Chile Agenda 2030, Ministerio De Desarrollo Social Y Familia

Desde la tradición liberal, John Rawls afirma que “la justicia es la primera virtud de las instituciones sociales, como la verdad lo es de los sistemas de pensamiento”. Por su parte, la filósofa Nancy Fraser habla de la paridad participativa y postula que la justicia exige unos acuerdos que permitan que todos los miembros de la sociedad interactúen en pie de igualdad, tanto a nivel de redistribución como de reconocimiento. Pero esta condición no se remite solo a diferencias en calidades de vida, ya que tiene asociado un conjunto de problemas que implican, especialmente, trabas a la justicia, a la convivencia y al desarrollo económico.

Según el sociólogo, hoy existe en Chile “un muro de titanio” que defiende el sistema impuesto, constitutido por el sector empresarial, los medios de comunicación y el sistema político, este último con la misión de consagrar el “empate” entre quienes quieren mantener el status quo y quienes desean cambiarlo. La salida sería política, para lo cual es necesario actores empoderados que hagan posible el cambio y una decidida intervención estatal. En lo que se refiere a educación, el Premio Nacional sentenció que es falsa la premisa de que la educación es la viga maestra de la igualdad y del desarrollo. Por el contrario, afirmó que el sistema de educación chileno actual, basado en las leyes impuestas en dictadura, es un sistema construido para reproducir desigualdades. Expresó que en Chile aumenta en la medida que no se garantizan condiciones básicas de bienestar para la ciudadanía y que el neoliberalismo implementado en los años ‘eighty infringió “graves estocadas cuyos efectos sentimos hoy”.

La pandemia habrá ocasionado el cierre del 2,7 millones de empresas latinoamericanas, es decir el 19% del total de las empresas. Pero las medidas de distanciamiento social y las limitaciones a la movilidad han afectado de forma desigual a las actividades económicas. La conferencia, que contó con más de 250 expertos de diferentes países, tuvo el objetivo de potenciar (i) el desarrollo sostenible de las regiones “periféricas” del mundo, y (ii) el diálogo entre los académicos provenientes y/o especializados en dichas regiones. Para esto, el congreso contó con forty six paneles distintos que cubrieron los principales desafíos de las regiones en desarrollo, incluyendo a África, Europa del Este, Asia y América Latina y el Caribe.

En ese contexto, podemos destacar una parte significativa de las condiciones que llevan a que las personas se mantengan sanas, o bien, se enfermen. Son los determinantes sociales de la salud y que corresponden a las circunstancias en que las personas nacen crecen, trabajan, viven y envejecen, incluido el conjunto más amplio de fuerzas y sistemas que influyen sobre las condiciones de la vida cotidiana (OMS). El 7 de abril de 2024 fue definido por las Organizaciones Mundial y Panamericana de la Salud como el día mundial de la salud, con el lema “Mi salud, mi derecho”.

Dicha institución ha liderado el estudio de la pobreza multidimensional en el mundo, contribuyendo al desarrollo de las primeras mediciones globales realizadas por Naciones Unidas y asesorando a diversos países en el diseño e implementación de mediciones de pobreza multidimensional. Los hogares encuestados por la Encuesta Casen son seleccionados a partir del marco muestral de secciones y de manzanas provisto por el Instituto Nacional de Estadísticas, que incluye sólo viviendas particulares. Por lo tanto, la información que entrega la encuesta es representativa a nivel nacional de los hogares y población que residen en viviendas particulares. La encuesta tiene cobertura a nivel nacional, entregando información representativa de hogares y población residente en viviendas particulares, tanto en zona urbana como en zona rural. El sistema educacional chileno, en vez de enseñar a todos por igual, servir para integrar a los niños de distintos orígenes sociales, promover la convivencia en comunidad, estimular la promoción social, favorecer un mismo lenguaje y valores, se ha convertido en instrumento de exclusión y ampliación de las desigualdades. Así las cosas, las mejores escuelas están reservadas para los hijos de las familias ricas, y gracias a ello obtienen los más altos puntajes en las pruebas estandarizadas, lo que les permite acceder a las mejores universidades.

Con ocasión de la disaster o “estallido social” que afectó a Chile con inusitada intensidad a partir de octubre del 2019, diversos análisis políticos, sociales y económicos han puesto la atención en la desigualdad como una de las principales causas del fenómeno. Como respuesta a estos indicadores, suele decirse que el problema no es que los ingresos sean muy desiguales, sino que hay demasiadas personas pobres. También se argumenta que la desigualdad era baja en los regímenes comunistas ruso y chino en 1980 y que su posterior aumento contribuyó a estimular la innovación y el crecimiento en beneficio de todos. Sin embargo, la justificación de la desigualdad en función del bien común no puede aplicarse a la realidad common de todas las naciones.

Parte del debate público, sin embargo, argumenta que la desigualdad es un producto inevitable del libre mercado, el desarrollo tecnológico, y de la globalización. Se cube (o al menos se asume) que no hay nada que los países puedan hacer para domar las fuerzas del mercado y que cualquier intento de regular el grado de desigualdad tendrá efectos negativos ineludibles sobre el crecimiento económico. Así, lo que hoy se observa en los datos sería una consecuencia inevitable de los tiempos modernos. Esta situación, a su vez, limita las posibilidades de progreso de las sociedades, ya que se pierden capacidades de generación de nuevos negocios y otras instancias de mejora del bienestar de la sociedad. Por último, la desigualdad tiende a causar situaciones de conflicto social que, a su vez, pueden derivar en consecuencias que afectan las posibilidades de desarrollo, ya sea a través de situaciones de inestabilidad política o por el tipo de políticas económicas implementadas. La contrapartida de la concentración en el tope son los bajos sueldos que obtiene la mitad de los asalariados, cuya remuneración es inferior al ingreso que necesita un hogar promedio para cubrir sus necesidades básicas (línea de pobreza).

La creciente desigualdad en diversos países del mundo ha exacerbado las divisiones y ralentizado los avances económicos y sociales. Esa fue una de las conclusiones del Informe Social Mundial 2020, publicado en enero pasado por el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales (Undesa, por sus siglas en inglés) de las Naciones Unidas. Mientras que las tasas de educación y alfabetización están aumentando en todo el mundo, no queda claro si se está disminuyendo la desigualdad educativa. Por eso, hay necesidad de aumentar la educación en los sectores desigualdad social a nivel mundial en crecimiento como la tecnológica y habilidades sociales específicas adaptables al mundo que actualmente se necesita movilidad ocupacional. Una buena educación, según expertos, tiene la función de adquirir habilidades y certificar conocimientos para participar aún más en la sociedad, y sirve para “socializar”. Utilizando datos de la CASEN para los años 2009 a 2017, los resultados de este ejercicio indican que alrededor del 11% de la desigualdad (medida a través del coeficiente de Gini) es exclusivamente atribuible al 1% más rico (ver Tabla 1).

Zimmerman (2019), por su parte, muestra que 50% de los cargos más altos en las empresas chilenas lo ocupan exalumnos de un subsegmento que proviene de solamente nueve colegios de élite (los que están incluidos en los 14 colegios identificados en el estudio del PNUD). El 29% de las y los estudiantes del nivel socioeconómico más alto no logra el desempeño esperado a finales de 1° básico. En contraste, el 73% de los estudiantes en el grupo socioeconómico más bajo está bajo el nivel esperado. Para los autores, esto llama a priorizar con urgencia a los establecimientos de bajo desempeño que educan a los niños y niñas más vulnerables. Los resultados indican que el 60% de los estudiantes de la Región Metropolitana muestra un nivel de comprensión lectora inferior al esperado. Esta medición se realizó a través de DIALECT, una evaluación digital adaptativa que permite enfocarse en los distintos subprocesos lectores según el nivel de comprensión lectora de cada estudiante.

En el mundo financiero los productos culturales, el conocimiento y los bienes inmateriales, son por excelencia los sectores más dinámicos de una economía donde la información es a la vez un factor de producción, un producto consumible y una variable económica. La duración y la calidad del sueño pueden predecir los niveles de hemoglobina A1c de una persona, con un consiguiente daño en los órganos blanco como riñones, corazón, nervios periféricos, retina, cerebro, entre otros. Casi un tercio de las personas indicaron dormir menos (24,7%) o más (7,7%) de lo recomendado, dos factores asociados a un mayor riesgo de mortalidad.

Si quiere obtener más información sobre como imprimir, guardar, y trabajar con PDFs, Highwire Press cuenta con una útil sección de Preguntas Frecuentes sobre PDFs (en inglés).Si el fichero no se descarga automáticamente, haga click aquí. Somos un centro de investigación y acción, que busca generar conocimiento crítico y acciones para potenciar las luchas sociales y sindicales. Es un verdadero apartheid”, explicó, lo que se implica gran endogamia y enfermedades genéticas asociadas.

Lamentablemente para algunas personas o grupos de la sociedad, la desigualdad es solo una externalidad negativa que acompaña el desarrollo económico particularmente cuando se trata de modelos económicos (y sociales) de carácter neoliberales. Peor aún más, existen tesis que señalan que la desigualdad es algo natural que nos acompañara de manera permanente y que en si mismo entonces no es un problema económico, al menos relevante. Uno de los hallazgos que más llama la atención de ambos estudios es el alto porcentaje de personas que no hace nada frente a una necesidad jurídica, lo que en 2015 alcanzó un 31% y en 2020 se reportó en un forty four,9%, siendo esto un factor que se encuentra asociado a mayores niveles de insatisfacción según el estudio 2020. Junto con lo anterior, se puede observar que los grupos de la sociedad que más insatisfacción experimentan son los que pertenecen al grupo socioeconómico E, que tienen alguna discapacidad, que pertenecen a un pueblo originario, que no trabajan, o que tienen bajos niveles de escolaridad. Porque detrás de las buenas cifras, que debemos valorar y mejorar, cómo no, queda claro que los desafíos para el Estado siguen más vigentes que nunca.

desigualdad social a nivel mundial

10.b Fomentar la asistencia oficial para el desarrollo y las corrientes financieras, incluida la inversión extranjera directa, para los Estados con mayores necesidades, en specific los países menos adelantados, los países africanos, los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países en desarrollo sin litoral, en consonancia con sus planes y programas nacionales. 10.1 De aquí a 2030, lograr progresivamente y mantener el crecimiento de los ingresos del 40% más pobre de la población a una tasa superior a la media nacional. Nos alejamos de los paradigmas lineales y reduccionistas y nos abrimos a enfoques sistémicos, organizacionales, tectológicos, determinantes sociales tienen injerencia en la salud y se deben corregir. La Organización Mundial de la Salud ya colocó la mejora de esta brecha como objetivo (número dos) en la estrategia de «Salud para el siglo XXI». Con voluntad política, con conocimiento, con arduo trabajo y con solidaridad hacia el otro como declara el Papa Francisco al referirse sobre el deber de la solidaridad que «nos obliga a buscar modos justos de compartir, para que no exista esa dramática desigualdad entre quien tiene demasiado y quien no tiene nada, entre el que descarta y el descartado».

Es preciso advertir que incluso los países más igualitarios exhiben algún grado basal de desigualdad vinculado a la división del trabajo, la que requiere pagos diferenciados acorde a la complejidad de las ocupaciones o para el fomento de actividades que están sujetas a un appreciable nivel de riesgo, como la innovación y la labor empresarial. Asimismo, la búsqueda de la igualdad desigualdad social politica y economica no supone eliminar la diversidad de valores, preferencias y capacidades que nos distinguen como personas. De hecho, como muestra otro estudio, el 1% de los súper ricos en el mundo ha aumentado enormemente su riqueza durante la pandemia, especialmente en los lugares donde los hogares han sufrido más el impacto de la pandemia, como Rusia, Suecia, Brasil, India y los Estados Unidos.