En 2021, la economía salvadoreña creció un 11,2 %, y el crecimiento se moderó hasta llegar al 2,6 % en 2022 y 2,7 % en 2023. Se prevé que el PIB converja en un 2,5 % en el mediano plazo, por encima de los promedios históricos, como consecuencia del consumo privado, la inversión pública y el turismo. Finalizado el primer gobierno de la Concertación, la coalición gobernante no tiene mayores dificultades para que su candidato Eduardo Frei Ruiz-Tagle, resulte electo con una holgada victoria. A diferencia de su predecesor, el nuevo mandatario menciona explícitamente en su programa de gobierno la necesidad de modernizar el Estado. Tello (2011) indica que “Es durante el gobierno de Frei donde se genera el primer proyecto de modernización de la gestión pública en el Chile post-autoritario (p. 250).
También si a un tribunal va un individuo inmigrante de otro país acusando a alguien nacido en el país que se hace la acusación se le trate igual que si fuese viceversa. Pero esta condición no se remite solo a diferencias en calidades de vida, ya que tiene asociado un conjunto de problemas que implican, especialmente, trabas a la justicia, a la convivencia y al desarrollo económico. Al igual que otras naciones de América Latina, su origen se remite a la Colonia, cuando se constituyeron las instituciones que la inician, como la concentración en la propiedad de la tierra y la relación jerárquica entre la clase alta y el bajo pueblo. Incluso los países más equitativos exhiben algún grado basal de desigualdad vinculado a la división del trabajo, la que requiere pagos diferenciados acorde a la complejidad de las ocupaciones o para el fomento de actividades que están sujetas a un appreciable nivel de riesgo, como la innovación y la labor empresarial. La desigualdad, del tipo que sea, supone graves consecuencias, tanto en el ámbito personal como en el ámbito social.
Así, los grupos (deciles o centiles) más ricos de las sociedades humanas detentan un porcentaje cada vez mayor del ingreso y de la riqueza. Si bien, el coeficiente de Gini (que mide la distribución del ingreso) mejoró de 0.54 a 0.forty desigualdad social 2022 eight entre 1989 y 2016, el 1% de la población más rica concentra el 43% de la riqueza nacional (Oxfam México). Hay abundantes pruebas para refutar tanto este como otros enfoques con una perspectiva lineal del progreso en materia de género.
Las guerras y los conflictos armados que existen en muchos países del mundo producen el desplazamiento de millones de personas que buscan un lugar seguro en el que vivir y tener un futuro. En algunos países, los refugiados sufren situaciones de rechazo, xenofobia y discriminación, lo que les lleva a una situación de desigualdad. La educación es la base para acabar con la desigualdad y para que todos tengamos las mismas oportunidades.
En definitiva, se trata de reafirmar un orden social que regula la vida y las conductas de los sujetos en una sociedad de mercado. Luego, vale la pena preguntarse, si en efecto la reforma a la gestión pública de las instituciones del Estado tenía como propósito adaptar el burocrático andamiaje público a la expedita fluidez del mercado neoliberal, o bien se trataría de un esfuerzo por establecer una nueva relación entre los ciudadanos y el Estado. Al parecer en la visión neoliberal, no existe contradicción entre ambos propósitos, en tanto prevalezca la libertad como principio de la actividad económica. Lo anterior, sin duda ha transformado la naturaleza de la relación entre ciudadanos y Estado, la cual hoy se encuentra mediada de manera creciente a través de la tecnología. En consecuencia, iniciar este análisis, sin antes indagar en el avasallador y vertiginoso avance del neoliberalismo, parece un esfuerzo estéril.
En un contexto económico internacional difícil, el Banco Mundial se compromete a apoyar a El Salvador centrándose en la reducción de la pobreza extrema, el aumento en la generación de empleo, la mejora del desarrollo humano y el fomento de la resiliencia climática. El diseño y la implementación nunca son neutrales, ya que responden a diversas formas en que se organiza una sociedad en torno a cuestiones económicas, políticas, y culturales. Por ello, aunque una tecnología se desarrolle a partir de principios racionales, su creación y uso van a depender de intereses y juegos de poder entre creadores y usuarios (p. 450). Por su parte, Harvey (2007) indica que, desde la década de los setenta, prácticamente todos los Estados han dado un giro drástico ajustando sus políticas y premisas a alguna forma de la teoría neoliberal, en algunas ocasiones estos cambios han sido voluntarios, y en otras producto de presiones.
Asimismo, refleja el modo en que los apriorismos sociales basados en concepciones del género estereotípicas y biológicamente esencialistas siguen instalados en todo el mundo. Incrementando los impuestos a las empresas y personas más ricas, los países de África Oriental podrían destinar más fondos a servicios públicos para reducir las desigualdades, especialmente evitando que las personas se vean arrastradas a la pobreza debido a tener que pagar estos servicios de su propio bolsillo. Esto les permitiría superar tanto la austeridad como la pandemia, y estar mejor protegidos ante futuras pandemias. Enfatizar el rasgo mundial del proceso es indispensable puesto que, ante el desarrollo de la tecnología de la producción capitalista, no podemos centrar nuestro estudio sobre la organización del trabajo exclusivamente a nivel de la fábrica, ni al nivel de un sector, de un país o de una región.
Ante este escenario, se configura una nueva forma de desigualdad social, la cual toma forma en la llamada brecha digital. Sobre este fenómeno, Alva de la Rosa (2015) indica que al conjunto de las desigualdades acumuladas históricamente se suma una más, aquella que excluye a un amplio segmento de la población del uso y apropiación de las nuevas tecnologías, que permiten o no, ser parte de la construcción de la nueva sociedad. Otro problema que destacan tanto académicos como activistas es la persistencia de la violencia contra las mujeres, en sus múltiples manifestaciones. También se ha puesto el acento en cómo las respuestas políticas en estas áreas diversas tienen una dimensión de género y en cómo influyen en la identidad de las mujeres y en sus relaciones con las demás, así como en los actos cotidianos de violencia no denunciada tanto en el Sur como en el Norte globales. En todo caso, este tipo de desigualdad de género ha sido uno de los grandes objetivos del activismo internacional, que combate estas manifestaciones diversas de violencia y sus efectos de desigualdad en las mujeres.
La desigualdad social condiciona las oportunidades de los desfavorecidos y afecta su calidad de vida, pero también incide negativamente en el desarrollo del país. La inversión en cooperación y desarrollo es uno de los mecanismos institucionales más promovidos para la lucha contra las desigualdades sociales. La thought es que los países mejor desarrollados destinen algunos recursos hacia los menos desarrollados para paliar sus desigualdades y así dar paso a sociedades más justas y competitivas en el ámbito global.
Dicha propuesta acentúa lo importante que es para los miembros de una sociedad el acceso a la educación y a la vivienda, servicios públicos estables, y espacios de recreación y formación laboral. Esta propuesta requiere, entre otras cosas, cierto grado de desprivatización de modo que los sectores menos favorecidos puedan acceder más fácilmente. Otra de las propuestas para combatir la desigualdad social es reducir las brechas salariales, lo que es una causa directa en la marginación social, el empobrecimiento y la explotación laboral.
La encuesta mostró que son las mujeres las que desempeñan una ocupación no remunerada como principal actividad (52%), en comparación a los hombres (8%). Asimismo, quienes consideran que “hablar bien el castellano” es una ventaja para una mejor posición económica son mayoritariamente mujeres (48%); mientras que son los hombres los que reconocen que su género les otorga una ventaja (11%). Con relación a la desigualdad entre hombres y mujeres, el 34% la percibe como muy grave mientras que el 48% como poco grave. Si bien es possible que los cierres de escuelas relacionados con COVID-19 retrasen el progreso en el acceso a la educación, la evidencia muestra que las niñas, una vez que tienen acceso a la escuela, suelen tener mejores resultados que los niños en términos de rendimiento académico. En la educación terciaria, las mujeres superan en número a los hombres y la matriculación está aumentando más rápidamente entre las mujeres que entre los hombres.
Esto quiere decir que el gran pilar de la Revolución Mexicana sigue siendo una deuda pendiente. La Justicia Social sigue como algo lejano para la gran mayoría de las y los habitantes de este país donde la desigualdad sigue reinando. Favorece la cohesión social e impulsa el empoderamiento económico de mujeres y grupos marginados. Defiende los derechos de todos los trabajadores y trabajadoras, ofrece protección social y garantiza que todos los medios de vida y los recursos del planeta se puedan mantener. Trabajamos con miles de organizaciones socias y aliadas en 87 países prestando apoyo a comunidades para que puedan mejorar sus vidas, fomentando la resiliencia, y protegiendo vidas y medios de subsistencia en tiempos de crisis desigualdad social wikipedia.