Es decir, podrán opinar con imparcialidad a la hora de determinar si el precio se ajusta a “las condiciones de equidad similares a las que habitualmente prevalecen en el mercado” para emplear los términos que se usan en el proyecto. En definitiva, lo que hace el proyecto al respecto es permitir que sociedades relacionadas con los controladores de la corporación sin fines de lucro, lucren a través de contratos celebrados con ella, es decir, con la universidad, siempre y cuando se cumplan algunas condiciones. El proyecto de ley bajo discusión se propone “modificar la ley basic de educación” con el objeto de “regular las operaciones de todas las universidades con personas relacionadas, de modo que esa vía no sea empleada para obtener los beneficios económicos que la ley prohíbe”.
¿El temor a los controles y sanciones de la Superintendencia será tan grande? “Puede perseguirse la responsabilidad civil de uno de los directores, pero el artículo sixty six i establece que queda inhabilitado para hacerlo quien haya concurrido a la aprobación de la operación. ¿No es un incentivo para que los acuerdos se tomen por unanimidad y todos los directores queden inhabilitados para perseguir judicialmente la responsabilidad civil? El proyecto, como señalé el three de enero pasado ante la Comisión de Educación del Senado, permite “que sociedades relacionadas con los controladores de la corporación sin fines de lucro, lucren a través de contratos celebrados con la universidad, siempre y cuando se cumplan algunas condiciones”.
El ánimo de lucro tiene que ver, entonces, con la finalidad que explica la existencia de la entidad, y no con la actividad o giro desarrollado por ella. Por otro lado, las más antiguas son aquellas que trabajan en respuesta a emergencias. El 50% de los cuerpos de bomberos fueron creados antes de 1989. Por su parte, el 38% de las organizaciones de sociedad civil y ciudadanía fueron creadas antes de 1990.
Por tanto, incluso la rentabilidad comparada de los colleges con fines de lucro para sus graduados parece estar en entredicho. “Las universidades con fines de lucro tienden a parecerse a los preuniversitarios. Si queremos honrar el principio de la libertad de enseñanza y permitirlas por ley debieran organizarse como empresas comerciales, perder los privilegios de las sin fines de lucro y quedar sometidas a un severísimo estatuto especial”.
¿No puede el Estado fijar metas y controlar su cumplimiento? Los sistemas de acreditación estatal, los rankings, los índices de selectividad, la publicidad de los ingresos de los graduados, las publicaciones, y otras, aunque útiles, son meras aproximaciones. Los criterios son laxos, inexactos y de menor amplitud, es decir, lo que se evalúa, es incompleto y reductor. Para lo más importante, simplemente, no disponemos de medidas. La educación propiamente universitaria promueve, a la vez, bienes individuales (el joven se prepara para ejercer una profesión y se cultiva como persona) y públicos (se cultiva como ciudadano). Además, la universidad que investiga es un vivero de ideas y, eventualmente, de hallazgos y descubrimientos.
Sólo una matizada evaluación cualitativa en el intercambio en la clase y los trabajos escritos de los alumnos podrían decirnos hasta qué punto los estudiantes han aprendido las destrezas de la argumentación crítica”. Por cierto, en la universidad se puede y debe evaluar el conocimiento de los alumnos en determinadas materias. Pero siempre importantes dimensiones quedan fuera y -asunto delicado- se afecta el modo en que se educa. Si la prueba controla materials aprendido de memoria, el alumno va a memorizar.
Para consultas escribir al correo electrónico y o acudir presencialmente al Departamento de Organizaciones Comunitarias en Pedro de Valdivia N°3636, Ñuñoa. 2022 Corparaucanía – Todos los derechos Reservados. La Corporación es una institución promotora del desarrollo integral de La Araucanía, referente en Chile y con sólidas alianzas a nivel internacional.
Tal vez por eso la cuestión del lucro en la educación suscite tantas aprehensiones y preguntas hasta hoy y desde tan antiguo. Ya Sócrates ironizó a los sofistas por supeditar la educación al lucro y vender saberes que no tenían, en otras palabras, por “pasar gato por liebre”. El sofista, según Platón, es criticado por ser un “cazador de jóvenes ricos”, un “mercader (emporos) de los conocimientos del alma” y un “mercachifle (kapelos) de estos mismos conocimientos”. Haya sido justa o injusta la acusación, nos cube algo acerca del concepto de educación. Me gustaría invitarlos a reflexionar y discutir sobre esto.
La dificultad de comprobar el daño a la universidad es lo que aconseja el establecimiento de la norma preventiva. Dado el peso de las asimetrías señaladas, en principio, el estudiante está más protegido en una institución sin fines de lucro. Porque la cláusula de no distribución de excedentes, afirma Brian Pusser “remueve la posibilidad de que el afán de lucro incentive a los productores a explotar a sus consumidores”. Típicamente, como sabemos, los bienes públicos o son financiados por el Estado o por benefactores. O la cátedra la financia el emperador Adriano o el mecenas Plinio el Joven.
Y es ese espacio público lo que nutre la democracia. En el trasfondo presiento una ruda metafísica positivista. Lo que mido es, como creo que intuyó Heidegger, lo que puedo tratar como materials que moldeará mi voluntad. Es decir, lo que puedo medir es lo que puedo dominar. Los gobiernos tienen una tendencia pure a preferir esta mediciones porque ellas son mecanismos de control. Si el dinero del Estado fluye a lo medible, fluye a lo controlable.
Bajo este contexto, las organizaciones sin fines de lucro deben dar pasos hacia una mayor autorregulación e incorporar prácticas encaminadas a elevar sus estándares de transparencia, así como, también incorporar prácticas de gobiernos corporativos en sus directorios y organismos que las dirigen. Conocer la información básica de una organización tal como los miembros del directorio, misión, visión, presupuesto y el origen y destino de sus recursos; no sólo ayudan a mejorar su gestión interna, sino que también a fortalecer los vínculos y la confianza organizaciones con fines de lucro significado con sus distintos grupos de interés. Las universidades con fines de lucro tienden a parecerse a los preuniversitarios. Son instituciones más de adiestramiento e instrucción que universidades en sentido propio. Su aporte a la generación de bienes públicos, de existir, tenderá a ser muy magro. Si queremos honrar el principio de la libertad de enseñanza y permitirlas por ley debieran organizarse como empresas comerciales, perder los privilegios de las sin fines de lucro y quedar sometidas a un severísimo estatuto especial diseñado con esmero.
Más que una institución de formación private y ciudadana, y de investigación, será una institución de instrucción. Se organizaciones privadas sin fines de lucro centrará más en el alumno, entendido como consumidor. Más que motivar nuevas inquietudes se interesará en las que ya existen.