En esta sección nos concentraremos en mostrar la importancia de la variable escala de la segregación en los problemas sociales, lo que haremos para el caso de Santiago. Más adelante mostraremos estadísticas para Valparaíso y Concepción que muestran la malignidad que ha cobrado la segregación entre los pobres después de la reforma económica. En las ciudades chilenas después de la reforma económica, y por razones que discutiremos, la segregación de las elites estaría tendiendo desde B a C; y la de los grupos pobres mostraría dos tendencias. Por una parte, grupos ya asentados en la ciudad que, como efecto de la propensión de los grupos altos a dispersarse, estarían transitando desde una situación parecida a la D a una como la B; y, por otra parte, las nuevas familias pobres tenderían a conformar una situación espacial semejante a la D. Como veremos en la siguiente sección, el concepto de «escala geográfica de la segregación» es clave para entender los cambios que están afectando al patrón de segregación de las ciudades chilenas y latinoamericanas.
Una fuente de bienestar tiene que ver con conocer y aprender a reconocer lo que nos decimos frente a nuestras alegrías, pero sobre todo frente a las dificultades que enfrentamos. La jerarquía visual determinada, comienza en el segmento superior por la descripción y la realidad en el contexto de cada región, pasando a la calidad de previsión pública que poseen sus habitantes (respecto del total, considerando las privadas), y a una condición demográfica que distingue a no pobres, pobres e indigentes, y desglosando finalmente, una visual del porcentaje de habitantes por género. La categoría, que visualiza directamente a la cantidad de habitantes y su condición (genero y socioeconómico), se construye a modo de rectángulo, con el fin de generar una línea, llamando la «línea de la pobreza» a nivel de país, expuesta al yuxtaponer todas las regiones del país, ordenadas geográficamente. ¿Cuándo escuchamos o decimos el recurring comentario diario en torno al “no tengo tiempo”, “ojalá el día tuviera más horas” “me gustaría tener más tiempo para mi” en el fondo a qué nos estamos refiriendo? Se ha calculado la cantidad de horas semanales de trabajo para mantenerse física y mentalmente sano, y la pobreza de tiempo recurrente o crónica, afecta directamente en la salud tanto física como psychological, en adultos como en niños y niñas.
Una discusión extensa de este concepto y de su fundamento a partir de la crítica a la literatura especializada, se encuentra en Sabatini et.al. Luego, en la sección 6, mostraremos cómo, en el nuevo contexto de globalización de las economías, la segregación residencial se está volviendo «maligna» en nuestras ciudades. La transformación en curso consiste en la reducción de la escala geográfica de la segregación en algunas zonas internas de las ciudades, y su ampliación en otras. Por otra parte, las consecuencias más bien perjudiciales que la segregación espacial de los pobres siempre ha tenido se han agudizado en las últimas décadas.
Las variables se construyeron a partir de preguntas de la encuesta que abordan la percepción de los trabajadores sobre estos temas, en base a una escala Likert de 1 a 7[1] (Tabla 1). Es cierto que la aglomeración de los pobres en la periferia de las ciudades siempre ha tenido efectos negativos. La ilegalidad, irregularidad e informalidad han sido rasgos peculiares de los asentamientos pobres y de los mercados de suelo de las ciudades de América Latina (Smolka, 2001). La falta de servicios urbanos y las malas condiciones de accesibilidad de estos barrios han sido un issue adicional de empobrecimiento de estas familias. Sin embargo, la «población» –nombre que se da en Chile a estos asentamientos, sean espontáneos o construidos por el Estado– fue en el pasado base de las organizaciones sociales y de las acciones de clientelismo o lucha de los «pobladores» dirigidas a lograr una mejor inserción política y laboral en la ciudad.
Debemos tener en cuenta que los cambios reseñados representan tan sólo tendencias; las ciudades aún conservan en gran medida el sello del patrón tradicional de segregación. Esto es especialmente claro para el caso de los grupos pobres que se benefician de la reducción de escala de la segregación causada por el sector inmobiliario privado. Representan una minoría entre los pobres, quienes aún viven mayoritariamente en las típicas aglomeraciones de pobreza de nuestras ciudades. Estas dos tendencias tan distintas de cambio en la escala de la segregación empujan hacia una diferenciación de la situación urbana al interior de los grupos pobres, y hacia ciudades más complejas que requieren políticas urbanas y de control de la segregación más específicas y variadas. Los efectos de la segregación sobre el desempleo posiblemente tengan que ver con los tiempos de viaje y con la exigua información sobre oportunidades de trabajo que circula en áreas socialmente homogéneas, especialmente si son pobres. Goldsmith & Blakely (1992) muestran cómo la residencia de gente discriminada en barrios segregados de las ciudades estadounidenses funciona como un «cerrojo espacial» que inhibe el acceso al trabajo, en parte porque no surgen allí redes de información laboral o porque ellas son débiles.
Por su parte, la académica Emmanuelle Barozet e investigadora principal del Centro de Estudios del Conflicto y la Cohesión Social (COES), recalcó que esta tarea de la comisión es de Estado. Los nuevos modelos a escala permitirán complementar la comprensión de diversos fenómenos y procesos fundamentales para la formación de los futuros profesionales. La Hora del Planeta es impulsada en más de 160 países por la organización conservacionista World Wildlife Fund for Nature (WWF). La manifestación ciudadana nació en Australia y Chile se sumó a la cruzada en el año 2009. En la instancia, como acto simbólico y de apoyo a esta acción ciudadana, el municipio bajó las luces de la Plaza de Armas y el Gobierno Regional redujo el consumo energético del frontis de la Intendencia. Laura Vega, desde su origen, “la Unidad de Mejoramiento Docente (UMD), dependiente de la Dirección de Docencia, ha participado activamente aportando a la docencia, en concordancia directa con el Modelo Educactivo y el Plan Estratégico de Desarrollo de la Universidad de La Serena”.
Georgina García, quien explicó que estos talleres continuarán desarrollándose próximamente en las universidades Santo Tomás (sede Viña del Mar, en mayo) y de La Frontera (julio). La actividad tuvo como propósito que las organizaciones de Educación Superior y las personas en situación de discapacidad, debatieran y consensuaran un concepto de Educación Superior Inclusiva. “La discusión es técnica pero tremendamente política”, según Durán, pues actualizar los patrones de consumo iba a hacer que la pobreza aumentara.
Propuso un «camino de cintura» que definiría «la ciudad estableciendo los límites propios de ésta…creando la ciudad propia, sujeta a los cargos y beneficios del municipio, y los suburbios, para los cuales debe existir un régimen aparte, menos oneroso y menos activo» (De Ramón, 1992). El Intendente buscaba marcar clara diferencia entre la «culta capital de Chile», «el Santiago propio, la ciudad ilustrada, opulenta, cristiana» y los «arrabales», «inmensa cloaca de infección y de vicio, de crimen y de peste, un verdadero potrero de la muerte…». Erazo, “Rigor científico en las prácticas de investigación cualitativa”, en Ciencia, Docencia y Tecnología 42 (2011).
Nuevas o mejoradas carreteras urbanas y anillos de circunvalación han cambiado las condiciones de accesibilidad dentro de las ciudades, permitiendo generar extensas áreas de mercado y, con ello, una cierta dispersión de los mega-proyectos. Dentro de estas áreas de mercado suelen quedar incluidos barrios pobres que, por sí mismos, no podrían sustentar los comercios y servicios de alto nivel de los mega-proyectos. La construcción de «condominios cerrados» para grupos medios y altos fuera de su área tradicional de concentración, es tal vez el cambio más notorio y generalizado que está afectando a la estructura interna de las ciudades chilenas y latinoamericanas. No pocas veces estos emprendimientos surgen, inesperadamente, en las proximidades de barrios pobres. Se están publicando numerosos artículos que los describen, con el tono de denuncia comentado antes, pero en common esos trabajos no reparan en la localización de estos proyectos. Las rejas electrificadas y los guardias armados son formas violentas de privatización del espacio público que contrastan con el entorno inmediato, especialmente si éste es pobre.