Hace más de diez años se abrió un expediente penal por colonos de Las Américas, pero los agraviados quedaron en el limbo por, supuestamente, no haber acreditado el cuerpo del delito. “Podría decirse que las Américas es la colonia más fresa de Ecatepec”, estima Miguel Ángel Juárez, empresario que vive en el vecindario que considera “una burguesía inmobiliaria”. Él conoce bien El Salado, pero confiesa que sus vecinos de Las Américas no irían allá pues “tienen un estigma de que de allá vienen a atracarnos, pero si tuviéramos tanto pues la verdad tampoco viviríamos aquí”. En efecto, Las Américas es la colonia con mayor poder adquisitivo de Ecatepec, pero no por eso puede considerarse una colonia de ricos.
well being inequalities in the region of the americas using completely different methodological desigualdad entre paises ricos y pobres approaches – artículo en ingles]. En este trabajo los autores hacen un análisis descriptivo de la situación de la salud en la región de las Américas,
Desde hace décadas, el escenario regional de las desigualdades en salud acompaña el patrón de las desigualdades sociales y económicas, con avances y retrocesos. Así como mencionamos que en América Latina aumentó la esperanza de vida de la población, también ha disminuido 42% la mortalidad infantil desde 2003, un indicador altamente wise a la pobreza y la desigualdad. Pero esa reducción presenta disparidades cuando miramos el caso de los niños y niñas afrodescendientes o indígenas22. Algo related se ha producido con la mortalidad materna, que se redujo 32% a escala regional desde el año 2000 en adelante, pero con importantes diferencias entre los países y dentro de ellos.
25, el propio Sen propuso que la equidad es un concepto simultáneamente multidimensional e intersectorial, especialmente si se aplica a la salud. En lo referente a su multidimensionalidad, incluye desde aspectos más estrictamente epidemiológicos -como riesgos de enfermarse o probabilidades de tener buena salud-, hasta la “distribución de la atención sanitaria, […] la justicia de los procesos y, por lo tanto, la ausencia de discriminación en la prestación de la asistencia sanitaria”. En este sentido, afirma que “ciertamente, la equidad en salud no trata solo de la distribución de la salud, por no hablar del campo todavía más limitado de la distribución de la asistencia sanitaria”25. Refuerza así el carácter intersectorial de la salud, al afirmar que la equidad en salud extrapola el campo de la salud, incluyendo el tema de la distribución de recursos económicos y considerando el papel essential de la salud en la vida y en la libertad humanas40, para alcanzar “el ámbito más amplio de la justicia de los acuerdos sociales”25. En este texto, propongo un recorte de la problemática teórica de las desigualdades, como paso inicial para formular de modo sistemático y con mayor precisión, quizá como “pensamiento claro”, su articulación con el problema de la determinación social de la salud. El análisis está centrado en cómo se ha realizado el proceso de construcción teórica en la bibliografía sobre desigualdades en salud, concediendo especial atención al rigor conceptual y, en consecuencia, a la formulación de una estructura terminológica adecuada y específica.
Las desigualdades son una parte inherente de la vida cotidiana y se presentan en múltiples áreas de nuestra vida. Una de las aplicaciones más evidentes de las desigualdades en la vida cotidiana es el ámbito económico. En nuestra sociedad, existe una brecha significativa entre las personas de diferentes niveles socioeconómicos, lo que se traduce en desigualdades en el acceso a recursos y oportunidades.
Existen diferentes formas de analizar el concepto de raza como determinante en la disparidad en salud. Uno de ellos es ver la raza como una categorĺa biológica, una segunda perspectiva es verla como una forma de aproximación a la clase social y la estratificación socioeconómica, y una tercera perspectiva es verla como un constructo distinto, semejante a una casta, es decir ni como issue biológico, ni como representante de la clase (Kawachi, Daniels, & Robinson, 2005). Hay una serie de situaciones en las cuales el mundo cientĺfico puede contribuir a la DS, uno de ellos es focalizar los esfuerzos en las causas de DS y desarrollar estrategias de intervención. Otra alternativa es focalizar las investigaciones en identificar las causas de DS en términos de recursos humanos, por ejemplo identificar decisiones de los sistemas de salud que perpetúan dicha disparidad (Northington & Stone, 2006). El Instituto de Medicina de los Estados Unidos (IOM) analiza los focos de disparidad a 2 niveles, uno de ellos a nivel de los sistemas de salud, el cómo operan y el marco regulatorio legal, y el otro nivel es la discriminación a nivel individual, paciente-proveedor (Institute of Medicine, 2003). Si nos basamos en la definición de disparidad como diferencia, estudiar DS significarĺa estudiar todas aquellas diferencias en los indicadores de salud entre los diferentes grupos poblacionales, sin embargo el concepto focaliza especĺficamente en las diferencias que son evitables, imparciales e injustas.
Resulta interesante por innovador este diseño metodológico y entre los hallazgos principales, los autores reconocen que los mayores niveles de ingreso, educación y posición laboral, se vincula positivamente con una mejor percepción de las personas sobre su estado de salud y, el aumento de edad, con una peor salud autoreferida. Se corroboró la necesidad de implementar acciones que mejoren las condiciones sociales, tanto individuales como de vecindad y contribuyan a una percepción más positiva de su propia salud. Esta percepción, en un nivel de generalización, se considera un buen indicador de la calidad de vida y con valor instrumental, para predecir la morbilidad y la mortalidad al interior de las comunidades. Hasta la década de los eighty del siglo XX, existió un «silencio investigativo»sobre ese enfoque social de la salud, roto en el continente europeo, con el reconocido informe Black y en la región de Las Américas, desde los núcleos de pensamiento médico social en México, Ecuador y Brasil. El grupo de trabajo sobre desigualdad en salud, presidido por Sir Douglas Black, revitalizó el análisis de las variables sociales de la salud dentro de la investigación sanitaria y, reconoció la estructura social y económica, como el principal factor determinante de la salud y el bienestar de la población de Inglaterra y Gales. Eso implica considerar que, en las sequence semánticas tomadas como fundamento lingüístico de los conceptos, existe un componente etnológico esencial para comprender la dinámica de las desigualdades, inequidades e iniquidades en salud en la sociedad.
En economías de mercado como la mexicana, con un débil sistema de protección social estatal, la desigualdad en los ingresos outline los niveles y la calidad de vida de las personas e incluso, debido a la segmentación de los servicios de salud, puede ser determinante en la vida o muerte frente a enfermedades o accidentes. Por ejemplo, algunas localidades registran elevadas tasas de mortalidad materna debido a la carencia de servicios cercanos de salud especializados y la falta de recursos de las familias para pagar el costo de los traslados a los hospitales ubicados en las ciudades de mayor tamaño. Un tipo de desigualdad fundamental –que, además, es acumulativa de generación en generación– se relaciona con la propiedad diferenciada de bienes y recursos para la producción o para la obtención de rentas, tales como tierras, recursos naturales, de capital (inmuebles, equipo y maquinaria) y recursos financieros. En México, en el contexto de una sociedad fuertemente oligopolizada –y pese a las denuncias de la enorme acumulación de riqueza por unas cuantas personas y familias– no se cuenta con estudios que muestren, con sustento estadístico, cuál es el estado real de la distribución de la riqueza. En este marco, el presente artículo repasa, a partir de diversos datos y estadísticas, la historia reciente de la desigualdad en México y el modo en que ha evolucionado la estructura de ingresos de las familias.
Cabe señalar que cada individuo, independiente de su raza, responderá de manera diferente a los agentes medioambientales (Olden & White, 2005), lo que hace aun mas difĺcil establecer investigaciones en esta área. Por esto es que autores explican que el grado de estrés al cual el individuo este expuesto seria el issue determinante para desarrollar o no una determinada enfermedad o daño (Gee & Payne-Sturges, 2004). Cabe señalar que uno de los mayores estresores seria la discriminación racial (Gee & Payne-Sturges, 2004). A continuación, serán descritos los diferentes factores considerados determinantes de DS por la literatura (Cuadro 1).
Los indicadores en materia de salud, vivienda, infraestructura sanitaria y acceso al progreso científico y tecnológico muestran enormes disparidades de acuerdo con el origen étnico de la población. Aunque en los últimos años se registraron algunas mejoras en la distribución del ingreso, relacionadas sobre todo con las remesas y la diversificación de actividades en el medio rural, la situación sigue siendo crítica. La desigualdad en México es un fenómeno complejo y multifuncional, que se relaciona y se retroalimenta con la discriminación ética, de género y de lugar de residencia.
El gasto en seguridad privada en el país es de 1.7 puntos del PIB, lo que representa siete veces más que el gasto en seguridad pública federal. Cada dos horas y media alguien compra un auto blindado y en Nuevo León, uno de los Estados más ricos de México, hay ocho veces más guardias de seguridad privados que policías y agentes de tránsito. Su México es un gueto protegido por seguridad privada donde sus niños se conocen en las mismas escuelas privadas y sus ancianos son velados en las mismas funerarias.
El término gradiente social describe el fenómeno de que por cada paso en la escala socioeconómica hay una disminución correspondiente en el estado de salud. A diferencia de la mayoría de los planes de salud existentes, la estrategia se dirigía a los determinantes de la salud. Ello implica tener objetivos distintos a los más clásicos relacionados con la disminución de las desigualdades en la mortalidad o la morbilidad (p. ej., los objetivos de Estados Unidos formulados en el informe «Healthy people» de ), enfoques que suelen basarse en una visión más biomédica de las causas de la salud y la enfermedad, y mucho más centrados en las personas. Centrarse en los determinantes de la salud proporciona un papel menos relevante a los servicios de salud y requiere una acción multisectorial. La pandemia encontró a los países de América Latina con economías frágiles, disaster políticas, desconfianza en las instituciones y sistemas de salud que debieron enfrentar un nivel de demanda sin precedentes y se vieron obligados a reorganizarse rápidamente para poder dar una respuesta.
Cuando una persona pertenece a un colectivo socialmente menos favorecido, tiene peores resultados en lo relacionado con los indicadores de salud. La perspectiva filosófica ha sido descrita como una forma de lograr una real comprensión de DS, dado que es más bien conservadora en la explicación de la génesis del problema (Gibbons, 2006). Marcos de referencias conservadores colocan la disparidad en términos de cuidado de salud, y ven las causas en términos de conductas de los pacientes, responsabilidad, empoderamiento y calidad del cuidado de salud, soluciones como mejorar el acceso incrementando la información tecnológica en salud o mejorando la actual purple desigualdad infantil de seguridad en el sistema (Gibbons, 2006).
Mientras que a escala global el embarazo adolescente representa 11% del complete de los nacimientos, en América Latina y el Caribe esa cifra asciende a 19%24. No es casualidad que una región que padece una fuerte desigualdad presente altos índices de embarazo en adolescentes, y también existe una vasta cantidad de evidencias sobre la relación de estos índices con la pobreza, los bajos ingresos, el abandono de la escolarización y el incremento de la vulnerabilidad y la exclusión social. En este texto pretendo articular la problemática teórica de las desigualdades económicas y sociales con la determinación social de la salud. Inicialmente presento una síntesis de las teorías de justicia y equidad de Rawls y Sen, que ilustran la perspectiva dominante de las epistemologías del norte.