Tendíªncias Da Segregaí§í£o Social Em Metrópoles Globais E Dasiguais: Paris E Rio De Janeiro Nos Anos Eighty Revista Eure Revista De Estudios Urbano Regionales

Las políticas de descentralización implementadas, por ejemplo, a través de un aumento mayor en la inversión pública de decisión regional no parecen estar vinculadas con la reducción observada en los Índices de Gini de las regiones del norte puesto que la inversión pública en las mismas fue escasa en el periodo analizado, ni han conseguido reducir la desigualdad en otras como la RMS. Es por ello necesario que en el caso de la RMS se realice un análisis más pormenorizado de la interrelación entre dinámicas propias de la economía global y otras instancias político-administrativas de carácter local, ante el rol protagónico que ha tenido la ciudad de Santiago como punto de conexión de los flujos económicos globales. Por lo anteriormente destacado, se considera oportuno generar un debate sobre políticas públicas que podrían mediar en la dinámica por la cual los territorios donde se concentra el poder económico global concentran en mayor medida el desarrollo económico y el bienestar social. El impulso de centros industriales, por ejemplo, a través de incentivos tributarios para localizar los mismos en comunas en las que existe una menor actividad económica y son las menos desarrolladas, tanto en la RMS como en otras regiones del país, podría ser un camino a valorar. Además, generar estructuras político-administrativas más integrales en las ciudades del país donde se concentra la actividad económica, a través de Alcaldías Mayores o GORE con autonomía y recursos adecuados para distribuir la riqueza generada, podría ser otra política de mediación al respecto.

Se dice (o al menos se asume) que no hay nada que los países puedan hacer para domar las fuerzas del mercado y que cualquier intento de common el grado de desigualdad tendrá efectos negativos ineludibles sobre el crecimiento económico. En Chile, si consideramos las contribuciones para la seguridad social como parte de los impuestos al ingreso, este grupo de impuestos representa un 36,9% de la recaudación whole del año 2016. El promedio de la OCDE para el mismo periodo fue de un 59%.[13] Por lo tanto, el sistema tributario chileno no solo recauda poco en términos comparados, sino que además le da mucha importancia a los impuestos al consumo y una menor importancia relativa a los impuestos al ingreso. Además, existen razones para pensar que la progresividad nominal del impuesto al ingreso está mermada por una masiva práctica de elusión tributaria por parte de los grupos más ricos (ver aquí y aquí). En easy, éste consiste en que las personas paguen todos los años una proporción determinada de sus ingresos.

Por ejemplo, las denominadas “big four” de la consultoría a nivel internacional (Price Waterhouse, Deloitte, KPMG y Ernst & Young) tienen sus oficinas cerca de la considerada popularmente como la zona de negocios de “Sanhattan”, en calles como Isidora Goyenechea o Avenida Costanera. Alrededor de esta zona de negocios, donde se ubican las empresas de servicios financieros y empresariales avanzados, se concentran los barrios con mayor nivel socioeconómico de la capital. Esto se muestra en el mapa sobre grupos socioeconómicos en el Gran Santiago (Figura 3), donde se visualiza que los barrios con mayor estrato socioeconómico se concentran fundamentalmente en barrios de comunas como Las Condes, Vitacura y Providencia. Desde 1980 se ha consolidado a lo largo del mundo un nuevo fenómeno histórico-cultural que ha impactado a las sociedades a lo largo del mundo (Ottone, 2011). La globalización ha generado un nuevo contexto que ha permitido que se expandan redes y flujos multinacionales (Castells, 2009), haciendo posible la conformación de un entramado de intercambios entre estados nacionales a través de distintos actores transnacionales (Beck, 2006), pero también entre personas, organizaciones y grupos sociales a lo largo del mundo. Esto produce que ciertas actividades comiencen a operar como una sola unidad a escala mundial y de forma simultánea (Castells, 1999), e incluso contradictoria (Giddens, 2007).

Hasta este momento nos hemos referido a la progresividad o regresividad de los sistemas tributarios, pero no hemos hablado con mayor detalle de sus componentes. Lo cierto es que los sistemas tributarios se componen de múltiples tipos de impuestos, todos ellos con diferentes ventajas y limitaciones. Una de las principales causas que ha conducido a dicha desigualdad en el contexto de la globalización es –usando la terminología de ciertos politólogos- la Corporatocracia, es decir, el gobierno invisible de las corporaciones, compuesto por la élite política, empresarial y financiera. Este paradigma estructural, obedece a un modelo de injusticia global, provocando que una pequeña parte de la población tenga el poder y el control de la (in)estabilidad social y económica del resto del mundo.

Debemos ocuparnos de Santiago y de las regiones, con acciones complementarias en beneficio del país en su conjunto. Las diferencias entre los sistemas legales de diferentes países pueden crear obstáculos para la cooperación y el comercio internacional, dificultando la reconciliación de diferencias en valores y principios subyacentes a distintos sistemas legales. La armonización legal, que se refiere al proceso de unificar o hacer compatibles diferentes sistemas legales para facilitar las relaciones internacionales, es un desafío significativo en el mundo de hoy. En definitiva, en su función de difusores culturales, los medios ejercen influencias socioculturales que fomentan y reproducen mediante diferentes formas de socialización como son los valores, creencias, normas, conocimiento, entre otros.

El poder de conexión con el que cuenta la ciudad muestra una importante presencia de redes de empresas proveedoras de alta especialización, tanto financieras como de servicios avanzados o de comunicación. Las mismas se localizan principalmente en Las Condes, y junto a las comunas aledañas son las que mayor nivel socioeconómico tienen. En el caso del poder espacial de la ciudad, Santiago no aparece entre las 50 ciudades con mayor importancia en el mundo. A pesar de no contar con una gran presencia de headquarters, la ciudad cuenta con importantes redes de empresas financieras, de servicios avanzados y comunicaciones, que proveen a las multinacionales en sus operaciones globales. Fusionando estas dos medidas, Santiago se sitúa en el puesto 50 en cuanto al índice de ciudades globalizadas (Taylor et al., 2012), lo que muestra que la economía global tiene un importante nodo de conexión en la ciudad, solo superado en América Latina por las ciudades de Sao Paulo (puesto 25), Ciudad de México (puesto 31) y Buenos Aires (puesto 35).

La percepción de inseguridad y el abandono del espacio público, tanto físico como social, funciona como un proceso round y acumulativo. Todo lo anterior nos lleva a pensar que, si perdemos los espacios para la interacción social -en último término, el lugar donde se construye la identidad colectiva-, aumenta la percepción de inseguridad. Aunque se la considera una ciudad segura entre las grandes urbes latinoamericanas, sus habitantes perciben Santiago globalizacion desigualdad economica como un lugar amenazante, una ciudad de miedo. En la actualidad es relativamente generalizada una sensación de inseguridad vinculada a la violencia delictiva y al sistema económico y político-institucional. No obstante, la percepción de inseguridad no se basa, ni tiene su correlato, en las tasas de victimización. Decíamos que la calidad del servicio varía según el subsistema educacional de que se trate, dependiendo del sector socioeconómico al que está dirigido.

Igualmente, sería oportuno que esta autoridad desarrollara una visión integral de la ciudad y contara con los recursos adecuados para asumir la compleja tarea de redistribuir recursos entre las dispares comunas urbanas como forma de mitigar los procesos de concentración y expulsión que se producen en ciudades globales como Santiago de Chile. Como destaca ONU Hábitat (2012), “sin una adecuada planificación urbana la gestión del territorio puede convertirse en un gran problema cuando el área formada por un continuo urbano es gobernada de manera fraccionada” (p. 149). Sin una coordinación integral de las grandes urbes “resulta imposible asegurar un mínimo de equilibrio en la localización de equipamientos, la prestación de servicios y la distribución de la riqueza, con el riesgo de contribuir a una alta polarización física y social” (ONU Hábitat, 2012, p. 149). En definitiva, se corrobora que Santiago de Chile se ha convertido en una ciudad global en los últimos años, puesto que la economía mundial cuenta con un importante nodo de conexión para sus flujos globales.

Pero este crecimiento ha sido acompañado por lógicas de concentración y exclusión, lo que se evidencia en que las empresas multinacionales más importantes del mundo concentran prácticamente el 40% del PIB mundial actual. Las corporaciones incluidas en el ranking Global 500 de Fortune (2016) tienen ingresos anuales por un volumen de 27,6 billones de dólares, lo que supone que en promedio entre dos y tres empresas por país facturan four de cada 10 dólares que se producen en el mundo. Esta concentración se muestra también  en el estudio Global Metromonitor, dado que 300 ciudades del mundo (en promedio menos de una por país), en 2014 concentraron el 47% del PIB mundial y fueron responsables del 38% del crecimiento económico a escala global (Parilla, Leal, Berube y Ran, 2015). Esta concentración ha generado que las desigualdades económicas se hayan incrementado desde la década de 1980, tanto a escala mundial (Milanovic, 2010) como al interior informacion de la organizacion social de los países desarrollados y en vías de desarrollo (Piketty, 2014). La población que tiene acceso a web en los países en vías de desarrollo es del 21,5% frente al 73,4% en los países desarrollados (Guillen, 2010), y el número de subscripciones a telefonía móvil representa un 60% en los países con menor renta per cápita, frente a un 124% en los países con mayores ingresos (Banco Mundial, 2016). Por otro lado, el análisis realizado muestra que mientras más carácter global ha tenido la actividad económica en Chile, más posibilidades de crecimiento económico se han generado en los territorios en que se han localizado las operaciones de la economía global.

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Leandro Prados de la Escosura, historiador económico y catedrático emérito de la Universidad Carlos III de Madrid, destacó en declaraciones a El País que Milanovic es un investigador capaz de opinar con criterio sobre prácticamente cualquier tema precise, desde la invasión rusa de Ucrania hasta la situación en Gaza. “Es una persona tolerante, que no busca convencer a nadie de sus ideas, no porque no quiera, sino porque cree que es una batalla perdida”, añadió Prados de la Escosura. Porque los votantes son bastantes miopes en su evaluación de la condición económica, premiando o castigando fuertemente al partido que viene, dependiendo de cómo ha andado la economía en los meses previos a las elecciones”.

Su principal autoridad es el alcalde, que dura cuatro años en el cargo y puede ser reelegido.8 La entidad colegiada de la municipalidad es el Concejo, que tiene una función normativa, resolutiva y de supervisión. Lo integran concejales electos a través de elecciones directas, mediante un sistema de representación proporcional; su cargo dura cuatro años y también pueden ser reelegidos. La instancia de participación de la ciudadanía es el Consejo Económico y Social Comunal, compuesto por representantes de la comunidad native organizada, y que tiene carácter consultivo. Este ejercicio muestra cómo los metros cuadrados aprobados no se distribuyen homogéneamente en la ciudad; al contrario, existe un crecimiento muy concentrado.

Está lógica de concentración impacta aún más en aquellas zonas que no cuentan con industrias y están alejadas de los centros de decisión y control de la economía. Municipios como Puente Alto o La Pintana, además de contar con procesos históricos de mayor marginalidad, se ven excluidos de las dinámicas económicas de alto valor agregado y dependen en gran medida del mecanismo de distribución del FCM. Estas dos comunas no tienen prácticamente ingresos municipales propios, puesto que los impuestos municipales favorecen a aquellos municipios en que se concentra la actividad económica.

Según ésta, los hurtos, los robos con fuerza y los robos con violencia, afectan más a las residencias que a las personas, instituciones o vehículos (Oviedo, 1994). Uno de los correlatos potencialmente más serios de lo anterior es que los habitantes de Santiago que tienen una percepción de inseguridad en la ciudad tienden a apoyar la resolución de conflictos nacionales por medios no-pacíficos, a diferencia de aquellos que consideran la ciudad o su barrio como un espacio seguro. Más aún, en ambos grupos -seguros e inseguros-, sorprende ver el alto porcentaje que apoya medios no-pacíficos, considerando el bajo índice de violencia en el país.

Hemos visto que, en términos de recaudación de impuestos, el tamaño del Estado en Chile es pequeño y que los ingresos fiscales que recauda provienen mayoritariamente de impuestos al consumo. A lo anterior se suma que los impuestos al ingreso, además de tener una relevancia secundaria, abren espacios para elusión y evasión, haciendo que la progresividad nominal se vea seriamente mermada.[18] Además, los impuestos al patrimonio prácticamente no existen. Además, la riqueza tiene la característica que suele transmitirse intergeneracionalmente, por lo que esta alta concentración de riqueza contradice principios de igualdad de oportunidades dentro de cada generación.[16] Coherente con el análisis de la primera columna, es evidente el riesgo que estos niveles de concentración suponen para el ejercicio democrático.

En función de lo anterior, se desarrollan y analizan algunos conceptos de globalización en términos generales, lo que sumado a los conceptos ya descritos, nos adentrarán en la revisión de la globalización económica en el siglo XXI, y más específicamente, desde el período precise, al año 2030. [9] Existe una tradición académica que sugiere que si no se le pueden poner impuestos a todos los bienes de consumo, el impuesto al consumo óptimo posiblemente impondrá distintas tasas a distintos bienes. Un problema de esta tradición es que no considera que impuestos diferenciados dificultan la fiscalización y abren espacio a la evasión y elusión, lo que a su vez afecta la eficiencia del sistema. Un segundo problema, más importante aún, es que los impuestos diferenciados óptimos dependen de elementos que no son observables, por lo que son muy difíciles de implementar. Como el IVA en Chile es homogéneo, y para no extender la discusión más allá de lo necesario, no profundizaremos al respecto. [3] Los datos tributarios, si bien representan una mejora sustantiva en relación a las encuestas de hogares, tampoco son perfectos.