mejor los alimentos disponibles. Posteriormente se da la sustitución en la adquisición de unos alimentos por otros, buscando siempre la mayor eficiencia energética, con perjuicio a veces de la estructura o densidad de la dieta. Cuando la estructura de la dieta se altera de forma significativa, comienzan también a hacerse evidentes los
Este grupo está integrado por las frutas frescas, los alimentos preparados para consumo en el hogar, las bebidas no alcohólicas, los cereales, la carne de cerdo, las carnes procesadas, la carne de pollo, los pescados frescos, la leche, el queso y los derivados de la leche. Estos son productos, por tanto, en los que independientemente del ingreso del hogar se observa una reacción similar ante un aumento de precios. Entre los 18 productos relativamente inelásticos destaca el caso del huevo, los aceites, las verduras, los tubérculos, el frijol, las frutas frescas y los productos derivados del trigo, para los que la elasticidad se encuentra entre los valores de zero y -0.eight.
O habiéndosele limitado sus capacidades productivas y las oportunidades de empleo temporal, deben enfrentar limitaciones al acceso a alimentos, que frecuentemente disponibles en los mercados, no pueden ser adquiridos por las familias pobres o extremadamente pobres. El drama es que una cultura que no incorpora los alimentos más sanos, hace que Chile tenga un índice de obesidad alto.
De acuerdo con el Banco Mundial (2012) estos cambios recientes se han diferenciado de los previos en dos aspectos importantes. Por una parte, han estado acompañados de una volatilidad de precios inusitada que genera factores de incertidumbre adicionales. Por la otra, los aumentos han abarcado a un conjunto aún más amplio de productos alimenticios, lo cual deja menos opciones a los hogares para modificar sus pautas de consumo hacia productos de menor precio y ajustarse a la nueva realidad. En este contexto, México ha adquirido compromisos dirigidos a la erradicación de la pobreza y disminución de la inseguridad alimentaria, derivado ello en la definición de políticas públicas.
Se esperaría que la expansión de estas acciones desde mediados de los años noventa hubiera tenido un efecto de reducción de la pobreza desde entonces, y que incluso pudiera haber amortiguado mayores incrementos derivados del ciclo económico. Al igual que existen estudios diversos que intentan dilucidar las causas del fenómeno en análisis, también existe una multiplicidad de investigaciones que intentan medir
la agenda pública con marcos normativos que no han logrado garantizar el derecho a la alimentación. Las políticas alimentarias en México se caracterizan por
En 1958, se levantó la Encuesta de Ingresos y Egresos de la Población de México también realizada por la Secretaría de Industria y Minas, y su principal objetivo fue obtener información de la distribución del ingreso en el país. Para 1963 y 1968 se cuenta con la Encuesta de Ingresos y Gastos Familiares realizadas por el Banco de México (1963, 1968). Los principales objetivos de ambas encuestas fueron estimar la demanda de productos agrícolas y obtener información de las diferencias de ingreso entre los ámbitos rural y urbano (véase en Hernández Laos y Velázquez Roa, 2003, un análisis pormenorizado de las características de las bases de datos de 1963 y 1968). En 1977 se realiza la primera Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares, por la Secretaría de Programación y Presupuesto (1977).
Se incrementó entre 1992 y 1996, disminuyó constantemente entre 1996 y 2006 hasta llegar a 13.8%, y aumentó nuevamente a 18.8% entre 2006 y 2010. Esto tuvo como consecuencia que 6.5 millones de personas adicionales pasaran a formar parte del grupo de pobreza alimentaria en el transcurso de los pasados cuatro años. Hay familias que pasan hambre con niños obesos por el consumo de productos procesados y ultraprocesados, con exceso de grasas, de azúcares o de sal. R. Según la FAO, hay 58 países en situación de emergencia alimentaria, sobre todo en África y Oriente Medio. Y el problema aquí es que, aunque un productor tenga acceso a la tierra, no consigue alimentar a su familia porque no tiene agua. Se venden los productos, y dependen de los precios de otros bienes y servicios
La cuarta sección describe las modificaciones en las pautas de consumo de alimentos por parte de la población pobre en los años recientes. La quinta sección presenta una serie de estimaciones de las elasticidades precio de la demanda de cada uno de los rubros incluidos en la canasta alimentaria, lo cual revela las estrategias seguidas por los hogares para aminorar el efecto.
Si seguimos con la concept de que combatir el hambre es un tema de filantropía o de ayudas de emergencia, no vamos a ninguna parte. Si un niño no come antes de ir a la escuela, no es culpa de la madre porque es una obligación del Estado garantizar la alimentación. Las de trigo bajarán un poco por las sequías, pero, dividido per capita, sobra maíz, trigo, arroz o soja. Esta alarmante cifra pone en evidencia que, en nuestro país, no solo existe un problema de falta de alimentación entre los sectores económicos más vulnerables, sino que también se agrega la problemática de la calidad de los alimentos consumidos a lo largo del territorio nacional.