Desigualdad: Qué Es, Concepto, Definición, Tipos Y Características

Chile ha presentado gran progreso en las últimas décadas en lo referente a indicadores de salud, con cifras comparables con países desarrollados en cuanto a mortalidad infantil y basic. Sin embargo, igual como pasa con el crecimiento, estos logros no benefician a toda la población de la misma manera, existiendo diferencias a nivel regional. Este tipo de desigualdad suele crear malestar por parte de la ciudadanía y descontento hacia las autoridades públicas, a quienes se exige salud de calidad y para todos. Actualmente, en Chile el gasto total en salud representa el 7,2% de su PIB, por debajo del promedio de los países miembros de la OCDE, 9,3% (Instituto Nacional de Derechos Humanos, 2016), por lo que en materia de salud aún quedan muchos desafíos para el país y para la equidad en el territorio. En esta oportunidad se estudiaran el índice de desarrollo humano (IDH) y el índice de desarrollo regional (IDERE).

desigualdad social ejemplo

Por otro lado, la población española ha encontrado complicaciones para gozar de una vivienda segura y adecuada en tiempos recientes. El informe FOESSA indica que son dos millones los españoles que tienen el miedo de quedarse sin vivienda, una situación de inseguridad que involucra sus dificultades para pagarla y para dotarla de suministros. La desigualdad legal involucra un reconocimiento desigual de las personas ante la ley, lo que puede dar pie a otras situaciones de desigualdad. Millones de personas son obligadas a abandonar sus países de origen por múltiples razones como guerras o conflictos sociopolíticos, convirtiéndose en la mayoría de los casos en refugiados. En este caso, el motivo principal del acceso a las mismas oportunidades entre individuos está en función de su género u orientación de género.

Por su lado, la Región Metropolitana, como no es de extrañar, ostenta los mejores resultados junto con regiones del norte como Antofagasta y Tarapacá. En 2015, seis de las 15 regiones superaban el promedio nacional calculado para ese año. Las regiones que más han mejorado su nivel de escolaridad promedio son Los Ríos, Aysén y Coquimbo, mientras que las regiones de menor avance han sido Atacama, la Región Metropolitana y Antofagasta. En general, las regiones con menores años de escolaridad al comienzo del período, son aquellas que han tendido a mejorar más este indicador. Al realizar el mismo ejercicio pero considerando el 20% de los hogares con mayores y menores ingresos, el ratio es claramente menor.

El subempleo es una causa económica que deriva directamente del desempleo de una sociedad. La reducida accesibilidad a cargos laborales de calidad puede motivar a las personas a tomar trabajos precarios y de condiciones adversas para ellos por la ganancia mínima que perciban de ellos. Las diferencias, por ejemplo, de salarios entre hombres y mujeres, así como las oportunidades para ubicarse en puestos gerenciales, es una situación que ha estado en el foco de atención desde hace un tiempo.

Luego sigue Bolivia, que pasó de fifty eight,1 a 44 y en tercer lugar Guatemala, que redujo su desigualdad desde un fifty nine,6 a 48,three. Uno de los reclamos de los manifestantes que protagonizan el estallido social que comenzó en Chile a mediados de octubre y que aún se mantienen es que su país es muy desigual. 8Estados Unidos por su parte, obtiene el puesto número diez, con un PIB per cápita 2,4 desigualdad social en tiempos de pandemia veces superior al chileno. Es interesante ver como a partir del año 2001 la tasa de mortalidad comienza nuevamente a ascender.

Esta diferencia, aunque pequeña, se ha mantenido en el tiempo y es el mismo comportamiento presentado por Barro y Lee (2010). Otros datos interesantes que nos entrega la CASEN en materia de educación, es la diferencia de escolaridad por lugar de nacimiento y pertenencia a una etnia. En Chile, en el año 2015, el promedio de escolaridad para una persona nacida en el país period desigualdad social como combatirla de 11 años, y para un inmigrante (cuya madre residía en otro país al momento del nacimiento) de 12,5 años. Asimismo, hay una diferencia promedio de un año de escolaridad dependiendo de si pertenece o no a una etnia, siendo el promedio de 10,1 años para la población indígena y 11,1 para la no indígena.

“Estos niveles de desigualdad son significativamente más altos que en Brasil (donde el 10% superior de la población emite ocho veces más que el 50% inferior) y comparables con China (12)”, alerta el estudio. Se ha establecido que las personas de las clases más bajas tienden a tener menores logros y resultados educativos, menores oportunidades laborales y peor salud en common. Veamos algunas estadísticas sobre la desigualdad de clase social y sus explicaciones sociológicas. A pesar de esto, aún son muchos los casos de desigualdad en el ámbito de la salud, donde algunas personas no pueden acceder a la atención sanitaria tan fácilmente como otras.

Las mujeres y niños sin acceso a asistencia sanitaria mueren cada día de enfermedades prevenibles como el sarampión y la tuberculosis o durante el parto. Las personas mayores, los migrantes y los refugiados se enfrentan a la falta de oportunidades y la discriminación, un problema que afecta a todos los países del mundo. Una de cada cinco personas afirma haber sido discriminada por al menos un motivo de discriminación prohibido por el derecho internacional de los derechos humanos.

Según un informe de Oxfam de 2017, las personas con mayores ingresos en España acumulaban el 25% de la renta nacional, mientras que el 50% de la población más pobre tenía únicamente el 26,3%. El acceso reducido al conocimiento es una causa cultural importante de la desigualdad social. La falta de los procesos de aprendizaje en la vida de un niño incidirá directamente en sus habilidades para enfrentar la realidad social y especialmente el mercado laboral, que goza de niveles de competitividad muy altos hoy en día, lo que puede llevarlo a escenarios de desempleo o subempleo. Esta desigualdad se vuelve un problema cuando la distribución de la riqueza condiciona en exceso el desarrollo de los menos beneficiados, que se ven envueltos en una desigualdad de oportunidades respecto a las personas que acumulan la mayor proporción de riqueza en una sociedad. Uno de sus agravantes es la disminución del poder adquisitivo, que es propio de los contextos de inflación o hiperinflación.

Así, la falta de educación formal acaba por segregarlos dentro de instancias laborales y sociales. Se conoce como desigualdad social a la situación socioeconómica por la cual un individuo recibe un trato desigual o diferente. En función de su posición social, económica, su creencia religiosa, su shade de piel, su género, sus preferencias sexuales, su lugar de procedencia o su cultura, entre otras cosas.

A pesar que es claro que las regiones tienen sus diferencias entre sí, estas son menores a las que se encontrarían al comparar distintos países. “Esta relativa homogeneidad significa que es más possible que exista convergencia absoluta entre regiones de un mismo país que entre países” (Barro y Sala-i-Martin, 2009, pp. 468). La incorporación de la dimensión sustentabilidady medio ambiente produjo que el IDERE disminuyera en todas las regiones (Tabla 7). La región de Magallanes fue la menos afectada tras la incorporación de la nueva dimensión, con un IDERE que solo descendió un 1,86%.

La desigualdad educativa refiere a la diferencia existente entre sectores sociales respecto a las oportunidades de estudio. Entre las características de la desigualdad social está su componente estructural, es decir, tiene su origen en la organización y funcionamiento de la sociedad y de las instituciones que las componen y que, a su vez, están integradas por personas. Esta definición en sociología de desigualdad social implica que la desigualdad se extiende y desarrolla en los patrones instituidos a lo largo de la sociedad, facilitando su asimilación por los individuos. La desigualdad social es un obstáculo para el desarrollo particular person de los más desfavorecidos y también de la sociedad como conjunto. La comprensión de este complejo fenómeno, que se manifiesta de diferentes maneras, constituye un primer paso para poner solución esta lacra que padecemos a nivel global. Estas diferencias son más notorias en el ámbito de los derechos, si a esto le sumamos una situación de pobreza, la desigualdad puede verse aún más agravada.

Con la nueva metodología, se aprecia que en ambos años se repiten tanto las regiones más desiguales como aquellas con menor nivel de inequidad. Siguiendo la tendencia de los años anteriores, La Araucanía y la Región Metropolitana ocupan el primer y segundo lugar, con un índice de Gini de 0,444 y 0,434 respectivamente en 2015 y de 0,453 y 0,452 en 2013. Las regiones con menor desigualdad por ingreso en ambos períodos son Arica y Parinacota y Atacama (intercambiando de lugar entre un período y otro). Sin embargo, las regiones que han logrado reducir más sus niveles de desigualdad en el último período son las regiones de Los Lagos y Valparaíso, y en tercer lugar la Región Metropolitana, con un menor four,01%.