En “Mujeres trabajadoras jóvenes y pensiones en Chile”, las investigadoras Rosario Undurraga y Javiera Becker, muestran la preocupación que implica el envejecimiento de la población y los desafíos que el sistema de pensiones debe afrontar en el contexto nacional donde las pensiones son particularmente bajas y siendo las mujeres las más afectadas. Esta investigación explora las percepciones sobre el sistema de pensiones y las posibles estrategias previsionales de mujeres entre 20 y 35 años, profesionales y no-profesionales de Santiago (Chile), para mantenerse económicamente en su vejez. El estudio evidencia un descontento generalizado hacia el sistema previsional y una predominancia del presente, llamando al análisis de las políticas públicas en estas materias.
Si bien es claro que estos avances han mejorado la calidad de vida de las personas, se debe asumir que no en la misma proporción e incluso ha dejado mucha gente marginada de este gran avance (PNUD, 2016). Es por lo anterior que el último informe del PNUD está dedicado a este tema “desarrollo humano para todos”, considerando, igualmente, que en 2015 los dirigentes nacionales se comprometieron a “no dejar a nadie atrás”, compromiso que dejaron plasmado en la Agenda 2030. Mientras que a nivel nacional no hay un gran cambio en la desigualdad en el último período, Tarapacá incrementó su desigualdad en más de un 6%, y por su parte Los Lagos la redujo en casi un 11% (metodología nueva). Estas diferencias son de gran relevancia para la política pública y de acuerdo con Contreras (1999), también para el proceso de descentralización.
Más allá de los avances sociales, hay sectores de la sociedad que aún no consideran que la integración social y la equidad en el diseño y construcción de la ciudad sean condiciones ineludibles de la calidad de vida. Lo que queremos es que esto no sea en vano y sirva para reflexionar y reconocer que el sistema chileno no protege los derechos humanos de todas las personas por igual. 17El IDH-D considera las mismas tres dimensiones del IDH, pero considerando cómo se distribuyen los logros a lo largo de la población, penalizando el valor promedio para cada dimensión en función de lo desigual que sea. Si los países se encontraran en una situación perfect de perfecta igualdad, ambos indicadores coincidirían. Mientras mayor desigualdad, el IDH-D se ubicará más por debajo del IDH, siendo este el caso de Chile.
Ciertamente hay muchos otros aspectos a considerar, si se tiene en cuenta la devaluación de la institucionalidad política, el empoderamiento de las comunidades y los cambios que trae consigo la automatización del empleo y la revolución digital. Es tarea de todos contribuir a superar los obstáculos y aspirar a un país más justo, próspero y solidario. Bajo su alero surgieron grandes fortunas, cuyo origen se centra en la minería, las finanzas y el comercio.
Asimismo, se presentan reflexiones y sugerencias de estudios nacionales y de la bibliografía internacional. En efecto, en la mayor parte los países miembros de la OECD se observan niveles sin precedente de endeudamiento juvenil (Oksanen, Aaltonen, & Rantal, 2016; Patel, Balmer, & Pleasence, 2012; Russell, Whelan, & Maître 2013). La definición de juventud implica desafíos para la investigación, ya que la categoría authorized e institucional de quienes son considerados jóvenes se restringe tradicionalmente a un rango de edad. Así, para este número especial, hemos considerado necesario trascender estas nomenclaturas naturalizadas de lo que se considera una ‘población juvenil’.
Dadas las posibilidades que tenemos, me limitaré a algunos tópicos o hitos bíblicos, teológicos y magisteriales. Ciertamente debería ampliarse la indagación hacia otros temas o paradigmas afines, como la justicia y la injusticia, la pobreza y la riqueza, la inclusión y la exclusión, and so on. que tienen largas resonancias bíblicas y magisteriales, pero obviamente implica un mayor espacio del que disponemos. Habiendo muchas opciones temáticas y metodológicas, me propuse comenzar por el concepto de “igualdad”, porque la lingüística y la semiótica nos ha enseñado a estar atentos al eje paradigmático de los mensajes que circulan en las culturas; es decir, a los esquemas de diferencias que subyacen en los discursos. Me pareció interesante, entonces, partir por este último significante del eje paradigmático igualdad/desigualdad y desde allí moverme, enseguida, hacia algunas consideraciones teológicas y magisteriales. Espero que este ejercicio teológico sea una contribución en la necesaria atención que requieran las desigualdades que hoy día hieren a la humanidad y a nuestra sociedad, en particular desigualdad un análisis de la in felicidad colectiva.
Otros datos interesantes que nos entrega la CASEN en materia de educación, es la diferencia de escolaridad por lugar de nacimiento y pertenencia a una etnia. En Chile, en el año 2015, el promedio de escolaridad para una persona nacida en el país period de 11 años, y para un inmigrante (cuya madre residía en otro país al momento del nacimiento) de 12,5 años. Asimismo, hay una diferencia promedio de un año de escolaridad dependiendo de si pertenece o no a una etnia, siendo el promedio de 10,1 años para la población indígena y 11,1 para la no indígena.
Para entender la evolución de la desigualdad a largo plazo, se expondrán también los resultados del índice de Gini bajo la metodología tradicional. Por su lado, Sunkel e Infante (2009), atribuyen la persistente desigualdad a la permanencia de la asimetría y falta de vínculos estrechos entre los diferentes estratos de la economía. Otros determinantes de la resistente desigualdad son “la concentración de la propiedad y el poder económico, el acceso diferenciado según los ingresos a la educación de calidad, la diferencia de remuneraciones en los empleos, la debilidad de los sindicatos, entre otros factores…” (Sunkel e Infante, 2009, pp. 89). El país está conformado por 16 regiones5, siendo la capital nacional la ciudad de Santiago en la Región Metropolitana. El territorio chileno es abundante en recursos naturales, es el mayor productor de cobre a nivel mundial y tiene un importante rol dentro de los países exportadores de productos agrícolas, forestales y ganaderos (OCDE y CEPAL, 2016).
En Chile, la ley reconoce la existencia de nueve pueblos originarios4 y de acuerdo con la CASEN (2015) solo el 9% de la población chilena declara pertenecer a una etnia, siendo mayormente Mapuches (84% del total). Las regiones con mayor porcentaje de población indígena son la Región Metropolitana y La Araucanía, siendo en esta última donde la mayoría de ellos vive en zonas rurales (59%). Esta sección busca contextualizar el trabajo, dando una mirada global al país de estudio, Chile, presentando algunas de sus principales características sociodemográficas, contando un poco de su historia política y su evolución a nivel económico. Por ejemplo, en China e India, las encuestas muestran una concentración de ingresos del 1% más rico cercana a la mitad de la concentración real. Existen múltiples razones que explican el aumento sostenido de la desigualdad en Estados Unidos, todas ellas decisiones de política.
Tanto es así, que un estudio del Banco Mundial indica que un tercio del ingreso generado por la economía chilena en 2013 fue captado por el 1% más rico. Por ello, es relevante considerar este aspecto como una verdadera traba al desarrollo, cuando se bloquean las oportunidades y se traduce en un acceso poco equitativo al poder político y económico. Por último, uno de los puntos más oscuros de la desigualdad social tiene que ver con la incertidumbre, específicamente la laboral, que es la que determina todo lo demás para las personas de escasos recursos. “Del universo de trabajadores cubiertos por el seguro de cesantía en un período de eleven años, aquellos que partieron en un trabajo de bajo salario tuvieron empleo formal y con contrato indefinido menos de un 30% de esos 132 meses y tuvieron en promedio casi 10 empleadores. Quienes partieron en un trabajo de alto salario estuvieron en esa situación más de un 72% de los meses y tuvieron en promedio menos de cinco empleadores.
En esta línea de autores se encuentran principalmente neokeynesianos, como Lewis (1954), Kaldor (1957) y Pasinetti (1962), quienes sostuvieron que la desigualdad inicial en la distribución del ingreso era necesaria para el crecimiento. Por otra parte Okun (1975) fue mucho más allá en los planteamiento, sosteniendo que la desigualdad no solo era necesaria, sino que además period buena (Domínguez 2009). Lazear y Rosen (1981) defendieron la thought de que la relación entre desigualdad y crecimiento es positiva porque la desigualdad incentiva la innovación y el espíritu empresarial, lo que a su vez promueve el crecimiento. En la misma línea, Thierry Verdier (1993) concluyó que en países con sociedades más desiguales se tiende a destinar mayores recursos financieros a educación, lo que trae consigo capital humano más capacitado y, por tanto, crecimiento.
De este modo nació el movimiento que ha sacado a la luz diversos abusos sufridos por mujeres, no sólo del mundo del espectáculo, y no sólo en el país del norte, sino del mundo entero. Lo que comenzó hace más de one hundred sixty años como una demanda local de mejoras salariales y derecho a voto, se convirtió en una conmemoración internacional que reivindica el rol de la mujer en todos sus ámbitos. Respecto de las solicitudes para acceder a los beneficios del seguro de cesantía, la mayor parte de las solicitudes aprobadas en el caso de las mujeres fue con cargo a la Cuenta desigualdad social y medio ambiente Individual de Cesantía (CIC), mientras que en los hombres con cargo al Fondo de Cesantía Solidario (FCS). Por rama de actividad económica, se constató que las mujeres tienen una participación mayor en sectores de bajas remuneraciones o en sectores asociados principalmente a servicios, lo cual refleja la existencia de una segregación ocupacional por sexo de carácter estructural. «Reforzamos nuestro compromiso con los cambios que son necesarios para responder a la fuerza transformadora que hoy impulsa a nuestro país, así como a los desafíos de la educación superior a nivel global», ha señalado la académica.
El reporte da cuenta que mientras los hombres registraron a junio de este año una densidad promedio de cotización desde su afiliación al sistema de pensiones de fifty eight,1%, en el caso de las mujeres alcanzó el forty seven,7%. Asimismo, revela que la mediana de densidad de cotizaciones para los hombres fue de 63,4% y para las mujeres llegó a forty five,3%. Respecto de los saldos acumulados, a junio de 2020 las mujeres registran un saldo promedio de 663 UF, en tanto que el de los hombres es de 1.842 UF, lo que indica una brecha de -64,0%. En esto incide, además de las densidades de cotizaciones, el período de acumulación de ahorros, a su vez, determinado por las diferencias en las edades legales de jubilación por sexo (60 años para las mujeres y 65 años para los hombres), lo cual resulta en un menor período de acumulación en el caso de las mujeres. Sí, porque este 2022 el reconocimiento lo obtuvo la neuróloga infantil Marta Colombo, quien tiene una vasta carrera en docencia, investigación y asistencia en hospitales públicos.
Dado este resultado, y a pesar que posee signo de coeficiente esperado, se descarta la aplicación de pruebas para evaluar los supuestos básicos. Dos destacadas académicas de la Universidad de Concepción y uno de los investigadores del PNUD autor del libro «Desiguales», analizan la raíz de la que muchos se atreven a nombrar como la mayor movilización social en la historia de Chile. En la inauguración del Hospital Provincial de Curicó, junto al presidente Piñera y otras autoridades, el senador UDI fue captado en vivo obligando a la gobernadora regional del Maule, Cristina Bravo, a levantar su brazo para saludar a las cámaras. La presidenta del Senado -y también compañera de militancia de Bravo-, Ximena Rincón, condenó el actuar del parlamentario. La autoridad de la región del Maule señaló que no pretendía alzar el brazo para ser parte de un saludo colectivo del cual no se siente parte, además dijo que en la instancia no se sintió a gusto porque pretendía pedir la inauguración del nuevo hospital y el Ejecutivo solo fue a «poner una placa».