La armonización legal, que se refiere al proceso de unificar o hacer compatibles diferentes sistemas legales para facilitar las relaciones internacionales, es un desafío significativo en el mundo de hoy. Frente a esto es necesario reflexionar acerca de cómo se está utilizando socialmente la comunicación, considerando que está sometida en su estructura a las condiciones del mercado y, por lo tanto, a las dinámicas de la oferta y la demanda, de la producción, distribución y del consumo. Estudio de medición del impacto de la inversión extranjera directa en la economía chilena, Gobierno de Chile. “Mi pronóstico es que la globalización, o se deshace del modelo neoliberal y así podríamos tener una globalización más regulada que no aumenta tanto la desigualdad, o se mantiene bajo la modalidad neoliberal, y en este caso veremos más respuestas conservadoras, populistas que ofrecen respuestas nacionalistas”, argumentó. El Dr. Akram sostiene que la existencia de una pandemia implica necesariamente la existencia de la globalización, al punto de decir que sin globalización no hay pandemia. Al respecto explicó que desde hace ya varios siglos la humanidad ha vivido en una sociedad global, aunque con una profundidad mínima, tal como ha sucedido con el capitalismo.
En un esfuerzo inédito por acercar la evidencia científica al debate público, un grupo de investigadores crearon una base de datos de acceso abierto que permite un análisis más sistemático de la desigualdad a nivel global. Para Chile, existen diferentes estimaciones de la porción de los ingresos que se lleva el 1% más rico, que varían dependiendo de los datos disponibles, supuestos metodológicos, y correcciones hechas por evasión y elusión. El estudio de Flores, Sanhueza, Atria y Mayer encuentra una concentración en torno al 24% usando datos tabulados.
Este incremento fue posible gracias al aumento en la capacidad tecnológica de las telecomunicaciones, que se multiplicó por 200 veces de 1986 a 2007 (Hilbert y López, 2011). Este crecimiento sistémico se observa igualmente en el aumento de personas que viven en el mundo, que ha pasado de four.500 millones en 1980 a casi 7.400 millones en la actualidad (ONU, 2015). Las personas que viven con menos de 1,9 dólares al día pasó del 44,3% de la población mundial en 1981 a un 10,68% en 2013, la esperanza de vida evolucionó de un promedio de sixty two,8 años en 1980 a seventy one,5 años en 2014, y el acceso al suministro de agua creció de un 76,1% de la población en 1980 a un 91% en 2014 (Banco Mundial, 2016).
Esto es importante, porque las principales inversiones en las áreas urbanas no son de decisión de los gobiernos regionales o locales (municipalidades). El área urbana de Santiago está claramente diferenciada según los niveles de ingreso de las familias. El resultado es un cuadro de importantes diferencias en la calidad y volumen tanto de la infraestructura y servicios, como de las viviendas. Un análisis de la pobreza e indigencia por municipalidad en la ciudad de Santiago muestra que en nueve comunas, es pobre entre 0 y 10% de la población; en as soon as comunas, es pobre entre y 20% de la población; en cinco comunas, es pobre entre 20 y 30% de la población.
Afortunadamente, evidencia reciente provista por Bernardo Candia y Eduardo Engel nos permite responder esta pregunta. Los autores muestran que el coeficiente de Gini de mercado calculado con los datos de la encuesta CASEN y registros tributarios es 0,59. Consistente con lo reportado por la OCDE, encuentran que en su conjunto la acción del gobierno es levemente progresiva.[8] El estudio muestra, además, que el sistema tributario es levemente regresivo y el sistema de transferencias es progresivo, especialmente debido a las transferencias en salud y educación. Así, el diseño mismo del sistema tributario explicaría por qué la desigualdad antes y después de impuestos y transferencias es particularmente acotada en el caso chileno.
La literatura académica sugiere que las tasas óptimas a la herencia podrían ser bastante altas (del orden del 50%-60%). Zygmunt Bauman nos presenta un estudio sobre las consecuencias sociales de los procesos globalizadores; pretende demostrar que la globalización incluye mucho más que sus manifestaciones superficiales e intenta hacer legible un término supuestamente clarificador de la mujer y el hombre moderno. Constituye, pues, un importante aporte sobre la polémica que ha desencadenado el concepto de globalización. En definitiva, en su función de difusores culturales, los medios ejercen influencias socioculturales que fomentan y reproducen mediante diferentes formas de socialización como son los valores, creencias, normas, conocimiento, entre otros. Al tiempo que establecen ciertos estilos de vida, valores culturales, modos de actuación y de pensamiento; es decir formas de representar el mundo bajo la complete desigualdad en las ciudades influencia del sistema económico transnacional.
En el caso de Santiago, sus habitantes manifiestan mayor inseguridad en los espacios públicos que en los privados, situación contradictoria cuando se la compara con la información estadística nacional. Según ésta, los hurtos, los robos con fuerza y los robos con violencia, afectan más a las residencias que a las personas, instituciones o vehículos (Oviedo, 1994). Uno de los correlatos potencialmente más serios de lo anterior es que los habitantes de Santiago que tienen una percepción de inseguridad en la ciudad tienden a apoyar la resolución de conflictos nacionales por medios no-pacíficos, a diferencia de aquellos que consideran la ciudad o su barrio como un espacio seguro.
De esa forma, se evitaba que los partidos políticos volvieran a ser el referente en la relación entre el Estado y la ciudadanía, como lo habían sido antes del golpe militar. En el caso del poder espacial de la ciudad, Santiago no aparece entre las 50 ciudades con mayor importancia en el mundo. A pesar de no contar con una gran presencia de headquarters, la ciudad cuenta con importantes redes de empresas financieras, de servicios avanzados y comunicaciones, que proveen a las multinacionales en sus operaciones globales. Fusionando estas dos medidas, Santiago se sitúa en el puesto 50 en cuanto al índice de ciudades globalizadas (Taylor et al., 2012), lo que muestra que la economía global tiene un importante nodo de conexión en la ciudad, solo superado en América Latina por las ciudades de Sao Paulo (puesto 25), Ciudad de México (puesto 31) y Buenos Aires (puesto 35). Entre los grupos de extrema pobreza, la tasa de desempleo casi cuadriplica el promedio nacional y es quince veces mayor que la de los sectores más ricos. Esta situación es particularmente marcada entre jóvenes de las comunas pobres, que presentan niveles de desempleo varias veces superiores al promedio nacional; y entre mujeres, en especial las jefas de hogar y cuyo ingreso es el principal en la manutención de la familia, situación que se da en 22% de los hogares del país.
El escenario más optimista de acuerdo a las estimaciones para Chile, nos deja como el país más desigual entre países ricos y como el sexto más desigual a nivel global. Sin embargo, ambas pueden tener un impacto negativo en la economía del país, limitando la capacidad del gobierno para financiar servicios públicos y contribuyendo a la desigualdad económica. La globalización, entendida como el proceso de integración y conexión entre países y economías, ha tenido un impacto en todas las esferas sociales. Por su parte, para Jesús Martín-Barbero es en el espacio de lo nacional y lo local donde la cultura se mundializa, pues, como afirma el autor, globalización no equivale a una mayor difusión de productos sino a la rearticulación de las relaciones entre países desde una des-centralización que concentra poder, y un des-enraizamiento que hibrida las culturas (Martín-Barbero, 2004).
Uno de los estudios precursores en este ámbito (Duff & Mac Cammant) sitúan a Chile entre los tres países con más bajos índices en América Latina. Algunos enfoques teóricos en este ámbito permiten sostener que, para superar el miedo, las personas tienden a cierta adaptación conformista, a homogeneizar sus creencias y comportamientos, y a sobrevalorar la fuerza y el poder como medio de resolver diferencias. desigualdad en las clases sociales Por su parte, el estudio de Oviedo y Rodríguez citado muestra, al menos como conclusión parcial, que la inseguridad ciudadana se asocia positivamente a la debilidad de los valores democráticos, a la existencia de una evaluación negativa de las instituciones sociales, al pesimismo en relación con el futuro del país y a una actitud negativa hacia los medios pacíficos de resolución de conflictos.
Es así como los gastos vinculados al consumo de agua, electricidad, aseo y recolección de basuras o mantenimiento del alumbrado público, jardines, semáforos o señalización de tránsito, que en conjunto se consideran en el ítem de gastos municipales de Bienes y Servicios, son mayores en las comunas con altos ingresos propios en relación al número de habitantes. En relación al proceso de descentralización, es oportuno destacar que existió previamente una política pública al respecto durante el régimen militar de Augusto Pinochet. El gobierno militar creó la Comisión Nacional de la Reforma Administrativa (CONARA) en el año 1974 con el fin de que el desarrollo económico pudiera llegar a todo el país. Sin embargo, como destacan Lira y Marinovich (2001), este proceso estaba más enfocado en generar nuevas estructuras de relación entre la sociedad civil y el Estado.
Los servicios personales que incluyen educación y salud fueron en 2014 el segundo sector económico de mayor importancia en el país, llegando a representar un 12,9% del PIB nacional. También la cuarta actividad económica en importancia en el país, la industria manufacturera, concentró su actividad en un forty five,94% en la RMS. Por su lado, las actividades de comercio, restaurantes y hoteles igualmente se concentraron en la capital, siendo este sector económico el quinto en importancia para el país – el 11,4% del PIB nacional en 2014 – y teniendo la RMS una concentración del sixty four,96% de este tipo de actividad en Chile. Sólo el sector de la minería, que es el tercero en importancia económica (representando un 12,2% del PIB nacional) no está concentrado en la RMS, puesto que la actividad minera en la región sólo corresponde a un 2,49% del complete en el país. Otros sectores económicos concentrados en la RMS son los servicios de vivienda (56,63% de la actividad total del sector se da en la región), el transporte y las telecomunicaciones (40,93% de actividad en la región), y la administración pública, que en Santiago concentra el 39,55% del total de la actividad económica que genera en el país.
Esto genera desafíos para supervisar y controlar el movimiento de dinero y bienes a través de las fronteras internacionales. Además, la globalización ha llevado a un aumento en la movilidad entre distintas nacionales, lo que puede complicar la protección de los derechos fundamentales. Es factible asumir a estas alturas que dicho fenómeno surge en un inicio con la consolidación del mercantilismo del siglo XVII, se articula a través de la industrialización del siglo XVIII, por medio del proceso de colonización y la división internacional del trabajo y, por último, se reafirma con la revolución tecnológica de la década de los ochenta y noventa. Estudio sobre la relación entre desigualdad, instituciones y globalización en Chile, entre 1850 y 1973. Todo lo anterior refleja a un sistema psicopolítico y económico que, falazmente revestido de paladín de la libertad, no logra desdibujar su verdadera esencia… Individualismo, propiedad, orden y consumo; la sociedad, como una vez dijo Margaret Thatcher, no existe. “El sistema solo funciona bajo la condición el individuo tenga la disposición de adaptarse a los cambios y procesos, de someterse a convenciones que no serán los resultados de una planificación racional.