Superación De Los Desafíos De Distribución Y Desnutrición Del Programa De Leche Escolar De Paraguay

Efectivamente, si bien “hambre” e “inseguridad alimentaria” aplican en un mismo contexto, según FAO, la primera debe ser entendida como la sensación física de incomodidad o dolor, y la segunda responde al evento en que las personas no dispongan de acceso a suficientes alimentos —inocuos y nutritivos— para satisfacer necesidades y llevar una vida sana. Asimismo, los datos afirman que en la actualidad unos one hundred forty four millones de niños menores de cinco años, es decir, el 20% de los niños del mundo, tienen retrasos del crecimiento por desnutrición. Según el Programa Mundial de Alimentos, alrededor de one hundred thirty five millones de personas padecen hambre severa , debido principalmente a los conflictos causados por los seres humanos, el cambio climático y las recesiones económicas. La pandemia de COVID-19 podría duplicar ahora esa cifra y sumar unos 130 millones de personas más que estarían en riesgo de padecer hambre severa a finales de 2020. Por su situación geográfica privilegiada, es uno de los principales exportadores de frutas a nivel mundial, siendo el primero en uva de mesa, arándanos, ciruelas, cerezas, manzanas desecadas y está en los primeros lugares en palta, kiwi, frambuesas, ciruelas secas y jugos envasados.

Asimismo, en estudios a nivel nacional para evaluar la desnutrición en sus diferentes estadios, al estudiar la desnutrición global en Pereira en niños menores de 10 años (2011) se encontró que fue de 24,7%; cuatro veces mayor que lo que se reporta en América Latina, aunque muy similar a lo reportado para el nivel mundial. La desnutrición global encontrada fue mayor en el área urbana (22,1%) que en la rural (20,8%)[18]. En los menores de dos años, la prevalencia de desnutrición crónica fue de 35,4%; en tanto que en el periodo de los dos a los 9,9 años fue de 32,09%[19].

En todo el mundo, las empresas —sobre todo las microempresas y las pequeñas y medianas empresas de los países en desarrollo— se encuentran sometidas a una intensa presión, dado que más de la mitad de ellas están en mora o probablemente lo estarán dentro de poco tiempo. Para entender la presión que el COVID-19 está ejerciendo sobre las empresas y los ajustes que estas se ven obligadas a realizar, el Banco Mundial y sus asociados han estado realizando encuestas de pulso empresarial relativas al COVID-19 en asociación con los Gobiernos de los países clientes. Las respuestas recopiladas entre mayo y agosto mostraron que muchas de las empresas estaban reteniendo al personal, con la esperanza de mantenerlo hasta que salieran de la recesión. Más de un tercio de las empresas han aumentado el uso de la tecnología digital para adaptarse a la disaster. Sin embargo, los mismos datos advertían que durante la disaster las ventas de las empresas se han reducido a la mitad, lo que las ha obligado a reducir salarios y horas de trabajo, y que la mayoría de ellas —especialmente las microempresas y las medianas empresas de los países de ingreso bajo— se esfuerzan por acceder al apoyo del Estado. Millones más sin comida

Actualmente, Akamasoa Argentina se desarrolla en 2 lugares de la Provincia de Buenos Aires, donde se concentra el 73% de ese 63% de pobreza infantil. Una de ellas es Lima de Zárate, ubicada entremedio de los 2 polos industriales más grandes del país. Ahí han logrado ayudar a las primeras 600 personas, y están levantando el primer centro de desarrollo integral porque, además de escuela para niños, el objetivo es hacer un gran polo para aprender a fabricar viviendas y su mantención, para luego ofrecer sus servicios a las industrias colindantes.

Otro gran problema es el hacinamiento habitacional, que afecta a más de 300 mil niñas, niños y adolescentes que viven en condiciones de pobreza y pobreza extrema, lo que aumenta la probabilidad de contagio de enfermedades respiratorias agudas y de sufrir violencia intrafamiliar, además de dificultar el aprendizaje. Otras regiones como el África subsahariana siguen muy a la zaga, con una de cada cuatro personas con desnutrición crónica, y Asia, la región más poblada, sigue albergando a 526 millones de personas con problemas de alimentos. Esto quiere decir que los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) -reducir a la mitad la proporción de personas en pobreza extrema para están al alcance de la mano, dice la FAO, que pide a los países que «redoblen los esfuerzos» en el año largo que falta. La pobreza extrema, una condición caracterizada por la privación severa de las necesidades humanas básicas, continúa disminuyendo, pero esa disminución se ha desacelerado de tal manera que el mundo no está en camino de alcanzar la meta de reducir para 2030 a menos del 3% el número de personas en el mundo que se encuentran en esta situación. Según Hampson, una de las causas de la pobreza alimentaria es que los hogares rurales de los países en desarrollo no tienen un acceso adecuado a información sobre precios en diferentes mercados, por lo que no pueden negociar muy bien con distribuidores y mayoristas; o sobre prácticas mejoradas o clima localizado. Cree que no se puede hacer política de salud entre gente de extrema pobreza que se siente derrotada y que no tiene ninguna esperanza de salir de la situación en que se encuentra.

Y culminó su relato contando que fruto del resultado del programa “Entre Todos” se habían reunido en asamblea y habían decidido cambiar el nombre de su comunidad. Antes de tener esa pasarela se llamaban Salsipuedes y ahora unánimemente su comunidad eligió llamarse La Gloria. Tanto las organizaciones populares, como las mujeres han sido invisibles en la historiografía de la lucha democrática que se desarrolló en nuestro país durante la dictadura y, en especial, en la segunda mitad de los ochenta.

Para empeorar aún más la situación, muchos niños y niñas caen en manos de grupos armados debido a la violencia, la pobreza y la desesperación. Numerosos menores de edad de la zona metropolitana de Puerto Príncipe afirman que se ven obligados a alistarse a cambio de protección o de alimentos e ingresos para sus familias. Algunos aseguran que los grupos armados les proporcionan un sentimiento de identidad y pertenencia. —La soberanía alimentaria es un paradigma de producción y consumo de alimentos que no está centrado en la dependencia del capital. Esto significa que, más que el dinero, lo que importa es facilitar un acceso colectivo a espacios donde producir alimentación saludable de manera local, como sucede con las huertas urbanas o la agricultura familiar —agrega por su parte Noelia Carrasco.

desnutrición y pobreza extrema en el mundo

Las páginas –amargas y emotivas a la vez– de Las uvas de la ira, de John Steinbeck (Tusquets, 2010) son una manifestación elocuente de aquellos tiempos de miseria norteamericana, que nos muestran un tiempo que no debemos olvidar. Es cosa de pensar en la España de hace unas ocho décadas, cuando venía terminando la guerra civil y sufría las consecuencias del conflicto, enfrentando una situación muy grave de miseria, que prolongaba los dolores del conflicto bélico. Lo mismo ocurrió en esa misma época con la Segunda Guerra Mundial y sus secuelas, que sumieron al continente en una realidad horrible que perpetuaba los males y abría una etapa de rumbo desconocido y difícil. El presupuesto del gobierno para el programa de leche escolar aumentó de USD 14.2 millones al año en 2019 a USD 25.5 millones al año en 2010 y 2011[5]  La práctica más común de entrega de leche a las escuelas por parte de la mayoría de los procesadores de productos lácteos que abastecen el programa es utilizar un distribuidor para esta función.

Hay niños y niñas que se encuentran atrapados en el fuego cruzado, o que son el blanco directo de los grupos armados que aterrorizan a la población en su lucha por el territorio y el management, principalmente en la capital, Puerto Príncipe, y cada vez más en la vecina región de Artibonito. Finalmente, el informe plantea varias recomendaciones a través de las cuales los sistemas alimentarios podrían transformarse para garantizar el acceso a la alimentación para todos y todas de manera sostenible e inclusiva. La tragedia, entonces, no es solo el número creciente de niñas, niños y adultos que viven el drama del hambre y la malnutrición. Es también que la solución está ahí, al alcance de nuestra mano, pero no la vemos, o no la queremos ver.

Pero no sólo conflictividad y demandas con movilizaciones en las calles de distintas ciudades en todas las regiones del país. Hay también una lenta y poco perceptible revitalización de la sociedad civil reorganizándose en diversas formas y tipos de agrupaciones. Una reciente publicación que presenta un exhaustivo catastro de organizaciones de la sociedad civil registra más de 200 mil activas de una amplia variedad.

Una economía que surja, no de la razón, de los cálculos y de las estadísticas, sino de la pasión, de la compasión y más aún del amor por el otro (Nussbaum, 2014). Como lo hemos mencionado anteriormente, el problema basic de la economía es que se ha ligado a la política y no a la ética, a la razón abstracta del yo y no a la escucha humilde del otro. A la pretensión de querer hablar en nombre de todos, de la colectividad, de la masa de seres humanos, pero olvidando relacionarse con el individuo concreto. El objetivo de la presente reflexión es mostrar que la lucha contra la pobreza económica y materials ejemplo de desigualdad social, debe comenzar con un cambio de actitud individual que podemos llamar conversión o búsqueda de pobreza espiritual.

Hasta 132 millones más personas de las proyectadas anteriormente podrían pasar hambre en 2020, y el incremento de este año puede ser más del triple de cualquier aumento de este siglo. La pandemia está volcando las cadenas de suministro de día de la erradicación de la pobreza alimentos, paralizando las economías y erosionando el poder adquisitivo de los consumidores. Algunas proyecciones muestran que para fin de año, el Covid-19 causará que más personas mueran cada día por hambre que por infecciones de virus.

La infancia es el periodo más importante de crecimiento físico y de desarrollo cognitivo de las personas. Por ello es de important importancia intervenir en los determinantes sociales y en diferentes patologías que pueden ser causantes de problemas crónicos y de salud pública[8]. En Haití, la prestación de servicios básicos y el desarrollo del capital humano han sido inadecuados durante varias décadas, un problema que se suma a una desigualdad, una marginación y una exclusión social extremadamente elevadas. Es el país más pobre y menos desarrollado del hemisferio occidental, y no está preparado para hacer frente a las múltiples perturbaciones que confronta.

La actual inflación en el sector alimentario, que afecta sobre todo a los países de ingresos bajos y medianos, obedece, según el organismo multilateral, a la guerra en Ucrania, a las interrupciones en la cadena de suministro y a las repercusiones económicas de la pandemia de COVID-19. Ese fue el contexto del surgimiento de algunos proyectos transformadores en la década de 1960, liderados por Eduardo Frei Montalva y la Democracia Cristiana –la “Revolución en Libertad”– y por Salvador Allende y la Unidad Popular, en la denominada “Vía chilena al socialismo”. En ambos casos no se trataba simplemente de cambiar a las autoridades del poder Ejecutivo, sino de acometer cambios estructurales, verdaderas revoluciones (el concepto mágico de la época), para darle a Chile un futuro diferente. En gran parte del análisis subyacía la situación de miseria en que vivían millones de compatriotas y la necesidad de revertir de manera urgente esa realidad. Después de la crisis de 1929, Estados Unidos, país con una capacidad extraordinaria de renovación y creatividad, se encontró sumido en la pobreza que obligaba a migrar con dolor y a vivir una situación que creía haber abandonado en  la historia.

La medición de pobreza multidimensional implementada por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia toma en cuenta un conjunto de 5 dimensiones y 15 indicadores (3 indicadores en cada dimensión) que buscan identificar si los hogares alcanzan o no un determinado umbral de bienestar. La Canasta Básica de Alimentos (CBA) refiere a un conjunto de bienes alimentarios que se utiliza como base para definir el valor de la línea de pobreza y línea de pobreza extrema por ingresos. No obstante, es importante precisar que las publicaciones realizadas por el Ministerio de Desarrollo Social y Familia (y, antes por el Ministerio de Planificación) con anterioridad al mes de enero de 2013 consideraron la metodología de medición de pobreza por ingresos que estuvo vigente hasta entonces.