Por lo tanto, haber aprobado la Agenda 2030 indica voluntad, pero aún así objetivos como el 10, tendrán que superar barreras y resistencias políticas a nivel internacional y nacional para poder ser implementado y realmente exitoso (Donald & Lusiani, 2016). No obstante, aunque con varios resultados positivos, esos quince años dejaron bastantes lecciones respecto del desarrollo y cómo debía enfrentarse. En otras palabras, “[e]n muchos lugares, el progreso no fue lo suficientemente sostenible ni equitativo para lograr las metas; en otros, el progreso se frenó o revirtió debido a desastres, conflictos, degradación ambiental o inestabilidad económica o climática” ( UNDP, 2016, p. 18). Esto permitió que las autoridades se replantearan el modelo de desarrollo implementado y la cooperación internacional, para abrir paso a nuevas conversaciones con el fin de dilucidar cuáles eran realmente las necesidades y cómo se debía llevar a cabo el trabajo internacional para lograr el desarrollo sostenible (Sanahuja & Tezanos, 2017).
De todos modos, el Banco Mundial ( 2016 ) indica que las cifras chilenas pue-den estar subvaloradas, por cuanto hay poca representatividad de los hogares con mayores ingresos en las encuestas que proporcionan la información necesaria para calcular estos índices. Los datos de la última Casen muestran que el 49% de las mujeres chilenas hoy trabaja remuneradamente (lo que representa un aumento de sixteen puntos en 27 años, pero la participación laboral femenina sigue estando 22 puntos por debajo de la masculina). Sin embargo, este mayor número de mujeres que hoy sale al mundo del trabajo no vuelve a su a casa precisamente a descansar. Al preguntarles por el encargo de realizar las actividades domésticas en sus hogares, la distribución sigue siendo desigual. Tareas como cocinar, lavar la ropa, cuidar a los niños o hacer el aseo recaen en las mujeres en más del 80% de los casos. “La brecha salarial de género se arrastra hace décadas y tiene que ver con una concepción cultural y social que se instala en los procesos de industrialización a principios del SXX.
Es preciso advertir que incluso los países más igualitarios exhiben algún grado basal de desigualdad vinculado a la división del trabajo, la que requiere pagos diferenciados acorde a la complejidad de las ocupaciones o para el fomento de actividades que están sujetas a un appreciable nivel de riesgo, como la innovación y la labor empresarial. Asimismo, la búsqueda de la igualdad no supone eliminar la diversidad de valores, preferencias y capacidades que nos distinguen como personas. Espacio Público es un centro de estudios independiente que busca aportar en la construcción de una sociedad más justa, transparente y democrática, que permita un desarrollo económico, social y político que beneficie a todas las personas. Estas mejoras en la educación de la mujer han sido acompañadas por un crecimiento impresionante en la participación de la mujer en el sector laboral. La tasa de participación en la fuerza laboral (PFL) de las mujeres en edad productiva (15 a 64 años) en Chile pasó de 37.4% en 1996 a 55.7% en 2014.
Basepublica es un medio de comunicación y un espacio para el diálogo entre las personas y Ong que están cambiando el mundo. Esto genera que la brecha económica entre el 10% más pobre y el 10% más rico sea de 418 veces, lo que significa un aumento del 971% en relación a la última medición de la Casen. En términos de rendimiento, Australia vio la mejora más importante en el ranking subiendo en el último año del puesto 17 al 10. En la vereda contraria, Luxemburgo destacó en el primer lugar del rating seguido de Islandia y Eslovenia.
La construcción social de ser mujer incorpora consigo un conjunto de prácticas, creencias, representaciones y percepciones sociales que, en términos generales, polariza las ideas de ser hombre y ser mujer, asignando a esta última un rol cuidador que pareciera no productivo, pero que a su vez es esencial en la sociedad. Lo mismo se repite a nivel global, donde ambos grupos registran una tasa de 5,3% y 4,9%, respectivamente. Por otro lado, la puntuación promedio de Chile ha registrado un aumento de 8,three puntos desde 2011 a la fecha, situándose en 50,4 y estando cerca de alcanzar su máximo de 50,7 registrado en 2017.
Lo que comenzó hace más de 160 años como una demanda local de mejoras salariales y derecho a voto, se convirtió en una conmemoración internacional que reivindica el rol de la mujer en todos sus ámbitos. Los montos promedio de pensiones de vejez autofinanciadas en pago dieron cuenta de una brecha promedio de -50,9% en perjuicio de las mujeres. Esta brecha se acentúa en la modalidad de pensión de retiro programado (-57,0%) y es menor en el caso de la renta vitalicia (-29,9%). De hecho, al analizar las cifras de nuevos pensionados, se observó que las proporciones de mujeres fueron mayores en los tramos de menos años cotizados (menos de 15 años), en tanto que en los hombres se concentraron en los tramos mayores de años cotizados (entre 25 y 40 años).
Su objetivo es aportar en la disminución de las desigualdades y brechas de género, apoyando la incorporación de medidas que permitan conciliar la vida private, laboral y acquainted. Según las cifras del INE, la participación de la mujer en la fuerza de trabajo se redujo en 2020 a poco más del 41%, la cifra más baja en una década, lo que revela que aquellas mujeres que perdieron o tuvieron que abandonar su empleo durante la pandemia demorarán más en volver a integrarse al mercado laboral que los hombres. Según un estudio de ComunidadMujer, por ejemplo, un 88% de las mujeres que perdieron el empleo en el último año dejaron de buscar un trabajo.
Las EFS son espacios de aprendizaje e información para dirigentes sociales, quienes luego de participar en ellas, son capaces de difundir en su territorio o aplicar en su gestión, los conocimientos adquiridos, contribuyendo al desarrollo de una sociedad más informada respecto de las prestaciones sociales del Estado. Busca potenciar los negocios de mujeres emprendedoras de todo el país, con el fin de fortalecer su autonomía económica. Con esto se espera fomentar las redes y asociatividad entre emprendedoras a partir de diversos encuentros regionales, mentorías y tutorías. Iniciativa país que integra a las empresas, instituciones de formación y gobierno para desarrollar nuevas capacidades en las personas, en sintonía con las demandas de la economía digital, generando más oportunidades para acceder a empleos de calidad. Con la implementación del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género continúa el proceso de construcción de más y mejores políticas públicas para enfrentar las diversas realidades de las mujeres. Finalmente, la experta de la Cepal planteó la importancia de analizar propuestas de mecanismos de rendición de cuentas y de reparación que permitan compensar las desigualdades de género que se aprecian en materia previsional y laboral.
No obstante, el objetivo de este artículo no es el de determinar los orígenes y fundamentos de la desigualdad en Chile 5 , sino que examinar qué concepto de desigualdad está justificando el plan de acción del país respecto del ODS 10 sobre desigualdad en el país y entre los países. De este modo, un estudio elaborado por Chiledeudas.cl reveló que a las mujeres se les cobra una tasa de interés promedio de 12,4%, mientras que a los hombres se les cobra un promedio de 11,1%, por lo tanto, el género femenino está pagando un monto casi 12% mayor (1,3 puntos porcentuales). Asimismo, las mujeres aún tienen menor acceso a bienes financieros que los hombres (el 95% de las mujeres D/E no tiene cuenta corriente) y son más pesimistas que ellos frente a las expectativas económicas del país. Un claro ejemplo de esto lo encontramos en la Región del Biobío, donde Concepción se encuentra dentro de las comunas con mejores índices de desarrollo a nivel nacional (Índice de Desarrollo Regional 2020, ICHEM), mientras que la comuna de Alto Biobío se ubica entre las más bajas. Si a esta misma muestra le incorporamos, además, la perspectiva de género desde la interseccionalidad nos encontramos ante brechas aún mayores.
La exposición estadística y los análisis de equivalencia dan cuenta de que las mujeres presentan una diferencial en el monto de sus remuneraciones ordinarias respecto de los hombres de significancia. Sin embargo esta variable, que es la comúnmente analizada en los estudios relacionados, presenta un sesgo por su forma de determinación que amplifica el diferencial con base en circunstancias no relacionadas con el sexo de la persona, sino con el desempeño que tienen. En este sentido, al utilizar las remuneraciones extraordinarias como forma de evaluar el diferencial por sexo, los parámetros asociados con los take a look at disminuyen, así como los diferenciales iniciales, estableciéndose de esta manera que las brechas salariales con base solamente en el sexo de los trabajadores son menores a las determinadas por las estadísticas oficiales y estudios relacionados. A nivel de grupos ocupacionales (gráfico 3), las mayores diferencias que se produce en las remuneraciones (por sobre del 25%) entre hombres y mujeres se encuentran en los Directivos y gerentes, Operarios manuales, Operadores de máquinas y Profesionales.
En este sentido, si bien ha habido políticas públicas importantes a nivel mundial para resolver temas significativos relacionados a la desigualdad, como la reducción de la pobreza, éstas, por ejemplo, no han tenido grandes consecuencias en términos de desigualdad de ingresos para el resto de la población (Alfonso et al., 2015 ). Por otra parte, los resultados encontrados, luego de examinar las acciones desigualdad de la riqueza públicas para reducir las desigualdades, proponen la necesidad de realizar un análisis sobre los indicadores que están siendo utilizados para cuantificar las disparidades en el país y cómo se están utilizando para tomar decisiones. Como se explicó en el primer apartado de este artículo, los indicadores son una herramienta que cuantifica una realidad y facilitan los procesos de toma de decisiones.
Es importante que el gobierno use los datos existentes sobre los rendimientos escolares para hacer una conclusión informada de cómo mejorar el sistema educativo. El gobierno chileno intentó implementar un subsidio por estudiante (voucher), pero según investigaciones de expertos chilenos e internacionales, esto no tuvo éxito porque reforzaba la segregación escolar, ya que las escuelas privadas podrán admitir estudiantes por preferencia y ganancias, mientras que las escuelas públicas no podían hacer lo mismo y estaban sujetas al estatuto más rígido. El ausentismo y deserción escolar implican pérdidas de oportunidades duraderas y prolongadas, que afectan el desarrollo y el aprovechamiento de las oportunidades educativas, otro factor contribuyente a la desigualdad. Distancia, falta de transporte, enfermedades frecuentes, vestimenta inadecuada, falta de útiles escolares, inadecuadas en las poblaciones vulnerables. Para hacer seen este problema, desde Good Neighbors Chile hemos preparado una recopilación de datos alarmantes sobre la desigualdad educativa y la pobreza en Chile.
Por el contrario, el grupo de los Trabajadores de servicios personales y seguridad son quienes presentan la menor brecha salarial entre sexos. Los niveles de informalidad laboral también muestran importantes diferencias en las distintas ramas económicas. Los mayores niveles de informalidad se dan en la rama de Otras actividades de servicios, con una informalidad femenina de sixty desigualdad de la pobreza one,2% y masculina de forty one,3% y en Actividades de los hogares como empleadores, donde la informalidad de las mujeres alcanza un 57,9% y la de los hombres es del 61,1%.