Develando Los Determinantes De La Desigualdad Del Ingreso En Chile: Estudio Empírico Regional

Se concluye que la desigualdad tiende a empeorar en aquellas regiones con mayor concentración de población indígena, respecto al total nacional, lo que enfatiza la desventaja económica de este grupo de la población. Igualmente, la esperanza de vida al nacer refleja que en Chile, las diferencias en acceso a salud de calidad, tienen consecuencias en las desigualdades del ingreso. La variable años de escolaridad promedio, está muy correlacionada con el PIB per cápita, se observa su significancia en la Tabla three (utilizando como variable dependiente el ratio 20/20), demostrando que regiones más escolarizadas tienden a reducir las desigualdades. En este sentido, guarda especial importancia la oferta de educación superior, demostrándose en cada caso que las regiones con mayor oferta educativa por habitante, tienden a tener menos desigualdad del ingreso. Se puede inferir, que los esfuerzos de los últimos thirteen años para mejorar el acceso a la educación superior, en este caso por medio de la oferta, han contribuido en parte a mejorar los indicadores de desigualdad.

Por su lado, mantienen su posición relativa, las regiones Metropolitana, de Los Lagos, de La Araucanía, del Biobío y del Maule. Mientras que bajan de posición relativa las regiones de Tarapacá (aunque continúa dentro de las con mayores logros de desarrollo humano), Atacama, O’Higgins y Valparaíso. La metodología de investigación consiste en un análisis descriptivo y comparativo de las regiones del país, así como de un análisis de convergencia regional.

La conclusión es menos clara si lo que nos interesa es la evolución en el tiempo, ya que mientras la desigualdad medida con encuestas ha disminuido (el Gini ha bajado de 0,fifty two a 0,forty seven entre 1990 y 2015), no ha sido el caso si nos enfocamos en los datos del sistema impositivo. Al utilizar como variable dependiente el ratio 20/20, en vez del Gini, se aprecia que el sector silvoagropecuario es significativo y que regiones intensivas en esta actividad tienden a reducir las desigualdades. Se propone por tanto, aumentar la productividad del sector, mejorando la tecnología y eficiencia, permitiendo un mayor ingreso de la población menos favorecida. El papel de la distribución sectorial del PIB, a lo largo del período estudiado, refleja la incidencia del cambio estructural en la distribución de la renta. Esta incidencia dependerá de las fuerzas relativas que puedan estar actuando en direcciones opuestas (tecnologías más intensivas en capital físico o capital humano, enlaces productivos, and so on.). Es probable que aquellos sectores con más enlaces productivos apropiados con otras industrias, a nivel regional, contribuyan a mejorar la desigualdad, como es el caso de la minería en Chile.

pobreza por desigualdad

“Existe capacidad técnica para aumentar impuestos; además,los estimados muestran que la capacidad del Estado de Chile es muy alta comparada con otros países, es decir, se pueden usar de mejor manera los recursos”. Para la efectividad de su cumplimiento, los derechos que no pueden ser cedidos en favor de otro/a, son de carácter universal, ya que aplica para todos los niños y niñas, son indivisibles, ya que no puede solo aplicarse unos derechos y otros no, y no hay un derecho que sea más importante que el otro. La Convención Sobre los Derechos del Niño es un tratado internacional que existe para establecer las normas mínimas que aseguren la vida, el bienestar, la protección y la libertad de los niños y niñas. Es importante que el gobierno use los datos existentes sobre los rendimientos escolares para hacer una conclusión informada de cómo mejorar el sistema educativo. 10Esta ecuación también se probó utilizando la oferta de educación superior en vez del Gini inicial, la variable resultó igualmente significativa y negativa, siendo el ajuste del modelo de un 67,7%.

Desde el estallido social en 2019, quedó en evidencia que la desigualdad es el mayor problema que tiene Chile. Porque los que están en la parte de abajo de la balanza no sólo no han podido aprovechar las ganancias de este país pujante, sino que peor aún, la han visto pasar frente a sus ojos sin poder siquiera disfrutar un pedacito de ella. La Encuesta Casen en su edición pandémica del 2020 determinó que la pobreza creció a un 10,8%, equivalente a más de 2,1 millones de personas. Mientras que la pobreza extrema prácticamente se duplicó a un four,3%, es decir, alrededor de 800 mil personas.

Igualmente, en Chile aún es muy difícil encontrar datos a nivel regional de ciertas variables de gran interés en este estudio. Se aprecia en el modelo XII, que ahora la variable ingreso último quintil es significativa y positiva, reforzando lo dicho en el párrafo anterior. Esta teoría, que se fundamenta en la hipótesis de Kuznets, no se cumple en este caso (al menos en el período de tiempo estudiado). Varios autores, como Arndt (1983), Guillén (2004) y el más señalado en el último tiempo, Piketty (2014), han revelado esta teoría como falsa. En el 2022 la tasa de pobreza multidimensional en hombres fue de 17,1% y en mujeres fue de sixteen,8%.

Con todo, no hay evidencia de que las desigualdades discutidas hayan aumentado en los últimos 30 años. Pero ello no es razón suficiente para descartarlas como causas relevantes del estallido social. Es posible, por ejemplo, que la acumulación de una desigualdad no creciente, pero presente por mucho tiempo, junte un malestar que en algún momento explote. Ya sea porque la no resolución de un problema por mucho tiempo genere rabia, o bien porque el progreso ethical de un país haga insupportable un problema que antes se aceptaba.

La que más rechazo provoca en la población es la disparidad en el trato y dignidad que, por ejemplo, se materializa en la atención de salud. La sociedad se fragmenta en grupos sociales que viven como si habitaran en naciones de nivel de desarrollo opuesto. Así, hay personas que son denigradas y discriminadas, en tanto otras desarrollan una actitud de superioridad fundada en la posesión de cargos o tenencia de dinero. Los conceptos de pobreza y desigualdad en la distribución de la riqueza han sido ampliamente estudiados en la literatura económica y medirlas se ha convertido en uno de los grandes retos de los economistas.