Ante esta situación, el representante regional la FAO subrayó que es necesario transformar profundamente el sistema alimentario. Queremos que la gente los consuma y por eso hicimos mermeladas porque los niños no comen algas y en Chile tenemos tanta cosa que la gente no consume y que podrían ayudar a mejorar la alimentación”, explicó. He sido recolectora de orilla”, contó Ximena Cárcamo, de forty eight años, presidenta de la Cooperativa Pesquera Flor del Mar.
Convertirnos al pobre no debe ser una opción política o religiosa entre otras más (una ideología política o una teología particular), sino que en esta conversión debemos encontrar el sentido mismo a nuestra existencia, y la posibilidad de vivir en una sociedad realmente justa y fraterna. Alimentarse no es un privilegio de la gente rica ni es una caridad que hacemos a la gente pobre. Cuando decimos que es un derecho inherente al ser humano por el hecho de existir, estamos diciendo que los Estados tienen la obligación de hacer cumplir este derecho y que el papel de los ciudadanos es muy importante porque tienen el derecho y la obligación de exigir a sus gobiernos que creen las condiciones adecuadas para que todo el mundo pueda comer. Libro de muy reciente publicación al que fui invitada como comentarista y que recomiendo porque rescata el interesante fenómeno de producción intelectual y programática que sustentó la lucha democrática en plena dictadura y le dio densidad de concepts a los partidos proscritos que, junto con las movilizaciones sociales, promovieron la ofensiva por el retorno a la democracia.
Luchar por combatir la pobreza económica es el mayor reto de las sociedades desarrolladas, subdesarroladas (y maldesarrolladas). Y este combate no se logra creando guetos ni construyendo murallas, sino rompiendo el gueto y la muralla principal que es el egoísmo. La pobreza como virtud implica no dejarse encadenar por los mecanismos de la sociedad consumista en la que ahora vivimos, que lejos de liberarnos nos esclaviza a las cosas. Vivimos en una sociedad donde el amor por las cosas (automóviles, teléfonos, artefactos tecnológicos, etc.) es más fuerte e importante que el amor por la vida y por las personas.
El último anuario de mortalidad se publicó en el 2014 y desde el 2015 no se publican cifras sobre el consumo y la disponibilidad de alimentos en el país. Suma la caída de las importaciones, la alta inflación, el bajo poder de compra del salario mínimo del venezolano. En otras palabras, los impactos negativos de la desnutrición crónica no solo acompañarían a la persona por el resto de su vida, sino que podrían ser transmitidos a sus descendientes. Este retraso tiene una serie de efectos a largo plazo para los individuos y las sociedades entre los cuales se encuentran. Disminución del desarrollo cognitivo y físico, reducción de la capacidad productiva, mala salud y aumento del riesgo de enfermedades degenerativas como la diabetes”. En el informe del siguiente año (2020), el PMA no incluyó a Venezuela debido a la falta de información.
Nos relató que su comunidad había hecho todo el proceso de priorización de sus necesidades y habían votado con amplia mayoría un proyecto para construir una pasarela por sobre sus caminos empedrados y de tierra, pues en el invierno y con las lluvias se anegaban y quedaban aislados. No podían transitar para acudir al servicio de salud más cercano, ni los estudiantes podían asistir a la escuela que también estaba localizada fuera de la comunidad, agregando que en esas circunstancias tampoco podían salir a vender sus productos agrícolas de los cuales subsistían las familias de la comunidad. El FOSIS había financiado esa pasarela y se habían resuelto esos problemas en el invierno que recién había terminado.
Esto puede deberse a la falta de disponibilidad de alimentos o a la falta de recursos para obtenerlos (acceso) (1). Ésta adquiere masividad y mayor fuerza desde el movimiento estudiantil del 2011 (durante el primer mandato de Sebastián Piñera) y se condensa definitivamente en el estallido social de octubre del 2019 (durante el segundo mandato de Sebastián Piñera). Si bien su visibilidad desaparece de la escena pública a partir de marzo 2020 con la pandemia instalada en nuestro país, sigue latente y forma parte de una realidad social imposible de eludir. Pero la constatación de que superar la exclusión llevaba a formas de integración muy desiguales, empezó a erosionar la credibilidad en una movilidad social ligada al crecimiento y a la educación. Pero tanto o más que los programas en sí mismos que se orientaron a apoyar a las organizaciones de subsistencia surgidas en los ochenta, es haberles dado una señal simbólica como un gesto de la naciente democracia con sus participantes y como reconocimiento a su labor.
Las primeras voces que escuché decir que un trabajo no remunerado es igualmente un trabajo, las oí de muchas de ellas al hacer un stability de su esfuerzo solidario en las ollas comunes. Hubo un descubrimiento –que no fue el resultado de una proclama feminista ni de algún marco teórico elaborado por una intelectual– de que las tradicionales tareas de cuidado y de labores domésticas tenían igual valor que los trabajos remunerados de sus parejas y que ahora cesantes, ellos tenían que darse cuenta de la importancia de las mujeres en la sobrevivencia acquainted. Muchos testimonios en nuestras conversaciones durante el proceso de investigación que dio origen a ambos libros apuntan en esa dirección, pero con un agregado que hace la diferencia. Sin duda, cocinar, alimentar, comprar víveres, coser, tejer y bordar son acciones que se realizan en el espacio doméstico como rutina habitual. Salir del encierro y de la privacidad de la casa para hacerlo colectivamente, en el espacio de una organización, con horarios fuera del hogar y teniendo además que tomar decisiones mayores, manejar recursos y administrar dineros, dirigir equipos y grupos de trabajo, hacen una tremenda diferencia. Con un tercio del total del empleo que es casual, con muchas y muchos trabajadores dependientes de las áreas de servicios y de menores niveles de calificación, con millares de trabajadores de la construcción, restoranes, hoteles, centros de esparcimiento, del transporte privado y escolar que quedan inactivos, no hay teletrabajo ni trabajo alguno.
En el presente trabajo sólo mencionaremos el caso de la filosofía y de la espiritualidad, como defensoras de una pobreza que libere y que promueva al ser humano. “El aumento del número de seres humanos víctimas de la pobreza y del hambre, debe llevarnos a redoblar nuestro compromiso por un mundo más justo en el que todos tengamos una vida digna”, asegura Fidele Podga, coordinador de Estudios y Documentación de Manos Unidas. Proliferan al margen del sistema político y con un modelo de institucionalidad que las mantiene fuera de su esfera de acción, creándose una frontera entre las organizaciones de la sociedad civil y las instituciones de la democracia.
Aunque las soluciones parecen estar a la mano de los gobiernos, especialmente en el Sur, las relaciones de fuerza no siempre favorables y la falta de voluntad política conspiran para que no se las implemente. La torta terrestre es una y solo una mejor redistribución de las porciones podría asegurar que todas y todos puedan sentarse a la misma mesa para compartirla. En paralelo, las grandes multinacionales dedicadas a la producción y comercio del petróleo y el fuel diferentes organizaciones sociales registran beneficios récord, al igual que las transnacionales del sector de alimentos y bebidas. Las últimas semanas han sido testigo de una fuerte escalada del intercambio de fuego entre la resistencia libanesa y las fuerzas israelíes en el sur del Líbano/norte del Estado sionista.
Además del malestar económico, los confinamientos y las cadenas de suministro rotas también han creado un problema grave para la distribución de alimentos. Solía representar más de la mitad de las comidas– significa que los agricultores han estado tirando leche y rompiendo huevos, sin un medio fácil de redirigir su producción a las tiendas de comestibles o a los necesitados. También es una fuerza determinante en quién come y quién no, lo que subraya las divisiones sociales globales, ya que los más ricos siguen disfrutando de un ritmo vertiginoso de acumulación de riqueza. Millones de personas se han quedado sin trabajo y no tienen suficiente dinero para alimentar a sus familias, a pesar de los billones en estímulos gubernamentales que han ayudado a llevar las acciones globales a máximos históricos.
Chile estuvo en inseguridad alimentaria en la década de 1980, cuando el producto interno bruto cayó en un 12% en 1982 y luego en un 2% agregado al año siguiente, produciéndose una desocupación cercana al 50% de la fuerza laboral. En esos años, mediciones de ingesta calórica realizadas en la periferia de Santiago mostraron un consumo por persona de 1600 a 1700 calorías, en base a pan, té con azúcar, arroz, fideos y papas. Con la reactivación económica a fines de los eighty la situación cambió y mediciones realizadas en los mismos lugares en 1993 mostraron un consumo de 2700 a 3100 calorías por persona, lo que coincide con el incremento de la obesidad en el país (2).
En los análisis más recientes se advierte que este año el COVID-19 ha empujado a 88 millones de personas más a la pobreza extrema, y que esa cifra es apenas un punto de partida. El Grupo Banco Mundial (GBM) prevé que el mayor porcentaje de “nuevos pobres” estará viviendo en Asia meridional y que África al sur del Sahara ocupará el segundo puesto, con escasa diferencia. El 26 de junio de 1984 la revista Cauce, el semanario más vendido en Chile en esos años, dirigida por el periodista Edwin Harrington, publicó este artículo donde se afirmaba que el hambre afectaba a no menos de cinco millones de personas en nuestro país. Los pobladores ya no preparaban ollas comunes porque carabineros y civiles llegaban a volteárselas, y que los preescolares, entre dos y seis años, estaban recibiendo la mitad de las calorías que necesitaban. La línea de pobreza es la medida oficial, expresada en pesos corrientes, que se utiliza como umbral para identificar al conjunto de hogares y de población que se encuentra en situación de pobreza por ingresos. Un hogar en situación de pobreza extrema por ingresos, en tanto, es aquel cuyo ingreso mensual es inferior a la “línea de pobreza extrema por persona equivalente”, o ingreso mínimo establecido de acuerdo al número de integrantes del hogar y que corresponde a 2/3 del valor de la línea de pobreza.
La Encuesta Casen es respondida por una persona que entrega información por todos los integrantes del hogar. Esta persona, denominada informante idóneo, es el jefe(a) de cada hogar, o en su defecto un integrante del hogar mayor de 18 años. Los hogares encuestados por Casen son seleccionados de manera aleatoria en viviendas incluidas dentro del marco muestral de secciones y manzanas entregado por el Instituto desnutrición y pobreza Nacional de Estadísticas (INE) e incluye a hogares residentes en viviendas particulares de las comunas que son cubiertas según el diseño muestral correspondiente. Se consideran miembros de un hogar a todas aquellas personas que, siendo residentes de una misma vivienda, pueden tener o no vínculos de parentesco entre sí y habitualmente hacen vida en común, es decir, se alojan y se alimentan juntas.
La meta recogida en la Agenda 2030 acordada por los líderes mundiales es mantener el calentamiento global por debajo de los 2ºC y si posible en 1,5ºC. El aumento promedio mundial es ya de 1ºC por encima de los niveles preindustriales, pero si no se hace lo suficiente, la temperatura continuará creciendo de forma insostenible y puede exceder los 3ºC a finales de siglo. El anterior, para implementar los correctivos necesarios y así enfrentar de manera eficaz la grave inseguridad alimentaria. Esto, por definición, “es una inseguridad alimentaria muy severa”, afirmó Rafalli en noviembre del 2020 en una entrevista con Crónica Uno.
También cuentan con un huerto a cargo de los pobladores, quienes ya comercializan sus primeros dulces. La Sociedad Nacional de Agricultura destacaba poco antes del golpe militar de septiembre de 1973 «el desembolso que significa a los chilenos financiar el ritmo de importaciones. Es decir, el dinero que irá a los agricultores de otros países a un promedio diario de 1,5 millones’ de dólares». Por otro lado, organizaciones de todo el mundo celebran el Día Mundial de la Soberanía Alimentaria, propuesta que intenta recuperar sistemas de producción con inclusión de las poblaciones locales, en la que el alimento sano es objetivo central. Intenta también fortalecer las economías locales, la reducción de la pobreza, la protección del medioambiente, el respeto por las culturas locales; generando con ello un comercio mas justo y humano de los alimentos. Además del factor económico, el informe presenta una primera radiografía a los niños, niñas y adolescentes viviendo en condiciones de pobreza con un enfoque multidimensional.