Alarmantes Cifras Sobre Niñez, Pobreza Y Situación De Calle

La incidencia de repetición para el GE fue 60% y para el GC de hermanos eutróficos fue 53%, siendo para niños del conurbano bonaerense con NBI forty three,6%10. El nivel socioeconómico se determinó por medio del Indice Específico para poblaciones urbanas homogéneas de NSE bajo27. Una descripción exhaustiva de los instrumentos, acciones comprendidas y métodos utilizados1, así como los resultados obtenidos en las variables que no son objeto de análisis para esta publicación, se encuentran en los respectivos documentos.

El artículo describe las condiciones de vida de la infancia en situación de pobreza en España desde una perspectiva multidimensional. Para ello, se realiza una aproximación a cada una de las dimensiones, componentes e indicadores de bienestar infantil a partir de datos secunda­rios procedentes de fuentes estadísticas e in­formes de entidades y organismos vinculados al estudio de la pobreza. Los resultados ponen de manifiesto que los niños con menores recursos presentan niveles de privación superiores en comparación con aquellos de mayor nivel ad­quisitivo. Un análisis que pone de relieve el im­pacto de la pobreza económica en su vida coti­diana, pero que necesita combinarse con otros indicadores que examinen el bienestar desde un enfoque multidimensional, a fin de abordar las diferentes manifestaciones de la pobreza en su complejidad.

La implicancia de este hallazgo consiste en que, ante un número menor de palabras escuchadas, y en volúmenes de tales dimensiones, las niñas y los niños desfavorecidos dispondrían de menor vocabulario, de menos acceso a la gramática y, finalmente, a un menor capital cultural. Diversas iniciativas -por ejemplo, la propuesta de Bloomberg Philanthropies en Rhode Island-, desde aquel 1995 han propuesto que estas niñas y niños puedan escuchar más palabras durante su temprana infancia de modo de superar tal brecha. Aun en ese contexto, en la comunidad de lingüistas la misma noción de la brecha ha sido fuertemente cuestionada, porque desde otro tipo de análisis, estimar las cantidades de palabras escuchadas es en sí mismo un problema y, en consecuencia, los datos deben ser tomados con cautela.

Unicef concluyó que una clara desmejora en las condiciones de vida de los niños y adolescentes de Argentina, más significativa en los hogares monomarentales y en aquellos que tienen a la persona de referencia con un trabajo formal. La Unicef señaló que a finales de 2023, más de siete millones de infantes eran pobres por ingresos, lo que afectaba al 57,5 por ciento del whole, y que 2,four millones de niños (19,4 por ciento del total) se vieron alcanzados por la indigencia. Cómo se incorporan los derechos sociales a la salud, al trabajo, a la educación y a la vivienda será uno de los debates claves de la discusión constitucional. Las organizaciones de la sociedad civil, en especial las que trabajan en pobreza, tienen mucho que decir al respecto ¿Hacia dónde debemos avanzar? Reunimos a algunas de ellas para profundizar en las propuestas que recogieron en el documento “Constitución y Pobreza”.

No deja de sorprender el promedio de edad de quienes enfrentan esta situación, 15,6 años, y que cerca de un 18% sea menor de 14 años, siendo el rango entre 10 y 14 años la edad en la que declaran -mayoritariamente- haber dormido o pasado la primera noche en la calle. La educación está profundamente relacionada con la posibilidad de acceder a un trabajo adecuado, por eso, cuando los estudiantes no logran adquirir las competencias necesarias para su adecuada inclusión laboral, las opciones para generar ingresos que les permitan satisfacer sus necesidades básicas se reducen significativamente. A pesar de los avances conseguidos desde entonces, persisten muchos desafíos, entre ellos la situación que viven las niñas y niños más desfavorecidos. Luego de conocer esta información, podemos analizar que según los factores que determinan el estado de pobreza claramente la población inmigrante se ve más afectada que la población chilena.

Uno de ellos, por ejemplo, reveló que entre los 15 y los 21 meses de edad, los niños de los padres más altamente educados suben hasta lo más alto de la distribución, en cambio, los niños de los padres con menor educación lamentablemente está cayendo a la parte más baja de la distribución en términos de su desarrollo cognitivo. Que nacer y crecer en circunstancias socioeconómicas precarias impacta negativamente en el bienestar de los niños, niñas y adolescentes, generando en muchos casos consecuencias desfavorables que perduran durante toda la vida. En este sentido, la pobreza y la vulnerabilidad socioeconómica limitan las potencialidades inherentes a todo ser humano, especialmente en las etapas cruciales del desarrollo, como la primera infancia. El que el Estado no considere a los niños, niñas y adolescentes, de acuerdo a sus distintos niveles de desarrollo y de autonomía progresiva, como sujetos de derecho afecta a la larga a la sociedad completa. Así lo han demostrado los estudios del Observatorio de Niñez y Adolescencia a través de sus distintos informes Infancia Cuenta.

Desde Unicef afirman que “es importante que se entienda que el problema de la pobreza infantil tiene particularidades propias de la etapa del ciclo de vida de este grupo, que va desde la gestación a los 17 años. Durante esta etapa las personas tienen necesidades de desarrollo que, si no son abordadas de manera oportuna y pertinente, pueden traducirse en situaciones de inequidad que persistan hasta la adultez, propiciando la reproducción intergeneracional de la pobreza”. Del mismo modo, los números son aún más preocupantes en el caso de niños menores de siete años, de los cuales el 6,6% vive en situación de extrema pobreza y el 9,9% en pobreza no extrema. Desde entonces, muchos cambios han ocurrido, la sociedad ha comprendido que niñas y niños son personas en desarrollo, portadoras de derechos que irán ejerciendo progresivamente según la evolución de sus facultades. En estos 30 años se eliminaron discriminaciones injustificadas, como la diferencia entre hijos legítimos e ilegítimos, y se ha avanzado en asegurar el derecho a la educación, a la salud, a tener y vivir en una familia, a ser representados en un tribunal, entre otras tantas materias. Estos datos evidencian no solo el brutal efecto que tendrá la pandemia, sino además la tragedia que se viene para los niños y niñas de la región, esto pues no son datos vacíos y descontextualizados, la pobreza infantil en la región alcanzaba ya antes de la pandemia al 40%.

pobreza en la niñez

La herramienta empleada para llevar a cabo esta medición es la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen), la cual es mandatada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia. En 1990, Chile ratificó la Convención sobre los Derechos del Niño (en adelante CDN) y se comprometió pobreza estructural que es internacionalmente a la protección de los derechos de la niñez desde un enfoque de derechos humanos. Esto implica el reconocimiento de niños, niñas y adolescentes como titulares de derechos, tanto civiles y políticos, como también derechos económicos, sociales y culturales.

En el T3, el valor medio de cociente intelectual obtenido por el GE es categorizado por la prueba como «límite con la deficiencia mental», no conteniendo necesariamente implicación diagnóstica, ya que es una observación puntual. Sin embargo, desde la práctica asistencial, ya a estas edades los niños que se ubican en categorías tan cercanas al nivel, «límite con la deficiencia» o «fronterizos», como se los denomina comúnmente, presentan muy pocas probabilidades de revertir estas puntuaciones hasta llegar a valores de normalidad. – Es de destacar que, si bien la media para ambos grupos no alcanzaba los valores esperados para la población de referencia de la prueba, el GC presentaba un número importante de niños (65%) en la categoría de normalidad. En esta publicación pretendemos resaltar la problemática que surgió a partir de los resultados hallados en las evaluaciones del desarrollo psicológico, dado que dentro del proyecto general adquieren relevancia propia y merecen una reflexión particular. Desde el año 1984 hasta 1989 nuestro Grupo de Estudios en Rehabilitación Nutricional de la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires (GEREN-CIC) llevó a cabo una investigación prospectiva longitudinal en niños desnutridos pertenecientes a hogares pobres del área urbana marginal del Gran La Plata12. Misma línea sigue Francis Valverde, directora ejecutiva de la Asociación Chilena Pro Naciones Unidas (Achnu), quien asegura que “la infancia en Chile sigue siendo la población más vulnerada y empobrecida y esta situación no está cambiando a medida que pasan los años”.

Pobreza es que a un niño de 9 años, lo viole la ex pareja de la madre, cuando ésta lo mandó a las 2 de la madrugada a pedirle plata. Pobreza sería que una bebé, a quien su madre dice amar y adorar por ser lo más importante en su vida, esté en abandono durante 6 meses, porque en seis meses, nunca tuvo $ 1180 para la micro e ir al hogar. Pero sí tuvo para comprar pasta base o marihuana, y cuando la fueron a visitar desde el hogar, la encontraron a mediodía durmiendo y aun drogada. –Hay niños que se saltan comidas porque saben que no hay más o que si ellos comen, sus padres no lo harán, y empiezan a pasar de largo. Así, sus necesidades empiezan a ser inadvertidas, a volverse invisibles, lo que resulta muy tóxico a nivel cerebral para ellos.

En cuanto a “salud y bienestar” Chile se sitúa en el puesto 40, mientras que en “paz, justicia e instituciones sólidas” se ubica en el lugar 39. En el ámbito privado las formas de crianza se modificaron a tal grado que, el castigo y la disciplina rígida dejaron de ser considerados métodos legítimos de educación, lo que no ha evitado que sigan presentes prácticas de maltrato y abuso hasta el día de hoy. Basepublica es un medio de comunicación y un espacio para el diálogo entre las personas y Ong que están cambiando pobreza estructural el mundo. Es por todas estas razones que Unicef ha llamado urgentemente al Estado de Chile a proveer de un Sistema de Protección enfocado en la infancia, y además a aprobar cuanto antes la Ley de Garantías y Protección Integral de los Derechos de la Niñez y Adolescencia. Respecto específicamente de las consecuencias que acarreará  para los niños, particularmente los más vulnerables, el no poder acceder a ese especio educativo por causa de la pandemia, la Educadora de Párvulos manifestó que pueden ser irrecuperables.

Porque los discursos grandilocuentes, sobre el compromiso con la niñez y la adolescencia, carecen de sentido cuando, como correlato concreto, no se observan acciones decididas que les consideren y traten como sujetos de derecho”, señaló la defensora de la Niñez Patricia Muñoz. Kimberly Noble y Rodrigo Aguirre explicaron la urgencia de actuar en edades tempranas para impedir la desigualdad desde la cuna y la subsecretaria de la niñez, Carol Bown habló sobre las políticas que tiene el gobierno en la materia. Aunque Chile ratificó hace unos 30 años la Declaración Universal de los Derechos, persisten numerosos obstáculos para su implementación plena en el país. En este ámbito, urge una Ley de Protección Integral o de Garantía de Derechos de la Niñez (pese a existir un proyecto de ley presentado en 2015, aún sin ser aprobado).

Sin embargo, hay quienes postulan que el problema de la pobreza trasciende mucho más allá de las necesidades básica para subsistir, englobando factores como el acceso a la educación y el desarrollo integral humano. El cierre prolongado de las escuelas en América Latina (70 semanas promedio de cierre frente a forty one semanas en el resto del mundo), exacerbó las desigualdades preexistentes en materia de acceso, inclusión y calidad. Si no se articulan políticas de salud con las de educación a corto plazo, alerta la Cepal, puede traer serias consecuencias en las trayectorias educacionales y laborales de estos jóvenes, adolescentes y niños.