Para graficar esta situación, basta una breve visita a cinco datos clave sobre la penetración de Internet en Chile y las consiguientes desigualdades. En primer lugar, de acuerdo a los datos de País Digital, el porcentaje de usuarios de Internet en Chile es cercano a 75 por ciento, pero la distribución de este porcentaje no es homogénea entre distintos grupos sociales. Cada una de los/as convocados/as al taller “La desigualdad y la justicia social en Chile” tiene a su haber, sin duda, diferentes experiencias, conocimientos y biografías. Así, aunque suene a verdad de perogrullo, partimos de la base que todas las personas asistentes saben, conocen y/o han entablado conversaciones informales –en sus trabajos, territorios, comunidades, con sus familias, en sus vecindarios, and so on.– acerca de las desigualdades y la justicia social en Chile. Resultó, entonces, de interés de este taller rescatar dichas experiencias y saberes cotidianos para entablar una conversación que nos ayude a gestar un “sentido común” respecto de lo que es la justicia social y cómo esta se relaciona con las desigualdades vividas en Chile. La convocatoria está destinada a estudiantes y egresados que se encuentren en las etapas iniciales de su carrera investigadora.
De esta investigación se concluye, principalmente, que la desigualdad remuneracional, medida bajo la metodología de Palma, afecta significativa y negativamente al crecimiento económico. A raíz de este hallazgo es factible mencionar que se cumple con el objetivo central de este estudio y se valida la hipótesis en él presentado. Dentro de toda desigualdad social encontramos una práctica directa de la violencia y es en esta circunstancia, donde existe mayor nivel o probabilidad de ejercer la violencia; ya sea para mantener el standing desigualdad social wikipedia de desigualdad (Estado) o para salir de él (sociedad). Entre los dolores de la sociedad chilena están las alzas de los precios de las viviendas, la dificultad para acceder a créditos que no sobre endeuden a las familias, las esperas de postulantes a subsidios habitacionales del Estado y la percepción de que el acceso a la casa propia no es igual para todas las personas.
Pero, precisamente, la necesidad de que el Estado intervenga es evidencia de que el sistema en sí mismo no funciona como garante de derechos de todas las personas. Si en medio de la pandemia “el Estado no interviniera de manera excepcional y se dejara operar al sistema tal como está establecido, el resultado sería desastroso”. Así reflexiona en esta columna la directora ejecutiva de Aministía Internacional Chile, Ana Piquer. “La necesidad de que el Estado intervenga es evidencia de que el sistema en sí mismo no funciona como garante de derechos de todas las personas”, dice. Si la gente salió a la calle en octubre, sostiene, fue “para exigir dignidad, igualdad y protección de sus derechos” y la emergencia del coronavirus “mostró hasta qué punto estas exigencias no exageraban ni un ápice”. El 8 de octubre 2019 en el programa matinal Mucho Gusto, el presidente Sebastián Piñera expresaba que «en medio de esta América Latina convulsionada veamos a Chile, nuestro país, es un verdadero oasis con una democracia estable, el país está creciendo».
Las probabilidades de inclusión o exclusión social se explican a partir de la posibilidad de los individuos de participar en los distintos subsistemas sociales, siendo los más relevantes el sistema político, económico, jurídico, educacional y el de salud. N2 – La complejidad de la sociedad contemporánea y el dinamismo de los cambios sociales que se suceden, especialmente aquellos vinculados a la distribución de bienes materiales y simbólicos, establecen la necesidad de identificar mecanismos y procesos que inciden en la situación de desventaja social que afecta a gran parte de la población. La pandemia del Covid-19 ha desnudado otras capas de desigualdad social y educativa presentes en el país, la más llamativa de ellas es la brecha digital.
Por medio del Coeficiente de Gini se puede determinar la desigualdad en el ingreso, tomando entre 0 y 1, donde 0 corresponde a la máxima igualdad de la distribución del ingreso y 1 corresponde a la máxima desigualdad; es decir, una persona tiene el management total de los ingresos. Por un lado se encuentran los autores que, basándose en los planteamientos teóricos desarrollados por Kuznets (1955), sostienen que ambas variables tienen una relación positiva. Mientras que en la otra vereda se encuentran quienes han encontrado que esta relación es de carácter negativo, argumentos que se derivan del comportamiento evidenciado en la literatura empírica al momento de estudiar el comportamiento de estas variables tanto en el continente asiático como en Latinoamérica2.
Aquello contrasta con la visión política, repetida por la derecha, sus medios, y cada cierto tiempo coreada por sectores de la centroizquierda, de que la irrupción de los movimientos sociales puede hacer peligrar la capacidad de nuestra democracia de representar los intereses de la mayoría. Primero, existe una distancia abismal entre las concepts políticas de la ciudadanía y de la elite económica. La ciudadanía quiere mayoritariamente que el Estado se haga cargo de un conjunto de temas claves para la sociedad, mientras que la elite económica, por el contrario, prefiere un Estado que no asuma tal responsabilidad.
Los siguientes modelos se construyen con la base de datos reducida, buscando con ello evidenciar dos períodos temporales distintos (ver Tabla 3). Con el primero se quiere analizar un período de homogeneidad y estabilidad, tomando en consideración una tendencia política uniforme. Para ello, se utilizará como muestra la etapa correspondiente a los gobiernos de centro-izquierda. Con el segundo, se intenta analizar un intervalo temporal que contenga diferentes matices políticos, por lo que se toma los años entre 2010 y 2017 debido a la transición política evidenciada en este período. Esta forma de desigualdad social, por lo common, establece grandes contrastes en lo que a la distribución de las riquezas, privilegios y oportunidades se refiere; siempre sobre la base de la ejecución del poder arbitrario con lo cual sustentan la estructura de desigualdad social, construyendo de esta manera potenciales reacciones de inconformidad colectiva. Si se observa lo que ocurre en los sistemas educativos exitosos de países más desarrollados, lo anterior queda de manifiesto.
La diferencia clave entre estos dos sistemas de educación es que Shanghai ofrece a todos sus alumnos el tipo de oportunidades educativas que Chile se reserva para sus niños más ricos. Muchos países han demostrado que ambas, calidad y equidad de la educación, pueden mejorar significativamente”. Desde nuestra última Jornada, celebrada en el año 2023, Chile ha experimentado una serie de procesos que han influido en la agenda de investigación en diversas disciplinas, especialmente aquellas que abordan el tema de la desigualdad. Fue a lo largo de estos años que se pusieron en marcha una serie de movimientos sociales que transformaron la cuestión social en un problema que afectó no sólo a los trabajadores sino a todo el país. Desde entonces, surgieron a la luz pública una serie de innumerables escritos, ensayos, artículos de prensa y tesis de grado que comenzaron a analizar sus causas y motivos, además de las posibles alternativas de solución. La crisis desigualdad social ejemplo política, social y de derechos humanos que empezó en octubre del año pasado reveló hasta qué punto nuestro sistema falla gravemente al asegurar el derecho de reunión, la igualdad ante la ley, la protección frente a la violencia estatal.
Muestra la relación entre segregación espacial de la vivienda social, uso del tiempo y producción de desigualdades, con especial énfasis en las desigualdades de género. Se basa para esto en un estudio de caso en la población San Guillermo de Bajos de Mena, el que fue abordado con una metodología etnográfica durante el año 2019. Durante la investigación, se realizó observación, entrevistas en profundidad y etnografía móvil, en fin de mostrar las dinámicas de producción y reproducción cotidiana de desigualdades en el espacio segregado, a partir de un análisis del tiempo destinado al trabajo remunerado, de cuidado y doméstico, de ocio y sociabilidad y tiempo de traslados.
Los Estados Partes que aceptaron las normas de la Convención deben convertir estas normas en una realidad para todas las niñas y niños en sus respectivos ordenamientos jurídicos de manera que no puedan contravenir o impedir el disfrute de estos derechos. Los gobiernos de manera periódica deben presentar informes sobre los progresos en el cumplimiento de todos los derechos. Para la efectividad de su cumplimiento, los derechos que no pueden ser cedidos en favor de otro/a, son de carácter universal, ya que aplica para todos los niños y niñas, son indivisibles, ya que no puede solo aplicarse unos derechos y otros no, y no hay un derecho que sea más importante que el otro. La Convención Sobre los Derechos del Niño es un tratado internacional que existe para establecer las normas mínimas que aseguren la vida, el bienestar, la protección y la libertad de los niños y niñas. Sumado a lo anterior, atendiendo a la digitalización y el contexto actual, realizamos publicaciones que constantemente apoyan la educación en derechos humanos y/o la contención emocional en tiempos de disaster a través de recursos descargables. También, apoyamos a niñas y niños para que crezcan no sólo como sujetos de derechos, sino como ciudadanos/as globales capaces de compartir y empatizar con sus vecinos/as.
“Los invasores” se hizo hace más de forty años y saca a la luz arreglos torcidos, colusiones, como las que hace pocos días se conoció con la industria de los pollos. La puesta en escena de esta pieza de Wolff se presentará en el Campus Curicó, con motivo del aniversario de la Universidad de Talca, por invitación de la Federación de estudiantes de Curicó y más adelante la podrá ver el público linarense, siempre con el apoyo de la Vicerrectoría de Desarrollo Estudiantil, bajo cuyo alero funcionan el Elenco y el Taller de Teatro. El coeficiente de Gini fue desarrollado por el estadístico y sociólogo italiano Corrado Gini (1912), y es el método de medición de la desigualdad más utilizado para estudios que abordan esta temática.
Nuestro sistema CRM permite registrar y seguir cada caso dentro de los plazos establecidos por la normativa y gestionar de mejor manera a nuestros usuarios/as. Esta agrupación incluye las naciones más desarrolladas del planeta, pero también aquellas emergentes como México, Chile y Turquía. Nuestro país se sumó el 2010, durante el primer gobierno de Michelle Bachelet, convirtiéndose en el miembro número 31 de la OCDE y el segundo latinoamericano en ingresar a esta organización, después de México. Las personas al no haber terminado su Educación Media no pueden acceder a muchas ofertas laborales y se les cierran muchas puertas laborales. La convocatoria para presentar trabajos está dirigida a becarios y patrocinados COES y a estudiantes de pregrado y postgrado de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia UDP. Las temáticas o ejes en torno a los cuales deben estar orientadas las ponencias deben referir a una de las dimensiones de la desigualdad mencionadas anteriormente.
“Creemos también habernos ganado un lugar en la ciudadanía, que es al ultimate de cuentas para nosotros lo más importante. Porque este Instituto descansa en un mandato legal, cierto, pero también y necesariamente en la legitimidad que la ciudadanía le otorga”, concluyó. No obstante lo anterior, la Directora del INDH, criticó la “violencia de que son objeto las mujeres, y de los obstáculos a los que se enfrentan para acceder a espacios de poder, tanto en el ámbito público como en la empresa privada”. Durante su discurso la Directora del INDH planteó su preocupación por la baja participación que manifestó la ciudadanía en las recientes elecciones parlamentarias, en este sentido hizo un llamado al Estado a generar las condiciones para mejorar la participación. Si consideramos que la violencia es una acción de dominio forzado con el cual el otro logra imponer su voluntad y conseguir un fin particular person o colectivo, dañando de esta manera la necesidad más intrínseca del ser humano; podríamos afirmar entonces que toda expresión de violencia origina una violación a algún derecho o necesidad prioritaria del ser humano.
En los años recientes, Chile se ha visto remecido por dos importantes crisis, de carácter social y sanitario, sumado a un escenario socioeconómico inédito en las últimas décadas. El impacto del modelo económico neoliberal que sostiene y reproduce las múltiples desigualdades vividas por la sociedad chilena, cuyo nivel de afectación quedó de manifiesto con la revuelta social de 2019, se ha visto profundizado con la pandemia de Covid-19 a nivel sanitario, educativo, de género, laboral, territorial, por mencionar algunos. Este escenario de disaster, a su vez, pone en el centro del debate el estado actual de la cohesión social y sus posibles proyecciones de fortalecimiento y/o reformulación, tomando en consideración el inicio de un proceso constituyente en el país que asegure la promoción de un modelo de desarrollo basado en los principios de justicia, participación y democracia. Las estadísticas de género que se presentan en este sitio permiten visibilizar y comprender las brechas, barreras e inequidades entre hombres y mujeres en la sociedad.