Antropología Udec Se Adjudica Proyecto Sobre Desigualdad Social En Pandemia

Y, como explica la académica Teresa Correa, “ahora que nos vemos enfrentados a hacer todo online, nos damos cuenta de que es insuficiente”. Evidentemente, se trata de un problema complejo y multidimensional, con aristas que van tocan cuestiones que van desde la regulación laboral en relación al uso de la tecnología, a otras respecto a las políticas de vivienda y el hacinamiento que experimenta un porcentaje no menor de la población. La implementación del aborto por plazos, que establezca una edad desigualdad multidimensional gestacional límite como ocurre en otros países, sería una oportunidad de hacernos cargo del aborto inseguro, que representa una carga desproporcionada para las mujeres y para el sistema de salud. Texto escrito por Andrea Alvarez Carimoney, Académica de la Escuela de Salud Pública, Facultad de Medicina, Universidad de Chile. Frente a esta perspectiva creemos que es necesario y urgente abordar la salud como un proceso dinámico y contextualizado, en relación dialéctica con la enfermedad y la atención.

¿Qué reflexiones devienen de la pandemia en el hecho educativo y la formación de maestros, bajo una premisa de la necesidad social de formar bajo y para el cuidado? Así, el objetivo del escrito es propiciar la discusión en la importancia de la formación de maestros con el propósito de transformar la vida de las infancias, aprovechando el papel protagónico que tienen las mujeres en la educación. La invitación es a propiciar la reflexión sobre la necesidad que tiene la humanidad de cuidarse a sí misma y cuidar de la vida del planeta mediante el aprendizaje de la ética del cuidado y el desarrollo humano en la formación docente. Al iniciar el siglo, Manuel Vázquez Montalbán analizaba la emergencia del pancapitalismo en un ensayo sobre la globalización en el que nos  advertía de que “enseñar el hormiguero, la piel, los ojos de los perdedoresera subversión”,y que algún día cercano podría estar prohibido. Afortunadamente, no hemos llegado a ese punto, pero la actual ausencia de datos fiables que existe en muchos países para analizar la desigualdad parece acercarnos a ello. Un gran número de análisis científicos ha mostrado cómo las clases más vulnerables, las mujeres, migrantes, infantes, mayores y residentes en territorios pobres mueren y enferman más por causas injustas y evitables.

5 años como educador well-liked en la dirección de proyectos sociales y comunitarios y tres (3) años como profesor investigador en la Fundación Universitaria Los Libertadores. La movilidad urbana cotidiana es una práctica a través de la cual las personas organizan socialmente espacio y tiempo en la ciudad, para acceder a lugares, personas, trabajos y servicios, entre otros aspectos escenciales para la reproducción de la vida social. Así, la movilidad es un aspecto central al momento de pensar ciudades inclusivas y con igualdad de derechos para todos sus habitantes. Sin embargo, el coronavirus no es una pandemia global que afecta a toda la población por igual, como a menudo se suele repetir, sino que está exacerbando, aún más, las enormes desigualdades sociales ya existentes.

La política de transferencias directas, particularmente en lo relacionado al Ingreso Familiar de Emergencia, también proviene de un proceso de aprendizaje ocurrido durante el año 2020 y el primer trimestre del año 2021, donde los intentos de focalizar las ayudas terminaban dejando parte de los hogares que se vieron afectados por la pandemia fuera de los beneficios. En este sentido, fue elementary avanzar en un diseño que dotara de recursos en forma oportuna a los hogares, mediante el uso de requisitos de rápida verificación, tales como el easy hecho de pertenecer a cierto grupo de la clasificación socioeconómica del RSH. Como se observa en el Gráfico 4, la participación de los hogares del primer decil en los ingresos totales a nivel nacional se triplica. También, como es de esperar, el impacto de las ayudas en términos relativos va decreciendo a medida que aumenta el decil de ingresos, beneficiando, en menor cuantía, hasta el sexto decil de ingresos autónomos. Lo anterior permite ver la progresividad del IFE y el resto de los beneficios, ya que son los sectores de más altos ingresos quienes más ven reducida su participación del ingreso complete, y dichos recursos fluyen hacia los sectores más vulnerables. El primero, cube relación con la efectividad del IFE, en conjunto con otras transferencias a los hogares, para mitigar la caída de ingresos que sufrieron las familias.

desigualdad social en tiempos de pandemia

Para la efectividad de su cumplimiento, los derechos que no pueden ser cedidos en favor de otro/a, son de carácter universal, ya que aplica para todos los niños y niñas, son indivisibles, ya que no puede solo aplicarse unos derechos y otros no, y no hay un derecho que sea más importante que el otro. La Convención Sobre los Derechos del Niño es un tratado internacional que existe para establecer las normas mínimas que aseguren la vida, el bienestar, la protección y la libertad de los niños y niñas. La Convención sobre los derechos del niño/a ha sido ratificada por 196 Estados Parte de la Convención. Ha sido uno de los tratados sobre derechos humanos que más rápidamente ha sido ratificado y a la que más países se han adherido. Uno de los Estados que aún no ha ratificado la Convención, pero que ha expresado su intención de hacerlo, es Estados Unidos. El ausentismo y deserción escolar implican pérdidas de oportunidades duraderas y prolongadas, que afectan el desarrollo y el aprovechamiento de las oportunidades educativas, otro factor contribuyente a la desigualdad.

Cifras acumuladas de las transferencias directas entregadas y comprometidas en pandemia hacia los hogares, a diciembre 2021 (cifras en millones de dólares). Cobertura de las medidas de mitigación implementadas durante el primer semestre del año 2020, según tramo de ingresos. Por nuestra parte, creemos que estos datos invitan a seguir profundizando lecturas respecto al rol que le asignamos a internet y el papel que cumple en materia de derechos humanos, cuestión que pretendemos continuar en una versión ampliada de este artículo, que inaugurará la edición 2020 de Latin America in a Glimpse, dedicado este año —cómo no— a la pandemia. Sin embargo, de acuerdo a las últimas mediciones disponibles, el número de hogares conectados solamente a través de dispositivos móviles se encuentra entre el 44% y el 46%.

Por su parte, IZZI, Megacable, Telmex, Totalplay y Maxcom comenzaron a ofrecer a sus clientes la opción de migrar temporalmente a un plan de bajo costo. Las características son similares a las del “Plan Solidario de Conectividad” chileno —acceso a internet con una velocidad de hasta 2Mbps, de navegación libre y datos ilimitados con excepción de video y videojuegos— pero con un costo de $ a hundred. En el caso de México, el Instituto Federal de Telecomunicaciones acordó con los concesionarios de los servicios móviles los concesionarios de servicios móviles –AT&T, Telcel y Telefónica- un “plan de emergencia”, que permite a los usuarios de prepago acceder, por una sola ocasión, a un paquete gratuito de llamadas de voz y mensajes SMS, pero no acceso a internet.

Prácticamente en todos los ámbitos, desde la salud hasta la economía, desde la seguridad hasta la protección social, los efectos de la COVID-19 han agravado la situación de las mujeres y las niñas simplemente como consecuencia de su sexo. La COVID-19 ha intensificado las desigualdades existentes y ha afectado más que nadie a los pobres y las comunidades más vulnerables. Ha sacado a la luz las desigualdades económicas y las frágiles redes de seguridad social que hacen que las comunidades vulnerables tengan que sufrir las consecuencias de la crisis desigualdad social en tiempos de pandemia. Al mismo tiempo, las desigualdades sociales, políticas y económicas han amplificado los efectos de la pandemia. La influencia del imperialismo en la vida de la clase trabajadora y en las poblaciones es multifacética y se manifiesta en diferentes aspectos de nuestra vida cotidiana, así como en sus condiciones socioeconómicas y políticas. Esto se manifiesta en salarios bajos, largas jornadas laborales, falta de seguridad laboral y social, y dificultad para acceder a empleos estables dado por la tercerización del trabajo.

Los resultados evidencian que, si bien las parejas visualizan a la mujer como la cuidadora principal y al hombre como proveedor, el confinamiento ha posibilitado un mayor involucramiento paterno, lo que ha sido significado de forma positiva por ambos miembros de la pareja. Aún se hace necesario investigar más acerca de la distribución inequitativa y sexista de los cuidados y la evolución del involucramiento paterno pos pandemia. En el ámbito de la investigación académica hemos sido testigos de cómo la crisis sanitaria, el confinamiento, la educación remota y el teletrabajo han generado una serie de dificultades para los investigadores e investigadoras que realizan trabajo empírico. Los tiempos de la investigación cualitativa han sido complejos; las observaciones etnográficas y entrevistas de campo se han debido desarrollar vía zoom u otras plataformas tecnológicas, las cajas de herramientas de indagación y producción de datos sociales ha debido ajustarse y transformarse. Esto produce desafíos teóricos y metodológicos interesantes y necesarios de sistematizar y socializar.

Es decir, la disminución common de la probabilidad de morir joven y la disminución de la heterogeneidad a lo largo del espectro socioeconómico pueden bien ser caras de la misma moneda, donde los grupos más desaventajados están simplemente “poniéndose al día” con los niveles de mortalidad en los grupos afluentes. En los jóvenes, además de la probabilidad de morir antes de 65 años, usamos también la esperanza de vida entre 20 y sixty five años; cuántos años se espera que una persona que cumple 20 años vivirá en los forty five años siguientes, y la probabilidad de morir antes de los sixty five años. En edades avanzadas usamos esperanza de vida a partir de los sixty five años, cuántos años se espera que vivirá una persona que acaba de cumplir sixty five años. La evidencia disponible indica contundentemente que el impacto del Coronavirus ha sido mucho mayor en las áreas más pobres [1,2,3], y que aún más, estas diferencias fueron particularmente fuertes en edades más jóvenes [1]. Sin embargo, como el grueso de las muertes se concentra en grupos de edad avanzada donde los resultados dependen menos del nivel socioeconómico, no es claro la medida en que la pandemia ha cambiado el panorama basic de la mortalidad.

Con la intensidad del nuevo paquete fiscal para el año 2021 se logra revertir esa situación, consiguiendo que la desigualdad alcance mínimos históricos de forma momentánea. Por su parte, las ayudas que fueron directamente a los hogares en los años 2020 y 2021, tales como el IFE common y laboral, los bonos a la clase media y transportista, entre otros, se contabilizan en alrededor de 28,5 millones de dólares, según se detalla en la siguiente tabla. En la tramitación de la Ley de Presupuestos del Sector Público del año 2021 (ley N° 21.289), se abarcó la necesidad de contar con mecanismos que permitieran al Ejecutivo decretar la transferencia de recursos de forma expedita a los hogares.

Incluso los países más equitativos exhiben algún grado basal de desigualdad vinculado a la división del trabajo, la que requiere pagos diferenciados acorde a la complejidad de las ocupaciones o para el fomento de actividades que están sujetas a un considerable nivel de riesgo, como la innovación y la labor empresarial. En temas de género, las cifras respecto al desempleo se agudizaron porque las mujeres disminuyeron su participación laboral a sólo un 47,3%, su nivel más bajo en 10 años en nuestro país, según datos del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género. La siguiente tabla muestra el resumen de la pérdida de ingresos laborales, por año y según su condición de formalidad.