Para presentar su propuesta las comunidades deberán contactarse con el equipo de la VPSC, para el llenado y aplicación de los instrumentos necesarios para evaluar la solicitud. Detalló que ser ciudadanos más conscientes y responsables supone no dar la vuelta a la espalda a la realidad social, aunque esta ocurra a far de kilómetros de distancia. Por organizaciones de base ejemplo, indicó que el 60 por ciento del cacao (chocolate) “proviene de Costa de Marfil y Ghana y allí trabajan más de 300 mil niños esclavos”. Por eso, añadió, “debemos preocuparnos sobre cuáles son las cadenas de valor, de dónde vienen los productos, quién los hace, por qué los hace, en qué condiciones lo hace, y preferir a las empresas más sustentables”.
organizaciones se consideran las Asociaciones de Productores, Cooperativas, etc. que fueron creadas por otras instituciones actualmente atendidas por el PRODERCO. De Olancho, Veterinarios sin
Cabe recordar, además, que cualquier ciudadano que quiera verificar la existencia de alguna institución cooperativa, puede consultar en la página net de la División de Asociatividad (DAES), en el hyperlink Buscar Organización, en donde podrá encontrar el listado de cooperativas que se encuentran debidamente registradas en la cartera. En razón de lo anterior, se hace presente que todas las cooperativas, independiente de su rubro, deben remitir los antecedentes de su constitución y funcionamiento a este Ministerio. Desde la región de Coquimbo, la gerenta general de Sercotec, María José Becerra Moro, anunció la apertura de la convocatoria nacional a los programas… Así mismo, se hace una verificación para varios segmentos de entidades, evaluando entre otros aspectos la forma como se direccionan las empresas y su apetito al riesgo.
Se necesitan profesionales con pertinencia y vocación en esta área, ya que sin una gestión comprometida es muy difícil que se consolide esa cooperativa pese a contar con recursos para ello”. Igualmente, Horacio Velásquez, Secretario Regional Ministerial de Agricultura, destacó que “la experiencia de Brasil en cuento a cooperativas ayuda a generar emprendimientos rurales que se pueden replicar perfectamente en la región. Sin duda, la mejor forma para que los productores/as se convenzan es viendo justamente los ejemplos de sus pares, entendiendo además que como Ministerio estamos convencidos que la asociatividad es la manera de comercializar del futuro”. En la ocasión, el experto brasileño dio a conocer experiencias de trabajo cooperativo y gestión en las organizaciones, temas que no sólo son de interes para los dirigentes campesinos sino que también son parte de los lineamientos del Programa Fortalecimiento Gremial Rural. Wijnant explicó que el modelo de la “economía del bien común” apunta a recuperar el sentido unique aristotélico y la esencia del sentido de la economía, donde el fin último es “administrar una casa común buscando el bienestar de sus habitantes” y el dinero es sólo un medio para ello. “Esto es contrapuesto a la crematística o el amor por el dinero, la maximización de las utilidades a como dé lugar”.
De esta forma podremos humanizar la economía, mediante el fortalecimiento de empresas y cooperativas que promuevan la integración social frente a fenómenos como la migración y la lucha contra la pobreza, promoviendo el trabajo asociativo y colaborativo, en beneficio de los sectores más vulnerables. El objeto es la formulación de proyectos, iniciativas o emprendimientos, los cuales entiendan la rentabilidad con otra mirada, en donde los ingresos económicos de sus actividades y el menor gasto público generado sean valorados, reconociendo rentabilidad social, la cual es posible conseguir bajo una mirada de auto sustentabilidad, desarrollando indicadores sociales que incorporen variables como el bienestar de las personas. En el trascurso del trabajo de campo, participé de un competition de la organización social realizado un fin de semana de verano en la plaza del centro de la localidad. En aquella oportunidad, solo encontré a la presidenta de la cooperativa y a una de las trabajadoras “jóvenes”, quien me comentó que “algunas [compañeras] están de vacaciones, algunas son grandes y no pueden, otras hacen y mandan comida para vender en el competition, y otros directamente no vienen y no hacen nada”.
Se crean la Caja del Seguro Obrero, la Caja de Empleados Particulares y la Caja de Empleados Públicos, instituciones que otorgan previsión social a sus cotizantes a través del sistema de reparto. Sin embargo, la gran disaster mundial de 1929 detuvo muchas de estas iniciativas, las cuales sólo quedaron reflejadas en el diseño institucional, sin financiamiento ni personal capacitado para llevarlas a cabo. Se trata de 57 asociados a esta nueva organización que trabajan en la pesca artesanal de la jibia en las costas de la provincia de Arauco y que tienen como puerto base a la comuna de Lebu. En el marco de la primera actividad con estudiantes de la generación 2021 de la carrera de Ingeniería Comercial, especialistas coincidieron y felicitaron que la Universidad de Playa Ancha haya decidido abrir esta disciplina imprimiéndole un sello propio. Dentro de este tipo de
Necesitamos sentirnos parte de un mismo buque donde no hay un carro de primera, otro de segunda y otro de tercera, como en el Titanic, donde los de la última clase no tenían botes para salvarse. Las organizaciones de la economía social tienen una larga trayectoria promoviendo, organizacion privada sin fines de lucro dentro de la diversidad, un sentimiento de igualdad y de solidaridad entre la gente. Usando la misma metodología, un estudio del PNUD arrojó 106 mil organizaciones de este sector en 2005 y en 2015 un estudio del CPP de la Universidad Católica arrojó 226 mil.
Está dirigido a agrupaciones formales e informales, comunidades católicas o laicas, organizaciones comunitarias, territoriales, sociales y/o socioeducativas que busquen soluciones atingentes y cuyas propuestas sean ejecutadas por personas que son parte de su propia comunidad. Wijnant sostuvo que “el balance del bien común es el corazón de esta propuesta”, la cual se refiere a una métrica que contiene factores económicos, sociales y ambientales para determinar qué tanto están aportando al bien común las organizaciones privadas o públicas. Esta “matriz”, por ende, implica evaluar el comportamiento de una organización con respecto a sus distintos grupos de contacto internos y externos, en los ámbitos valóricos arriba citados. En la oportunidad, el Dr. Radrigán planteó en un primer punto la importancia que tienen las empresas cooperativas al desarrollarse en los territorios, “al estar afincadas a los territorios donde viven sus socios y familias se convierten en un motor de desarrollo local y territorial, teniendo un impacto directo en procesos de desarrollo sostenible”. Por supuesto, en todo este heterogéneo mundo de empresas, asociaciones, unidades y experiencias, hay horizontes distintos. Algunos ven la posibilidad de una alternativa international al capitalismo; otros, la posibilidad de fortalecer un tercer sector “social” de la economía, junto al privado y al público; otros, “simplemente”, crear espacios alternativos de economía movida por otros valores y propósitos que los de la ganancia y la acumulación.
DAES ofrece en forma permanente capacitaciones, charlas y talleres on line para cooperativas, asociaciones gremiales y de consumidores. El ejemplo más reciente es el trabajo que se está llevando a cabo con los desmovilizados de la guerrilla de las Farc, quienes se capacitan actualmente en economía solidaria para reincorporarse a la vida civil bajo el modelo cooperativo, con el fin de poder acceder a una vida digna, de manera productiva. La confianza en la economía solidaria se forma porque existe una institucionalidad robusta desde el Estado y de los diversos organismos que conforman el sector. Esto no quiere decir que no haya inconvenientes, sino que precisamente se tomen las decisiones con un enfoque objetivo y de mitigación de los riesgos, tanto por los sujetos vigilados como por las partes interesadas, cada uno dentro del ámbito de sus competencias legales. Esta visión versa sobre un modelo económico que contribuye a la reducción de la pobreza y la desconcentración del ingreso, todo lo contrario de la tendencia en las relaciones internacionales de los países ricos y pobres, donde las diferencias y las brechas se aumentan cada vez más. A raíz de esta decisión, la cooperativa efectuó una serie de acciones colectivas tanto institucionales como directas.
Es importante mencionar que en la red de economía solidaria participan productores, Asociaciones de Productores, Empresas de Desarrollo Rural, Cooperativas de Ahorro y Crédito, Cooperativa de servicios múltiples y otros actores económicos similares. Más específicamente, la propuesta de la Economía del Bien Común (EBC) identifica tres problemas y tres soluciones. Para superar la contradicción entre los valores de la economía y la sociedad propone un modelo que premie el aporte al bien común y la coherencia con los valores sociales.
Entonces le pregunté cómo evaluaba que algunas “no hacen nada” y ella me contestó que le molestaba y que siempre se discute en las asambleas. Pero no sólo por ello la evaluación del “modelo chileno” es críticada por este sector de la economía. También porque las formas dominantes de funcionamiento de la economía y del Estado ha favorecido a los grandes grupos económicos y su comportamiento voraz. Frente a esos procesos, Chile, orientado desde mitad de los años 70 por un liberalismo económico radical y precoz, y pese al surgimiento de muchas experiencias de la economía a la que hacemos referencia, aparece aún lejano a ese tipo de iniciativas institucionales.
Además, indica que el “espíritu” de nuestras constituciones no se refleja en la economía, ante lo cual el modelo busca medir la contribución al bien común. Por último, se plantea que sólo hay indicadores de valores de cambio que miden el medio, por lo cual se requiere medir el éxito económico con indicadores de utilidad socioambiental que evalúen el fin. Podemos decir que la confianza es la base del modelo de economía solidaria, ya que su ADN es el bien común, el liderazgo colectivo y la construcción de un capital social que asegura a todos sus miembros una distribución equitativa de beneficios, sin ningún tipo de discriminación. Por ende, se debe asumir el cuidado del medio ambiente poniendo énfasis en el uso correcto y responsable de los recursos naturales, como una manera de entender el progreso y la economía, incorporando educación y espiritualidad ecológica.