De acuerdo a datos de Candid, solo durante 2020 se movilizaron más de 20 billones de dólares alrededor del mundo para hacer frente a las consecuencias del Covid-19, de los cuales 600 millones fueron destinados a América Latina. Esta desconfianza no cae del cielo, nace de la relación cotidiana que las personas de menores recursos tienen con su entorno. La mitad de este grupo cube ser discriminado, menospreciado o sufrir frecuente falta de respeto comparado con el grupo socioeconómico alto. No podemos asumir como parte del paisaje que compatriotas estén condenados a la pobreza extrema y que el trabajo de toda una vida no alcance para tener una vejez digna. No nos gusta la pobreza, le tememos a sus consecuencias, sobre todo cuando sentimos que nos afectar a nosotros o nuestros familiares. Si comparamos con otros desafíos como «ser un país desarrollado» o «resolver el problema de la calidad de la educación», la percepción es más baja.
Desde el año 1990, por medio de la suscripción de convenios bilaterales, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), ha prestado asistencia técnica al Ministerio de Desarrollo Social y Familia en el proceso de medición de la pobreza con datos de la Encuesta Casen. Un núcleo familiar es una parte de un hogar (es decir, un subconjunto de sus miembros) y puede estar constituido por una persona sola o un grupo de personas. Se excluyen aquellas personas que estuvieron ausentes más de seis meses en el último año, exceptuándose el jefe del hogar y los niños menores de seis meses. Se consideran miembros de un hogar a todas aquellas personas que, siendo residentes de una misma vivienda, pueden tener o no vínculos de parentesco entre sí y habitualmente hacen vida en común, es decir, se alojan y se alimentan juntas.
Sin embargo, en un año, se observa un retroceso en pobreza de 12 años y de 20 años en pobreza extrema. Frente a esta realidad, es muy importante seguir apoyando a las familias más afectadas, especialmente, con ayudas que permitan superar este momento de disaster. En un mundo con recursos naturales limitados (suelo, agua, energía, fertilizantes, and so forth.) y con millones de personas con problemas de hambre y malnutrición, nacen los Bancos de Alimentos como una solución para reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos y apoyar a millones de personas vulnerables. Por tanto, un enfoque multidimensional que promueva el desarrollo humano es fundamental para hacer frente a los desafíos dela última milla.
La clave de esto es la labor que pueden desempeñar las empresas para aliviar las condiciones económicas que conducen a la pobreza, mediante el aumento de la actividad comercial en los países menos adelantados. De acuerdo con las necesidades de las comunidades locales, en specific garantizando que los beneficios económicos lleguen a los trabajadores locales y proveedores. Más allá de los ingresos, las empresas pueden influir en otras dimensiones de la pobreza, como las oportunidades y capacidades limitadas. Estas dimensiones interrelacionadas incluyen la inseguridad alimentaria/nutricional, falta de acceso a servicios básicos y de calidad como la atención médica, educación y saneamiento, y el bajo empoderamiento y seguridad personal. Varias de estas dimensiones, especialmente para los pobres, están estrechamente relacionadas con el medioambiente – por ejemplo, la salud está directamente afectada por la disminución de la calidad medioambiental de forma que a los pobres les resulte más difícil de abordar individualmente. Estas múltiples dimensiones de la pobreza –cuando se miden adecuadamente – transmiten una imagen más completa que la proporcionada únicamente por el de indicador de ingresos.
Durante los conflictos, las tasas de homicidio y otros crímenes violentos aumentan de manera significativa. Si bien es más probable que los hombres mueran en el campo de batalla, las mujeres están sujetas a la violencia sexual, el secuestro, la tortura y la necesidad de abandonar sus hogares. Las mujeres pobres de medios rurales que dependen de los recursos de uso común resultan especialmente afectadas cuando éstos disminuyen. Las mujeres y las niñas son las responsables de recolectar el agua en el eighty % de los hogares que no cuentan con acceso a agua corriente. En 18 países, los esposos pueden impedir legalmente que sus esposas trabajen; en 39 países, las hijas y los hijos no tienen los mismos derechos hereditarios y 49 países carecen de leyes que protejan a las mujeres de la violencia en el hogar.
Tanto la Fundación Gates como el Banco Mundial se centran en la medida de la pobreza extrema de US$1,ninety al día. La cifra es comparable, ajustada por inflación, al umbral de US$1 por día que se hizo in style en la década de 1990 como indicador de pobreza extrema. En 1990, más de 1.900 millones de personas vivían por debajo del umbral de pobreza extrema, una tasa del 36%. Las estimaciones de la institución son más espantosas que las de un informe similar erradicación de la pobreza de la Fundación Bill y Melinda Gates publicado el mes pasado, que estima que la pandemia había llevado a 37 millones de personas a la pobreza extrema.
Una nueva investigación publicada por el Instituto Mundial de Investigaciones de Economía del Desarrollo de la Universidad de las Naciones Unidas advierte de que las consecuencias económicas de la pandemia mundial podrían incrementar la pobreza en todo el mundo hasta llegar a afectar a 500 millones de personas más, o lo que es lo mismo, a un eight % más de la población total mundial. Se estima que la pandemia de COVID-19 empujará a entre 88 millones y a hundred and fifteen millones de personas a la pobreza extrema este año, mientras que la cifra total llegará a los one hundred fifty millones para 2021, según la gravedad de la contracción económica. La pobreza extrema, definida como la situación de quienes viven con menos de USD 1,90 al día, probablemente afecte a entre un 9,1 % y un 9,4 % de la población mundial en 2020, de acuerdo con el trabajo Poverty and Shared Prosperity Report (Informe sobre pobreza y prosperidad compartida), que se publica cada dos años. Si la pandemia no hubiera convulsionado el mundo, la tasa de pobreza habría descendido al 7,9 % en 2020, según se preveía.
Además de posibilitar un espacio de reconocimiento e intercambio de experiencia y generar un espacio de reflexión entre protagonistas y expertos en las temáticas de voluntariado juvenil y su rol transformador. La situación ha provocado una de las mayores crisis de desplazamiento del mundo, según la ONU, y más de 5,6 millones de personas han abandonado el país. Estos datos refuerzan la necesidad de abordar la pobreza como una urgencia país, porque de su invisibilidad y consecuente desatención surge parte importante de la desconfianza y desesperanza imperantes.
Por eso se insiste que es “crítico” que diversifiquen su modelo económico y adopten políticas para ser más competitivos a largo plazo, incrementando la productividad y la formación. La Canasta Básica de Alimentos (CBA) refiere a un conjunto de bienes alimentarios que se utiliza como base para definir el valor de la línea de pobreza y línea de pobreza extrema por ingresos. Para comparar las estimaciones obtenidas para dos grupos independientes de hogares o de población (incluyendo comparaciones entre grupos para un mismo año y comparaciones de un mismo grupo para diferentes años), el Ministerio de Desarrollo Social y Familia. Sodimac cuenta con un programa de inversión social denominado “Construyendo Sueños de Hogar“, colaborativo y participativo que tiene por objetivo mejorar la calidad de la infraestructura y entorno comunitario de comunidades en situación de vulnerabilidad.
Las empresas deben asegurarse de cumplir con su responsabilidad de respeto a los derechos humanos, incluyendo los derechos de dichos grupos. 1.b.1 Proporción de los gastos públicos periódicos y de capital que se dedica a sectores que benefician de forma desproporcionada a las mujeres, los pobres y los grupos vulnerables. 1.b Crear marcos normativos sólidos en los planos nacional, regional e internacional, sobre la base de estrategias de desarrollo en favor de los pobres que tengan en cuenta las cuestiones de género, a fin de apoyar la inversión acelerada en medidas para erradicar la pobreza.
Por ahora, en el Hogar de Cristo, seguimos empujando la responsabilidad que tiene la sociedad de garantizar los derechos humanos y la inclusión plena de las personas, especialmente de quienes están en mayor situación de desventaja. De acuerdo a la encuesta Casen en pandemia, existe una disminución en los ingresos por trabajo de las familias en zonas urbanas, pasando de 812 mil pesos en 2017 a 776 mil pesos en 2020. Pero el estudio también descubre las ventajas de acrecentar el comercio, como el aumento de los ingresos y las consiguientes mejoras para los pobres del mundo. El estudio es pionero, porque constituye el primer intento de establecer los costos y beneficios no sólo a nivel mundial, sino también para los ricos y los pobres del mundo.
En el país se están llevando a cabo algunos de los proyectos más innovadores de IFC, que incluyen autobuses eléctricos, productos especiales diseñados para promover la inclusión financiera, e hidrógeno verde. En el ejercicio de 2023, los nuevos compromisos de IFC alcanzaron un monto récord de USD 1700 millones, becas voluntariado union europea un aumento de casi el 200 % en comparación con el ejercicio anterior. Esta estrategia se basa en las recomendaciones de política pública para que Chile alcance un desarrollo sostenible e inclusivo y en aquellas para desarrollar un sector privado más fuerte, para una sociedad más productiva e inclusiva.
Más de 700 millones de personas, o el 10% de la población mundial, todavía viven en la pobreza extrema y luchan por satisfacer las necesidades más básicas, como la salud, la educación y el acceso al agua y a la sanidad. En todo el mundo, la tasa de pobreza en las zonas rurales es del 17,2%, más de tres veces mayor que en las zonas urbanas. Se cumplen 15 meses desde la llegada del Coronavirus a la región y con ello a Chile, provocando la peor crisis sanitaria y humanitaria del último siglo. De acuerdo a estudios de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la pobreza, la pobreza extrema y la desigualdad aumentaron en todos los países de la región.