Las organizaciones que consigan perdurar son aquellas capaces de aprender constantemente a flexibilizar e innovar. Pues bien, a diferencia de otros momentos de deliberación como el plebiscito del 1988, la organización política -sea esta nueva o tradicional- se enfrenta a muchas dificultades para asumir el desafío de la integración de las preferencias sociales y políticas. Actualmente en Chile no existe cabida para que los partidos asuman un encausamiento de las demandas, tampoco lo pueden hacer liderazgos personalistas -lo que parece una buena noticia- y menos aún los mesianismos intelectuales. Comenzar un proceso constituyente fue una de las pocas salidas de la clase política para salir del descrédito whole con los ciudadanos. El discurso de orden público a través de la represión de carabineros está alimentando aún más el descontento. Por otro lado, a pesar de que la emergencia sanitaria le entrega al gobierno una frágil sensación de management comunicacional, lo cierto es que la ciudadanía sigue considerando que el actuar comunitario es el que ha logrado resolver sus indecisiones.
Aparte de la expresión de repertorios violentos de desorden callejero que se observaban antes de la cuarentena, este momento también ha puesto en vigencia los principios de convivencia social como la solidaridad, la igualdad y la autogestión. Lo interesante es que estos principios provienen de una organización ajena a las instituciones políticas tradicionales. La propia incapacidad del sistema político de recoger las demandas ciudadanas condujo a que las bases sociales del país iniciaran un proceso de reemplazo a la institucionalidad a través de movimientos y comunidades de organización horizontal.
Fundaciones y corporaciones sin fines de lucro, asociaciones, colegios profesionales, juntas
El referente más inmediato para su puesta en práctica20 en la zona andina fue y es la comunidad native, que lejos de ser una formación colectiva estable con legitimidad y autoridad, ha sido sistemáticamente utilizada como plataforma para la proposición e imposición de formas organizacionales ad hoc con políticas y programas y no es, por lo tanto reconocida. De la ceguera, rigidez, centralismo y autoritarismo de la razón tecnocrática instalada en el Estado han derivado problemas de coordinación, fragmentación de intereses, surgimiento de tensiones internas originadas en esta proliferación, aprovechamiento de la oferta organizacional por facciones disidentes y liderazgos emergentes. Las figuras jurídicas de la comunidad y asociación indígena no han remediado esta dinámica que fue uno de sus propósitos. En vez de dar mayor coherencia a la organización indígena de base en su relación con el Estado, han favorecido la proliferación y las tendencias faccionalistas internas. Pueden analizarse como puntos de desarrollo avanzado de tendencias de cambio más generales en la sociedad andina. Entre aquellas con orientación campesina registramos en 1987 la alianza entre dos organizaciones de ganaderos del altiplano norte, una de artesanas urbanas de Arica y otra étnico–reivindicativa, cuya convergencia se dio por el interés de sus dirigentes más que por afinidad de objetivos.
Compromisos internos diversificados y respuesta externa normalmente plural comprometen la capacidad de acción de las organizaciones andinas (juntas de vecinos y comunidad) y su calidad. Este problema se torna especialmente agudo cuando la demanda sobre la organización implica conocimientos y destrezas especializadas, o nuevas formas de gestión. Buena parte de la inversión pública en las comunidades y localidades indígenas se deteriora y cae en desuso rápidamente, entre otras razones, por la ausencia de competencias técnicas y capacidades de gestión adecuadas a esas innovaciones.
Estiman que Chile vive un “momento anarquista”, que se caracteriza por la aparición de un individuo que niega las jerarquías y “aspira a un best de sociedad basado en la equidad y la solidaridad”. La construcción de un nuevo pacto social, estiman, depende de comprender que la sociedad no “sólo rompió con el Estado y sus gobiernos, sino que también se rebeló ante su manera de ejercer la autoridad”. La ley española no abriga misterios en cuanto a que el régimen general de las subvenciones a entes privados se estructura sobre un sistema de “concurrencia competitiva”, en que la selección de los postulantes se efectúa bajo condiciones de igualdad, publicidad y objetividad. Adjudicada una subvención, se generan obligaciones financiero contables y de registro para las organizaciones. A su turno, la ley regula el gasto subvencionable y sus límites, se tipifica infracciones y se prevé sanciones para hacer valer la responsabilidad de las OSCs, junto con el reintegro del monto de los recursos. El informe respectivo, consolidado por la Secretaría de Hacienda, debe ser incluido como un apartado específico del Informe Anual que rinde el Presidente de la República al Congreso de la Unión y de la Cuenta Pública elaborada con base en las leyes de Presupuesto, Contabilidad y Gasto Público, de Transparencia y Acceso a la Información, de Fiscalización Superior de la Federación y demás leyes aplicables.
Finalmente, desde el punto de vista del uso de nuevas tecnologías, la configuración de plataformas informáticas “amigables” para materializar las donaciones (que debería crear el Servicio de Impuestos Internos) es clave para el éxito de esta forma de financiamiento, así como la realización de campañas de sensibilización de los ciudadanos/as, suficientemente plurales e infomativas, que los motiven a donar. Estos dispositivos sencillos de implementar permitirían que las OSCs se posicionen más de cara a la ciudadanía que al Estado, y que cuando miren al Estado sea, más que reclamando de este autonomía, financiamiento y derecho a la crítica de lo establecido, lo hagan exhibiendo tales atributos. Al efecto, coincidimos en que una estrategia integral de fortalecimiento de la sociedad civil, como la que el mencionado Programa de gobierno propone, implica la redefinición de los objetivos, los montos y formas de asignación del actual Fondo de Fortalecimiento de las Organizaciones de Interés Público, creado por la Ley 20.500, de 2011. Al carácter cada vez más complejo del mundo asociativo chileno se ha sumado una creciente legislación regulatoria con intención muchas veces de promoverlas y apoyarlas a su inserción social. Contrario a lo que se pudiera pensar, desde la propia experiencia de las OSCs estos afanes regulatorios no han contribuido al desarrollo y buen funcionamiento de las mismas en Chile. El informe del PNUD del año 2000 concluyó enfatizando dificultades en su institucionalización y consideró como prioritario establecer reformas legislativas.
Los sistemas informáticos permiten estar al tanto de lo que ocurre en una empresa desde un dispositivo móvil. Las telecomunicaciones permiten contactarse en directo con personas a far de kilómetros, generar negocios y abrir oportunidades, sin tener que trasladarse. Nuestras organizaciones están siendo organizacion social actual sometidas cotidianamente a múltiples desafíos, los cuales son fruto de la evolución que la sociedad está evidenciando. Cuando revisamos cuáles son las principales tendencias en recursos humanos señaladas por las principales publicaciones extranjeras, encontramos que muchas de ellas se condicen con la realidad nacional.
Basta con realizar 20 minutos de actividad moderada a diario, (caminar, jardinear, aspirar la casa, etc). Hospital Digital, dispuso a disposición del público seis módulos de formación y entrenamiento básico para prestar primera ayuda psicológica a personas en contextos de disaster y experiencias traumáticas. Es un servicio de entrega de conocimientos que busca instalar capacidades y habilidades organismos sociales ejemplos en el uso de tecnologías y herramientas digitales, a través de cursos en línea, contribuyendo al mejoramiento en la gestión, comercialización e innovación de los negocios. La Subsecretaría de la Mujer y la Equidad de Género es el organismo perteneciente a la estructura interna del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género a cargo de la Subsecretaria de la Mujer y la Equidad de Género.
De esta manera, las organizaciones amplias prometen el acceso a bienes y servicios a través de la agregación de esfuerzos y recursos o por medio de la legalidad que proporcionan. Por otra parte, la localidad rural es un espacio particularmente denso de relaciones económicas, sociales y simbólicas que sigue mediando la reproducción social de los individuos y de las unidades familiares. En un grado seguramente menos intenso y más diverso que en el pasado, la vida de los individuos y hogares andinos, sea en aspectos internos o en los nexos con contextos más amplios (microrregiones, centros urbanos, región), se sigue desarrollando con el concurso de la comunidad. Espacio de identidad, de un «nosotros» materializado en la cotidianeidad de las relaciones primarias, de defensa y refugio, de solidaridad y apoyo, constituye la base de repliegue para los individuos y hogares cuando la participación en grupos y organizaciones mayores se torna crítica. La relación entre la organización local y supralocal es, según esta mirada, una relación dinámica, cambiante y, con frecuencia, habitada por competencias o disputas.
Es un conjunto integrado y articulado de acciones, prestaciones y beneficios destinados a lograr un propósito específico en una población determinada, de modo de resolver un problema o atender una necesidad que la afecte. Se entiende por reformulación significativa de un programa a aquella intervención existente que manteniendo su propósito (resultado esperado del programa), introduce cambios en algunos de sus elementos claves (población objetivo, componentes, estrategia, modalidad de producción, entre otros), los que pueden o no considerar incremento de recursos. El porcentaje de mujeres que se han realizado un examen Papanicolau (PAP), considera a las mujeres de 15 años o más que declaran haberse realizado un examen PAP durante los últimos 3 años.
Digitaliza tu Pyme es un programa del Ministerio de Economía, Fomento y Turismo, junto con Corfo y Sercotec, en alianza con instituciones públicas y privadas que acompañan y guían el proceso de digitalización de las Pymes. También conocido como Subsidio Único Familiar (SUF), está destinado a personas de escasos recursos que pertenezcan al 60% de la población nacional socioeconómicamente más susceptible, según el Registro Social de Hogares (RSH). Start-up Chile, en sus tres programas, contempla un mayor porcentaje de cofinanciamiento para aquellas empresas lideradas por mujeres. Programa dirigido a micro, pequeñas o medianas empresa lideradas por mujeres que necesitan reactivar su actividad, recuperar y/o mejorar su potencial productivo y de gestión. El apoyo se entrega mediante el financiamiento de planes de trabajo de inversión y/o capital de trabajo. Si existiera deuda, la organización deberá contar con la aprobación de la rendición de cuentas, por parte de la Unidad de Rendiciones del Fondo Social.
En poco tiempo surgieron medios llamados “panfletos virtuales” como Chileokulto enfocados en la denuncia inmediata o, plataformas críticas pero con contenido elaborado como El Desconcierto. El siguiente gráfico muestra la progresión de estos tres medios de prensa hasta el 1 de abril al 17 de marzo. Centro Bartolomé de las Casas, Universidad Católica del Norte y Taller de Estudios Andinos, Cusco.