponer que la situación social ha tenido un mejoramiento, entre 1987 y 1990. En 1987, como se dijo públicamente y fue negado por ciertas personas, había más de 2 millones de habitantes que vivían en la indigencia y casi 5 millones 500 mil en la pobreza. Además, se escuchó a más de cincuenta representantes de diversos sectores sociales, en una sesión especial que la Comisión realizó el 31 de octubre de 1990 en esta Sala de la Cámara de Diputados. Agrega que la Ocde es más un termómetro que evalúa el estándar de un país y no la pobreza.
Los enlaces que se muestran más fuertes están evidenciados entre el issue de la accesibilidad a los servicios bancario-financieros y el factor de la calidad de servicios públicos del hábitat, aspecto que pone de relieve el papel fundamental que tiene la variable número de personas que se fueron al extranjero a trabajar en la realización de los presupuestos de las comunidades rurales. La dicha información fue tratada al nivel de localidad, 2.944 asentamientos humanos, que totalizan las ocho provincias del este de Rumania que forman la región histórica llamada Moldova. El Estado debe actuar corrigiendo las desigualdades más agudas producidas por el mercado en términos de empleo o generación de ingresos. Es primordial para hacer más justa y equitativa la estructura de financiamiento de los programas sociales. Por lo anterior, concluimos que la pobreza no se reproduce sólo socialmente, sino que este hecho implica un gran costo adicional para la sociedad no sólo medible como un medio de superar la pobreza. La cantidad de pobres en Chile ha sido un tema claramente preocupante de las discusiones política, académica y social, en nuestro país.