Oxfam ha constatado que, por ejemplo, la Unión Europea ha reducido a más de la mitad los fondos humanitarios para Timor-Leste y que otros donantes han notificado que reducirán los fondos de ayuda a Burkina Faso en un 70 %. Mientras, África Occidental se enfrenta la peor disaster alimentaria en 10 años, con más de 27 millones de personas en situación de hambre. Para más información, consulte Tras la crisis, la catástrofe (solo disponible en inglés). Para obtener estas cifras, además de los indicadores, en el IPM se examinan otros aspectos para comprender cómo las personas experimentan la pobreza en sus variadas formas, las que además se superponen. Se determina de qué manera se deja a las personas atrás en lo que atañe a la salud, la educación y el nivel de vida, para lo cual se estudian 10 indicadores como el acceso a una fuente mejorada de agua potable, nutrición adecuada o al menos seis años de escolaridad.
Se propone ayudar a los Gobiernos y otros actores clave a mejorar las respuestas para acercarnos más al logro del Objetivo de Desarrollo Sostenible 1, poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo. Con la introducción de los “perfiles de carencias”, en el IPM 2022 se presenta un panorama muy matizado de la magnitud y la naturaleza de la pobreza en los países en desarrollo. Las estimaciones del IPM exploran más de 850 combinaciones diferentes entre 10 tipos de privaciones para conocer las variaciones regionales y de otra índole en la pobreza multidimensional.
El PNUD explicó que la crisis de deuda se ha deteriorado en parte como consecuencia de las políticas internas de los países ricos, que han provocado que las tasas de interés en las economías en desarrollo se disparen y que los inversionistas huyan de esas naciones. En common, si se quiere poner fin a la pobreza extrema, la atención no se puede centrar únicamente en los países de ingreso bajo, dado que más del 60 % de la población extremadamente pobre vive en países de ingreso mediano. El foco debe ponerse en las personas más pobres, sin tener en cuenta el lugar paises con menor pobreza donde viven, y trabajar con los países de todos los niveles de ingreso para invertir en su bienestar y su futuro. Cada año, millones de hogares caen en la pobreza o quedan atrapados en esta situación debido a los desastres naturales. Las temperaturas más altas ya están provocando una caída de la productividad en África y América Latina, y reducirán aún más el crecimiento económico, especialmente en las regiones más pobres del mundo. Con las PPA de 2017, las estimaciones de pobreza de algunos países cambian considerablemente, lo que modifica su posición relativa respecto de otros países.
Las medidas se presentan en PIB per cápita convertido a través de la paridad del poder adquisitivo (PPA) y a precios de 2017. Para proteger a los más vulnerables y reforzar la inclusión social en la CEMAC se necesita un mayor y mejor nivel de gasto público en educación, salud y protección social, junto con una mejor gestión pública. La globalización social implica que todas las personas del mundo deberían ser tratadas de la misma forma y comparten valores similares.
Erradicar la pobreza extrema para todas las personas en todo el mundo para 2030 es un objetivo basic de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible. La pobreza extrema, entendida como el hecho de sobrevivir con menos de 2,15 dólares por persona al día según la paridad del poder adquisitivo de 2017, ha experimentado descensos notables en las últimas décadas. Sin embargo, la aparición de la COVID-19 marcó un punto de inflexión, al revertir estos avances, ya que el número de personas que viven en la pobreza extrema aumentó por primera vez en una generación en casi 90 millones con respecto a las predicciones anteriores. Incluso antes de la pandemia, el impulso de la reducción de la pobreza se estaba desacelerando.
La eficiencia en el gasto podría mejorarse, sobre todo en los ámbitos de la salud, la educación y la infraestructura. Podrían adoptarse marcos fiscales orientados a la gestión de los desastres naturales y otras conmociones, que se producen con mayor frecuencia. Unas políticas globales específicas y coordinadas también pueden contribuir a que estos países adopten una secuencia impositiva más sostenible.
Como bien se ha podido observar en el top 20, el país más pobre de África es el que encabeza el listado, Burundi. Esta situación está causada por una mala praxis política, unida a los diversos golpes militares que han agitado el país africano. Este país sufre diversos problemas que deterioran sus condiciones de vida, como la desnutrición, la baja expectativa de vida de 66 años y los golpes políticos.
“Aunque los precios de los alimentos y la energía se han moderado en todo el mundo, la inflación básica continúa siendo relativamente alta y podría mantenerse así”, dijo Ayhan Kose, economista en jefe adjunto y director del Grupo de Perspectivas del Banco Mundial. “Esta situación podría impulsar a los bancos centrales de las principales economías avanzadas a retrasar las reducciones de las tasas de interés. En un entorno de tasas ‘más altas durante más tiempo’, las condiciones financieras mundiales serían más estrictas y el crecimiento, mucho más débil en las economías en desarrollo”. Aparte de figurar entre los países con menor nivel de pobreza de la región, es el segundo país sudamericano con el mayor producto interno bruto (PIB) per cápita. Las políticas internas y la composición del PIB en Chile le han permitido no sufrir tan gravemente las consecuencias económicas de la pandemia, a pesar de ser uno de los países con mayor incidencia de casos.
En la CEMAC, 1 de cada four jóvenes no trabaja ni estudia ni está recibiendo capacitación, un issue que puede ser fuente de inestabilidad y tensión social. Para revertir las tendencias de crecimiento y creación de empleo insuficientes, sería esencial adoptar políticas que promuevan la inclusión y la participación económica, en particular invirtiendo en el capital humano, para lograr una mejor educación y mejores habilidades paises mas pobres de la union europea laborales. El elevado nivel de desempleo, la informalidad, los obstáculos a las actividades empresariales y la falta de oportunidades económicas constituyen un desafío para reducir la pobreza. Desde un punto de vista político y económico, esta transición hacia un mundo globalizado ha desencadenado en sistemas políticos más abiertos, economías de mercado o liberalización económica, eliminación de restricciones y la promoción de la inversión extranjera.
La tasa de pobreza extrema mundial disminuyó del 10,1 % en 2015 al 9,2 % en 2017, lo que equivale a 689 millones de personas que vivían con menos de $1,ninety dólares al día. En 2017, en las líneas de pobreza más altas, el 24,1 % del mundo vivía con menos de $3,20 dólares al día y el 43,6 % con menos de $5,50 al día. En 2018, de cada cinco personas por debajo de la línea internacional de pobreza, cuatro vivían en zonas rurales. Estos países necesitarán una ayuda significativa para salir de la recesión tras la COVID-19. En 2020, la pandemia prácticamente detuvo el crecimiento económico en los países de la AIF y provocó una disminución del ingreso per cápita del 2,3 %. Nuestros análisis indican que su crecimiento será inferior al de las economías avanzadas en alrededor de 2 puntos porcentuales al año en promedio entre 2021 y 2023, lo que aumentará la ya amplia brecha entre los países más ricos y los más pobres.
Valor más favorable Dentro de los cinco valores más favorables Valor más desfavorable
Madagascar, antigua colonia francesa, es una de las islas más grandes del mundo y está situada en el océano Índico, al este del continente africano. Más de dos tercios de su población de 27 millones están empleados en la agricultura y una pequeña parte está involucrada en el turismo. De estos, alrededor del 80% vive por debajo del umbral de la pobreza y depende de la agricultura de subsistencia. Burundi tiene más de eleven millones de habitantes y ha estado en conflicto interno durante muchos años, debido a dos grupos étnicos, así como a grupos externos. Al mismo tiempo, el gasto público aumentó en la mayoría de los países de la CEMAC, reduciendo el espacio fiscal e imponiendo desafíos para contener la deuda pública. La relación deuda total/PIB se sitúa por encima del criterio de convergencia de la CEMAC de 70,0 por ciento del PIB en la República del Congo y en Gabón.